tag:blogger.com,1999:blog-32614610198644256162024-03-13T15:09:58.011+01:00TabulaUnknownnoreply@blogger.comBlogger317125truetag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-79553510833129210672024-02-06T12:30:00.003+01:002024-02-09T09:48:43.460+01:00OLD WORLD<p style="text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjvYm7OtuhVh4OlSzlWyXl-_WP-BnED4zjBvuQmUTgUIUmO_t2IWn_BW7t5axwtNdPt0sjFzgZRibCHlErNnIez3yY08VUk9SNBqIcKmYZmadDPl2C3nGC0qAYK4opBWEN1H6yzBayeWtHFqlqfCXN1G2DFIsyckX5moblQXQNu7kItKHlAv-3-r-0ur4/s460/portada.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="215" data-original-width="460" height="188" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjvYm7OtuhVh4OlSzlWyXl-_WP-BnED4zjBvuQmUTgUIUmO_t2IWn_BW7t5axwtNdPt0sjFzgZRibCHlErNnIez3yY08VUk9SNBqIcKmYZmadDPl2C3nGC0qAYK4opBWEN1H6yzBayeWtHFqlqfCXN1G2DFIsyckX5moblQXQNu7kItKHlAv-3-r-0ur4/w400-h188/portada.jpg" width="400" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Hoy nos toca hablar de un juego
centrado en la Antigüedad e inspirado en la saga Civilization, la más conocida
entre los juegos de estrategia. Una inspiración que resulta evidente, pues el
creador de Old World es Soren Johnson, que estuvo detrás del Civilization IV, que es quizá el mejor número de la saga.<span></span></p><a name='more'></a><o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero el juego no es un Civilization
con ambientación antigua, sino que añade muchas más cosas. Aunque al principio,
como en cualquier civ, debes elegir entre una de las ocho civilizaciones del
juego (hay mods que las amplían), ahora tenemos cuatro familias en cada
civilización, por lo que hay que jugar a quedar bien con ellas y orquestar
alianzas matrimoniales, si no queremos guerras civiles y secesiones de
parientes. Esto implica también que nuestros gobernantes enferman, envejecen y mueren,
dejando problemas a sus herederos, mientras el resto de civilizaciones busca su
oportunidad de engrandecerse a tu costa. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqKKwySANe7YqtIo26HucNrR3MOse-wMv1Q32Q_yo8pYtHUHQ82CVWvsqlWsz1gMVfSz4-Pfw80fq19Cq8j4Bx25yDGC7pkwbct5aahVQyDZeGhYLjNUI3_o3RKFli_jh-lHtL9PNAgMuD-iIBsAuWzVXh3grO9Atdpe5VUfyIzS_1Vu7uj4YfYqA_T_Q/s1920/mapa1.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqKKwySANe7YqtIo26HucNrR3MOse-wMv1Q32Q_yo8pYtHUHQ82CVWvsqlWsz1gMVfSz4-Pfw80fq19Cq8j4Bx25yDGC7pkwbct5aahVQyDZeGhYLjNUI3_o3RKFli_jh-lHtL9PNAgMuD-iIBsAuWzVXh3grO9Atdpe5VUfyIzS_1Vu7uj4YfYqA_T_Q/w400-h225/mapa1.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Bonitos mapas para sangrientas luchas</td></tr></tbody></table><br /> Este juego de familias no es tan intrincado
como otros juegos de dinastías, como el Crusader Kings, pero suceden eventos de
forma constante y hay que estar atento a la diplomacia doméstica de celos y
envidias en busca de cargos importantes. No te llenes de amantes exigentes y
ten cuidado, ¡Los hermanos son unos pérfidos envidiosos!<p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjL9NajGH8vexKmNNG7_F1Pz5tPZKYI9EX4MWHdICYP6HDQ8eKCNs8d_aFsMt3k3bUsubpEID93qLwLwhQ9_s6qM6vIj68v6q4en4yOryXxKqHg_DKK_kgq0FkvWK1KtV1ENgADHXnB92kEt9yADbQ_M6VoIK7BPSr0gmwwdG3pE_PQrsG7-vD9guy5aA4/s700/dinastia.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="527" data-original-width="700" height="301" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjL9NajGH8vexKmNNG7_F1Pz5tPZKYI9EX4MWHdICYP6HDQ8eKCNs8d_aFsMt3k3bUsubpEID93qLwLwhQ9_s6qM6vIj68v6q4en4yOryXxKqHg_DKK_kgq0FkvWK1KtV1ENgADHXnB92kEt9yADbQ_M6VoIK7BPSr0gmwwdG3pE_PQrsG7-vD9guy5aA4/w400-h301/dinastia.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Una dinastía de parientes intrigantes<br /><br /></td></tr></tbody></table><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Una diferencia con los civ es que puedes
elegir entre turnos anuales o semestrales y las partidas duran 200 años, ni uno
más. Así que tendrás partidas de 200 turnos o 400, según gustes, con varias posibilidades de victoria, desde la simple conquista del mundo hasta la refinada victoria cultural. Así que no son partidas eternas
y lo normal es que las acabes. Aunque ya hay mods que te amplían este límite.<o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">El principal meollo del juego es
que en cada turno tienes un límite de acciones o movimientos, que puede ir
creciendo según ocurran diferentes eventos. Al principio no importa, te sobran
movimientos para crear minas, granjas, templos y mover a tus guerreros, pero, según se complica tu civilización, te verás limitado en
cierta medida, porque no podrás hacer en cada turno todo lo que quiera tu deseo megalómano. Sobre
todo con tus ejércitos, que consumen acciones a saco cuando están en campaña.
Esto obliga a no ser un imperialista loco, limita la expansión descontrolada y
obliga a usar la diplomacia en tus relaciones exteriores llegado un determinado
momento. También a primar ciertas aspectos de tu civilización sobre otros. Así
que, si eres un jugador con ganas de ser un todopoderoso psicópata, este no es
tu juego. No podrás hacer todo lo que desea la locura salvaje que disimulas en
la vida real.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9C1sRj8gJ0Z_ugFem4_sQaVGFFBKEHtuqLPgl5NeG8RuMFUwrwBFR0XqukNdbNAXYfj61KJkd_NJ8y1B4LIou-67FyMNgeyHZuZ2IL63Q423w2WdJzHVWmQ1w03D52vAUU6bttrbc4eLOfHTSxrVr7OR0XP9bNtvwq81lm8HLmWu0HYW3xovUgrTtQPw/s888/batalla.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="888" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9C1sRj8gJ0Z_ugFem4_sQaVGFFBKEHtuqLPgl5NeG8RuMFUwrwBFR0XqukNdbNAXYfj61KJkd_NJ8y1B4LIou-67FyMNgeyHZuZ2IL63Q423w2WdJzHVWmQ1w03D52vAUU6bttrbc4eLOfHTSxrVr7OR0XP9bNtvwq81lm8HLmWu0HYW3xovUgrTtQPw/w400-h225/batalla.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">En el combate es evidente el estilo Civilization </td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Otra diferencia es que no puedes fundar
ciudades donde te dé la gana, solo en determinados lugares que te marcan en el
mapa. Esto evita el spam de ciudades de
los Civ y crea mapas de imperios más realistas, con varios lugares o ciudades
estratégicas a defender hasta el último soldadito o diplomático. Por otra
parte, esta limitación quita libertad de expansión al jugador. Pero, como ya te
puedes imaginar, hay un mod que te
permite saltar esta regla.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvAMOI9RyePvUNaw9iTgcGYHG6r3YjmzSds8vUKLWaHwXPtCnN_dldlBYOloBUfiiv8Cfjn5wU9xkFDCO7_MnMVhH7FNyLNvbQ3IY7z2Cym8MmqmA7cs659Ey-Ij2Kq3PwiixW_NyG91ny1qSaqFJq8IviC_j9cXt60cKY8VvHEqGq0Oc_WF_lExAguGI/s1920/ciudad.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvAMOI9RyePvUNaw9iTgcGYHG6r3YjmzSds8vUKLWaHwXPtCnN_dldlBYOloBUfiiv8Cfjn5wU9xkFDCO7_MnMVhH7FNyLNvbQ3IY7z2Cym8MmqmA7cs659Ey-Ij2Kq3PwiixW_NyG91ny1qSaqFJq8IviC_j9cXt60cKY8VvHEqGq0Oc_WF_lExAguGI/w400-h225/ciudad.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Bellas ciudades que se agrandan con el tiempo... antes de perecer</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Porque si en algo destaca este
juego, como ya se ha notado, es en su capacidad de modificación, que ha
permitido una buena cantidad de mods de fácil instalación que lo cambian o
mejoran, según gustos. De esta manera, la jugabilidad se ve aumentada con
nuevos civilizaciones, personajes, mapas y eventos, porque, a ver, ¿Quién no ha
querido ser alguna vez rey de los etruscos?</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> No nos olvidemos tampoco de las tecnologías, que hay en abundancia y se pueden desarrollar con el tiempo, pero en este apartado no sigue a su saga inspiradora, no hay un árbol lineal como en los Civ, sino que lo que hay es un sistema basado en tarjetas, con el que tras haber investigado una tecnología, puedes seleccionar una de las cuatro nuevas que te aparecen para centrarte en ella. Un sistema, en el fondo, aleatorio, que te puede arruinar los planes más pensados. Pero la Historia real es igual de imprevisible.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3Wh8IKtyFsDk97U7350KxXn7ViHVfKTeoClkOQcubatrPG9Y7Vyh7FmxOcukRNcqZ1UyoKTrRYqw7afvRqN6ayCt1aAD8z7PdU569p9hR-uBLSilSviIp26p5AVZ2Qp1Z26TlKhed352be3lg5lWZ6Rpx_5VtN7mLPy_2RJGKNhtu50RZ8EWHoKEOb-Q/s1920/tecno.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3Wh8IKtyFsDk97U7350KxXn7ViHVfKTeoClkOQcubatrPG9Y7Vyh7FmxOcukRNcqZ1UyoKTrRYqw7afvRqN6ayCt1aAD8z7PdU569p9hR-uBLSilSviIp26p5AVZ2Qp1Z26TlKhed352be3lg5lWZ6Rpx_5VtN7mLPy_2RJGKNhtu50RZ8EWHoKEOb-Q/w400-h225/tecno.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">¿Qué invento hoy?</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">El juego ya ha tenido varias
expansiones de pago, que son baratas y jugosas de contenido, como el muy
recomendado y para mí esencial “The sacred and the profane”, que añade personajes
relacionados con la religión, el fanatismo y cientos de eventos sobre el culto divino en la Antigüedad, ¿Quién no ha querido tener a Hipatia en
su consejo de gobierno?</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggEDgOW_53NyO0_6TE1L5nSsVnM7Rn0sHNQzfgrmqdrUsnuA3pHof79U8IoSFxERpHtrMPVdK2c1mj-dhA8ndS0oU9AOAHqiaW_7sJ5YFD4drY3oRJdb9PsmB762zOztXPIfd15F2fUmq3zjfehEQT1mjdUWLrYKhQriZ5K4Suui3dQoFoTpsl7lm2Mh0/s1920/saul.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggEDgOW_53NyO0_6TE1L5nSsVnM7Rn0sHNQzfgrmqdrUsnuA3pHof79U8IoSFxERpHtrMPVdK2c1mj-dhA8ndS0oU9AOAHqiaW_7sJ5YFD4drY3oRJdb9PsmB762zOztXPIfd15F2fUmq3zjfehEQT1mjdUWLrYKhQriZ5K4Suui3dQoFoTpsl7lm2Mh0/w400-h225/saul.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Saul de Tarso persiguiendo cristianos porque no ha caído del caballo</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Otras expansiones se centran en
escenarios más elaborados de determinadas civilizaciones, como “Heroes of the
Aegean” y “Pharaons of the Nile”, de nombres ya explicativos, o añaden más edificios
maravillosos a las civilizaciones, más personajes, tramas y dinastías, como “Wonders & Dinasties”,
donde ya te deja escoger tu rey o reina de inicio entre varias familias e incrementar tus turbias relaciones y lazos de
amistad con culebrones sin fin.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiOfiVoVFimNhS1mGulQWcmfwLU6NKbte8b2DTJgbnzOt_EhG9gf1Z8lZYskPElwnDNEHd-QqyCBD3Dgalcli9Mb5ISjBqRHwBogkhxiLDHzWnwL7x_6d5Bp0YUf_8hU156vXYt7pKLIcZ3BxuwvN4n4-7of9AsEp8U9IvLQ70Ulh3re4Ms51B15rWc4Xg/s639/wonderdinasties.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="361" data-original-width="639" height="226" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiOfiVoVFimNhS1mGulQWcmfwLU6NKbte8b2DTJgbnzOt_EhG9gf1Z8lZYskPElwnDNEHd-QqyCBD3Dgalcli9Mb5ISjBqRHwBogkhxiLDHzWnwL7x_6d5Bp0YUf_8hU156vXYt7pKLIcZ3BxuwvN4n4-7of9AsEp8U9IvLQ70Ulh3re4Ms51B15rWc4Xg/w400-h226/wonderdinasties.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Psicópatas a elegir para gobernar Roma en Wonders & Dinasties</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En definitiva, un gran juego
sobre las civilizaciones antiguas, que te permite jugar con muchos conceptos y
diversas estrategias, tanto a nivel familiar como geopolítico. Eso sí, el aspecto y la estructura de la saga
Civilization es la base de todo. Si no te va el sistema de esa saga de construcción de
civilizaciones, este juego no te va a gustar… o quizá sí.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Echa un vistazo al vídeo.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><br /><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/YpPzS-ko0Po" width="320" youtube-src-id="YpPzS-ko0Po"></iframe></div><br />Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-9042408354772127702024-01-08T11:54:00.016+01:002024-02-14T21:43:21.101+01:00Lucio Sicio Dentato; el mejor soldado de Roma... gracias al cual tenemos derecho romano. Los peligros de ser un héroe III<p> <span style="text-align: justify;">Todos los pueblos tienen sus héroes, verdaderos, inventados o, más frecuentemente, adaptados a sus necesidades. Los tenían los griegos, los tenían los romanos y los tenemos nosotros. Eso no significa que todos sean iguales, es más, la elección de sus héroes refleja, como pocas cosas, las características de una cultura. Los héroes griegos nacen de la mitología, hijos de su amplísimo panteón de dioses. Los nuestros también proceden de la mitología, en este caso de Hollywood, que los produce en serie, los crea, los destruye o los transforma según el mensaje que nos quiere trasmitir en cada momento. Los héroes romanos, por el contrario, siempre eran, o pretendían ser, verídicos, personas de carne y hueso. De los héroes griegos de Troya, solo uno no era hijo de un dios, Diomedes, el único mortal que venció en combate a los inmortales, y según los propios romanos después de la guerra emigró a Italia y fue uno de sus ancestros. Pero los héroes de Roma tenían algo más en común: en líneas generales<a href="https://blogtabula.blogspot.com/2018/05/aureliano-o-los-peligros-de-ser-un.html" target="_blank"> <span style="background-color: #d9ead3;">acababan muy mal</span></a>. Porque el sentido práctico y realista de los romanos les impedía ignorar lo evidente; pocas cosas hay más peligrosas en esta vida que ser un héroe. Ya lo dijo Mafalda: un mártir es un héroe sin suerte. Lucio Sicio Dentato, el mayor guerrero, el mejor soldado de la historia de Roma, fue <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2014/07/marco-manlio-capitolino-o-los-peligros.html" style="background-color: #d9ead3;" target="_blank">uno de esos héroes.</a></span></p><p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipDWSGeyOEaQaq5Cb0DIK-1etFm6B27CDPI_ipgFRp6ABwPPH2xn9i46mSNDo7KSHgtCqxboAx9t0R_cBryEf0w7I0VJliWgtLx6_-G2DGcJBmjQivou0Hm-lx5wia4Fe1EUZaT6cRrgwENpB3sN4qkLO1jQOQSi63tOrug2BxY9HGmdrnasC57zcQKlY/s1246/SKM_C250iAy23121113530.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1246" data-original-width="934" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipDWSGeyOEaQaq5Cb0DIK-1etFm6B27CDPI_ipgFRp6ABwPPH2xn9i46mSNDo7KSHgtCqxboAx9t0R_cBryEf0w7I0VJliWgtLx6_-G2DGcJBmjQivou0Hm-lx5wia4Fe1EUZaT6cRrgwENpB3sN4qkLO1jQOQSi63tOrug2BxY9HGmdrnasC57zcQKlY/w480-h640/SKM_C250iAy23121113530.jpg" width="480" /></a></div><p></p><p style="text-align: justify;">Su cognomen “dentato”, al parecer se debe a que nació ya con dientes (o a que tenía una dentadura como el teclado de un piano, que también podría ser, los romanos tenían muy mala baba para eso de los apodos). Vino al mundo en el año 514 a.C., en el seno de una familia plebeya sin miembros de <span style="text-align: left;">importancia, por lo cual tuvo que buscarse desde muy joven el futuro en el ejército, un oficio para el que nunca falta trabajo, y menos en Roma. La época no podía ser más convulsa, poco después de su nacimiento los romanos derrocaron al último de sus reyes, Tarquino el Soberbio (es de suponer que si hubiera ganado hubiera sido recordado como el justiciero o algo por el estilo) e inaugurado la República, con sus cónsules, tribunos y demás. Tarquinio, lógicamente, no se tomó muy a bien eso de que lo derrocaran y con la ayuda de sus parientes etruscos intentó reiteradamente recuperar el trono. Y como ya se sabe que a río revuelto ganancia de pescadores, los vecinos de Roma, tan depredadores como ella misma, aprovecharon para lanzarse sobre su territorio. Por otro lado, la desaparición de la monarquía volvió a dejar al descubierto las graves diferencias entre patricios y plebeyos que, prácticamente, solo se ponían de acuerdo para luchar. Quizás por eso Roma viviría en pie de guerra de forma casi permanente, como única forma de evitar que sus conflictos políticos y sociales la destruyeran. Eso ha sucedido con más de un imperio.<span></span></span></p><a name='more'></a><p></p><p></p><p style="text-align: justify;">En este ambiente, Dentato destacó tanto en el campo de batalla como en la reivindicación de los derechos de los plebeyos, tal y como corresponde a un verdadero héroe. Con las armas en la mano era imbatible. Fue ascendido a centurión y luego a primipilus, “primera lanza”, el mayor rango que podía alcanzar un soldado. Estaba por encima de todos los centuriones y solo debía obediencia al legatus nombrado por el senado. Según Plinio el Viejo y Dionisio de Halicarnaso, participó en 120 combates, ocho de ellos singulares, es decir, se enfrentó como campeón de los romanos a un rival designado por sus enemigos para decidir la suerte del enfrentamiento (y ahorrarse el masacrarse entre ambos ejércitos), mató a 300 adversarios, y sufrió 45 heridas, todas por delante, ninguna en la espalda, algo de lo que estaba muy orgulloso. Por su valor recibió nada menos que 200 condecoraciones, 14 coronas civiles (otorgadas por salvar la vida a un ciudadano romano), 3 coronas murales (por ser el primero en traspasar las fortificaciones enemigas), y 8 coronas diversas más; 83 torqueses (collares en forma de anilla abiertos por delante) de oro; 160 armillas (brazaletes) de oro; 18 hastae purae (un simbólico venablo de madera) y 25 phalare (medallones que se sujetaban en el pecho, sobre la armadura). También, según Plinio el Viejo, fue condecorado con la corona gramínea; la más alta condecoración militar romana, concedida únicamente en 9 ocasiones en toda la historia de Roma. Ganarla no era fácil, para lograrlo era necesario salvar a un ejército romano entero de la destrucción, emulando al propio Dentato, el primero en obtenerla y para el que, de hecho, fue creada por sus agradecidos camaradas. Y es que esa corona no la otorgaban los cónsules, el senado ni ningún otro cargo político o militar, sino los propios soldados en el campo de batalla, reuniendo allí mismo hierbas y tallos para confeccionarla. </p><p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEinXx4wwgASpG0jJvy3EO-gbw72mjPlY4bflf_n5kWAiMkB9mZn9JbKyqcHvkA3DsnRa8VgQBIa0XL2GNwXB9ja-jxloJHSSbVo3gi5XIiS-gk_9qUbIfxUGQXvBbh_FtlVDsObts0WEG7oWBDNMlvVif1Ra9asVlYvIvWkRQlFCg-aiY5qHVaP48fNwrU/s980/lucio-dentato-1614335953.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="682" data-original-width="980" height="446" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEinXx4wwgASpG0jJvy3EO-gbw72mjPlY4bflf_n5kWAiMkB9mZn9JbKyqcHvkA3DsnRa8VgQBIa0XL2GNwXB9ja-jxloJHSSbVo3gi5XIiS-gk_9qUbIfxUGQXvBbh_FtlVDsObts0WEG7oWBDNMlvVif1Ra9asVlYvIvWkRQlFCg-aiY5qHVaP48fNwrU/w640-h446/lucio-dentato-1614335953.jpg" width="640" /></a></div><br /><div style="text-align: justify;">Pero Dentato no solo sobresalía con las armas, como corresponde a un romano ejemplar era también buen orador, y un líder nato. Decidido partidario de los plebeyos, su clase, no tardó en distinguirse en política. Uno de los asuntos más candentes en Roma era la distribución de los bienes obtenidos en tantas campañas victoriosas, en particular de las tierras conquistadas a sus enemigos. Los plebeyos querían que se repartieran en lotes entre los ciudadanos, pero los patricios se negaban, afirmando que debían permanecer como propiedad del estado, alquilándolas para, con los ingresos obtenidos, financiar los servicios públicos. Así explicado parece algo muy razonable, incluso justo, pero había un truco. El <i>ager publicus</i> se arrendaba en forma de grandes parcelas, y las condiciones exigidas (propiedades, avales y demás) hacían que solo pudieran optar a ellas los patricios que, lógicamente, se las adjudicaban a cambio de unos alquileres ridículos que muchas veces ni pagaban, llegando las familias, con el paso del tiempo, a considerar aquellas tierras como de su propiedad.</div><p></p><p style="text-align: justify;">Esta continuaría durante varios siglos más, hasta que los soldados plebeyos se hartaron y las legiones entregaron el poder a aquellos de sus generales que se comprometieron a repartirles tierras, poniendo así fin a la República. Pero no adelantemos acontecimientos. En el año 455 a.C., siendo cónsules Tito Romilio Roco Vaticano y Cayo Veturio Cicurino, se propuso votar por la asamblea el enésimo intento de ley para repartir los latifundios públicos de los que disfrutaban los patricios. Entre los que habló a su favor el más elocuente fue el propio Lucio Sicio Dentato, ya con 58 años, que explicó que habían logrado aquellas tierras por el valor y sacrificio de los plebeyos, que constituían el grueso de la población y del ejército, enumerando a continuación su impresionante lista de hazañas y recordando a los patricios su vileza al haber sido capaces, solo para conservar sus privilegios, de cometer los peores delitos y desmanes. Su intervención fue tan contundente que, para evitar que la ley fuera aprobada, los patricios tuvieron que recurrir a una de sus tretas favoritas: utilizar a los plebeyos de sus amplias redes clientelares para reventar la asamblea e impedir la votación. En respuesta los tribunos reunieron de nuevo al pueblo para decidir el castigo aplicable a los responsables; algunos pedían a gritos coger las armas y hacerlos pedazos, otros la s<i>ecessio plebis</i>, una primigenia forma de huelga, pero Dentato los convenció para que decidieran el menor de los castigos posibles, una multa, y se pasara página para poder aprobar cuanto antes la ley de reparto de tierras. Ser generoso con determinada gente es algo que esta nunca perdona.</p><p style="text-align: justify;">Sin embargo, una vez más, algo impidió la aprobación de la ley: una delegación de Tusculum llegó a Roma pidiendo urgentemente ayuda para defenderse del ataque de los ecuos. Los cónsules convocaron al ejército, lo que impedía que se realizaran asambleas hasta el regreso de los ciudadanos movilizados. Los plebeyos se indignaron ante lo que consideraban un nuevo truco y muchos se negaron a alistarse, pero Dentato, considerando que la defensa de Roma estaba por encima de cualquier otra cuestión, sí lo hizo, junto con ochocientos de sus veteranos. Una vez frente al enemigo, ambos ejércitos acamparon uno frente a otro, sin que el cónsul Romilio, al mando de las tropas, se decidiera a atacar, lo que provocó incluso las burlas de los ecuos. Dentato empezó a sospechar que era todo una treta de los patricios para dejar pasar el tiempo sin que pudieran celebrase asambleas, hasta que se eligieran nuevos tribunos. Cuando se lo echó en cara a Romilio, este respondió presentándole su plan de batalla: él y sus ochocientos camaradas ascenderían la colina enemiga y atacarían directamente su campamento. Mientras se dejaban masacrar, el resto del ejército, es decir los patricios y sus clientes, atacarían aprovechando que estaban desprevenidos. Dentato protestó, porque aquello era enviarlos a una muerte segura, ante lo cual el cónsul se burló recordándole la impresionante lista de hazañas que había desgranado en su discurso ante la asamblea. La trampa era evidente: u obedecía y se dejaba matar, o se negaba a ir y quedaba deshonrado como un cobarde. Dentato aceptó aquella misión suicida porque afirmó que valoraba más su honor que la propia vida. </p><p style="text-align: justify;">Romilio debió verlos marchar muy satisfecho de su ingenio, pero, como tantos otros que se creen muy listos, cometió el error de minusvalorar a su rival. Y es que nadie sobrevive a cuarenta años de combates siendo solo un bruto que reparte mandobles. Dentato obedeció la orden… a su manera. Mientras, como todos los días, los dos ejércitos se alineaban en el valle, él y sus hombres ascendieron la colina que llevaba al campamento enemigo después de haberla rodeado arrastrándose por un bosquecillo. Como sabía que la mayoría de la guarnición estaría en la parte delantera de la empalizada, contemplando el espectáculo en el valle, él y sus hombres se acercaron sigilosamente desde atrás, saltaron la empalizada y los atacaron por sorpresa y por la espalda. Después de liquidarlos o ponerlos en fuga, cargaron colina abajo contra el grueso del ejército ecuo, que permanecía alineado frente al de Romilio intercambiándose proyectiles e improperios. Estos, cuando vieron que su campamento había sido tomado y que se les echaba encima el famoso Lucio Sicio Dentato con sus colegas, no se lo pensaron dos veces y se dieron a la fuga. Dentato no solo había sobrevivido a la misión suicida, había ganado la batalla, obtenido un gran botín e incrementado aún más su leyenda. Romilio estaba furioso, y para vengarse decidió retener el botín, según él con el fin de “aliviar las penurias del estado” en vez de repartirlo, de acuerdo con la costumbre, con lo cual Dentato y sus hombres se quedaban sin recompensa. Este reaccionó con indignación… e inteligencia. Como vencedor del combate, reclamó su derecho a efectuar una ofrenda a los dioses para agradecerles que tanto él como sus ochocientos camaradas hubieran sobrevivido; una “ofrenda” que consistió en sacrificar a todo ser vivo capturado y pegar fuego al campamento con la totalidad del botín en su interior, ante la mirada estupefacta del cónsul. Con los romanos, pocas bromas.