viernes, 31 de marzo de 2023

Alejandro, el profeta de la serpiente

 



Siempre ha habido pícaros que han vivido de los dos grandes motores de la humanidad: la esperanza y la estupidez. Tipos que mediante engaños y tácticas de manipulación han vivido de la ignorancia y anhelos de otros. Algunos hasta caen simpáticos, por poner de manifiesto los errores de su tiempo o demostrar las carencias de tipos supuestamente honorables y poderosos. Ustedes juzgarán, tras leer este artículo, a que clase pertenece Alejandro de Abonutico, que se declaró profeta de un dios y muchos se lo creyeron.