</p><p style="text-align: justify;">A partir de aquí, los acontecimientos, y la carrera de Dentato, se sucedieron imparables. El año siguiente, 454 a.C, fue elegido tribuno de la plebe, y completó su ajuste de cuentas con Romilio haciendo que lo procesaran por corrupción, delito por el que fue condenado al pago de una fuerte multa (ya hemos explicado que nuestro héroe era partidario de los castigos económicos, que duelen como poco a los corruptos y no crean mártires). Aparte de eso, continuó dando voz a las reivindicaciones de la plebe, una voz que era imposible acallar. Una de esas reivindicaciones marcaría un hito en la historia europea. Hasta entonces la legislación de Roma consistía básicamente en los <i>mores maiorum</i>, las tradiciones de los antepasados, unas costumbres que se conservaban de forma oral y eran “recordadas” por los pontífices. Esto, naturalmente, repercutía en una gran inseguridad jurídica, especialmente para los plebeyos ya que los pontífices y los jueces eran siempre patricios. Por eso exigieron que las leyes se pusieran por escrito y se exhibieran de forma pública, de manera que todo el mundo pudiera conocerlas y no quedaran al albur de los patricios, y que estas leyes fueran iguales para todos los ciudadanos. Los patricios se resistieron cuanto pudieron pero, al final, y ante la amenaza de secesión plebeya, se vieron obligados a ceder. Para elaborarlas se eligió un colegio especial de diez magistrados, los decemviri, cuyo poder estaba por encima incluso del de los cónsules. Esta comisión elaboraría un conjunto de leyes, las XII tablas (como las de Moisés, qué casualidad) que serían la base del derecho romano y, por tanto, del nuestro.</p><p style="text-align: justify;">Para presidir el primer decenvirato fue elegido Apio Claudio Craso, miembro de una de las familias patricias más importantes (de ella saldría la primera dinastía imperial) y uno de los grandes impulsores del proyecto, lo que le granjeó la simpatía del pueblo. La labor de este primer decenvirato se consideró ejemplar, sus leyes fueron justas y cada una fue sometida a la aprobación de la asamblea. Al terminar el año habían redactado diez leyes, pero como el trabajo aún estaba incompleto, se decidió nombrar un nuevo decenvirato. Claudio, gracias a su excelente reputación, logró ser reelegido, esta vez con diez hombres de su absoluta confianza. Elaboraron dos leyes más y tras ello se esperaba que grabaran las doce en tablas de bronce, las expusieran en el foro y dimitieran, entregando de nuevo el poder a los cónsules y tribunos, pero no lo hicieron. Cada <i>decemviri</i> se hizo rodear de doce lictores, armados con fasces que incluían hachas, y como portar armas dentro de la ciudad estaba prohibido, estos 120 hombres armados constituían un cuerpo verdaderamente intimidatorio. Impidieron la celebración de nuevas elecciones, sometieron a quienes se les oponían a juicios arbitrarios a puerta cerrada… todo parecía indicar que Apio Claudio Craso aspiraba a convertirse en rey, o por lo menos en tirano, de Roma.</p><p style="text-align: justify;">Los sabinos y los ecuos aprovecharon la confusión para reiniciar sus razias sobre territorio romano, y los decenviros convocaron al senado, que no se presentó, al considerarlos ilegítimos. La postura del senado y los patricios ante los decenviros siempre fue ambigua, ya que por una parte los veían como una garantía frente al creciente poder de la plebe, pero por otro temían que les privaran de su propio poder. Finalmente, y tras algunas negociaciones, se decidió convocar al ejército, pero la plebe se negó a alistarse. Una vez más fue Lucio Sicio Dentato, ya con más de sesenta años y firme opositor a los decenviros, uno de los pocos que accedió a tomar las armas para defender a la República, y su ejemplo fue imitado por otros muchos, lo que permitió que se reunieran las tropas necesarias para la campaña. Esto, lejos de granjearle la simpatía de Claudio Craso, desató su temor. Era evidente el enorme ascendiente de Dentato entre el pueblo, en especial entre los militares, ¿qué pasaría si decidía utilizarlo para acabar con su gobierno? Decidió que la única forma de evitarlo era darle muerte, pero escarmentado por lo sucedido con Romilio, modificó ligeramente el plan original de este. Dentato fue enviado a una patrulla rutinaria junto con un puñado de soldados previamente escogidos por Claudio. Fueron veinticinco los curtidos veteranos seleccionados para asesinarlo, y de ellos solo diez regresarían con vida, algo que no hizo sino incrementar su fama. Al regresar al campamento aseguraron que los habían atacado los sabinos, pero cuando sus compañeros acudieron al lugar solo encontraron cuerpos de soldados romanos, y comprobaron que Dentato conservaba sus armas, algo imposible si los matadores hubieran sido los sabinos. </p><p style="text-align: justify;">Ese fue, una vez más, el trágico final de un héroe.</p><p style="text-align: justify;">Para acallar las protestas, se ordenó celebrar un gran funeral de estado por el “héroe muerto por los malvados enemigos de Roma” amenazando con procesar a cualquiera que pusiera en duda la versión oficial por “denigrar su insigne memoria”. En política, todo hace tiempo que está ya inventado. Después de asesinarlo, Claudio Craso se desmandó. Encaprichado con la hija de un centurión llamado Virginio, Virginia, decidió utilizar su poder para convertirla en su esclava mientras su padre servía en el ejército enviado contra los ecuos, un episodio que recuerda mucho al de Sexto Tarquino con Lucrecia, ya se sabe que no hay nada como un buen escándalo sexual para atraer la atención. Este, avisado por sus amigos, regresó apresuradamente a Roma y, antes de permitir la deshonra de su hija, la degolló (gracias, papá). La plebe indignada se sublevó, al igual que el ejército enviado contra los ecuos, sumándose al que hacía frente a los sabinos y que ya estaba en franca rebelión desde la muerte de Dentato. Los decenviros no tuvieron más remedio que dimitir, esperando con ello conservar, al menos, la vida. Los cónsules y los tribunos de la plebe fueron restaurados y las XII Tablas, grabadas en bronce, fueron colocadas en el foro. Quizás, sin nuestro héroe, nunca hubiéramos tenido derecho romano, y nuestro mundo sería muy diferente.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgT6viEIZ158GNvbePnDZcycZZKLJ9Wx9P7J88q4lckEDUSj0UZgKCbRyhB2PSmegH_rBfzSKjxFVSosB2ytn1CbSt2FkqX8NdQEbTp3qmAOpdgAVxc5ZPG9ot3QzYfX2SSWC-7Nl_flJCG6R2rNVNgf6so3Sx3hvhm4Yl1OqTrpF2ofJIMq20xClLcDe8/s768/IL_fatto_di_Virginia-2.webp" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="446" data-original-width="768" height="372" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgT6viEIZ158GNvbePnDZcycZZKLJ9Wx9P7J88q4lckEDUSj0UZgKCbRyhB2PSmegH_rBfzSKjxFVSosB2ytn1CbSt2FkqX8NdQEbTp3qmAOpdgAVxc5ZPG9ot3QzYfX2SSWC-7Nl_flJCG6R2rNVNgf6so3Sx3hvhm4Yl1OqTrpF2ofJIMq20xClLcDe8/w640-h372/IL_fatto_di_Virginia-2.webp" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #ffe599;">La muerte de Virginia</span></td></tr></tbody></table><p style="text-align: justify;"><br />En cuanto a Apio Claudio Craso, según algunos se suicidó en prisión, según otros fue ejecutado.</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><p>FUENTES</p><p>Aulo Gelio, Noches áticas, II. 11</p><p>Dionisio de Halicarnaso, Antiguedades romanas, X. 36</p><p>Plinio el Viejo, Historia natural, XXII. v</p><p>Tito Livio, Ab urbe condita, III.43</p><div><br /></div>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-20553593932621089022023-12-11T22:38:00.003+01:002023-12-14T19:23:26.982+01:00Navidades, esas fechas tan gladiatoriasO anfiteatrales, que lo mismo da. Efectivamente, aunque la mayoría de gente no asocie ambos conceptos (Navidades y gladiatura, o espectáculos de anfiteatro [munera]) la verdad es que estuvieron muy relacionados, tanto por el festival pagano que se celebraba en esas fechas, las Saturnales, como también luego por la propia Navidad cristiana cuando el imperio fue ya cristiano.<div><b><br /></b></div><div><b>Sin miedo al frío <br /></b><br /><div>Al ser un espectáculo que se contemplaba al aire libre, sentado en la grada del anfiteatro, solía ofrecerse con más frecuencia cuando la temperatura era más agradable, y efectivamente los anuncios de munera de Pompeya suelen estar fechados en primavera (predominan aprilis y maius), mientras que los colosales juegos que alcanzaban la centena de días (como la inauguración del Coliseo), o que la rebasaban (como los de Trajano de 123 y 117 días), solían ir de mayo a septiembre. <br /><br />Esencialmente los mismos meses que hoy comprende la temporada taurina, por los mismos motivos meteorológicos. <br /><br />Sin embargo, mientras que hoy no hay corridas de toros en diciembre y enero, porque uno se quedaría helado en el tendido, los romanos no temían a esas fechas (como entonces no había tantas alternativas para entretenerse, el anfiteatro siempre resultaba una opción atractiva… hoy nos quedamos en casa calentitos viendo una peli y listo). Como señalan los autores de la época, se ponían ropajes de gruesa lana, y con eso ya estaban listos para aguantar las varias horas que duraba el spectaculum.<span><a name='more'></a></span><span></span><br /><br /><b>Un calendario cristiano del año 354 <br /></b><br />Sabemos de la celebración de munera en Navidad por un calendario del año 354, llamado de Filócalo (pues fue realizado por el calígrafo e ilustrador Furius Dionysius Filocalus, para un rico cristiano llamado Valentinus). Como todo calendario, da la lista de los meses y sus días, señalando los eventos destacados que se celebran cada día. En el mes de diciembre señala que hay munera el 24 de diciembre, pero también el 2, 4, 5, 6, 8, 9, 20, 21 y 23 de diciembre. <br /><br />El calendario de Filócalo es además muy importante para la Navidad, pues es el primer documento que menciona la celebración de esta el 25 de diciembre. Efectivamente, en la página dedicada a las festividades cristianas señala “VIII kal. Ian. natus Christus in Betleem Iudeae” (8 días antes de las calendas de enero nació Cristo en Belén, Judea). Las calendas de enero son el 1 de enero, y 8 días antes son el 25 de diciembre (entonces contaban de forma inclusiva, esto es, contando tanto el primero como el último elemento de un intervalo, es decir, entre el 25 de diciembre y el 1 de enero contaban ambos días, por eso les daba 8, cuando a nosotros hoy nos da 7, porque no contamos el 25. Esta diferencia se debe a que entonces no tenían cero, mientras que nosotros sí conocemos ese concepto). <br /><br />Así, el calendario de Filócalo prueba que celebramos la Navidad el 25 de diciembre desde, al menos, el año 354. Antes no es seguro, pues sabemos que esa fecha fue elegida por la Iglesia, porque se desconoce el día del nacimiento de Cristo. La Iglesia eligió el 25 de diciembre porque era cuando se celebraba el cumpleaños de Mitra, la divinidad más popular entonces, de manera que poner el cumpleaños de Cristo el mismo día era una buena estrategia para popularizar a este y poco a poco ir borrando al pobre Mitra (del que hoy ya solo nos acordamos cuando leemos un cómic de Conan el Bárbaro). Sin embargo, desconocemos qué año fue el primero que la Iglesia decidió celebrar el nacimiento de Cristo el 25 de diciembre, por lo que el calendario de Filócalo prueba que tuvo que ser en 354 o antes. <br /><br />Pero evidentemente todos esos munera que se celebraban en diciembre, y el 24 de diciembre, no tenían nada que ver con la festividad cristiana, sino con la festividad pagana que desde los inicios de Roma se celebraba en ese mes, las Saturnales (Saturnalia), cuyo día grande era el 23. Como su nombre indica conmemoraban a Saturno, y aunque en su origen primitivo se celebraban el día 17, la propensión de los romanos a la fiesta y el cachondeo acabó extendiendo la festividad hasta el 23, ambos inclusive (pasaron así de uno a siete días de fiesta). <br /><br />Esa festividad era el motivo de esos munera de diciembre, y también otra razón más para que la Iglesia eligiese el 25 de diciembre como fecha de la Navidad: no solo había fiesta por Mitra el 25, sino que los días de antes ya eran de jolgorio generalizado, lo que hacía que poner una fiesta más en esa fecha fuese bien visto. <br /><br />Además, junto a Mitras y Saturnos, la razón de que todos esos dioses celebrasen sus fiestas esos días era el solsticio de invierno: desde el 21 de diciembre los días se hacen más largos, es el triunfo del sol, que vuelve a crecer, y todos esos dioses pretendían adoptar para ellos esa imagen poderosa del sol creciendo, querían mostrarse como el sol. <br /><br />De hecho, los romanos también celebraban esos días la festividad del sol invicto (dies natalis solis invicti, ‘día natal del sol invicto’). <br /><br />Los munera de los días previos al 20 de diciembre debemos entenderlos como la expansión de la fiesta, del mismo modo que expandieron las Saturnalia del 17 hasta el 23.<br /><br />¿Pero por qué un calendario cristiano indicaba los días que había munera? Muy sencillo, porque los cristianos eran los primeros que iban a ver los combates de gladiadores. Valentinus, quien encargó el calendario, pese a ser cristiano también era aficionado a los munera, y por eso pidió que el calendario incluyese esa información importante para él. Esa afición de los cristianos por el anfiteatro era una de las grandes preocupaciones de la Iglesia de la época. <br /><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgif-jGO5hpxYTTja3YtE8i3jMI5BW9M0qn0rAv9D8kpDDu_PdLLij4QZsAuJxBcbLWaQS37Y1zQT7j0c2ylXRaIvYedsXg5tehp0oijj2-tfyitF2a9s3a8BA5nx0hBRWFJcSK_BmKhXK3FxW4QU11wDnT97NM_VVzWL-U4_8Q6Z0EU5neLuwqdNaAKZ50/s732/FOTO%201%2001_dedicatio354.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="732" data-original-width="584" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgif-jGO5hpxYTTja3YtE8i3jMI5BW9M0qn0rAv9D8kpDDu_PdLLij4QZsAuJxBcbLWaQS37Y1zQT7j0c2ylXRaIvYedsXg5tehp0oijj2-tfyitF2a9s3a8BA5nx0hBRWFJcSK_BmKhXK3FxW4QU11wDnT97NM_VVzWL-U4_8Q6Z0EU5neLuwqdNaAKZ50/s320/FOTO%201%2001_dedicatio354.png" width="255" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;">Portada del calendario de Filócalo. Manuscrito Barberini, copia realizada en 1620. El original romano no se conserva.</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><div style="text-align: right;"><br /></div><br />Veamos ya algunos ejemplos de esa relación entre los munera y la Navidad. <br /><br /><br /><b>Un cristiano estudiante de derecho descubre la Navidad de Roma <br /></b><br />Alipio era un joven cristiano discípulo de san Agustín, miembro de la congregación que este tenía en Cartago. En 390 Alipio va a Roma a estudiar derecho, y todo marcha bien hasta que llega diciembre y empiezan los munera arriba citados. Alipio no tenía ningún interés en verlos, y presumía de ello ante sus compañeros de estudio, por lo que ante tanta pedantería estos decidieron llevarle a la fuerza, para comprobar si efectivamente se mostraba tan indiferente al espectáculo. En la grada Alipio mantuvo los ojos cerrados, para no ver la tentación, pero sus oídos no podía cerrarlos… De pronto, todo el Coliseo rugió, y Alipio no pudo resistirse y abrió los ojos, creyéndose por encima de cualquier cosa que pudiese ver. <br /><br />Lo que ocurrió entonces lo cuenta san Agustín: “Vio la sangre y la atroz carnicería. Lejos de girarse, fijó sus ojos en ello. Sin saber lo que estaba ocurriendo, bebió de la locura, quedó encantado por el reprochable duelo, borracho con la lujuria de la sangre, y la herida que recibió en su alma fue peor que la del gladiador que causó ese rugido”. Alipio ya no era más Alipio, sino un hombre diferente, que volvería ya todos los días al Coliseo, y ya no tenían que arrastrarlo sus amigos, sino que lideraba a estos, y arrastraba a otros nuevos consigo. <br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2OPPUgvj6uQpIvQ2Qe1LMKwZQAQFnwsu8IGCjYYqb7x_cOjaFPxOUwPbfnTpVsOUhlFmVfVz_rIRg5FFtnPcrF81za1dkEJYIezjQ9M3RS5C0TB-len2fgI_imLgY9QSouoTnXtbzWNMias-cxn_zU9bAOVnWuNRLKiW7aQGR9BHhdtZu0dchXgCju1Z5/s1142/FOTO%202%20alipio%20-%20copia.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="564" data-original-width="1142" height="158" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2OPPUgvj6uQpIvQ2Qe1LMKwZQAQFnwsu8IGCjYYqb7x_cOjaFPxOUwPbfnTpVsOUhlFmVfVz_rIRg5FFtnPcrF81za1dkEJYIezjQ9M3RS5C0TB-len2fgI_imLgY9QSouoTnXtbzWNMias-cxn_zU9bAOVnWuNRLKiW7aQGR9BHhdtZu0dchXgCju1Z5/s320/FOTO%202%20alipio%20-%20copia.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;">Podemos imaginar a Alipio así de fanatizado tras ver la “atroz carnicería”.</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><br /><br /><b>Symmachus </b><br /><br />Tres años después de la caída de Alipio, en 393, el senador Símaco organizó munera en esos días de Navidad, pero un cúmulo de adversidades arruinó la mayoría de espectáculos que tenía preparados. <br /><br />Entre otras atracciones, había traído leones de África, osos de toda Europa, y prisioneros de guerra sajones para que muriesen luchando en la arena. Pues bien, los leones ni llegaron a Roma, porque cuando el barco estaba ya cerca de la costa italiana naufragó (probablemente por el mal tiempo propio de diciembre, generalmente no se navegaba en esas fechas). Igualmente, los osos enfermaron (sarna) y murieron antes del espectáculo. Finalmente, los prisioneros sajones, orgullosos como ellos solos, decidieron suicidarse la noche antes del espectáculo mientras esperaban en el calabozo, estrangulándose unos a otros (Símaco les reprocha que fuesen tan egoístas, privando así al pueblo del “bello espectáculo” que habían de ofrecer muriendo en la arena). <br /><br />Esas eventualidades eran propias de los munera, el problema fue que en esa ocasión coincidieron todas. <br /><br />Ocho años después (en 401) Symmachus volvió a tener problemas en sus munera, esta vez con cocodrilos: se negaban a comer (por el frío de diciembre esos reptiles estaban aletargados) y tuvieron que matarlos antes de lo previsto, el segundo día de juegos. <br /><br /> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhO2f7C7UN9WU0-xz1Geqr33y8Qxh_Iy0gHbt8FS407I8ffkkMROWney4BLklMgF8Dc2GzRod52pki6BLOo98W8DIFTnDMwcweWNE1Ndp3JvBZF0Pe6rSEShL-B3wOy3AlG0JhWNnkdSluMQat6py7VeerHbTxjl2j38eapmdhyBEeAASwyGRAwafrpW9lb/s1278/FOTO%203%20Luciani%20low%20p.146.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="852" data-original-width="1278" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhO2f7C7UN9WU0-xz1Geqr33y8Qxh_Iy0gHbt8FS407I8ffkkMROWney4BLklMgF8Dc2GzRod52pki6BLOo98W8DIFTnDMwcweWNE1Ndp3JvBZF0Pe6rSEShL-B3wOy3AlG0JhWNnkdSluMQat6py7VeerHbTxjl2j38eapmdhyBEeAASwyGRAwafrpW9lb/s320/FOTO%203%20Luciani%20low%20p.146.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;">Galera romana transportando leones en jaulas, como las galeras fletadas por Símaco que se fueron a pique. Relieve del siglo III. Villa Medici, Roma.</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><br /><br /><b>La Nochevieja de Cómodo <br /></b><br />El 31 de diciembre de 192 empezó en Roma como cualquier otro día de fin de año, con los preparativos habituales para esa noche. Sin embargo, conforme fue avanzando la jornada los acontecimientos se fueron encadenando de tal forma que harían pasar esa Nochevieja a la historia. <br /><br />El emperador era Cómodo, de 31 años, que llevaba en el cargo en solitario desde que su padre Marco Aurelio murió en 180. Para entonces Cómodo ya se había convertido en un emperador gladiador, pues luchaba regularmente en la arena (Dión Casio dice que llevaba ya 12.000 combates, todos victorias lógicamente). <br /><br />Por excentricidades como esa el senado odiaba a Cómodo, y el sentimiento era mutuo, pues Cómodo sentía el mismo asco por el senado, y lo humillaba obligando a los senadores a asistir a sus combates en el Coliseo y a aplaudirle con entusiasmo (y si alguno no lo hacía lo ejecutaba). <br /><br />Esa mañana del 31 de diciembre de 192 Cómodo se había levantado con una nueva idea para humillar a los senadores: uno de los actos del 1 de enero de cada año era que el emperador salía del palacio imperial, a la puerta del cual le esperaban los senadores, para todos juntos acudir a las celebraciones del año nuevo. <br /><br />Cómodo había pensado que ese año no partiría desde el palacio, sino del ludus magnus, la escuela de gladiadores junto al Coliseo, vestido de gladiador en lugar de con la toga imperial, y acompañado por el resto de gladiadores. Así los senadores tendrían que pasar por la humillación de tener que ir a la puerta del ludus (lugar que despreciaban porque consideraban a los gladiadores unos infames) y tener que esperar a los gladiadores mismos. <br /><br />Cómodo sonreía pensando en eso mientras desayunaba-almorzaba, un brunch en toda regla, porque se había levantado a mediodía, lo normal en él, pues la noche anterior había estado de juerga con sus amigos gladiadores (desde mediados de año tenía una habitación en el ludus magnus, para vivir como un auténtico gladiador y rodeado de gladiadores, con quienes salía muchas noches de fiesta). <br /><br />Mientras desayunaba-almorzaba llegó su amante, Marcia, y le contó a esta su idea para el día siguiente. Marcia temió que eso fuese demasiado, y le pidió que no lo hiciera, pero incapaz de hacerle cambiar de opinión se marchó llorando. Entonces Cómodo ordenó al prefecto de la guardia pretoriana, Laetus, y a su cubiculario (mayordomo), Eclectus, que lo preparasen todo para su estancia de esa noche en el ludus magnus. Estos dos también le pidieron que no lo hiciese. <br /><br />Molesto porque ninguno aprobase su idea, decidió ejecutar a los tres (Marcia, Laetus y Eclectus), añadiendo sus nombres a la lista de gente a ejecutar esa noche. Tras eso Cómodo se marchó a las termas, donde entrenaba lucha con los mejores luchadores de Roma, uno de ellos Narciso, que vivía en el palacio imperial. <br /><br />Pero hete aquí que la lista la encuentra Marcia, que inmediatamente avisa a los otros dos, decidiendo que para salvar sus vidas lo mejor es envenenar a Cómodo durante la cena. <br /><br />Cuando Cómodo vuelve se pone a cenar con Marcia, y como venía hambriento (había pasado toda la tarde luchando) come muchísimo. Al rato se siente somnoliento, pero enseguida comienza a vomitar. Sospechando lo que ha pasado, empieza a amenazar a Marcia y Eclectus, que se asustan mucho, y pensando estos que el veneno que le quedará en el cuerpo tras vomitar no le matará, llaman al luchador Narciso, y prometiéndole riquezas le ordenan que mate a Cómodo. Narciso entra al baño donde Cómodo se encuentra vomitando y lo estrangula. <br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJHlz3f3iCSoJy3hgrIBMRXOxy5xDroI1hvr-PJDVBPeINNtqi63V2g4obbQs2qDNp4oYt-K9JTDEPwlCpxpTGQAXygtu5Dv_J1BdYSxBDLaQh9YJRyc8pptaWWtxktnNr-GkcFPAS9sUqBc_oRbudBbQhyphenhyphenebg2c8cYbwXvd4WJDX2H90cftCDAqMU779j/s1614/FOTO%204%20Commodus's%205%20death7%20Pelez.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="1614" data-original-width="1161" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJHlz3f3iCSoJy3hgrIBMRXOxy5xDroI1hvr-PJDVBPeINNtqi63V2g4obbQs2qDNp4oYt-K9JTDEPwlCpxpTGQAXygtu5Dv_J1BdYSxBDLaQh9YJRyc8pptaWWtxktnNr-GkcFPAS9sUqBc_oRbudBbQhyphenhyphenebg2c8cYbwXvd4WJDX2H90cftCDAqMU779j/s320/FOTO%204%20Commodus's%205%20death7%20Pelez.jpg" width="230" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;"><i>La muerte de Cómodo</i>, Fernand Pelez, 1879.</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><br /><br /><b>Año Nuevo <br /></b><br />El 1 de enero de 392, en Roma, durante los munera que era tradicional celebrar ese día, un religioso llamado Almaquio saltó a la arena e interrumpió el espectáculo, para pedir el fin del paganismo y de los combates gladiatorios. El público protestó y el prefecto de la ciudad (presente en el palco) ordenó su ejecución, que se llevó a cabo inmediatamente sobre la arena, a manos de los mismos gladiadores a los que había interrumpido. <br /><br />Este hecho no tuvo mayor trascendencia (solo lo conocemos porque los cristianos incluyeron a Almaquio en la lista de mártires) y los munera continuaron, pero inspiraría la leyenda de Telémaco, un monje que habría hecho lo mismo en 404, en esa ocasión logrando el final de la gladiatura. Esta historia de Telémaco es falsa, pues ni Telémaco existió ni los munera acabaron ese año (sabemos de juegos de gladiadores hasta el año 438). <br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgq_hb8Nwq89nlZcC8TUO7tdF5TqcnY1gbokI8_9AtQTueDpB51_x9XPTZ4oDSQYVF1RoXUDTxZK3LRjF5iE7x5XYcrjHEntVUvnQgEKRn2kvQu6Ctnme6-yCR8WU-gQjY9iGQ9dARAuR1g0FGSmZLDUsdLvTDhCeXFnQqEoare7-mhBszCHpUhLKRI1noT/s826/FOTO%205%20Almaquio%20392%20Tel%C3%A9maco%20%20%2043.aK.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="826" data-original-width="566" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgq_hb8Nwq89nlZcC8TUO7tdF5TqcnY1gbokI8_9AtQTueDpB51_x9XPTZ4oDSQYVF1RoXUDTxZK3LRjF5iE7x5XYcrjHEntVUvnQgEKRn2kvQu6Ctnme6-yCR8WU-gQjY9iGQ9dARAuR1g0FGSmZLDUsdLvTDhCeXFnQqEoare7-mhBszCHpUhLKRI1noT/s320/FOTO%205%20Almaquio%20392%20Tel%C3%A9maco%20%20%2043.aK.jpg" width="219" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;">Representación tradicional de Almaquio interrumpiendo el combate de gladiadores.</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><br /><br />Son esas algunas de las historias que relacionan la gladiatura con la Navidad, aunque hay muchas más. Incluso hoy, tantos siglos después, la Navidad sigue conservando cierta relación con la gladiatura: es frecuente ver belenes en los que se han incluido figurillas de romanos (normalmente playmobils), y entre ellas suele haber gladiadores.</div><div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYO9eK1EHyatsQamSE676xpGTUWaqOQlJUq73QR6A-0qj87kSHePXz7XFKfNih-FglGLWUmrzblJJVEQ4ZuqKHHcRG3yt5IqJMQz2hS861eoTXipR2EwJh2TtOSr-YSpC2OcZ9pvQ7apr6Ozajqs-tc0u_IkRC_IPt5OQvkBZUR4jFoLBw1gPZ5bphIWv6/s752/FOTO%206%20bel%C3%A9n%20-%20copia.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="714" data-original-width="752" height="304" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYO9eK1EHyatsQamSE676xpGTUWaqOQlJUq73QR6A-0qj87kSHePXz7XFKfNih-FglGLWUmrzblJJVEQ4ZuqKHHcRG3yt5IqJMQz2hS861eoTXipR2EwJh2TtOSr-YSpC2OcZ9pvQ7apr6Ozajqs-tc0u_IkRC_IPt5OQvkBZUR4jFoLBw1gPZ5bphIWv6/s320/FOTO%206%20bel%C3%A9n%20-%20copia.jpg" width="320" /></a></div><br /><div><br /><br />Igualmente, entre las ciudades que tienen anfiteatro, estos suelen decorarse con motivos navideños, como el de Verona, que instala una espectacular estrella de Belén. <br /><br /><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhL-TSqZ8bz9G6M7Urv8h6royGHKBQlLxNmx6dL3AgBENSZnvP9vkzqYVbzr1hjmJeAYhbbsya0EG-oY_DjfKB0IXGOWRUhl2UTmvSTwgWQ4EpZwsg38fwcu6qSNB5DVLgOzhNvuR4ZKWQcC-Yo_CdFIgtCGlZeCynOUiKpMj5zTQd5WLsbXjoIWXoLw6Lg/s800/FOTO%207%20Christmas%20star%20at%20amphithetre%20di%20Verona.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="599" data-original-width="800" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhL-TSqZ8bz9G6M7Urv8h6royGHKBQlLxNmx6dL3AgBENSZnvP9vkzqYVbzr1hjmJeAYhbbsya0EG-oY_DjfKB0IXGOWRUhl2UTmvSTwgWQ4EpZwsg38fwcu6qSNB5DVLgOzhNvuR4ZKWQcC-Yo_CdFIgtCGlZeCynOUiKpMj5zTQd5WLsbXjoIWXoLw6Lg/s320/FOTO%207%20Christmas%20star%20at%20amphithetre%20di%20Verona.jpg" width="320" /></a></div><br /><div><br /></div><div>A nivel personal, la Navidad siempre ha estado marcada por los gladiadores, porque cuando era niño los reyes magos me traían siempre Airgamboys de romanos, que incluían gladiadores, bastante bien hechos, con sus cascos, manicas, grebas, tridentes, redes, etc. <br /><br /><br /></div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdQHw9u0qPQw9jR8GUPmLLDjP5-TUK6rfbIatxmFGhjPzm6HDcKS21gT9eVIMKAE0xg1WB-NiiH9pFVq7xfiUuVXcAnTI4IpDjA-81xFVLIaKWBf5lpsVzSoEUGraM2p-MBrSTeAIwk8PMgc8DvVhdpFlBQtC6DVMAmj0iwwrVg0eDleBMSGVUr1WYJ2_Q/s576/FOTO%208%20airgam%20boys%20gladiadores.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="432" data-original-width="576" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdQHw9u0qPQw9jR8GUPmLLDjP5-TUK6rfbIatxmFGhjPzm6HDcKS21gT9eVIMKAE0xg1WB-NiiH9pFVq7xfiUuVXcAnTI4IpDjA-81xFVLIaKWBf5lpsVzSoEUGraM2p-MBrSTeAIwk8PMgc8DvVhdpFlBQtC6DVMAmj0iwwrVg0eDleBMSGVUr1WYJ2_Q/s320/FOTO%208%20airgam%20boys%20gladiadores.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: left;">Algunos de los Airgamboys gladiadores que me echaron los reyes (el de la derecha con el penacho rojo no es gladiador). Lo mejor era que la boca del león por supuesto encajaba perfectamente en los brazos y piernas de los hombres, por lo que podías poner al felino devorándolos, en terribles carnicerías…</span><br style="text-align: left;" /></td></tr></tbody></table><br /><div><br /></div><div><br /> <br /><br />Feliz Navidad a tod@s, y poned un poco de gladiatura en vuestra Navidad, siempre alegra las fiestas (sirva para ello estos breves ‘cuentos de navidad’ [gladiatoria]).<br /><br />P.S. Todas esas historias (Alipio, Símaco, Cómodo, Almaquio), y muchas otras, las cuento completas en mi libro <a href="https://www.planetadelibros.com/libro-gladiadores/268792" target="_blank">Gladiadores: el gran espectáculo de Roma</a> (edición 2018). <br /><br /><a href="https://www.planetadelibros.com/libro-gladiadores/268792"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /></a><div style="mso-element: endnote-list;"><div id="edn1" style="mso-element: endnote;">
</div>
</div><p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span><b><span style="background: white;">Alfonso Mañas</span></b><o:p></o:p></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span>alfonsomanas1@hotmail.com<o:p></o:p></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span style="color: red;"><a href="https://www.facebook.com/alfonso.gladiadores/" target="_blank"><span>Perfil en Facebook</span></a></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span style="color: red;"><a href="http://alfonso-manas.blogspot.com/" target="_blank"><span>blog personal</span></a></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span>Miembro del grupo de investigación CTS-545 (área de Historia del
Deporte) de la Universidad de Granada<br />
Consejero Editorial de <i><span style="color: red;"><a href="https://www.tandfonline.com/action/journalInformation?show=editorialBoard&journalCode=fhsp20 " target="_blank">The International Journal of the History of Sport</a></span></i> <o:p></o:p></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;"><span style="color: red;"><a href="https://www.viajesiverem.com/tours/gladiadores-antigua-roma/" target="_blank"><span>Guía en viajes de temática gladiatoria</span></a></span></p>
<p align="right" class="MsoNormal" style="background: white; text-align: right;"><span><a href="https://granada.academia.edu/AlfonsoManas" target="_blank">https://granada.academia.edu/AlfonsoManas</a><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 12pt; text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 12pt; text-align: center;"><span style="font-size: 14.6667px;">-----------------------------------------------o-----------------------------------------</span></p>
<br />Para saber más sobre gladiadores y los espectáculos anfiteatrales, ver el documental <a href="https://www.rtve.es/play/videos/arqueomania/arqueomania-escuela-gladiadores/5600249/">'Escuela de gladiadores'</a>.<br /><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /></div>Roberto Pastranahttp://www.blogger.com/profile/13128078798890547612noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-6094988014931324232023-11-07T01:15:00.002+01:002023-11-07T01:15:32.706+01:00Tusnelda, la bárbara ejemplar<p style="text-align: justify;"> </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVyEDYJv2Kowfyez-ODw6w19OprdUGpkP3ZRSDazpPAM0AJu6YdGZdAQMxGMZGWf1IrcRYsL2_f07KcElX7Eq1FR_ME9ddp726blBJmJdguCDyKYAxuoNLb0UUXnFozsKyOZiCfk1J0ojpNrULPWatoMiW3DZVuMKoRybX5pbdmN64OeyPlnIEY8FezeU/s800/thusneldabarbarians.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="450" data-original-width="800" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVyEDYJv2Kowfyez-ODw6w19OprdUGpkP3ZRSDazpPAM0AJu6YdGZdAQMxGMZGWf1IrcRYsL2_f07KcElX7Eq1FR_ME9ddp726blBJmJdguCDyKYAxuoNLb0UUXnFozsKyOZiCfk1J0ojpNrULPWatoMiW3DZVuMKoRybX5pbdmN64OeyPlnIEY8FezeU/w400-h225/thusneldabarbarians.jpeg" width="400" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Es la primera mujer germana de la
que tenemos noticias y la única germana de los tiempos antiguos cuya vida nos
ha sido transmitida con algún detalle. Tácito la mencionará con cierta
admiración, lo que ya es un mérito notable para un escritor romano, y varios
autores griegos hablarán con respeto acerca de su figura, lo que ya es
milagroso en escritores griegos. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Aunque solo uno, Estrabón, nos dejará su
nombre.<o:p></o:p></p><span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> De origen, Tusnelda no fue una cualquiera, sino una noble hija de Segestes, dirigente de la tribu de los queruscos, que habitaba partes cercanas al valle del Rin y las llanuras y los bosques del noroeste de Germania, en una zona que llegaría hasta la actual Hannover. Así que no era una tribu pequeña. El nombre "querusco" apunta a un origen celta de la tribu, pues parece de derivar del celta “kern” (cuerno), pero para el siglo I se habían germanizado, porque Plinio los menciona como parte de la cuarta raza o cultura de los germanos, junto a los catos, suevos, hermunduros y hermiones (HN, 4.28). </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Los romanos ya tenían contactos con ellos desde Julio César y sus relaciones siempre fueron bastantes respetuosas, sin conflictos a destacar, al contrario. Así que en la conquista romana de Germania, a partir del 12 a.c. se les consideraba una tribu aliada, que daba apoyo militar a las legiones.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> No parece que tuvieran un solo rey o líder, porque a Segestes no se le considera de tal rango en las fuentes, solo se describe como un noble importante. Pero lo suficiente para influir en las decisiones de su pueblo. Su hija, Tusnelda, debió nacer por el año 10 a.C. en plena campaña de conquista romana de Germania por Druso, hermano del futuro emperador Tiberio y excelente general. Pero los queruscos no sufrieron el acoso romano, sino que se beneficiaron de su alianza y a sus nobles les iba relativamente bien a principios del siglo I. El hermano de Tusnelda, Segismundo, por ejemplo, fue nombrado sacerdote del culto imperial en el año 9 d.C.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKguPFH2-8IcG8HSxX7NWNgmKrE_2sD7SPn2w_srIfEmiimFHHI8_sPzqBpiQVivR017dGK5MLa8REfDj_cuz9uxVp86IYAHNHELU0gNdi5J_qriHOaVAY1KOwpIIvHLxGYy62BDyzr7E8jJCWbkOfpSSKlT61ILo1wkwZBfUFkMKH1eRBktfkQi_JAdc/s1280/pueblos-germanos.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="890" data-original-width="1280" height="279" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKguPFH2-8IcG8HSxX7NWNgmKrE_2sD7SPn2w_srIfEmiimFHHI8_sPzqBpiQVivR017dGK5MLa8REfDj_cuz9uxVp86IYAHNHELU0gNdi5J_qriHOaVAY1KOwpIIvHLxGYy62BDyzr7E8jJCWbkOfpSSKlT61ILo1wkwZBfUFkMKH1eRBktfkQi_JAdc/w400-h279/pueblos-germanos.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pueblos germanos del siglo I. Una jaula de locos.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Pero llegó Arminio, joven querusco de buena familia y oficial de las tropas auxiliares romanas, como otros queruscos de su condición. Con sus hombres había participado en el aplastamiento de la revuelta panónica (6-9 d.C.), que tantos problemas causó a Roma, y parece que allí se dio cuenta de las debilidades del imperio y que podía ser vencido. También debió sufrir alguna afrenta o disgusto por parte de los romanos, porque cuando volvió a Germania estaba decidido a librarla de su dominio, perder todo lo ganado junto a los romanos y jugarse la vida. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Como dice Veleyo (II 118, 3) era <i>«un joven de familia noble, valiente en la lucha, rápido en comprender, más listo que los demás bárbaros… que dejaba adivinar en su rostro y en sus ojos el ardor de la inteligencia, que por habernos acompañado a menudo en nuestra campaña anterior, había accedido al derecho de ciudadanía romana, luego al grado ecuestre, se aprovechó de la pasividad del general para su traición.”</i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Este general era Quintilio Varo, gobernador de Germania, que nunca sospechó lo que aquel joven germano de su entorno estaba tramando y que, además, parecía ayudar a sus planes con su política en Germania. Ya que, como dice Floro (II 29-31):</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i>«Es más difícil conservar una provincia que conquistarla… Se conquistan con tropas; se retienen con justicia… De hecho, los germanos habían sido más vencidos que sometidos y, mientras estuvo como general en jefe Druso, sentían un respeto superior por nuestras costumbres que por los ejércitos; cuando murió, comenzaron a odiar los caprichos y la soberbia de Varo no menos que su crueldad.”</i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Pero mientras Arminio organizaba
una revuelta con otros jóvenes nobles, le dio tiempo a enamorarse
de Tusnelda, a la que seguramente se encontraba a menudo en las celebraciones y
reuniones de la nobleza querusca. Un amor que fue correspondido y que no gustó
nada a Segestes, que le negó el casamiento, pues tenía en mente otro
matrimonio para su hija. Pero Arminio no era de los que aceptaba un no por
respuesta y Tusnelda no era de las que hacían caso a su padre. Ambos se fugaron
juntos como los personajes románticos de una novela francesa.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpJqBfRbYeGyckXA5D2MoL-6McQgw5FzBwmAqabnPsA9V6cfRhih_sdzMRI1trRB-JEbYeUGT5zo0CsdZADXrychyQUdCujF9ONuq7p4NwWRnh9_ngNS7V3tK43ubTjG1GYu8SpR94O9pK37wjfqiqI6cFAVez6dQbi6JvNZuIGnAHWQNPZcGIkyf7alA/s1134/Hermann_und_Thusnelda_(Tischbein).jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1134" data-original-width="800" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpJqBfRbYeGyckXA5D2MoL-6McQgw5FzBwmAqabnPsA9V6cfRhih_sdzMRI1trRB-JEbYeUGT5zo0CsdZADXrychyQUdCujF9ONuq7p4NwWRnh9_ngNS7V3tK43ubTjG1GYu8SpR94O9pK37wjfqiqI6cFAVez6dQbi6JvNZuIGnAHWQNPZcGIkyf7alA/w283-h400/Hermann_und_Thusnelda_(Tischbein).jpg" width="283" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>"Arminio y Tusnelda"</i>, de Tischbein. Estilo romántico de manual.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Desde luego, como noble principal
que era, Segestes debía conocer o sospechar lo que tramaba Arminio, aunque no denunció a su paisano. Pero tras la fuga de su hija con ese descarado joven, Tácito (I,55)
dice que incluso avisó a Varo de la traición de Arminio:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i>“en el último banquete, después
del cual se tomaron las armas, descubrió la resolución y persuadió a Varo que
le prendiese a él mismo, a Arminio y a los demás principales, diciendo que no
intentaría cosa el pueblo si le quitaban el apoyo de los príncipes, y que
después habría harto tiempo para separar los inocentes de los culpados.”</i><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero no fue creído. A Varo le
caía simpático el inteligente Arminio y, probablemente, pensó que Segestes solo era un
padre traicionado con ganas de venganza.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Así llegó la derrota romana
de Teotoburgo del año 9, conocida por todos y que no hace falta relatar, que
llevó a Arminio a la cúspide de su fama e influencia. Había liberado Germania
del yugo romano y tenía tres águilas legionarias en su poder. Parece que
Segestes y su familia, muy a su pesar, se pasaron por pura supervivencia al
bando rebelde. Esto conllevó el perdón a su hija y la aceptación de su relación
con Arminio.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjEAUebjfs3qdW5MpSvPYkIRmRNcGQpCCMmF8KfhBb3vxsrSBHyaCk9rsEsSsd_uo1cykgzaRklnw0SkxFvyEV-swyqhUUqon-kNR0le0Os6wOmoW209LazjpxE24Z823O5nEykKW8rs-WbvJrHnHEdZghSKb6AMknQ-lhgzCeOpU65q_Y7E0MOWfxqp3Q/s670/Batalla-de-Teutoburgo.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="380" data-original-width="670" height="226" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjEAUebjfs3qdW5MpSvPYkIRmRNcGQpCCMmF8KfhBb3vxsrSBHyaCk9rsEsSsd_uo1cykgzaRklnw0SkxFvyEV-swyqhUUqon-kNR0le0Os6wOmoW209LazjpxE24Z823O5nEykKW8rs-WbvJrHnHEdZghSKb6AMknQ-lhgzCeOpU65q_Y7E0MOWfxqp3Q/w400-h226/Batalla-de-Teutoburgo.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Batalla de Teotoburgo. Un mal día en la oficina para las legiones</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> No sabemos qué pasó entre
los queruscos en los años posteriores, aparte de que hubo más desunión que
unidad frente a cómo continuar la guerra, pero la cosa volvió a torcerse para Tusnelda
en el año 13. Los romanos volvieron de nuevo y muy cabreados. Esta vez dirigidos por un
general de nombre ideal para el asunto, Germánico, el hijo de Druso, dispuesto
a ser tan buen general como su padre.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Comenzó una larga guerra de venganza y
castigo, donde Segestes volvió a ponerse del lado romano. En
el año 15, Tusnelda vivía con su familia y esperaba un hijo de Arminio, pero
estaba siendo retenida a la fuerza en la fortaleza de su padre. No sabemos el
trasfondo del asunto, pero es evidente que Segestes había roto la alianza con
su yerno. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Arminio intentó liberar a su mujer, pero Germánico llegó con sus
legionarios y rompió el cerco. Segestes, agradecido muy diplomático, le entregó a
su hija embarazada como preciada rehén. Los romanos no olvidarían su gesto.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Tácito (I, 57) nos cuenta que, al
ser llevada ante Germánico, Tusnelda <i>“demostró
un ánimo más parecido al de su marido que al de su padre: no se presentó
deshecha en lágrimas ni con voz suplicante, sino con las manos juntas dentro de
los pliegues de su vestido, dirigiendo la mirada a su vientre de embarazada.”</i><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Era una chica valiente y altiva,
que provocó el respeto de los captores. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Arminio, nos dice Tácito (I,59) se volvió “<i>loco por la pérdida de su mujer
y por el parto sujeto a servidumbre” </i>y que <i>“Por mis manos han sido degolladas tres
legiones con otros tantos legados; manos acostumbradas a hacer la guerra, no
con traiciones ni contra mujeres preñadas, sino a la descubierta y contra
enemigos armados.”</i> Lo cual
es una contradicción, porque las tres legiones también habían sido destruidas
por su traición antes que por su mano. Pero ya sabemos que las traiciones
propias siempre tienen excusas justas y las ajenas son actos inexcusables.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiANWrfO83HtiTlxjd0yHIS2P2grYZ9xYv1bSEtmUGYBJGHSOqIFgWIB45nAnaxLCOvMhiKW7pmvn0R8naQSzMjMYNTxd3UkTgi6VwHuSqBYg1dZMPrBvgI3rJDggQlLAPIVB07bi2EFma3FGZCAElHE6_G_avMqa9BHukxynIGyD2BwajB17mHMO9Rqn4/s375/Hermannsdenkmal_statue.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="375" data-original-width="250" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiANWrfO83HtiTlxjd0yHIS2P2grYZ9xYv1bSEtmUGYBJGHSOqIFgWIB45nAnaxLCOvMhiKW7pmvn0R8naQSzMjMYNTxd3UkTgi6VwHuSqBYg1dZMPrBvgI3rJDggQlLAPIVB07bi2EFma3FGZCAElHE6_G_avMqa9BHukxynIGyD2BwajB17mHMO9Rqn4/w266-h400/Hermannsdenkmal_statue.jpg" width="266" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Hermannsdeskmal</i> o estatua molona de Arminio</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">No parece mentir Tácito sobre el ánimo iracundo
de Arminio, porque la pérdida de Tusnelda la notó bastante. Sus encuentros
posteriores con los romanos, aunque no fueron derrotas, si fueron empates
sangrientos y costosos, por lo que empezó a ser contestado entre los suyos. El
poderoso rey Marbod de los marcómanos rompió su alianza con él y otros se
acercaron a los romanos para evitar una guerra interminable. Arminio tuvo que
refugiarse en la Germania profunda y los romanos se lo tomaron como una
victoria. Al menos el emperador Tiberio decidió que lo era y que Germánico
debía volver para celebrar un triunfo en la capital, que la guerra de venganza
ya estaba durando mucho y estaba claro que Germania no volvería a ser romana.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">El triunfo de Germánico tuvo lugar el 26 de
mayo del 17 d. C. (Tácito, Anales, II.41) y contó con la presencia del propio
Segestes, quien <i>"estuvo presente como invitado de honor en el triunfo
sobre sus seres queridos"</i>, pues sus hijos Tusnelda y Segismundo, más
su nieto Tumélico, ya de tres años, desfilaron tras el carro de Germánico, como
nos cuenta Estrabón, (Geografía, VII.1.4), que debía estar presente, y que también
nos llama la atención, con cierta ironía, sobre el hecho de que el marido de Tusnelda, su
querido Arminio, el vencedor en el bosque de Teutoburgo, no había sido
capturado y la guerra misma que tanto se celebraba no había sido ganada. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgg3gvp8Pez8gm7PG6IVHcW30RYTvK5giqH7qLJ925GeJrM0-TSEjDKzheG-dHfaSggGJMGQ-pwkHAaHStbMKlvtNqyCMY7uWHaf5u0FQ6FQ8-UAosIwX-FS9XK4zV73YaqSWR59w0uW9SQpMlSamKHcWHLND0RYaSZSTjffz-ypc0Lvj6c8I5hUWBKDX4/s600/ThusneldaLedinGermanicus%20Triumph1873874%20by%20Carl%20Theodor%20von%20Piloty.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><i><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="600" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgg3gvp8Pez8gm7PG6IVHcW30RYTvK5giqH7qLJ925GeJrM0-TSEjDKzheG-dHfaSggGJMGQ-pwkHAaHStbMKlvtNqyCMY7uWHaf5u0FQ6FQ8-UAosIwX-FS9XK4zV73YaqSWR59w0uW9SQpMlSamKHcWHLND0RYaSZSTjffz-ypc0Lvj6c8I5hUWBKDX4/w400-h266/ThusneldaLedinGermanicus%20Triumph1873874%20by%20Carl%20Theodor%20von%20Piloty.jpg" width="400" /></i></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>"Tusnelda en el triunfo de Germánico",</i> por Von Piloty (1874). Muy germánico.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Tácito también estaba desconcertado <i>porque
"se decretó un triunfo para Germánico con la guerra aún en curso"</i>
(Anales, I.55), uno que, <i>"dado que se le había prohibido completarlo,
se suponía que estaba completo" (II .41).</i> Desde luego, Tiberio tenía
prisa en acabar con aquella guerra de desgaste que costaba un dineral y su
carácter suspicaz quizá estaba molesto por la fama que estaba alcanzando su
sobrino Germánico.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Dado
que se decía que los germanos temían la esclavización de sus mujeres más que la
de sus hombres (Tácito, Germania, VIII), Segestes debió sufrir cierta conmoción
al presenciar la humillación de su hija Tusnelda. Pero era el precio que debía pagar por ser
“amigo de Roma”.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">No parece que Tusnelda recibiera malos tratos
después del desfile. Seguramente no la dejaron volver a Germania, pero por
respeto a su padre y familia, aliados de Roma, debió de vivir en Italia de forma digna
hasta su muerte. Quizás en Rávena, donde fue enviado su hijo. Lo que está claro
es que nunca volvió a ver a su amado Arminio. Tampoco es que le quedara mucho
tiempo. Pocos años después, en el 21, la familia de Segestes consiguió matarlo
a traición.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Si hay alguien que nunca perdona, es un suegro querusco
traicionado.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj0-dCvFEQMGErp_371G2suyJAizWXb1m1hIXgl05rUKnS1ZCFbd60xd-2U8MqblYTu5xnYK0x2VFx_3DHzodCjPGlvT-3jSWiiEnDEI6lLLAZ7W4NZUfJPvnJ11pFKN-LwIo8fFLFRHeBX5aJDHeMAUvcnszbQ4q-VWF8Fl5uKrej7ffcSYUANkR4d9X4/s600/logiadeilanzi.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="356" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj0-dCvFEQMGErp_371G2suyJAizWXb1m1hIXgl05rUKnS1ZCFbd60xd-2U8MqblYTu5xnYK0x2VFx_3DHzodCjPGlvT-3jSWiiEnDEI6lLLAZ7W4NZUfJPvnJ11pFKN-LwIo8fFLFRHeBX5aJDHeMAUvcnszbQ4q-VWF8Fl5uKrej7ffcSYUANkR4d9X4/w238-h400/logiadeilanzi.jpg" width="238" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Bárbara muy depre, llamada "Tusnelda", de época antonina. en la Logia dei Lanzi, Roma.</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Sobre su hijo Tumélico, el escrupuloso Tácito promete contar la historia <i>"a su
debido tiempo"</i>, pero en su obra no se encuentran más referencias sobre
su vida, al menos en los textos que nos han llegado. Existe un vacío perdido en
su obra en los años 29-31 y 37-47, por lo que se puede pensar que quizá Tumélico
murió en esos años, ya que no hay referencias posteriores y cuando los
queruscos solicitaron un rey a Roma en el año 47, sólo un miembro de la casa
real sobrevivía para liderar la tribu, el hijo del hermano de Arminio (XI.16).
Si Tumélico hubiera estado vivo entonces, sin duda también se habría mencionado
su nombre.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Ha surgido la leyenda de que el chaval acabó
su vida de gladiador, para disfrute del pueblo romano. Pero se debe a la fama
de Ravena, que era una ciudad <i>"tan saludable que los gobernantes habían
dado órdenes de alimentar y entrenar a los gladiadores allí"</i>
(Estrabón, V.1.7). Era el centro principal de entrenamiento de los gladiadores propiedad del emperador.
Pero no hay ninguna pista ni fuente que diga que Tumélico acabó en la escuela
gladiatoria.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikbgVt3BlHQRjimGPwPjUGB0MVQuMIq4XkTit6TT43CtVAQrByqwu-CNWFKYTcvQrc3Zf5Fx7TgOSxtpOaS7mu1j48gDT8eE0ffKOyZhYObFoWYfJivI4GUfVZJ8sV03lFLiepo_5fJn8Ina6ODqWE5O6cGPwmMXV1H4g3kk0gHPiMHsl3P8xsQsKeq1E/s670/ravena.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="480" data-original-width="670" height="286" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikbgVt3BlHQRjimGPwPjUGB0MVQuMIq4XkTit6TT43CtVAQrByqwu-CNWFKYTcvQrc3Zf5Fx7TgOSxtpOaS7mu1j48gDT8eE0ffKOyZhYObFoWYfJivI4GUfVZJ8sV03lFLiepo_5fJn8Ina6ODqWE5O6cGPwmMXV1H4g3kk0gHPiMHsl3P8xsQsKeq1E/w400-h286/ravena.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Al fondo, Ravena en el siglo I. En la costa estaba la base de la flota imperial</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Al contrario, Ravena, base de la flota, al ser una ciudad
rodeada de pantanos, era un lugar seguro donde alojar prisioneros y rehenes importantes,
como el rey dálmata Bato o el rey Marbod, el orgulloso rey marcómano que había
recibido la cabeza de Varo, el cual también acabó languideciendo en sus calles
hasta morir en el año 37. Es probable que también el emperador Tiberio hubiera enviado a Tusnelda y Tumélico a pasear por sus calles. Pero decir que el hijo de Tusnelda
acabó de gladiador por ser enviado allí es como pensar que todo joven que se va
a vivir a Madrid con su madre acaba jugando en el Real Madrid.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero ya sabemos que las leyendas suelen ser
dramáticas, algo trágicas y una pizca románticas. Si no, son solo cotilleo.<o:p></o:p></p><div style="text-align: justify;"><br /></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-28407496384264606892023-09-01T12:40:00.008+02:002024-02-14T21:44:07.555+01:00Euno y la primera gran rebelión de esclavos II. La esclavitud de las fuentes<p> </p><p><br /></p><div style="text-align: justify;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgILHo3szWKKTf4Vy9aLzFRingYzXRkRo8mGPBFj1sXta-mXkXsEm_aHIx7gM7jL4BdupGgUBMzavItTvMAbu_fwbXlMaQz3R2dtA807ms3GVE4Wydo7oqrAOcaCywxGrm2j_yX-rwOg_rZSDHsvzT6EL_KUHpVMzpdSGn1H7pyHsQ-EsT9_S-JjpWlD84/s1574/roman-slave-full-nr-bordeaux-1st-century-ad.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="510" data-original-width="1574" height="195" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgILHo3szWKKTf4Vy9aLzFRingYzXRkRo8mGPBFj1sXta-mXkXsEm_aHIx7gM7jL4BdupGgUBMzavItTvMAbu_fwbXlMaQz3R2dtA807ms3GVE4Wydo7oqrAOcaCywxGrm2j_yX-rwOg_rZSDHsvzT6EL_KUHpVMzpdSGn1H7pyHsQ-EsT9_S-JjpWlD84/w603-h195/roman-slave-full-nr-bordeaux-1st-century-ad.png" width="603" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Tumba de un esclavo romano en Francia. Aún conserva el collar, las cadenas y los grilletes en los pies</i></b></td></tr></tbody></table><br /></div><div style="text-align: justify;">En el artículo anterior “Euno y la primera gran rebelión de esclavos I. Libertad y sangre” narramos la historia tal y como ha llegado hasta nosotros.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbKSWswk5lp1DrGsSrOIAHZ-12u9yNvkFz8MEUS3MlaCYSYv_oZYGLCObr5ShzeS_a_K1P9w9GE_PAnbrqjKEAbIjYmN62SE1oIj9rwvPiBsUchO0dHyBeoOVSWQU3sYpt867HB9gDd1cu5Bim7qnTnok4IOeFuUtt0fRTPjV2Pul9i5M57CA-VNFAn7M/s792/16677461113.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="792" data-original-width="545" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbKSWswk5lp1DrGsSrOIAHZ-12u9yNvkFz8MEUS3MlaCYSYv_oZYGLCObr5ShzeS_a_K1P9w9GE_PAnbrqjKEAbIjYmN62SE1oIj9rwvPiBsUchO0dHyBeoOVSWQU3sYpt867HB9gDd1cu5Bim7qnTnok4IOeFuUtt0fRTPjV2Pul9i5M57CA-VNFAn7M/w440-h640/16677461113.jpg" width="440" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En cuanto a su interpretación, se puede decir que existen tres líneas. La marxista contempla lo sucedido como un episodio clásico de lucha de clases, en la que los oprimidos, los desposeídos, sin distinción de origen (sirios, griegos, cilicios, sicilianos…) se unen para luchar contra el opresor, aquellos que acumulan la riqueza. Cuentan con buenos argumentos, como la extensión del fenómeno a otros territorios donde se reproducían idénticas o similares condiciones y la colaboración con los elementos más desfavorecidos de entre los hombres libres, y no solo en Sicilia, el movimiento llegó incluso a contar con simpatías entre la propia plebe romana: “La población, lejos de conmoverse por las inmensas desgracias de los sicilianos, se mostraba por el contrario encantada, porque estaban celosos de la desigualdad de fortuna y condiciones. Los celos hicieron que la plebe pasara de abatida a alegre; porque el que una vez disfrutó de una fortuna brillante, ahora había caído en la condición más miserable. Lo más cruel fue que los rebeldes, con un refinamiento desalmado, quemaron las mansiones rurales, destruyeron propiedades y cultivos, pero perdonaron a los hombres dedicados a la agricultura. La turba, con el pretexto de castigar a los esclavos fugitivos, pero en realidad, por celos contra los ricos, vagaba por el campo, saqueaba sus propiedades y quemaba sus villas.” Esta idea, sin embargo, se contradice con el hecho de que Euno se proclamara rey y tratara de crear un reino a imitación del de los monarcas seleúcidas. Su respuesta es que, al no haber en aquel momento una teoría política ni una idea de estado “revolucionaria” (marxista) no tenían otra opción que adoptar y adaptar formas de gobierno existentes y que eran consideradas menos opresivas.<span><a name='more'></a></span></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Por el contrario, otro grupo afirma que la revuelta tuvo un origen o bien religioso, dada la condición de adivino de Euno, que habría dirigido una suerte de secta violenta; o bien nacionalista, siria, según algunos, siciliana, según otros. Euno se corona como rey “sirio” y llama a sus seguidores “mis sirios”, mientras que es evidente que, como hemos visto antes, la población local, o al menos una parte, colaboró con los rebeldes y grandes ciudades, como Siracusa, no consta que se enfrentaran con ellos. En ambos casos estas teorías cuentan con elementos discutibles. Si bien Euno parece haber presumido de poderes como adivino y conoce los ritos de la diosa Deméter, esto no le distingue en nada de la multitud de sacerdotes, arúspices, augures, nigromantes, magos y brujas que pululaban por el mundo romano, sin que ninguno llegara a protagonizar episodios como este. Tampoco consta que sus seguidores realizasen ningún rito especial, abandonaran sus anteriores creencias o que Euno propugnase una nueva doctrina religiosa. En una sociedad netamente politeísta, la mayoría de la población se acercaba a una u otra divinidad, templo o sacerdote por múltiples causas, entre las que la curiosidad ocupaba un lugar importante, y con igual ligereza las abandonaba. Aunque se registran algunos episodios de crímenes y autoinmolaciones por motivos religiosos, estos raramente pasan de lo anecdótico. <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2018/09/las-bacanales-cuando-la-adoracion.html">La única excepción conocida podría ser la “secta” de las bacanales dionisiacas en Roma</a>, pero las causas de este movimiento no parecen haber sido tampoco únicamente religiosas y nunca protagonizó una rebelión armada ni violenta.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En lo que respecta al factor nacionalista, los esclavos procedían de infinidad de lugares, por lo que es difícil imaginar cómo pudieron crear, como conjunto, un sentimiento nacionalista. El que Euno se refiera a ellos como “mis sirios” indicaría tan solo que los consideraba ahora sus “compatriotas”. Evitaba, además, el uso del infamante “esclavos”, sustituyéndolo por la ciudadanía de un país que, como el que ellos estaban intentando crear, era en aquel momento un crisol de razas y culturas. Y sobre la idea del nacionalismo “siciliano”, parte de que los pequeños agricultores que se unieron a la revuelta pertenecían todos, o su gran mayoría, a los pueblos originales de la isla, y que lo hicieron con la idea de lograr la independencia de su país, ambos hechos no solo no probados, si no carentes de cualquier indicio que los señale.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Una tercera interpretación rechaza que la causa fuera el conflicto entre clases, la religión o el nacionalismo, y apunta a los malos tratos y el abuso de los dueños que exacerba el deseo de libertad de los esclavos y les hace perder el miedo al castigo. Es decir, el simple “factor humano”. Es lo mismo que sostienen los autores del relato que nos ha llegado y, además, por ser la explicación más simple es la que mejor se adhiere a los principios de la “navaja de Ockham”. Pese a ello hay dos factores que hacen cuestionársela. El primero es que, dado que la rebelión se extendió no solo por toda la isla, sino por el conjunto de los territorios controlados por la República Romana, si no hubo ningún otro factor implicado todos los propietarios debían ser igual de abusivos que Damófilo, por lo que este sería un amo “normal”, mientras que nos es presentado como alguien singularmente mezquino y despiadado. La segunda, y más importante, es que, como ya hemos comentado, coincide plenamente con la interpretación de los autores de la historia que ha llegado hasta nosotros. Y es hora de que nos centremos en este último y fundamental asunto.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj5ecd7vpEAF8Bb_f1JdDlBdegIcMUrzgCHHZp_50BQ3xJYvk2yAG6I_Uwf5f3P3mhAS6Y38VzvLaohBZbjbnhAlYBPgqDdupiP8BUmWIu10qxG0ROum2q316z3FUYB0pRqD_0YdfrbsMA57soErEvb8XbsQjHPE19ShJy-uaf_mwT7vq5e_cBAcXQt17M/s1024/Diodoro-Siculo_edici%C3%B3n%20lat%C3%ADn%201559_latin.jpg" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1024" data-original-width="655" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj5ecd7vpEAF8Bb_f1JdDlBdegIcMUrzgCHHZp_50BQ3xJYvk2yAG6I_Uwf5f3P3mhAS6Y38VzvLaohBZbjbnhAlYBPgqDdupiP8BUmWIu10qxG0ROum2q316z3FUYB0pRqD_0YdfrbsMA57soErEvb8XbsQjHPE19ShJy-uaf_mwT7vq5e_cBAcXQt17M/w410-h640/Diodoro-Siculo_edici%C3%B3n%20lat%C3%ADn%201559_latin.jpg" width="410" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Primera edicón completa de Diodoro traducida al latín en 1559 </i></b></td></tr></tbody></table><br />La principal fuente sobre estos hechos es Diodoro Sículo, Diodoro de Sicilia, natural de esa isla pero que vivió casi un siglo después de estos hechos. Parece, sin embargo, que su fuente es su maestro Posidonio, que nació casi contemporáneo a la rebelión y que, además, era natural de la ciudad siria de Apamea, igual que Euno, por lo que es muy posible que dispusiera de buenas referencias sobre lo sucedido, incluidos posibles testigos. Ambos eran estoicos, (algunos autores consideran a Diodoro “ecléctico”, decir, que unía los postulados del estoicismo con el de otras escuelas filosóficas), y una de las bases del estoicismo es la aceptación del destino y la idea de “Dominación”. Esta idea, que ya formulan Platón y Aristóteles, parte de que el control, el “dominio”, de unos hombres sobre otros es imprescindible para que la sociedad pueda funcionar. Distingue entre “dominación” pública, y privada. En la primera se enmarcan distintas formas de gobierno, de las que ninguna es mejor que otra, sino que su calidad depende de la “moralidad” con la que se ejercen. Así, el lado oscuro de la monarquía es la tiranía, de la aristocracia la oligarquía y de la democracia la oclocracia. La otra dominación es la privada, es decir, el poder que unos hombres ejercen sobre otros fuera del ámbito público, en el privado, del que la esclavitud era, en aquel momento, una de las más comunes y plenamente aceptada. Pero esta dominación privada también debe estar regida por la moralidad. Si se ejerce de forma abusiva, el sistema se deteriorará rápidamente.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En este caso, Damófilo nos es presentado como un prototipo de lo que no debe ser un amo de esclavos: un patán inculto, entregado al lujo y al derroche más absurdo y vulgar, y que trata a sus esclavos con la mayor crueldad. No cumple con su “obligación” de vestirlos y alimentarlos y les impone castigos crueles e injustificados. Es por ese motivo que se altera el orden social “natural”. Como prueba vemos que esos mismos esclavos respetan a aquellos que han ejercido su dominio sobre ellos de forma moral, incluida la propia hija de Damófilo.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjg-T5xQcdLK73KMJZsQjsFiee_LjR-B5ICW4-qfK0Fu0DfSux_4090hSNZkVd4ehJSKizQ3aRxUGQdNH-CU7MO1XiMDtuGRjESNHWNN-ld0ms14Zh4T3s5cEx47k4MHX5imV__K5zZZYaRd958GawDW7OhpvnwrSQEWjvR_o8PVrqd7lmADc_83IkfxDM/s472/AuvrayFelixLamuertedeCayoGracoMuseodeValenciennes%20(1).jpg" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="354" data-original-width="472" height="480" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjg-T5xQcdLK73KMJZsQjsFiee_LjR-B5ICW4-qfK0Fu0DfSux_4090hSNZkVd4ehJSKizQ3aRxUGQdNH-CU7MO1XiMDtuGRjESNHWNN-ld0ms14Zh4T3s5cEx47k4MHX5imV__K5zZZYaRd958GawDW7OhpvnwrSQEWjvR_o8PVrqd7lmADc_83IkfxDM/w640-h480/AuvrayFelixLamuertedeCayoGracoMuseodeValenciennes%20(1).jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Muerte de Cayo graco por Auvray Felix<br /><br /></i></b></td></tr></tbody></table>En cuanto a Roma, esta tarda tanto y tiene tantas dificultades para aplastar la rebelión por que el dominio natural allí también se ha alterado. La plebe embrutecida disfruta con la desgracia de los ricos, y los “équites” uno de los tres órdenes en los que se dividen los ciudadanos romanos, están tratando de alterar el dominio natural del senado y la aristocracia sobre la República. Estos “équites”, una especie de clase acomodada pero sin ascendencia aristocrática y con acceso limitado a los cargos políticos, ya han sido presentados como responsables de la inactividad de las autoridades sicilianas frente a los primeros desórdenes en la isla. Encabezados por Cayo Sempronio Graco, contra el que Diodoro se muestra extremadamente hostil, han provocado una grave crisis política al pretender, entre otras cosas, el acceso a la judicatura o la revisión de las concesiones de tierras propiedad del estado a las grandes familias aristocráticas. Como consecuencia, la justicia y la propiedad son cuestionadas, el estado se debilita y hasta que no restaura ese orden interior no es capaz de hacer frente a la rebelión de los esclavos. Al final, todos los que han tratado de alterar esa “dominación” son justamente castigados: Euno muere en prisión devorado por las alimañas, Aqueo de hambre, abandonado por todos, Graco es asesinado….</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Estamos, pues, ante un ejemplo claro que confirma, punto por punto, los principios ideológicos de quienes nos la transmiten. Así que lo primero que debemos plantearnos es si lo que nos cuentan es cierto. Y no lo es.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La ley impulsada por Cayo Graco que pretendía que los caballeros pudieran ejercer como jueces, y a la que responsabiliza de lo sucedido en Sicilia, no se presentó hasta una década después del fin del conflicto. En cuanto a sus otras acusaciones, como la de abandonar las provincias de Hispania y Galia al expolio por parte de los publicanos (todos équites), el despilfarro de fondos públicos o el debilitar al ejército con la introducción de reformas militares, nunca sucedieron. Diodoro, pues, manipula los hechos. Pero ahora nos enfrentamos a otro problema, fundamental siempre que tratamos con fuentes escritas del Mundo Antiguo: ¿es realmente Diodoro quien lo hace?, es decir, ¿es Diodoro el verdadero autor de los textos que han llegado hasta nosotros, al menos en su forma actual?</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOj8cbMi_-BYPgwSobjOSLDS64EnX_UOlImMC0or6ZE5KHyWzrpM0CUh2Nje0sZOYZ-ER9MnKwXs0OkaEo4O_buEeecfmdaOhu9Y_HLZnBBF8L-aIMIKlQT88JmvgYDX0AZMPDsp0yyNMJ1n3UBIiwhg_9aYkFB75tEJs8QPRr7zNf_TVN8YdSslBscGY/s990/epicuro.jpg" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="990" data-original-width="798" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOj8cbMi_-BYPgwSobjOSLDS64EnX_UOlImMC0or6ZE5KHyWzrpM0CUh2Nje0sZOYZ-ER9MnKwXs0OkaEo4O_buEeecfmdaOhu9Y_HLZnBBF8L-aIMIKlQT88JmvgYDX0AZMPDsp0yyNMJ1n3UBIiwhg_9aYkFB75tEJs8QPRr7zNf_TVN8YdSslBscGY/w516-h640/epicuro.jpg" width="516" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Busto atribuido a Epicuro<br /><br /></i></b></td></tr></tbody></table>Aunque el epicureísmo fue en la Roma Republicana, y aún en la Alto Imperial, la corriente filosófica predominante, a las autoridades imperiales, y a todos los regímenes autocráticos que las sucedieron a lo largo de los siglos, incluida la Iglesia, siempre les gustó más el pensamiento estoico, que se esforzaron (y se esfuerzan) en difundir. Ambos tienen muchos puntos en común, como el considerar que el fin de la vida del hombre es ser feliz, y el resaltar que para conseguirlo es preciso controlar las pasiones, pero mientras que Epicuro y sus seguidores propugnan la búsqueda activa de la felicidad, en la que se debe perseguir aquello que nos hace feliz y eliminar lo que nos impide serlo, los estoicos proponen la aceptación pasiva del destino. La felicidad para los estoicos se logra aceptando, acomodándose, a la realidad de cada uno. Esto tiene unas connotaciones políticas claras. Los cesaricidas eran epicúreos, por poner un ejemplo, y trataron de destruir a quien ellos consideraban un tirano, mientras que la mayoría de los emperadores apoyaron e impulsaron la difusión de la doctrina estoica, muy útil para el mantenimiento del orden social, sea este justo o injusto.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi-9Luq-hlE0PV9xe9WHAKBvlht7LZrFw-ojiHky3lxXisEgQeg68SOoKQ5gsD3uiQ6XSEDID5CbouRA-MCfEYXce3jA7R0idX7sShp3xVkBu3WVMk3nV5L3SBLHGiepKZFYLOuH2XlmV4UZIsqO7QitLHEshyiDqgEefxDFko71BUiI6TiYH7m7VW1rNw/s480/11863486_994320553953004_7114222474082286356_n.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="434" data-original-width="480" height="578" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi-9Luq-hlE0PV9xe9WHAKBvlht7LZrFw-ojiHky3lxXisEgQeg68SOoKQ5gsD3uiQ6XSEDID5CbouRA-MCfEYXce3jA7R0idX7sShp3xVkBu3WVMk3nV5L3SBLHGiepKZFYLOuH2XlmV4UZIsqO7QitLHEshyiDqgEefxDFko71BUiI6TiYH7m7VW1rNw/w640-h578/11863486_994320553953004_7114222474082286356_n.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Busto doble de Séneca y Sócrates, dos de los autores estoicos más citados</i></b></td></tr></tbody></table><br />Como consecuencia, y pese a que en su momento fueron multitud, apenas disponemos de obras o referencias de autores epicúreos, mientras que abundan las del pensamiento estoico. Y esto es así porque ninguno de esos textos que atribuimos al Mundo Antiguo ha llegado hasta nosotros. Los conocemos, en el mejor de los casos, por copias de copias de copias… realizadas por personas al servicio de las élites intelectuales y políticas, siempre muy relacionadas, que se han ido sucediendo a lo largo de estos dos milenios. Y a quienes ocupan los escalones más altos de la pirámide social siempre les ha gustado el pensamiento estoico, con sus ideas de “Dominación” y aceptación del destino, entre otras. Así, se han copiado una y otra vez los libros de autores estoicos, o de determinados autores estoicos, mientras que han desaparecido muchos otros, simplemente porque no ha interesado dedicarles, siglo tras siglo, el esfuerzo y la inversión que supone copiarlos. E incluso estas copias sabemos que no siempre son fieles, ya que es frecuente encontrar diferencias sustanciales entre textos que nos llegan por vías distintas.</div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFD0WcqC8iz969I7mi3S6cXUW-7UA3TvZbcuQURWmPxuVHJUDzNzsCwIKNrPxqHL95QaS3GUHJrK6P8AUORPSjPUrzRW1x3UmesL_aXpqIxAb618jtmdYfz9UTAAdWPilZ92HuPVKEwY4iOwWdtoY0xDO6ozkHW2ERzCyKwqHoaj_lkImnx7MfPaeKRVo/s750/papiro-oxirrinco%20SIGLO%20I%20REM%20RESACA%20.webp" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="457" data-original-width="750" height="365" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFD0WcqC8iz969I7mi3S6cXUW-7UA3TvZbcuQURWmPxuVHJUDzNzsCwIKNrPxqHL95QaS3GUHJrK6P8AUORPSjPUrzRW1x3UmesL_aXpqIxAb618jtmdYfz9UTAAdWPilZ92HuPVKEwY4iOwWdtoY0xDO6ozkHW2ERzCyKwqHoaj_lkImnx7MfPaeKRVo/w599-h365/papiro-oxirrinco%20SIGLO%20I%20REM%20RESACA%20.webp" width="599" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Raro fragmento de un pergamino de época romana encontrado en un basurero en el desierto. Contiene un remedio para la resaca</i></b></td></tr></tbody></table><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En el caso de la rebelión de Euno de Diodoro no tenemos siquiera una copia completa, sino una serie de fragmentos recogidos principalmente en dos textos. El primero es la colección del patriarca de Constantinopla Focio, del siglo IX, que incluye un epítome de los libros 34/5. Nos ha llegado en forma de diversas copias manuscritas incompletas y con importantes diferencias entre ellas, que se trataron de unificar en la primera edición en 1601. El segundo es un resumen de esos mismos libros que se encuentra en la Excerpta Histórica Constantiniana de Constantino VII, del siglo X. Lo que nos ha llegado de ella está repartido por diversas bibliotecas, incluidas la del Escorial, y parte de los manuscritos se ha perdido y solo nos quedan las ediciones que se hicieron de ellos en época moderna. Los fragmentos que hablan sobre la rebelión de Euno se encuentran en la Biblioteca Vaticana. Todos presentan elementos comunes, pero también otros en los que no coinciden. Hay acontecimientos narrados de forma diferente, y algunos hechos que se mencionan en un texto no están en otro. Es, por tanto, probable que se haya producido algún tipo de alteración.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">“La historia nos dará la razón” es, sin duda, la idea más dañina que se ha generado en la historiografía. Porque la historia no da o quita razones: enseña, nos muestra nuestra experiencia como humanidad para que podamos aprender de ella. La búsqueda de una justificación de los postulados, de las ideas, de cada uno en la historia ha conducido a una sucesión interminable de manipulaciones, ocultaciones o, directamente, falsificaciones en las fuentes, antes y ahora, que nos impide, con frecuencia, conocer la realidad de lo sucedido, y con ello destruyen nuestra memoria y el sentido mismo de la historia, que pasa a ser mera propaganda. Pero estas manipulaciones, cuando se descubren y se exponen, también nos enseñan mucho, no sobre los hechos originales, pero sí sobre la época y los hombres que las realizaron y sobre los que las reprodujeron y las llevaron hasta nosotros.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Y eso es, quizás, aún más interesante.</div>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-15389498367598275992023-08-31T19:11:00.003+02:002024-02-14T21:44:31.954+01:00Euno y la primera gran rebelión de esclavos I. Libertad y muerte<p> </p><div style="text-align: justify;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8Ujih0gHDvyHjL1U_vIYeJ9OVUaVOCZQbecgtp0ewlW377a0_D90MC-fltjCwx4AjFjB9DYw_NjzdfyfyybOnPxWKxj2CAsyZHeWO2DHVmmsCG1XssMwUxeXYSJjYB70_nRQNeKiWrYlRZi7lYYYhGYgvxzPb1edUFy6frnG90p8DMpFs27CaVeUTSUA/s1107/roman-era-skeleton-with-shackles-sw-france-nr-amphitheatre-at-saintes-bordeaux-area-c1-ce.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="610" data-original-width="1107" height="329" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8Ujih0gHDvyHjL1U_vIYeJ9OVUaVOCZQbecgtp0ewlW377a0_D90MC-fltjCwx4AjFjB9DYw_NjzdfyfyybOnPxWKxj2CAsyZHeWO2DHVmmsCG1XssMwUxeXYSJjYB70_nRQNeKiWrYlRZi7lYYYhGYgvxzPb1edUFy6frnG90p8DMpFs27CaVeUTSUA/w602-h329/roman-era-skeleton-with-shackles-sw-france-nr-amphitheatre-at-saintes-bordeaux-area-c1-ce.png" width="602" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span face=""Calibri",sans-serif" style="font-size: 11pt; line-height: 15.6933px; mso-ansi-language: ES; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"><i><b>Tumba de un esclavo romano. Aún conserva el pesado collar y la cadena que debió cargar en vida</b></i></span></td></tr></tbody></table><br />Cuando hablamos de Roma y de las rebeliones de esclavos todos pensamos en Espartaco o, mejor dicho, en Kirk Douglas interpretando a Espartaco en la película de Stanley Kubrick, pero, de hecho, y aunque sea el que haya acaparado la atención, Espartaco no fue el líder de la primera gran rebelión de esclavos, sino más bien de la última. Ese lugar le corresponde a Euno, un esclavo sirio en Sicilia que protagonizó la Primera Guerra Servil. Espartaco dirigió la tercera.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Estamos en el segundo cuarto del siglo II a.C. y Roma ha conquistado Italia, derrotado a los cartagineses y se ha convertido en la primera potencia del Mediterráneo. La vieja república de campesinos-soldados, duros como el pedernal, está desapareciendo a marchas forzadas, fagocitada por el imperio que ella misma ha creado, un fenómeno que se repetirá varias veces en la historia. Los inmensos territorios capturados, despojados a sus antiguos dueños ahora muertos o esclavizados, no han sido repartidos de forma equitativa, sino que han pasado a manos de una pequeña élite de mega-ricos que gracias a ellos se enriquecerán aún más. Los convertirán en inmensos latifundios destinados a proveer de trigo a la nueva urbe imperial, en rapidísima expansión gracias a la llegada masiva de esclavos, de emigrantes y, sobre todo, de antiguos campesinos que lo han perdido todo. Las pequeñas propiedades tradicionales, cuyos dueños deben permanecer largos años de servicio militar en el extranjero, muriendo y matando por la República, no pueden competir con los inmensos latifundios esclavistas, cuyos propietarios, además, <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2016/11/marco-postumio-pirgense-contigo-empezo.html">controlan el senado, y con él los mercados y los contratos de suministro a la ciudad.<span><a name='more'></a></span></a></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Estos ciudadanos desposeídos ya no pueden ser convertidos en esclavos, un logro que, por primera vez, pone a un colectivo a salvo de la esclavitud debido a su origen (a su estatus jurídico en realidad) con lo cual su única opción es morirse de hambre o ponerse al servicio de los poderosos como “clientes”, una forma nueva de venderse a sí mismos. De hecho, muchos esclavos que sirven a esos poderosos se encuentran en una situación mejor que estos “proletarii” cuya única posesión son sus propios hijos, su prole.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Y, por debajo de todos ellos, en el último escalón de la degradación social, están los esclavos usados como mano de obra forzada en minas o grandes explotaciones agrícolas y tratados como simple ganado. Diodoro nos cuenta que sus amos acostumbraban a marcarlos como a las reses. Esto, además de espantosamente doloroso y humillante, debía tener otra consecuencia psicológicamente aún más devastadora: privarlos de la esperanza. En el Mundo Antiguo, dado que no existía ninguna comunidad, raza o grupo específico predestinado a la esclavitud, los esclavos siempre podían conservar la esperanza de alcanzar algún día la libertad, bien por generosidad en vida o póstuma de sus amos, bien comprándose a sí mismos o de otras varias formas. Y la esperanza es uno de los mejores métodos de control social, como bien saben actualmente los gobiernos con sus, por ejemplo, múltiples y rentabilísimas loterías, que permiten a sus ciudadanos soñar con alcanzar la riqueza o, al menos, mejorar su situación. Por el contrario, los esclavos marcados de forma indeleble comprendían que jamás podrían escapar a su condición.</div><div style="text-align: justify;"><br /><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiedZTs4ZTF5x8F-SKyVbzUaGDwDf57jYUzdHVWpuWfrVeOAP9m79sj1BAyRcwFWeoXSA0mHePLKYDjSnPtyPqzAsdjrfn5oFV3MyHC5ls82PuVGe9tQy1h5FQTH0Z2pRdTeISITYysXp0uRLk7IdeWonjDb87Fpszq4FdWpWv0UClMX6c4ep8c_Yg4pJ4/s566/2nd-century-skeleton.jpg" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="502" data-original-width="566" height="568" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiedZTs4ZTF5x8F-SKyVbzUaGDwDf57jYUzdHVWpuWfrVeOAP9m79sj1BAyRcwFWeoXSA0mHePLKYDjSnPtyPqzAsdjrfn5oFV3MyHC5ls82PuVGe9tQy1h5FQTH0Z2pRdTeISITYysXp0uRLk7IdeWonjDb87Fpszq4FdWpWv0UClMX6c4ep8c_Yg4pJ4/w640-h568/2nd-century-skeleton.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span face=""Calibri",sans-serif" style="font-size: 11pt; line-height: 15.6933px; mso-ansi-language: ES; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"><i><b>Tumba de un esclavo romano enterrado con sus grilletes</b></i></span></td></tr></tbody></table></div><div style="text-align: justify;">Euno era uno de esos esclavos. Entre los pocos datos que conocemos de él está su origen: procedía de la localidad de Apamea, en Siria, un territorio aún no conquistado por los romanos. Esto parece indicar que no se trataba de un prisionero de guerra. Aunque en el imaginario colectivo son las legiones y sus conquistas las que proveían de esclavos a Roma, en la práctica no eran suficientes. La economía y la sociedad romana tardorrepublicana tenían una necesidad continua de mano de obra que se cubría adquiriendo seres humanos por todo el Mediterráneo, e incluso mucho más allá. Estos podían caer en la esclavitud de muchas maneras: por deudas; por haber sido apresados en guerras ajenas a Roma, muchas veces provocadas con el único fin de lograr cautivos que vender a los tratantes de la urbe; o secuestrados por bandidos y piratas para vendérselos a esos mismos tratantes. Una vez llegados al mercado, nadie preguntaba su origen. De hecho, el auge de la piratería en el Mediterráneo en esa época pudo tener su origen en el negocio de capturar, en el mar o en la costa, esclavos para Roma, que por ese motivo la toleró, sino la impulsó, hasta que creció de tal manera que amenazó las propias vías de suministro de la ciudad.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Euno, en todo momento se define a sí mismo como sirio, al contrario que los esclavos de segunda o tercera generación que pierden rápidamente su conciencia de origen más allá de su propia condición de esclavos, conoce los ritos de la diosa siria Deméter, según nos cuenta Diodoro, y la mujer con la que vive, y a la que más adelante hará coronar reina, también es siria, y Diodoro la describe como συμπολῖτιν, que puede traducirse por conciudadana o paisana. Todo eso nos lleva a pensar que Euno nació libre y fue esclavizado, quizás junto a su compañera o esposa.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Euno aseguraba incluso que era capaz de comunicarse con la diosa, y que esta le transmitía mensajes gracias a los cuales podía adivinar el futuro. Diodoro afirma que: “Entre las muchas predicciones que pronunció, hubo algunas que se hicieron realidad, y como nadie recuerda los errores ni las falsas predicciones, mientras que se habla mucho de las que se cumplen, este hombre pronto adquirió una gran reputación”. Esta reputación traspasó los límites de las ergástulas de los esclavos y llegó hasta las casas de sus propios amos. Una de las predicciones que realizó es la de que llegaría a ser rey. Antígeno, su amo, un rico propietario que vivía en la ciudad de Enna, al saberlo lo invitaba a sus banquetes para entretenimiento y diversión de los invitados, algunos de los cuales, entre risas, y quizás medio en broma medio en serio dada su fama como adivino, le ofrecían grandes porciones de comida de sus platos, rogándole que, cuando alcanzara el trono, no olvidase su generosidad. Así que sus predicciones, por lo menos, lo llevaron a mejorar sus condiciones de vida. De momento.</div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimYz_crJJVHS8QlKG2m7kJTOLU8Op9xf3iVFzE-myZVqeTBGOmn2_YgomaWpyp0YrNLGh9KcHMT2wir42s1-lw2RUDESPB61Bq7VQ35WUWQ4A_B9PoTBfvkxTMT6NZJ3yHp0d8uIVrU4Wlu618TYc2vu_cKDkUPGf16yWlX0Em43oAFEuMy2CYB2VXu2c/s1239/slaves-in-roman-mosaic-from-tunisia-2nd-century-wearingtypical-clothing-and-lucky-amulets.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="897" data-original-width="1239" height="431" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimYz_crJJVHS8QlKG2m7kJTOLU8Op9xf3iVFzE-myZVqeTBGOmn2_YgomaWpyp0YrNLGh9KcHMT2wir42s1-lw2RUDESPB61Bq7VQ35WUWQ4A_B9PoTBfvkxTMT6NZJ3yHp0d8uIVrU4Wlu618TYc2vu_cKDkUPGf16yWlX0Em43oAFEuMy2CYB2VXu2c/w594-h431/slaves-in-roman-mosaic-from-tunisia-2nd-century-wearingtypical-clothing-and-lucky-amulets.jpg" width="594" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Esclavos romanos sirviendo a sus amos en un banquete</i></b></td></tr></tbody></table><br /><div style="text-align: justify;">Damófilo, uno de los más despiadados propietarios de esclavos de la isla, poseía grandes extensiones de tierra en torno a Enna que dedicaba a la cría extensiva de ganado, confiada a pastores esclavos<a href="file:///D:/EUNO/Eunoo.docx#_ftn1">[1]</a>. Estos esclavos pasaban largos periodos en el monte e iban armados para proteger los rebaños de las bandas de salteadores, con frecuencia formadas a su vez por esclavos pastores armados. De hecho, Diodoro nos describe en Sicilia y Varrón en Italia una situación de pérdida de control de las autoridades sobre gran parte del territorio en favor de estas partidas de esclavos pastores, que actuaban en muchas ocasiones con el conocimiento, la complicidad e incluso el impulso de sus amos.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Así pues, tenemos una isla repleta de esclavos, la inmensa mayoría jóvenes y nacidos en libertad, muchos de los cuales van más o menos armados (armas cortas, palos o garrotes) y están acostumbrados a actuar de forma violenta. Para que la rebelión generalizada estallase solo hacía falta un catalizador, y ese fue Euno.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Damáfilo, según nos cuenta Diodoro, se negaba a vestir o tan siquiera alimentar a sus esclavos pastores, ordenándoles que se mantuvieran del robo a los viajeros en los caminos. También les infringía castigos brutales, en especial si protestaban. Estos, perdido el miedo y la esperanza, decidieron rebelarse y matar a su amo, pero antes se pusieron en contacto con Euno para preguntarle si los dioses aprobaban lo que iban a hacer. Este, que quizás llevaba tiempo esperando una oportunidad así, les respondió que los dioses apoyaban plenamente la acción, y les instó a actuar rápidamente, sin duda para evitar que los volubles inmortales cambiaran de opinión. La situación de premotín en la isla debía de estar muy avanzada, porque de inmediato cuatrocientos esclavos, encabezados por el propio Eunoo que practicaba otro de sus trucos favoritos, arrojar fuego por la boca, cayeron sobre la ciudad.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhevsJNG2M__6ySlZ-9_jxMWcKuvdZZGEvoym9sPnjrUHT_Tb5mTP_yL2y-Wv7qVsKh09JIoyhPjea36qsP2epTxjYdEMiiDMhMrbN0OzIBmt3gIiiE0T7wh75m-z8gAz-r76_CuQLxxLXDheMgpRFf2zFf_3ZwIDnACyznOn1hKrACmzNkaFV3w0GBQso/s1525/enna-vista.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="533" data-original-width="1525" height="206" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhevsJNG2M__6ySlZ-9_jxMWcKuvdZZGEvoym9sPnjrUHT_Tb5mTP_yL2y-Wv7qVsKh09JIoyhPjea36qsP2epTxjYdEMiiDMhMrbN0OzIBmt3gIiiE0T7wh75m-z8gAz-r76_CuQLxxLXDheMgpRFf2zFf_3ZwIDnACyznOn1hKrACmzNkaFV3w0GBQso/w588-h206/enna-vista.png" width="588" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Enna en la actualidad</i></b></td></tr></tbody></table>Enna, conocida como el “ombligo de Sicilia” por estar en su centro, fue, al parecer, fundada por los sículos, uno de los pueblos originarios de la isla, conquistada luego por los griegos,<a href="https://blogtabula.blogspot.com/2021/05/jantipo-ese-delicado-momento-de-pedir.html"> más tarde por los cartagineses </a>y por último por los romanos. Situada en lo alto de un cerro, rodeada de acantilados y con fuentes de agua propias, era casi imposible de asaltar o rendir mediante asedio, por lo que todos los cambios de manos se debieron a traiciones desde el interior. Durante la Segunda Guerra Púnica, el gobernador romano, alarmado al ver como las ciudades se iban rebelando una tras otra para masacrar a sus guarniciones y pasarse al bando de Aníbal, decidió conjurar el peligro con un sentido práctico muy romano: reunió a los habitantes de Enna en el teatro y los asesinó a todos, sin distinción, asegurándose así una completa y permanente paz interior. Tras la guerra, fue repoblada por itálicos y griegos leales, que se repartieron los terrenos montañosos circundantes y los explotaron mediante esclavos.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8kDLYpOUwFync-xhYczM60D4t-1ouUoOv2iPf1xOpxtMRpCLwhw3HtoN80E2YI6iKipZzPrW6is9HFYjCfJYUsy04m0Dzd1veYgd9MU3uS2YYWxJFA9hZ4-b8dbjTPDdYJUk1CixcN-iFQmVWDlSrq9a2XgMBZsmCLV4Iy12BRwz2CloR79M9oPXWWu8/s602/main-qimg-e5e19947d859d475aad450878eedcc1f-lq.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="602" data-original-width="602" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8kDLYpOUwFync-xhYczM60D4t-1ouUoOv2iPf1xOpxtMRpCLwhw3HtoN80E2YI6iKipZzPrW6is9HFYjCfJYUsy04m0Dzd1veYgd9MU3uS2YYWxJFA9hZ4-b8dbjTPDdYJUk1CixcN-iFQmVWDlSrq9a2XgMBZsmCLV4Iy12BRwz2CloR79M9oPXWWu8/w640-h640/main-qimg-e5e19947d859d475aad450878eedcc1f-lq.jpg" width="640" /></a></div><div style="text-align: justify;">Euno y sus compañeros no tuvieron ningún problema para superar las murallas y defensas, ya que los innumerables esclavos del interior se apresuraron a franquearles el paso. La conquista de toda ciudad es siempre, antes y ahora, un escenario de horror que es mejor no imaginar. Si a esto le añadimos que, en este caso, los conquistadores eran los propios esclavos locales y las víctimas indefensas sus antiguos amos, entramos en un escenario en el que todas las atrocidades que un ser humano puede idear contra otro se desatan y superponen, y en este campo los seres humanos, incluso los en apariencia más garrulos, tenemos una capacidad creativa que no conoce límites.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">No murieron, sin embargo, todos los ciudadanos de Enna, ni siquiera todos los dueños de esclavos. Euno demostró desde el primer momento una inteligencia y un control fuera de lo común. Comprendió que el verdadero poder no es el de matar, eso es muy sencillo, sino el de decidir sobre la vida y la muerte. Perdonó primero a los herreros, armeros y otras profesiones que necesitaba para equipar a su ejército y asegurar el funcionamiento de su reino. Ejecutó a sus propios amos, pero perdonó a aquellos que durante los banquetes le habían entregado parte de sus manjares, demostrando así que sabía gradecer los favores. Incluso perdonó a la hija de Damófilo, que siempre se había mostrado benévola con los esclavos y había tratado de ayudar a aquellos que sufrieron la brutalidad de sus progenitores. En cuanto al propio Damófilo, había huido a una de sus fincas en las montañas, pero sus antiguos esclavos se enteraron y lo trajeron a la ciudad. Dentro de lo que cabe tuvo “suerte”, Euno, decidido a levantar la estructura de un estado funcional, organizó para él un juicio en el teatro, al que asistieron los esclavos en el lugar de los ciudadanos. Damófilo intentó defenderse mediante un discurso que no debió entusiasmar a la audiencia, ya que dos exaltados exesclavos suyos saltaron al escenario, lo apuñalaron y le cortaron la cabeza con un hacha. Su esposa no tuvo tanta fortuna, fue entregada a sus criadas, que demostraron con ella esa creatividad de la que hablábamos antes. Y allí mismo, en el teatro, Euno fue coronado rey.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">A emulación de los monarcas helenísticos, y más en concreto de los seléucidas, se ciñó la diadema, se puso los adornos reales, adoptó el nombre de Antioco, típico de los monarcas sirios, su modelo, y formó un consejo de hombres con fama de ser los más sabios para que le ayudaran en las tareas de gobierno del nuevo estado. La formación del ejército fue confiada a un griego conocido como “Aqueo”, de origen aqueo naturalmente, sin duda un exsoldado o mercenario. Este Aqueo se había quejado de los excesos cometidos por los esclavos rebeldes, pronosticando que si no se restablecía pronto algún tipo de orden la rebelión sería fácilmente aplastada. Euno, lejos de enfadarse al escuchar estas críticas, le dio la razón y lo nombró su consejero, confiándole el mando de sus tropas. En apenas tres días armó a más de seis mil hombres con ganchos, hachas, hondas, guadañas, palos con la punta endurecida al fuego o espetones de cocina y, en vez de esperar la reacción de los romanos, se lanzó al ataque.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-Mrn2T9BCTyJQEQbJQXq-UjU4wQl8IjUvxxUX-eGX3Y33NNzg_iGAhRoG6tpJox652FSqbJa6rejDnen7buaFGiYLsIwLMRQ33zdkc9FNxrC_e0gyUsikwvt_RpWa-Q28TvrZ3HRAS2CJsG_gMHpz4S8BGRNWgbk3Y4lVXkUh3UWijq_Y4TmnE_f07I0/s1949/MONEDAS.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="598" data-original-width="1949" height="181" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-Mrn2T9BCTyJQEQbJQXq-UjU4wQl8IjUvxxUX-eGX3Y33NNzg_iGAhRoG6tpJox652FSqbJa6rejDnen7buaFGiYLsIwLMRQ33zdkc9FNxrC_e0gyUsikwvt_RpWa-Q28TvrZ3HRAS2CJsG_gMHpz4S8BGRNWgbk3Y4lVXkUh3UWijq_Y4TmnE_f07I0/w593-h181/MONEDAS.png" width="593" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Monedas encontradas en Enna con Euno caracterizado como Antioco</i></b></td></tr></tbody></table><br /><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Los rebeldes saqueaban las grandes propiedades, asesinaban a los dueños que no tenían la prudencia, o el tiempo, para escapar y liberaban a los esclavos, pero respetaban a los pequeños granjeros y a las explotaciones familiares, también enfrentados a los latifundistas. Eso le permitió ganar simpatías entre la población local y que no se produjera un abandono masivo del campo que desencadenara una hambruna. Euno actuó siempre con inteligencia y previsión. Muchos de los esclavos liberados se unían a su ejército, que así fortalecido derrotó varias veces a las guarniciones romanas y a las tropas enviadas por el gobernador, logrando con ello mejor armamento y equipo.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">El levantamiento de Enna no parece haber sido un hecho aislado, sino el resultado del progresivo deterioro de la seguridad en Sicilia, del que hemos hablado antes. Un tal Cleón, de origen cilicio, encabezaba su propia rebelión de esclavos, y los romanos albergaron durante algún tiempo la esperanza de que ambos grupos se aniquilaran mutuamente, a fin de cuentas para ellos solo eran bandidos. Lejos de eso, ambos líderes se reunieron y Cleón se puso al servicio de Euno, aunando sus fuerzas. Juntos derrotaron al general romano Lucio Hipseo y a su ejército y, según las fuentes, se hicieron con el control de la Isla.</div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHefDy6dRo1KU41eXcRmOtFBG1pS-L3FaON0jMPhYvw2zAAJm__uWIO7S5fUDSqw6L03mbdlZ9hGa_uU5Yr5tpElNSNF8awxeQ0ZABfRHD9-igLe8iTo8T27P_43NVnmJLlKKpuRFkwypoEztAxBr7-OtY-DzvwO90v5bJiiaxm9TQuo51zJNs4-KXe-k/s1215/greek-sicily-at-the-time-of-the-servile-wars-from-donaldson2.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="705" data-original-width="1215" height="343" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHefDy6dRo1KU41eXcRmOtFBG1pS-L3FaON0jMPhYvw2zAAJm__uWIO7S5fUDSqw6L03mbdlZ9hGa_uU5Yr5tpElNSNF8awxeQ0ZABfRHD9-igLe8iTo8T27P_43NVnmJLlKKpuRFkwypoEztAxBr7-OtY-DzvwO90v5bJiiaxm9TQuo51zJNs4-KXe-k/w585-h343/greek-sicily-at-the-time-of-the-servile-wars-from-donaldson2.png" width="585" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><b><i>Mapa de Sicilia en la época de la Primera Guerra Servil</i></b></td></tr></tbody></table><br /><div style="text-align: justify;">En Sicilia había varias ciudades grandes, como Siracusa, Catania, Taormina, Mesina o Agrigento, todas difíciles de conquistar y de las que solo nos consta que fue tomada Taormina y, quizás, Agrigento, por lo que es de suponer que, tras su caída, las demás llegaron a algún acuerdo con Euno o que su “reino siciliano” nunca alcanzó el control total de la isla. Lo que sí hicieron fue derrotar a varios ejércitos enviados por Roma, por lo que su fama se extendió rápidamente, y como el problema de los esclavos no era exclusivo de Sicilia, las rebeliones inspiradas por la de Euno se extendieron por todos los territorios controlados por la República. En África, en Italia, en Grecia y hasta en la propia Roma se produjeron levantamientos, e incluso parece que llegó a contar con la simpatía de, al menos, una parte de la plebe romana, a juzgar por lo que dice Diodoro. </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">El senado se vio forzado a tomar medidas y un gran ejército fue enviado a Sicilia al mando de Rutilio. Este cercó primero Taormina, que fue rendida por hambre, tras lo cual torturó y asesinó a los prisioneros, incluido un hermano de Cleón. La guerra era sin cuartel. Después se dirigió a Enna, que, tras otro duro asedio fue tomada, según manda la tradición, gracias a una traición en el interior. Cleón murió combatiendo, mientras que Euno y sus últimos hombres se refugiaron en las montañas donde continuaron la lucha hasta que, ya cercados, optaron por matarse entre ellos, aunque Euno prefirió entregarse. Según nos cuenta Diodoro murió en prisión, mientras que Aqueo perecería de hambre durante su huida, ya que todas las ciudades y pueblos le cerraron sus puertas. Después de la caída de Enna, cuya población fue nuevamente masacrada, la rebelión se extinguió rápidamente, quizá porque se ofreció algún tipo de perdón, ya que, según Diodoro: “<i>La falta de esclavos y la necesidad de ellos obligó a los amos a recuperar a los rebeldes, porque no tenían otra opción</i>”.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Esta es la historia tal y como ha llegado hasta nosotros, en el siguiente artículo “Euno y la primera gran rebelión de esclavos II: la esclavitud de las fuentes” hablaremos sobre su interpretación, sobre todo, de su autenticidad: ¿este relato es fidedigno?</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEguf21QRKCjvY6sd2-oANtsMCDIOs2eKNIIyqhjxLDymzvVUeMyiR3SyrDHCprqpMUx8FwuqUmJWPXAV-i9e5VE-6itZREKQ_uGG61MJ-m2jkLG51ejWRUM0LrqyKfp4eldy8l7LR0JdBTPBqXyIDIwSmb20cJtI7yC7Jwe2zNAdYn9-KA51AvQGkMxyBQ/s602/main-qimg-a533d560c2e4d988e5466fe68020cd02-pjlq.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="313" data-original-width="602" height="293" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEguf21QRKCjvY6sd2-oANtsMCDIOs2eKNIIyqhjxLDymzvVUeMyiR3SyrDHCprqpMUx8FwuqUmJWPXAV-i9e5VE-6itZREKQ_uGG61MJ-m2jkLG51ejWRUM0LrqyKfp4eldy8l7LR0JdBTPBqXyIDIwSmb20cJtI7yC7Jwe2zNAdYn9-KA51AvQGkMxyBQ/w561-h293/main-qimg-a533d560c2e4d988e5466fe68020cd02-pjlq.jpg" width="561" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><a href="file:///D:/EUNO/Eunoo.docx#_ftnref1">[1]</a> Existe una importante controversia entre los historiadores sobre si la base de la economía siciliana eran las grandes explotaciones cerealistas como se deduce de muchos textos de la época, las granjas pequeñas, o la ganadería extensiva. Las tres opciones no son incompatibles en una tierra con la orografía y la historia de Sicilia. A la población original de la isla se le había superpuesto la de las colonias de origen griego, que se habían adueñado de buena parte del territorio. Luego ambos grupos sufrieron las invasiones de cartagineses primero y de romanos después, cada uno con sus propios aliados locales, que se apoderaron de lo que quisieron, aunque los cartagineses solo para perderlo todo tras ser aniquilados por Roma. Esto, sin duda, tuvo que crear una estructura de propiedades de origen y características muy diferentes, en el que las antiguas pequeñas granjas que habían logrado sobrevivir a las guerras púnicas luchaban, como en la propia Italia, por escapar a la rapacidad de terratenientes y políticos y funcionaros corruptos. Por otro lado, es muy posible que, como sucede incluso ahora en esta isla y en muchos otros lugares, las tierras de los valles, las más ricas, se dedicaran al cultivo de cereales, mientras que las de las abundantes zonas montañosas se utilizaran para apacentar ganado de forma extensiva.</div>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-44506314986350825022023-06-01T13:09:00.003+02:002023-06-05T17:57:01.784+02:00Rome total War REMASTERED, el clásico vuelve<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgCNZuzJOzb_uTI2hfxQ7st0CpfqcRAWIVx6kxPpFpyzf_gW7XWAJrcFnd6zA2jvHK9n6wQbQHzRm1QISOFeFV90XSZ46h7PlepQ6CfEXsYuJs_TTD3Q_nABG0vARlDKcJFe7XKyYP124_gDzAbawxBvXDs7FRX_FxBgHfT5FVwtLfr1yfXfthJ_GYV/s616/portada.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="353" data-original-width="616" height="229" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgCNZuzJOzb_uTI2hfxQ7st0CpfqcRAWIVx6kxPpFpyzf_gW7XWAJrcFnd6zA2jvHK9n6wQbQHzRm1QISOFeFV90XSZ46h7PlepQ6CfEXsYuJs_TTD3Q_nABG0vARlDKcJFe7XKyYP124_gDzAbawxBvXDs7FRX_FxBgHfT5FVwtLfr1yfXfthJ_GYV/w400-h229/portada.jpg" width="400" /></a></div><br /><p></p><p><br /></p><p style="text-align: justify;"></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Si hay algún juego cambió el
mundo de la estrategia digital y lo hizo popular entre muchos jugadores, ese es
Rome Total War, de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Creative Assembly,
publicado en 2004. Ahora, que vivimos en tiempos donde el homenaje y la
revisión de juegos antiguos es una moda, porque los juegos nuevos ya no
levantan la misma admiración que sus antecesores, esta maravilla vuelve a ser publicada en una
versión “Remastered”; o sea, no es una versión nueva, ni una simple
actualización para ser jugado por los sistemas operativos modernos, sino una
versión de mejora y puesta al día, sin traicionar las mecánicas originales.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Aunque se
añaden algunas cosas de sus secuelas y unos gráficos más pulidos, ¿Vale la
pena?, ¿Han traicionado el juego original? Veamos.<o:p></o:p></p><span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En primer lugar, el nuevo RTW Remastered
viene también con las dos expansiones originales (Barbarians y Alexander).
Ambas, por supuesto, también actualizadas y puestas al día. Estupenda noticia.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> A bote pronto, el cambio de menús es más
moderno, pero sin perder el toque original. Permite la opción de jugar con
todas las facciones desde el principio, lo que está muy bien y había sido una de
las pocas quejas del juego original.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiJfBfA-YlWygo4AWg6bbuQT912g_jVI2bxnsjwrALljfeuG6MVt9OEnnd9X-SzXQfNKZyOSysv3g45sw0b63iBOflSLG2rk5LAX-h4zQty_kKhnIOUVRDe6HVwaQ3ydytgKI4FVUAjE2NlrxrouMS3EEJ__d1nGh5ug-3bC0cESyrrcBKPd6HHZa4t/s930/Total-War-Rome-Remastered-04-Opening-Menu-2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="640" data-original-width="930" height="275" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiJfBfA-YlWygo4AWg6bbuQT912g_jVI2bxnsjwrALljfeuG6MVt9OEnnd9X-SzXQfNKZyOSysv3g45sw0b63iBOflSLG2rk5LAX-h4zQty_kKhnIOUVRDe6HVwaQ3ydytgKI4FVUAjE2NlrxrouMS3EEJ__d1nGh5ug-3bC0cESyrrcBKPd6HHZa4t/w400-h275/Total-War-Rome-Remastered-04-Opening-Menu-2.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Menú de inicio con opciones chulas<br /><br /><div style="text-align: justify;"><br /></div></td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">A la hora de escoger facción,
todo tiene un barniz nuevo en el aspecto gráfico, pero conserva su encanto
antiguo, un aspecto vintage bien logrado.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLuXmmR3fkXTHQXPR-39Zgi-j0nH3zlpziUlLdGzT_MnKioXJM9SIDc4oyMoCRNq4muPYEiAYovdb5RdkNYIGCnPwd6Us9GCH4UzVoMRJuahIEGB0br0GNKyTnYKmu1CEgJHWOFbkBXJJnJ-Mk6AQYT-gZrVbeYzoPJGOgCLP8Hw0w0Pl5yHR9Nl3F/s1024/Facciones.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="1024" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLuXmmR3fkXTHQXPR-39Zgi-j0nH3zlpziUlLdGzT_MnKioXJM9SIDc4oyMoCRNq4muPYEiAYovdb5RdkNYIGCnPwd6Us9GCH4UzVoMRJuahIEGB0br0GNKyTnYKmu1CEgJHWOFbkBXJJnJ-Mk6AQYT-gZrVbeYzoPJGOgCLP8Hw0w0Pl5yHR9Nl3F/w400-h225/Facciones.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Escoger facción... qué grandes recuerdos</td></tr></tbody></table><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">El mapa de campaña es el mismo en
líneas generales, su aspecto es muy de principios de siglo XXI, respira nostalgia
en cada píxel, pero le han mejorado los colores y texturas. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBKeT8MxiL3RNpuKYak38RzhuhjQNa86gBljZV4K2eTYj4CPAILuJJuKrSEFTzaUlg-aecm-Qua81a4Vn8BSyfao9ik0aOg1ANusqsxp3iB19qui93HprChyqKNZgd7MDyQqnmAVQ6kk44fa870flhHSeoeNa7ajUFbTM1iyrs_GUW_pfVBw7Ow8OZ/s768/mapacampa%C3%B1a.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="470" data-original-width="768" height="245" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBKeT8MxiL3RNpuKYak38RzhuhjQNa86gBljZV4K2eTYj4CPAILuJJuKrSEFTzaUlg-aecm-Qua81a4Vn8BSyfao9ik0aOg1ANusqsxp3iB19qui93HprChyqKNZgd7MDyQqnmAVQ6kk44fa870flhHSeoeNa7ajUFbTM1iyrs_GUW_pfVBw7Ow8OZ/w400-h245/mapacampa%C3%B1a.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Vintage Mapping Power!</td></tr></tbody></table><br /><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Además, ahora podemos rotar la cámara
sobre él y hay mayores niveles de zoom. Una gran ayuda, teniendo en cuenta
la gran cantidad de elementos que llegan a poblar el mapa según avanza la
campaña.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgO3mKDTKCTrlxWxsqJ32IovPtNJrOTcHRhPYTnrfFi8byfzXrh1A9ocY6mqfX_zFXzCvL39-O7FSAehAwiGUa8pV-8wkUwEtJYA3T-IzcQScqn8mGn0579mhrQJogBGNPkqdcEnhcjCKumgNtVLxU3nHDJZ_FVN4g6CZjVSSLcEGriBUQJpv7G1MNd/s900/mapa1.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="506" data-original-width="900" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgO3mKDTKCTrlxWxsqJ32IovPtNJrOTcHRhPYTnrfFi8byfzXrh1A9ocY6mqfX_zFXzCvL39-O7FSAehAwiGUa8pV-8wkUwEtJYA3T-IzcQScqn8mGn0579mhrQJogBGNPkqdcEnhcjCKumgNtVLxU3nHDJZ_FVN4g6CZjVSSLcEGriBUQJpv7G1MNd/w400-h225/mapa1.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Italia viceversa</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Ya hablando de las mecánicas, han mejorado
las presentaciones de datos, son mucho más claras, pero sigue siendo casi todo igual. Incluso la IA
sigue siendo la misma, por desgracia. Aunque la cantidad de mods que ya han
salido pulen algo este infortunio, no deja de ser un consuelo pequeño. Está
bien conservar el encanto original, pero la IA ya era tontita para el 2004. No
costaba nada darle un empujoncito.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ03Oa8wUpd6B2tzAg1MDMYzWvYyuIc3gDkLKwHX3NdlgLDROjRSa0A5-TxXLlcgnlsoWoLiIUpxM-P5b1HTmyq9gIoZUStVm0LoBdjAEXPNQ0gKeM8xT0-fDXSaVUjJCydZAc7P-uFMTuncpVBbnjbOVYSVSBkQjTBWIdwK4nVstlQwCPH10ODPXv/s1024/asentamientoresumen.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="1024" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ03Oa8wUpd6B2tzAg1MDMYzWvYyuIc3gDkLKwHX3NdlgLDROjRSa0A5-TxXLlcgnlsoWoLiIUpxM-P5b1HTmyq9gIoZUStVm0LoBdjAEXPNQ0gKeM8xT0-fDXSaVUjJCydZAc7P-uFMTuncpVBbnjbOVYSVSBkQjTBWIdwK4nVstlQwCPH10ODPXv/w400-h225/asentamientoresumen.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Información de una pequeña pero cuqui ciudad</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">La gran novedad en las mecánicas
es la aparición de un nuevo agente, porque aparte de los clásicos diplomáticos,
asesinos y espías, ahora hay comerciantes, que facilita tratos comerciales,
manipulan la economía y se pueden mover libremente sin provocar amenazas de
guerra. Se añadido un sistema de calidad de cosechas en las provincias, un poco
extraño a primera vista para un veterano del juego, pero no deja de ser un
aumento de la profundidad de gestión.<o:p></o:p></p><br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeiiQ8JC1gtRhL0-XdkNaxAysMcOrdp8tx95QVT-tmEmy8aH-ivA-48UHBxwFVyHpx-2EgFqBjFqmjhRfuXT9EdYaoVgUgUf4uyeKZCJTzJGrwNI0wZekNy-09eI0jADW4T8-7DsFAI8IPS8TVmFZg8MzwNmSWco9PLEWkNEE2QpjNiO1IgOwIMAnN/s1400/comerciante.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="700" data-original-width="1400" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjeiiQ8JC1gtRhL0-XdkNaxAysMcOrdp8tx95QVT-tmEmy8aH-ivA-48UHBxwFVyHpx-2EgFqBjFqmjhRfuXT9EdYaoVgUgUf4uyeKZCJTzJGrwNI0wZekNy-09eI0jADW4T8-7DsFAI8IPS8TVmFZg8MzwNmSWco9PLEWkNEE2QpjNiO1IgOwIMAnN/w400-h200/comerciante.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Comerciante demostrando el poder neoliberal</td></tr></tbody></table><br /><div><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La diplomacia tiene también mejora, porque en
el renovado sistema diplomático todo es más sencillo e intuitivo. La navegación
por las distintas propuestas y ofertas de las facciones es hasta agradable
comparado con la versión original.<o:p></o:p></p><br /></div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4mfzpGq83Y_2Mi5AHbKrnPmYmZ47xs1B_uQOofkxwTBWJno_4tm7bJhFt04-RZGa8yod7td4c0J0ePQWn31uPJ9ZgNozxtM50AahYon7HUzlfEPqqfjq8yGupo2KemtcHyC7LcGPCfHM9TluBWj5o9Lfw3JOqAi0tbGmIGicX1iiipN0fQCkuKRPa/s1000/diplomacia.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="563" data-original-width="1000" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4mfzpGq83Y_2Mi5AHbKrnPmYmZ47xs1B_uQOofkxwTBWJno_4tm7bJhFt04-RZGa8yod7td4c0J0ePQWn31uPJ9ZgNozxtM50AahYon7HUzlfEPqqfjq8yGupo2KemtcHyC7LcGPCfHM9TluBWj5o9Lfw3JOqAi0tbGmIGicX1iiipN0fQCkuKRPa/w400-h225/diplomacia.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La diplomacia ha sido pulida a nivel Bismarck</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Pero el principal objetivo y
logro de esta remasterización es sin duda los gráficos. Hay texturas de
mayor calidad, mejores efectos de iluminación y mayor variedad de unidades. No
es el TW Rome 2, no se busca eso ni mejorarlo, sino dar mejor aspecto al Rome
original sin perder su alma, y lo consigue. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjRsHuZ9YyUPWNbMY-XBZ9FXXAxxJ6V0nAn5MRrdwRf9laJHnFHarI7emcD4M8nnJEAo5WMR4ktdoQDT-aP58HF6748N3tk2bzZkjT_U3akr37zzuqrkrwhXzbT3zQT5ZFZuvIwmPXpPhdlPpOWHgm8Uf1Ngsjy61e94-JhEWipZwWECWYmAENFukYc/s1280/batalla.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjRsHuZ9YyUPWNbMY-XBZ9FXXAxxJ6V0nAn5MRrdwRf9laJHnFHarI7emcD4M8nnJEAo5WMR4ktdoQDT-aP58HF6748N3tk2bzZkjT_U3akr37zzuqrkrwhXzbT3zQT5ZFZuvIwmPXpPhdlPpOWHgm8Uf1Ngsjy61e94-JhEWipZwWECWYmAENFukYc/w400-h225/batalla.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Gráficos superiores = romanos más molones</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> También se ha agregado el mapa
táctico durante las batallas, algo que da una mirada rápida a la situación
general de la batalla con una vista cenital. Se agradece, que uno ya se va a
haciendo viejo para ir saltando de lado a lado.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRERtjdVnaBc5fKt9xv6XjPxL4mjeWOISGhUoIR5r1Jqxt3fp_ktX0A8MqDynIjiDZ-JXfVqYzdi3JWNxCmowqmggDiCVBLSmSYMnAPSVph8z8gT78_nK57-JYeJaxvsRZyeifHDhajuwpmtXFFGQ_WZ293i-NEOS_SGDr4lYaL8S-B94VOVnj7U6o/s914/mapacenital.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="514" data-original-width="914" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRERtjdVnaBc5fKt9xv6XjPxL4mjeWOISGhUoIR5r1Jqxt3fp_ktX0A8MqDynIjiDZ-JXfVqYzdi3JWNxCmowqmggDiCVBLSmSYMnAPSVph8z8gT78_nK57-JYeJaxvsRZyeifHDhajuwpmtXFFGQ_WZ293i-NEOS_SGDr4lYaL8S-B94VOVnj7U6o/w400-h225/mapacenital.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">vista cenital fenomenal</td></tr></tbody></table><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En fin, el TW Remastered apela a
la nostalgia de los jugadores originales e intenta agradar a los nuevos con una
versión adecuada a sus ojos acostumbrados a las virguerías modernas. No pierde
su esencia en la mejora gráfica, es su gran logro, con ese aire retro que sigue ahí y
bien conservado. Tampoco aporta demasiado más, quitando unos cuantos añadidos
en gestión, diplomacia y otro agente, que se agradecen y dan más juego. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Si
adoraste el original, esta versión actualizada no te va a poner mala cara. Es
hasta recomendable pillarla, porque el original ya no chuta bien en los windows
modernos.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Por otra parte, están los mods,
fáciles de añadir si usas Steam. Todo un universo de mundos que dan nuevo vigor
a un juego que ya es un clásico y parte de los recuerdos de una generación. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pocos pueden presumir de tal legado. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Os dejo con un video:</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/tc9HHv-wT-Y" width="487" youtube-src-id="tc9HHv-wT-Y"></iframe></div><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><br />Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-57947596011619511722023-03-31T18:08:00.001+02:002023-04-04T12:25:29.882+02:00Alejandro, el profeta de la serpiente <p style="text-align: center;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgsqiNXawGLU0t05k04lAIkbE0jmm_APTtl50CbB8V0VYOiOfirypliJsMhCvuEdpQDAAv6bK-ihGz7EK_QpnKyPa905tAEMVX6X5x4h7j9yQrDFztv9S3HOc04XmrJF4jXTxLD1EvZrxheL6bFgUQJRK2U2VKyd1o5fLHcdMTaLJ_OcO7YZRbH1QnQ/s347/Glycon_(51644816839).jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="347" data-original-width="230" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgsqiNXawGLU0t05k04lAIkbE0jmm_APTtl50CbB8V0VYOiOfirypliJsMhCvuEdpQDAAv6bK-ihGz7EK_QpnKyPa905tAEMVX6X5x4h7j9yQrDFztv9S3HOc04XmrJF4jXTxLD1EvZrxheL6bFgUQJRK2U2VKyd1o5fLHcdMTaLJ_OcO7YZRbH1QnQ/s320/Glycon_(51644816839).jpg" width="212" /></a></div><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: center;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Siempre ha habido pícaros que han
vivido de los dos grandes motores de la humanidad: la esperanza y la estupidez.
Tipos que mediante engaños y tácticas de manipulación han vivido de la
ignorancia y anhelos de otros. Algunos hasta caen simpáticos, por poner de
manifiesto los errores de su tiempo o demostrar las carencias de tipos
supuestamente honorables y poderosos. Ustedes juzgarán, tras leer este
artículo, a que clase pertenece Alejandro de Abonutico, que se declaró profeta
de un dios y muchos se lo creyeron.<o:p></o:p></p><span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Nuestra principal fuente sobre él
es Luciano de Samosata, otro griego como Alejandro, pero muy diferente. Fue su
principal enemigo y denunciante, un epicúreo al que no pudo engañar; inteligente, vividor, dotado de gran imaginación y aguda ironía. Pese a su
rivalidad, la obra que escribió sobre nuestro personaje (Alejandro o el falso
profeta) no deja de ser, aparte de una denuncia certera de los profetas de
pacotilla, un tributo a sus artes del engaño.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Nuestro tipo peculiar nació en Paflagonia, una
región al norte de Anatolia, allá por los principios del siglo II d.C. La ciudad que vio su nacimiento, Abonutico,
era pequeña, agrícola y pobre en comparación con otras muchas de la región,
pero Alejandro era un chico de recursos que no se conformaba con una vida
tranquila y mediocre de provincias. Sin embargo, en vez de emigrar para siempre
en busca de un mejor futuro, será fiel a su ciudad, aunque decidido a cambiarla
a su gusto.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjss4W4ESRL_3sFhBliKGvfXhrAF1wx38XWvyPS4Dl9RLIR-klwX4Gyx-CG5F_-RA4M-cO3yqd7U6_a4Z6jSRGOV1N6de4EMZAWRUclb9onaI577k67pg_rvnkFSC311zwKIXdJWoEjvKF8JM8dIxel05h69giULfNLLJYgFnmY-dozz4sqCxlyikuj/s600/paflagonia.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="432" data-original-width="600" height="288" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjss4W4ESRL_3sFhBliKGvfXhrAF1wx38XWvyPS4Dl9RLIR-klwX4Gyx-CG5F_-RA4M-cO3yqd7U6_a4Z6jSRGOV1N6de4EMZAWRUclb9onaI577k67pg_rvnkFSC311zwKIXdJWoEjvKF8JM8dIxel05h69giULfNLLJYgFnmY-dozz4sqCxlyikuj/w400-h288/paflagonia.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Lugar de las andanzas de Alejandro</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="mso-spacerun: yes; text-align: justify;"> </span><span style="text-align: justify;">En su juventud, vivió de vender sus favores, ya
que era de buena presencia, guaperas y con labia melosa, hasta que logró hacerse
amante y discípulo de un charlatán embaucador que se las daba de médico por
Anatolia y Grecia. A su lado, aprende los trucos básicos de timar a la gente y también
a manejar serpientes macedonias, que tenían fama de domesticables.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>No sabemos cuánto tiempo estuvo de “prácticas”
con su maestro, pero lo acaba dejando y vuelve a su ciudad natal para hacer
fortuna con sus paisanos. Alejandro tenía ya una idea madura para forrarse y no
perdió el tiempo. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Al llegar a su ciudad, se las da de poseído
por un dios y anda por las calles lanzando espuma por la boca, gracias a una
planta que masticaba en sus falsos arrebatos. La gente lo empieza a ver con
cierto respeto, dudando entre si estaban viendo una posesión o un preso de la locura.
Como en Abonutico estaban construyendo un templo a Asclepio, dios de la salud,
Alejandro empezó a profetizar que nacería pronto un hijo del dios, ya que se lo
había dicho en visiones el mismo Asclepio en persona.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTqCrXPQXeagfoaZ7v2rg6Iy7RTzarxxyz3tvCdFCJQAAlWHRp7huJA1xml-p51s2rsTfpvtbjL_sdqPVYiJCcze13C0nZFsO1twdC2EosXuacJVXIV3FfQxHjXwmxUqechkqqBZynHVcdhOi28xKagmZivSCGEjlCNoaxnl4JeovsrPVoaq1pBR9T/s430/asclepio.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="430" data-original-width="220" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTqCrXPQXeagfoaZ7v2rg6Iy7RTzarxxyz3tvCdFCJQAAlWHRp7huJA1xml-p51s2rsTfpvtbjL_sdqPVYiJCcze13C0nZFsO1twdC2EosXuacJVXIV3FfQxHjXwmxUqechkqqBZynHVcdhOi28xKagmZivSCGEjlCNoaxnl4JeovsrPVoaq1pBR9T/s320/asclepio.jpg" width="164" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Asclepio, el dios coleguita de Alejandro</td></tr></tbody></table><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Días después, enterró en un
arroyo, cerca de los cimientos del templo, un huevo de oca previamente vaciado,
en cuyo interior había metido una pequeña serpiente macedonia. Al día siguiente
aparece dando gritos y, como nos cuenta Luciano, que lo hace mucho mejor que yo:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Los presentes —a la carrera
habían acudido casi todos los habitantes con mujeres, ancianos y niños— se miraban
con asombro, hacían suplicas y se postraban de rodillas. El, dejando oír
ciertas palabras ininteligibles, que podrían ser de los hebreos o los fenicios,
anonadaba a las personas que no entendían lo que decía, excepto una sola cosa,
que por todas partes andaban entremezclados Apolo y Asclepio. Después corría al
pie del templo que se iba a construir. Acercándose al hoyo y a la fuente del
oráculo previamente organizada, metiéndose en el agua, entonaba con voz potente
himnos de Asclepio, de Apolo, e invocaba al dios para que viniera con buenos
augurios sobre la ciudad.<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Después pidió una copa; alguien
se la dio, y con un simple deslizamiento tira hacia arriba y saca, con el agua
y el barro, el huevo aquel en el que había encerrado al dios, pegado con cera
blanca y albayalde por la fisura de la cascara. Y, tomándolo en sus manos, decía
que tenía ya a Asclepio. Ellos miraban atentamente lo que sucedía, maravillados
sobre todo ante el huevo encontrado en el agua. Acto seguido, rompiéndolo,
recogió en el cuenco de la mano al embrión de aquel reptil. Los presentes
vieron que se movía y que se enredaba por los dedos; daban gritos, saludaban al
dios, se deshacían en felicitaciones a la ciudad y, a boca llena, cada uno se
iba atiborrando de oraciones pidiéndole al dios tesoros, riquezas, salud.<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Ya se había montado su propio oráculo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">En los días siguientes su fama fue en aumento por toda la región. Para
aumentar el misterio, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>construyó una
cabeza humana para la serpiente y se mostraba con ella en semioscuridad, pero era
otra de sus serpientes, ya crecida:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Imagínate una alcoba no con
mucha iluminación, sin recibir la luz de plano, y a una multitud de hombres
arracimados, alterados y previamente impresionados, movidos por las esperanzas,
a los que el asunto les parecía, como es lógico, prodigioso, ya que, en el
curso de tan pocos días, de un reptil insignificante se hubiera mostrado una
serpiente de semejante tamaño, antropomórfica y domesticada. </span></i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal; text-align: left;"> Además, mediante un mecanismo, la
boca de la serpiente se abría y cerraba, mientras un asistente escondido, por
un tubito de metal, iba diciendo oráculos como si hablase la propia serpiente.
Estos oráculos “autófonos” no se los daban a cualquiera, por supuesto, ya que
eran mucho más caros.</i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_bQlD_lv5RFLP_jn_cF2zrctEC-x33eT40KI8hrwcGr36dQumlo4WAIowVmezFUauVlO9ld46puPlsuolB8q2F8dGS3GevDylWiOrB5pOU8DoiFuTYg_KPWRTfa8P7sn7Fqq2EwrQeZgsdDcvGteDqBL990iYoN-lW5labrIXJMoxpS7kiLJjt6tO/s1301/glicon2.jpeg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="869" data-original-width="1301" height="214" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_bQlD_lv5RFLP_jn_cF2zrctEC-x33eT40KI8hrwcGr36dQumlo4WAIowVmezFUauVlO9ld46puPlsuolB8q2F8dGS3GevDylWiOrB5pOU8DoiFuTYg_KPWRTfa8P7sn7Fqq2EwrQeZgsdDcvGteDqBL990iYoN-lW5labrIXJMoxpS7kiLJjt6tO/s320/glicon2.jpeg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Glicón, a lo hippy ibicenco</td></tr></tbody></table><span style="mso-spacerun: yes;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En unos meses, toda Anatolia y
Grecia sabían de su oráculo y de su serpiente Glicón, hija de Asclepio, porque
sus profecías eran calculadamente ambiguas, vagas y abiertas a toda clase de
interpretaciones. Alejandro era un genio en soltar oráculos sin decir nada, principalmente
sobre temas de salud, que, después de todo, su serpiente era hija del dios de
la salud y él sabía algo de medicina, aparte de que montó toda una red de informantes
cómplices para asegurarse información sobre sus consultantes, para tener pistas
de qué decirles y cómo tratarlos.</p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>También era un adelantado a su
época, pues promocionó todo un merchandising alrededor de la serpiente Glicón:
dibujos,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>grabados de madera, imágenes de
oro, reproducciones de plata… dinero, dinerito, mucho dinero.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTFhn8Gq0-MHrStOFBslHCHbRhQVcrk-_x1a2V6bEIY-sIejjLOBQ8X57APpzSmG8YhxD1CTF02jDgBPSbyVwW59jW2j4Spsxo1ez5grtE_3W6tSEBKGtpzhGx9A8hteJG6-pky_PuRnvMECsDBFzHNwALxkNfu05A1vBvqsB8fVlqu0ScOdTvpTbn/s240/glicon%20souvenir.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="240" data-original-width="180" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTFhn8Gq0-MHrStOFBslHCHbRhQVcrk-_x1a2V6bEIY-sIejjLOBQ8X57APpzSmG8YhxD1CTF02jDgBPSbyVwW59jW2j4Spsxo1ez5grtE_3W6tSEBKGtpzhGx9A8hteJG6-pky_PuRnvMECsDBFzHNwALxkNfu05A1vBvqsB8fVlqu0ScOdTvpTbn/s1600/glicon%20souvenir.jpg" width="180" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Me quitan los glicones de las manos, señora</td></tr></tbody></table><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pronto su fama llegó al rico y poderoso procónsul de Asia, Publio Sisenna
Rutiliano. Un hispano de la Bética, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que
era tan crédulo como rico. Según Luciano<i style="mso-bidi-font-style: normal;">: “podía ver tan solo una piedra ungida o coronada, y caía de bruces
al punto, se postraba y aguantaba mucho rato en actitud suplicante, al tiempo
que le pedía mercedes.”</i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">En fin, la víctima propiciatoria para Alejandro, que lo cameló con
facilidad y le predijo toda clase de bienes, hasta el extremo de que Rutilio,
encantado del favor de la serpiente divina, se convirtió en su mayor
patrocinador y publicista. Alejandro, por fin, ya tenía un contacto entre la
élite del imperio, y lo iba a exprimir a conciencia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Fue tal la pasión de Rutilio por el profeta y su serpiente Glicón, que se
casó con la hija de Alejandro, cuando ya era un sesentón viudo. Por supuesto,
fue animado al casamiento por un oráculo, esta vez muy claro, de la serpiente
parlanchina.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Gracias a su rico y poderoso yerno, Alejandro empezó a dar oráculos a la
aristocracia romana. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Entre ellos, conocemos el dado a Sedacio Severiano, gobernador de la
Capadocia y amigo de Rutilio. Le predijo que derrotaría a los partos en su
expedición a Armenia y<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">“<i>regresarás a Roma, y al agua del Tíber luminosa, en las sienes
llevando una diadema centelleante” <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">El pobre Severiano partió todo confiado con
sus legiones a conquistar Armenia y no solo fue derrotado, sino que murió en
batalla, se piensa que incluso dos legiones, la IX y la XX desaparecieron con
Severiano en el desastre, ya que no se vuelven a citar. Pero Alejandro cambió
pronto el oráculo que había dado y pelillos a la mar: “<i>No empujes tú las
tropas contra armenios, no es bueno…” <o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Otro de sus oráculos más famosos fue el
llamado “oráculo de los leones”, del que Sabino Perea Yébenes habla en un gran
artículo disponible en las redes, que recomiendo, pese a su largo título: "<i>Guerra y Religión: Luciano, el oráculo de Alejandro de Abonuteico y las derrotas
de Sedatio Severiano contra los partos y de Marco Aurelio contra cuados y
marcómanos."</i><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">Fue el mismísimo emperador Marco Aurelio el
que pidió por carta a la serpiente Glicón un oráculo sobre su próxima
expedición contra los bárbaros del Danubio, porque Marco Aurelio, como buen
filósofo estoico que era, se creía muchas tonterías sobre el destino, entre
ellas que los oráculos pueden predecir el futuro. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sin
cortarse un pelo, la serpiente habladora le contestó al filósofo emperador que
arrojara dos leones perfumados al Danubio. Así se hizo:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">“pero los leones escaparon nadando a tierra enemiga y los bárbaros los
mataron a palos como si fueran algún género extraño de perros o lobos. Y «al
momento» sobrevino un enorme desastre sobre los nuestros, murieron de una vez
casi veinte mil hombres. Luego siguieron los sucesos de Aquilea, en los que por
un tris no se perdió la ciudad. Y frente a lo ocurrido él alegó la famosa
justificación de Delfos al oráculo de Creso: el dios había predicho una
victoria, sin revelar si de los romanos o de sus enemigos.” <o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">Yébenes deduce que la cifra de bajas está
exagerada por Luciano, pero que derrota sí que hubo, según las fuentes, y que
el episodio de los leones estaba representado en la escena XIII de la columna
de Marco Aurelio en Roma, hoy ya muy erosionada. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgw_6XYklAKQtcOGlNRSCh8jwtEjocbm3F9jKExr9UFIucxpCw_gaWuKtaiAEC-_VNfc62m1t0dHqBI9nUw8X9io3wkyWg4nlQxhf3vROMhSfl-ANIU94V6OtcNMhr4fPO-nOivNPKLh2m7C2x9lM_iHpekK_K57Yu0tGOuAD2tbuad-9hQgMDX_nr1/s800/marcoaurelio%20y%20glicon.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="681" data-original-width="800" height="272" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgw_6XYklAKQtcOGlNRSCh8jwtEjocbm3F9jKExr9UFIucxpCw_gaWuKtaiAEC-_VNfc62m1t0dHqBI9nUw8X9io3wkyWg4nlQxhf3vROMhSfl-ANIU94V6OtcNMhr4fPO-nOivNPKLh2m7C2x9lM_iHpekK_K57Yu0tGOuAD2tbuad-9hQgMDX_nr1/s320/marcoaurelio%20y%20glicon.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Glicón y Marco Aurelio</td></tr></tbody></table><br /><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><br /></span><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">El prestigio del oráculo no fue tocado, pese a
sus desaciertos, y Alejandro hasta instauró su propia festividad: unos
misterios sagrados que duraban tres días y que eran una orgía descarada, con
descansos donde se maldecía, como un ritual, a los cristianos y a los epicúreos,
que eran los principales enemigos y difamadores del oráculo. Ya saben, los
extremos ideológicos se juntan muchas veces en su odio.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Nos
cuenta Luciano que Alejandro incluso lo quiso matar, tras no convencerle de su
“magia” cuando pasó por Abonuteico camino de la costa. Primero le atacaron los
seguidores de su serpiente, cuando se negó a llamar profeta a Alejandro y casi
lo linchan, sino fuera porque Luciano llevaba escolta proporcionada por su
amigo, el gobernador de Capadocia. Luego, pese a que Alejandro pidió perdón por
los excesos de sus seguidores y quiso camelar a Luciano durante su estancia, lo intentó
matar de nuevo cuando dejó la ciudad y llegó a la costa, donde se
encontró con unos enviados de Alejandro que, muy amables, le invitaron a seguir
viaje en un barco que el profeta le ofrecía como gesto de amistad. Menos mal
que el piloto del barco le avisó de que los tipos tenían orden de tirarlo por
la borda, pero él se había negado, porque:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><i>“habiendo
observado en los sesenta años de su vida una conducta intachable y digna, no
quería, en este momento de su existencia, teniendo mujer e hijos, manchar sus
manos con un asesinato, al tiempo que explicaba claramente por qué me había
cogido a bordo y las ordenes de Alejandro.” </i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">Como vemos, el profeta Alejandro no tenía
escrúpulos en eliminar a cualquier enemigo o crítico de su negocio después de
tratarlo con cariño. Lo que no pensó es que existen gentes honradas en todas partes,
unas pocas, pero que te chafan cualquier plan maquiavélico.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Su
mayor triunfo fue cuando consiguió que el cándido emperador Marco Aurelio cambiara
el nombre de Abonutico, que pasó a llamarse Ionópolis (la ciudad de la
serpiente) y emitir moneda con la charlatana serpiente Glicón por una cara y la
solemne cabeza del emperador por la otra. Hoy son piezas codiciadas de
coleccionista.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-CwqtyeQNMq8s__FWcpuDW-kYtuwjdZ4A5BwgHnrRX6YimCeqhOYU1HMu1H_JuYFoyfDMm0TfeV32XaO7pLA2HH6c3iN7WtATuoLsh8EpxlRJ-V4Z_gvpWUxpiC7ukcAgYWkeErI7YZNkgtLxod0TSJOWCHNPzYmIoI4_6uV1RvZVp0Dns3lEZZzm/s300/monedadeglycon_tomis_244-249.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="300" data-original-width="300" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-CwqtyeQNMq8s__FWcpuDW-kYtuwjdZ4A5BwgHnrRX6YimCeqhOYU1HMu1H_JuYFoyfDMm0TfeV32XaO7pLA2HH6c3iN7WtATuoLsh8EpxlRJ-V4Z_gvpWUxpiC7ukcAgYWkeErI7YZNkgtLxod0TSJOWCHNPzYmIoI4_6uV1RvZVp0Dns3lEZZzm/s1600/monedadeglycon_tomis_244-249.jpg" width="300" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Glicón monetario</td></tr></tbody></table><br /><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><br /></span><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">Siguió con su oráculo y su serpiente bocachancla,
forrándose gracias a la credulidad de la gente, y profetizando que viviría 150
años. Pero, para su desgracia, tampoco acertó esta vez, pues murió antes de los
70, debido a una gangrena en un pie que le acabó llegando hasta la ingle. Cuando
murió, se descubrió que Alejandro era calvo y toda su vida había llevado
peluca.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sus
asistentes más cercanos, que bien sabían de qué iba el oráculo y las ganancias
que daba, empezaron a discutir por quién era su heredero en el negocio. Pero el
senador Rutilio hizo valer su status y prestigio, se proclamó sucesor del<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>profeta, porque estaba casado con su hija, y
todos callaron ante su decisión. No deja de tener su justica poética, porque
quizá Rutilio era el único creyente de verdad entre aquellos sinvergüenzas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">La fama del oráculo de la serpiente Glicón
duró por lo menos un siglo más, según las figurillas y monedas encontradas entre
el Danubio y el Éufrates. Incluso se daban a Alejandro, reconocido como el<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>nieto de Asclepio, honores religiosos en su
ciudad natal. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">Pero todavía hay más. En la actual Inebolu, la
antigua Ionópolis, existe entre los lugareños la leyenda de una serpiente
mágica y parlanchina que vive en los montes cercanos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">Esto es embaucar con éxito duradero, no me
digan que no.<o:p></o:p></span></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-18543619727248743202023-02-19T16:48:00.008+01:002024-02-14T21:45:20.724+01:00Domicio Afer; el abogado sin escrúpulos<p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgro04L0Ez9ovjhniCltSk5KIXmtPZC4kZyzKeJjSLLAmqj8v61jURQeW7yyLWm3CrNzgiqLk_NvB1FpFUaw8KIOVX-VOPG_OxfbeAYJPmxdDCwP_4dkHDg_0pt8tghcF_3-FQwvtVzYjOdIE8m7vtEKDYZ3ZAN2Su8ZQDz5uD5aRMwyPAekLMluUBU/s1431/se1.jpeg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="1431" height="338" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgro04L0Ez9ovjhniCltSk5KIXmtPZC4kZyzKeJjSLLAmqj8v61jURQeW7yyLWm3CrNzgiqLk_NvB1FpFUaw8KIOVX-VOPG_OxfbeAYJPmxdDCwP_4dkHDg_0pt8tghcF_3-FQwvtVzYjOdIE8m7vtEKDYZ3ZAN2Su8ZQDz5uD5aRMwyPAekLMluUBU/w604-h338/se1.jpeg" width="604" /></a></div><br />Abogado sin escrúpulos, sí, ya lo sé, parece una
redundancia, pero no es de eso de lo que trata este artículo, sino de saber
hablar… y saber callarse.<p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En el primer siglo de nuestra era el arte de la oratoria,
una de las disciplinas más valoradas en las desaparecidas democracias de Grecia
y Roma, había entrado en franca decadencia. Desde que Sila, César y Octavio
demostraran que la forma más eficaz de ganar una acalorada discusión en el
senado no era el sonido de un hermoso y bien fundado discurso, sino el chirrido
de las espadas de los legionarios al salir de sus vainas, la oratoria política había quedado reducida a un recargado ejercicio de
adulación, en el que se imponía aquel que fuera capaz de hilar la mayor serie de
hiperbólicas alabanzas a quien estuviera en el poder.<span></span></p><a name='more'></a><o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En cuanto al otro ámbito en el que siempre habían
destacado los oradores, los tribunales, los grandes juicios que permitieron a
hombres como Cicerón destacar e iniciar un brillante <i>cursus honorum</i>
ahora estaban estrechamente controlados por los emperadores, por lo que si
querías participar debías plegarte a sus deseos, y los pequeños solo daban para
ganarse malamente la vida.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero aún en este oscuro ambiente hay quien es capaz de
brillar, aunque no sea más que por su absoluta falta de escrúpulos, y ese fue Domicio
Afer.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Afer nació en el 16 a.C. en Nemausus. Actual Nimes, en la
Galia. Muy pronto se trasladó a Roma, probablemente de la mano de su primo,
Publio Cornelio Dolabela. Los Cornelio Dolabela eran una de las familias
patricias más importantes de Roma, y el padre de nuestro Publio, del mismo
nombre, había sido entre otras cosas yerno de Cicerón. Él mismo llegó a cónsul
y a procónsul de África bajo el mandato de Tiberio, donde consiguió acabar con
el escurridizo líder rebelde <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2020/03/tacfarinas-de-derrota-en-derrota-hasta.html">Tacfarinas</a>.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Así que nuestro protagonista empezó su carrera desde una
modesta ciudad de provincias, sin nada… aparte de un espectacular enchufe
familiar. Un clásico.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Su discípulo y también gran orador Marco Fabio Quintiliano
definió su estilo como lento, grave, de emoción contenida, en el que usaba un
lenguaje adaptado a su público, por lo que tanto podía ser de un culteranismo
recargado como sencillo y familiar. Siempre aliñado, eso sí, con un sentido del
humor cáustico, burlón y cruel con sus víctimas. Esa sería su “marca de la
casa” oratoria.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHHQ3OMACi32EXXpxeu7O5kjoWNXWcvo3andg_ewRsuVfhwO9ayd9XwtiRQXYxg7pQVtmZL4XKsbHYOzdEw2Bx74_zjhTEXCdGsxVqadlkT65O0PRdgmBxTlVReSaZeJWO88TGrmRhHCZi3ag8B-fq5S6jFl5kyim0yEsBncgjtKPdM2rV3M0LyKvw/s1248/se2.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="573" data-original-width="1248" height="295" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHHQ3OMACi32EXXpxeu7O5kjoWNXWcvo3andg_ewRsuVfhwO9ayd9XwtiRQXYxg7pQVtmZL4XKsbHYOzdEw2Bx74_zjhTEXCdGsxVqadlkT65O0PRdgmBxTlVReSaZeJWO88TGrmRhHCZi3ag8B-fq5S6jFl5kyim0yEsBncgjtKPdM2rV3M0LyKvw/w640-h295/se2.jpg" width="640" /></a></div><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Su gran oportunidad llegó cuando Tiberio, ya en las
postrimerías de su reinado y sumido en plena demencia conspiranoica tras la
traición de Sejano y el asesinato de su hijo, le encargó la acusación ante el
senado de Claudia Pulcra, la exmujer de Publio Quintilio Varo (sí, el de
Teutoburgo) por adulterio y uso de artes mágicas para intentar asesinar al
emperador. En realidad estos juicios eran una mera pantomima, ya que ni el
senado ni nadie se iba a atrever a esas alturas a oponerse a los deseos de
Tiberio, pero este apreciaba que sus acusadores representaran bien su papel y,
en especial, que no perdieran la oportunidad de humillar a sus enemigos, justo
el campo en el que Afer destacaba más. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Tras conseguir la condena de la madre, Tiberio fue a por su
único hijo, Publio Quintilio Varo “El Joven”, una de sus costumbres en esta
etapa final de desenfreno vengativo, y una vez más pudo contar con la entusiasta
colaboración de Domicio After, que en esta ocasión dispuso de la ayuda de su primo. <o:p></o:p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPZgnuzh-KJFtk4MyMF_VlHc2N29EfSL9cI36JTyN54AQqRBtN4eQUtuU3nqDA0qxQnLFrsCNrjDN4hfHyztYjBb6_8Tq6p_nnCJ2YhjFCXrvxRrG5EpB5rVYIAlyOPZV0qUVXMosniHB93Ibt4504SyzHV3Lltww-ARj2XqJUdb8GIwClTs1QZybc/s1008/se6.JPG" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="594" data-original-width="1008" height="377" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPZgnuzh-KJFtk4MyMF_VlHc2N29EfSL9cI36JTyN54AQqRBtN4eQUtuU3nqDA0qxQnLFrsCNrjDN4hfHyztYjBb6_8Tq6p_nnCJ2YhjFCXrvxRrG5EpB5rVYIAlyOPZV0qUVXMosniHB93Ibt4504SyzHV3Lltww-ARj2XqJUdb8GIwClTs1QZybc/w640-h377/se6.JPG" width="640" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;">El asunto resulta aún más sombrío si tenemos en cuenta que Publio
Cornelio Dolabela era hijo de la hermana de Varo y, por lo tanto, todos eran
parientes.</div><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">La familia de Varo, sin embargo, era un objetivo secundario,
casi podríamos decir que un daño “colateral”, para Tiberio. A quien de verdad tenía en el
punto de mira era a Agripina, buena amiga de Claudia Pulcra, que, gracias en
parte a las “revelaciones” hechas por Domicio After en estos procesos terminaría
muriendo de hambre durante su cautiverio en una isla olvidada.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Este fue el momento de gloria de nuestro protagonista, que
se convirtió en el orador de moda, al que todos deseaban contratar como
abogado, básicamente porque pocos tribunales iban a atreverse a fallar en su
contra sabiendo que era un protegido de Tiberio. Gracias a eso llegó a amasar
una más que considerable fortuna.<o:p></o:p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRFxjavz5HGsBXd0-s9lvmi_ld_jWfgwzof1UbNvYFHSROSJVbTC3B1o7Iu2PNIuPCPxl5ODZDihl4k54Qv5hpTDuyNvb693laRT0zXvpCQ_e89OPXUzGV_vmwpj8woXVeTMEbcDJgpQ669pf3lGPZSoemBs9nA7NpwjjDKFZa5l7jXyKtL0luopJv/s757/se5.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="389" data-original-width="757" height="327" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRFxjavz5HGsBXd0-s9lvmi_ld_jWfgwzof1UbNvYFHSROSJVbTC3B1o7Iu2PNIuPCPxl5ODZDihl4k54Qv5hpTDuyNvb693laRT0zXvpCQ_e89OPXUzGV_vmwpj8woXVeTMEbcDJgpQ669pf3lGPZSoemBs9nA7NpwjjDKFZa5l7jXyKtL0luopJv/w640-h327/se5.jpg" width="640" /></a></div><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero en la política las cosas pueden cambiar de un día para
otro. Tiberio era un anciano, que, con un poco de ayuda, no tardó en dejar este
mundo, y su sucesor fue Cayo César Augusto Germánico, más conocido por el cariñoso apelativo de "Botitas", Calígula,
el hijo de Agripina. Y este, aunque aún no había sufrido la enfermedad que
desencadenaría en él una afición al asesinato en masa que haría a todos añorar
los buenos tiempos de las masacres de su tío, ya apuntaba maneras.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">La pérdida de su madre, y más en aquellas terribles circunstancias,
fue un acontecimiento que, sin duda, marcó su vida. Hizo que repatriasen sus
cenizas, les dedicó grandes honras fúnebres e, incluso, hizo acuñar monedas con
su efigie. Luego empezó a ocuparse de sus asesinos.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>A Domicio Afer no
tardó en llegarle la hora, y de su acusación ante el senado se ocupó en persona
el propio Calígula, una muestra de lo mucho que valoraba su figura y el papel
que había desempeñado en lo sucedido. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Uno pensaría que las posibilidades de Domicio de sobrevivir eran
las mismas que si se hubiera caído sin paracaídas desde un avión a diez mil
metros de altura, después de ingerir veneno y recibir una docena de cuchilladas
y disparos, pero nuestro protagonista demostró que, aparte de un canalla, realmente
era buen abogado. Y, por increíble que parezca, logró encontrar la línea de
defensa que le permitió salir de aquella situación incólume: hacerlo fatal.<o:p></o:p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWFbvMcYCalbMRUdlnUVGJlQ3WyCYd9xG_WixunP3-1qHUP9HvR-svo8ipvYM0Af4tqbJpPDYJz6mSS_yGtcmVFDZMpVOd4U1aBWk09PLDBe5jbQFW_NRDu3dpKIsOt3eCU-53RCNaOTOYmJu096tCL4j2G5duV5iBzmkmVaJAQM5Be7-Vwlo5q81I/s1024/se4.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="579" data-original-width="1024" height="362" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWFbvMcYCalbMRUdlnUVGJlQ3WyCYd9xG_WixunP3-1qHUP9HvR-svo8ipvYM0Af4tqbJpPDYJz6mSS_yGtcmVFDZMpVOd4U1aBWk09PLDBe5jbQFW_NRDu3dpKIsOt3eCU-53RCNaOTOYmJu096tCL4j2G5duV5iBzmkmVaJAQM5Be7-Vwlo5q81I/w640-h362/se4.jpeg" width="640" /></a></div><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Durante todo el proceso permitió que Calígula lo vapuleara a
gusto, una y otra vez se quedó sin palabras ante la brillante argumentación de
su rival, sus bromas carecían de gracia, resultaban inofensivas, cuando no
contraproducentes, y con frecuencia le fueron devueltas con lo que hoy
llamaríamos “zascas” espectaculares. Al acabar el ego adolescente del nuevo
emperador estaba tan satisfecho por su indiscutible victoria sobre el
considerado mejor orador de su tiempo que olvidó sus deseos de venganza y lo
perdonó. Incluso llegaron a colaborar y, sumido ya en plena locura asesina, lo
nombró cónsul.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Los últimos años de su vida transcurrieron plácidamente
disfrutando de su fortuna y dando clases de retórica. A su muerte, legó sus
bienes a los hijos de una de sus víctimas, un antiguo amigo íntimo al que arruinó
y llevó a la muerte, la única muestra, aunque póstuma, de escrúpulos que dio en
toda su vida. <o:p></o:p></p>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-36549699682375828592023-01-09T11:58:00.002+01:002023-01-12T14:50:11.467+01:00Gates of Troy, renacer de un clásico<p> </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiilbPqk-Ex4Two8vXXsKoLoiOKF9p0SCG4niZjaHQ3HzHtlZtbPp4c70hQxCKDMwrSXaqNVmRyVVbUDnaks0u3AMPbS4o6yQb0BSblxCl0bOp1Yk6Rw1MRrMWGftObwgH8slNRbk5EXifokVg6VtutssUf4DAK7oMwqGgO0ubCozeYcFATHPz3hHPE/s268/portada.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="268" data-original-width="188" height="268" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiilbPqk-Ex4Two8vXXsKoLoiOKF9p0SCG4niZjaHQ3HzHtlZtbPp4c70hQxCKDMwrSXaqNVmRyVVbUDnaks0u3AMPbS4o6yQb0BSblxCl0bOp1Yk6Rw1MRrMWGftObwgH8slNRbk5EXifokVg6VtutssUf4DAK7oMwqGgO0ubCozeYcFATHPz3hHPE/s1600/portada.jpg" width="188" /></a></div><br /> <p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Hoy hablaremos de un clásico de la estrategia,
con casi veinte años a su espalda (es del 2004), que ha sido renovado a los
Windows actuales y puesto de nuevo en el mercado a un precio barato, barato,
señora: El venerable “Gates of troy”, que<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>fue el último de la trilogía empezada por <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2021/11/legion-gold.html">Legion</a>, del que ya hemos
hablado.<o:p></o:p></p><span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Sus mecánicas son las mismas que el Legion o el Chariots of War, los otros dos juegos de la trilogía, pero ahora con gráficos, diplomacia y recursos a explotar muy mejorados. Es el culmen de los tres juegos, que pusieron en el mapa de la estrategia videojueguil a la empresa Slitherine.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Podemos jugar en varios periodos de la historia de Grecia antigua, que pasan por el periodo micénico, la guerra de Troya, las guerras médicas o una campaña desde el año 400 a.C., donde aparecerán romanos hipervitaminados. Algunas son campañas inmensas, de largas horas de juego, con expansión conquistadora por el mapa y una diplomacia de puñaladas traperas. Todo a lo largo de varios siglos y épocas de desarrollo técnico, que debes ir cuidando, pues el juego tiene de añadido un árbol de investigación. </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPxAE8E2swkzWDdu36KAZB6JlpnYCIhx8EK5crsm7UauIeuDo2Hv5LwkZHq-GYKf4BgT5ZVPb-TKyTIn9qebngO6arv_12gWVsXi2ZnhA-MS8VmxEpfioP3Id6tKTTGOqwjdI-o7Axg5i5vq3VxmiStqTdmS0YpnOP6GjUOHp1_tQFT91s8FAcLPar/s1024/menu.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPxAE8E2swkzWDdu36KAZB6JlpnYCIhx8EK5crsm7UauIeuDo2Hv5LwkZHq-GYKf4BgT5ZVPb-TKyTIn9qebngO6arv_12gWVsXi2ZnhA-MS8VmxEpfioP3Id6tKTTGOqwjdI-o7Axg5i5vq3VxmiStqTdmS0YpnOP6GjUOHp1_tQFT91s8FAcLPar/w400-h300/menu.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Menú de campaña con su bonito mapa</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Un juego sencillo en su proceder, pero atractivo y que engancha a seguir un turno más, mientras das caña a los corintios o a los troyanos y comercias o haces tratos con el puñal preparado.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Una gran novedad con respecto a los dos juegos anteriores es que puedes escoger líderes legendarios de la mitología griega para comendar tus ejércitos, como Aquiles o Ulises, en las campañas relativas a Troya. Incluso puedes construir el caballo que lleva su nombre… y usarlo, por supuesto. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">También viene con una recreación de la batalla de las Termópilas en escala 1 a 1, que es una manera muy buena de desahogarse tras un día de trabajo.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGHH5zR0-1VPpd7W65U3lJ4EEb3T8jf1og7JGiQFVfrinZdwsLgE8c1dNL_sGaka8fthMNmNFkXma0cOJVBgMCeJr_3FETQ-m11J2SxJDR_PTUE497KNslys0Mgq1OVlJYcE7aT6jp95Q7z35HNXjJC4mcTdpnytvIwdfh2vs1md_C8L--4yyBKqDq/s1024/batalla.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" height="312" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGHH5zR0-1VPpd7W65U3lJ4EEb3T8jf1og7JGiQFVfrinZdwsLgE8c1dNL_sGaka8fthMNmNFkXma0cOJVBgMCeJr_3FETQ-m11J2SxJDR_PTUE497KNslys0Mgq1OVlJYcE7aT6jp95Q7z35HNXjJC4mcTdpnytvIwdfh2vs1md_C8L--4yyBKqDq/w416-h312/batalla.jpg" width="416" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Batalla cruenta con cobardes en fuga</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">La diplomacia juega un papel mucho más importante aquí que en Legion o Chariots of War, con diplomáticos que ahora pueden influir en la facción en la que se quedan, ya sea para ganar su favor o enojarlos, y también pueden trabajar como agentes de espionaje. Claro que eso implica ser descubierto y sufrir terribles muertes, en donde el juego destaca por un humor negro muy poco acorde a los gustos actuales. Por ejemplo, hervir vivos a diplomáticos extranjeros es una buena manera de crear discordia con otras facciones. Sin embargo, las facciones de la IA también tienen el sentido común de no atacarte si son mucho más débiles y no pueden ganarte. Una vez más, comparando el juego con la serie Total War que empezaba por los mismos años, este fue un soplo de aire fresco para cualquiera que estaba acostumbrado a la IA homicidamente agresiva y contra sus propios intereses del Rome Total War o el Medieval II.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhv_1g5fO7H00vN24Oo5rf5wsvSyzjuxLXgRBz3YkUPrbAKMtLc8jqADPh4kMOl11TChiJjadh0h0W-usPx_kg02xCLoFhkbCCEnOeq4JyZy_3qR07tKaCiiXcGSTs7n1JovfIlmUlmvVk-zMT2Nn7ZRcnMweSf8Cr_-gmtzdVhx-SaAV1yGHDnhwpX/s1280/ciudad.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="246" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhv_1g5fO7H00vN24Oo5rf5wsvSyzjuxLXgRBz3YkUPrbAKMtLc8jqADPh4kMOl11TChiJjadh0h0W-usPx_kg02xCLoFhkbCCEnOeq4JyZy_3qR07tKaCiiXcGSTs7n1JovfIlmUlmvVk-zMT2Nn7ZRcnMweSf8Cr_-gmtzdVhx-SaAV1yGHDnhwpX/w437-h246/ciudad.jpg" width="437" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pantalla de ciudad. Todo a mano y bien organizado</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Las batallas son en 3D, a diferencia de los anteriores juegos de la trilogía, pero se mantiene la característica típica de falta total de control sobre tu ejército una vez que comienza la batalla. Configuras tus unidades de antemano, les das órdenes iniciales sobre qué hacer (avanzar, cargar, retener brevemente y luego avanzar, disparar misiles, etc.), y luego simplemente las liberas y ver cómo se produce el caos. Sin embargo, una vez más, no puedo culpar al juego aquí, ya que es la tradición de la trilogía. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Por otra parte, las batallas no son grandes, de todos modos, tal vez 500 hombres por lado para una enorme. Con esta pequeña escala de las batallas, la falta de control no es tan mala y le da a la IA más posibilidades de ganar. No hay masacre al estilo de Total War de fuerzas dos veces más grandes que las tuyas debido simplemente a la estupidez de la IA.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjEDHrg2KG5M3C7e9UeHE3Stkj48LB_CXeyur4WbMi2wfKiIxiEOBckqOAwusRz7X_5ygUi3YsNMcosh9F5CWRkfT4ZV-5-d3kBvS2DE0Q3g-YSioisO_p11E8DCoE4uZUpdTrwArtzlf41a6spZNhHUuy6id2ssPVjJbXaPTlezZCEexA9zax7Hgi3/s1024/mapacampa%C3%B1a.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjEDHrg2KG5M3C7e9UeHE3Stkj48LB_CXeyur4WbMi2wfKiIxiEOBckqOAwusRz7X_5ygUi3YsNMcosh9F5CWRkfT4ZV-5-d3kBvS2DE0Q3g-YSioisO_p11E8DCoE4uZUpdTrwArtzlf41a6spZNhHUuy6id2ssPVjJbXaPTlezZCEexA9zax7Hgi3/w434-h300/mapacampa%C3%B1a.jpg" width="434" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El mapa de campaña es una chulada. No pasa el tiempo por él.</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Así que recomiendo encarecidamente Gates of Troy a cualquiera que busque un juego desafiante que se centre más en la gran estrategia que en las batallas tácticas, que, aunque vistosas para la época, hoy resultan poco resultonas y además acaba cansando ver tantos muñequitos corriendo en fuga al final de cada batalla.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYTIc2gsFfXjmHBEapfeCq5L2DcmFK6cEqGvADWw0y6IgmE0Q6ibVBiecIod_vHsWUcy6MagNDzqxVIgRcsgmtZS87ixniusfjuplofMyQVSjCHci_MHgi-Fk-rJKC6aITzsVYY2kABBsInsPyYrM2jm5ECM6aLJTBCVxYluR_WeX78L7rGk2JOPFe/s1024/batalla2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYTIc2gsFfXjmHBEapfeCq5L2DcmFK6cEqGvADWw0y6IgmE0Q6ibVBiecIod_vHsWUcy6MagNDzqxVIgRcsgmtZS87ixniusfjuplofMyQVSjCHci_MHgi-Fk-rJKC6aITzsVYY2kABBsInsPyYrM2jm5ECM6aLJTBCVxYluR_WeX78L7rGk2JOPFe/w433-h300/batalla2.jpg" width="433" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El mapa en 3D cumple y permite movimientos de cámara</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En fin, un juego que a más de uno le provocará nostalgia de los buenos tiempos, a principios de siglo, cuando la estrategia por turnos destacaba por mecánicas sin complicaciones, pero enganchadoras y novedosas. Ahora parece que en algunos juegos hay que pasar un cursillo de iniciación para hacer lo mismo. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Os dejamos con el trailer:</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/fOjnmRIetNc" width="475" youtube-src-id="fOjnmRIetNc"></iframe></div><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Enlace al juego en su página web: <a href="https://www.matrixgames.com/game/gates-of-troy" target="_blank">Gates of Troy </a></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Enlace a su página en STEAM: <a href="https://store.steampowered.com/app/1804720/Gates_of_Troy/" target="_blank">Gates of Troy </a></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-66282891406485508252022-12-12T20:35:00.003+01:002023-12-14T19:20:18.735+01:00Mevia, la mujer que cazaba jabalíes en el Coliseo con una teta al aire<p><span style="font-family: "Times New Roman", serif; text-align: justify;"><span style="font-size: x-small;">Alfonso Mañas</span></span></p><p><span style="font-size: small; text-align: justify;">2.055
palabras, 12 minutos de lectura </span></p><br />A finales de octubre el nombre de Mevia se puso de actualidad debido a que una docuserie de un conocido canal de historia le dedicó un episodio completo. Sin embargo, la <a href="https://amcnetworks.es/noticias/canal-historia/canal-historia-gladiadoras-coliseo/?fbclid=IwAR0k3d76XAqspU-Zsf1KNEpye_0-5mHaur_bH_Wlovk96W6g_n0qJeJeW0E " target="_blank">información</a> que daban no tenía nada que ver con la verdad histórica (decían que era una gladiadora, y una ciudadana que libremente había elegido esa profesión), por lo que esta entrada servirá para conocer a la Mevia real.<div><br /><span><a name='more'></a></span><br />A Mevia la cita Juvenal, en las líneas 22-23 de su Sátira 1 (escrita hacia el año 100). Le dedica solo ocho palabras: <br /><br /><div style="text-align: center;"><i>“Mevia Tuscum / figat aprum et nuda teneat venabula mamma”</i></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: center;">(Mevia al etrusco jabalí atraviesa con lanzas llevando una teta al aire)</div><div style="text-align: center;"><br /></div>Esa es la única referencia que hay en las fuentes a Mevia, solo Juvenal habla de ella, y no dice nada más. Aunque pueda parecernos poco, en realidad es mucho, muchísimo, pues los autores de la época no solían escribir sobre los espectáculos de la arena, y cuando lo hacían casi nunca mencionaban los nombres de sus protagonistas (gladiadores y cazadores de fieras). En total, los autores de la época solo nombran a poco más de una docena, y entre esos nombres la única mujer es Mevia. <br /><br />Teniendo todo eso en cuenta entendemos la importancia de la mención a Mevia: debía de ser una estrella realmente impresionante, de lejos la mejor <i>venatrix </i>(cazadora de fieras) de su tiempo, para que Juvenal la citase por su nombre, especialmente Juvenal, que se distinguía por su misoginia (en sus sátiras critica con dureza a las mujeres, especialmente en la sátira 6). <br /><br />Pero además, si analizamos el fragmento, veremos que también es importante porque nos dice muchísimo en esas ocho palabras, nos permite conocer bastante de Mevia, de la Mevia histórica, que como veremos no tiene nada que ver con la del episodio.<br /><br /><b>Mevia, un nombre común <br /></b><br />Lo primero que encontramos en el fragmento es el nombre, Mevia, que era muy común entre las mujeres de toda clase (está documentado tanto con mujeres de clase alta como con libertas y esclavas), por lo que no aporta ninguna pista sobre la clase social de Mevia. Lo único que nos indica es que no era un apodo, un sobrenombre, cuya adopción estaba muy generalizada entre <a href="http://blogtabula.blogspot.com/search/label/Gladiadores%20y%20espect%C3%A1culos " target="_blank">gladiadores</a> y <i>venatores</i>. <br /><br /> <br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6JseDkwkeczDvh5aV5B1SvZrf0LexeeLWUHIBmOSc9owJ6qHUNQwvNEs2aOumXJKYiEHPtC43H71c7qHpDaNu7u61j7HtVnOlF9zd8ZQ7sfE-8LFeN0gWHvdsfm7H38dyL8bWFXB0R1_Gc1wC-e7ZVgrxkr_Q1wIXSeCe3r6P0aWpC6tr-4joqv2avA/s1240/FOTO%204.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6JseDkwkeczDvh5aV5B1SvZrf0LexeeLWUHIBmOSc9owJ6qHUNQwvNEs2aOumXJKYiEHPtC43H71c7qHpDaNu7u61j7HtVnOlF9zd8ZQ7sfE-8LFeN0gWHvdsfm7H38dyL8bWFXB0R1_Gc1wC-e7ZVgrxkr_Q1wIXSeCe3r6P0aWpC6tr-4joqv2avA/s320/FOTO%204.jpg" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;">Foto 2. Lápida de una liberta llamada Mevia, siglo I, hallada en Stabiae (AE 2002, 00314).</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><br /><br /><b>No era una gladiadora, sino una <i>venatrix </i><br /></b><br />Lo segundo que dice el texto es que Mevia cazaba animales, por lo que NO ERA UNA GLADIADORA (como dicen en el episodio), sino una <i>venatrix </i>(una mujer que cazaba animales en la arena, <i>venatrix </i>significa literalmente “cazadora”, de <i>venatio </i>= cacería). Ya he advertido muchas veces sobre el error tradicional de confundir gladiadores con <i>venatores</i> (quienes luchaban contra animales). No eran lo mismo. Confundir un gladiador con un <i>venator </i>es como confundir un boxeador con un torero: el primero lucha contra otro hombre, el segundo contra un animal. <br /><br /><b>Probablemente era esclava o de clase baja <br /></b><br />Lo tercero que dice el fragmento es que Mevia lleva un pecho al aire, lo que indica varias cosas, entre ellas que probablemente era de clase baja, posiblemente una esclava, contradiciendo lo afirmado en el episodio, que dice que Mevia era una “ciudadana libre” (los esclavos no eran ciudadanos en Roma). Respecto a esto, en primer lugar habría que matizar que la ciudadanía de las mujeres romanas era una ciudadanía ‘de segunda clase’ (comparada con la ciudadanía de los hombres, pues ellas no podían votar ni disfrutar de muchos otros derechos, mientras que los hombres sí), por lo que la ‘libertad’ de las ciudadanas romanas era ciertamente pequeña (de hecho, la mujer romana estaba sometida siempre a la autoridad de un varón: padre, esposo, o hijo si era viuda). En segundo lugar, centrándonos en la mención de la mama desnuda, esto sugiere que Mevia no era una ciudadana, sino muy probablemente una esclava, en cualquier caso una mujer de clase baja, pues una mujer de clase alta (una ciudadana, una mujer respetable, de buena familia) jamás habría aparecido en público con un pecho al aire: su pudor y su decoro no se lo habrían permitido, ni tampoco su padre (o su esposo si ya estaba casada) le habría permitido aparecer así en medio de la arena, ante los ojos de todo el pueblo de Roma (sus conocidos, familiares y amigos). <br /><br />La desnudez pública era para los romanos una humillación, ningún hombre de bien aparecía desnudo en público (ni siquiera de cintura para arriba) y mucho menos una mujer. Los gladiadores sí luchaban así porque eran <i>infames</i>, la categoría social más baja, por debajo de los esclavos, por lo que se les imponía esa humillación pública de la desnudez, para mostrar a todos su degradación como individuos. <br /><br />Por tanto, si Mevia aparecía en la arena con una teta al aire (como dice Juvenal, y en efecto luchaban así, pues hay varios relieves y mosaicos que muestran a las mujeres que luchaban contra animales en la arena así, con uno o ambos pechos al aire) probablemente era esclava, o si no lo era sería una mujer pobre, obligada por las circunstancias a realizar ese trabajo denigrante (porque implicaba desnudez) y extremo (porque se jugaba la vida) a cambio de unas monedas con las que poder vivir. <br /><br />Pero aparte del hecho de ir medio desnuda, el propio oficio de Mevia, <i>venatrix</i>, ya indica que sería de clase baja: como hemos dicho, los individuos de clase alta no se dedicaban a los oficios de la arena, sino que estos los desempeñaban mayoritariamente esclavos y libertos, que necesitando dinero aceptaban la mancha moral de la infamia que entrañaba ejercer esos oficios. Junto a eso, matar jabalíes no es una habilidad que se adquiera de la noche a la mañana, una mujer de la época no pasaba automáticamente de vivir conforme a los roles de mujer aceptados entonces (los cuales no incluían la caza, una práctica exclusivamente masculina) y en unas condiciones de seguridad aceptables (las propias de un hogar romano de la época) a convertirse en una cazadora de jabalíes en la arena, adoptando unos valores totalmente opuestos y jugándose la vida en cada actuación. Eso sugiere de nuevo que Mevia no habría sido una ciudadana, o una mujer que hubiese pertenecido a una familia típica, sino más bien la hija de un <i>venator </i>o de otra persona relacionada con el mundo de la arena, o que se habría criado en una escuela de gladiadores y/o <i>venatores</i>, y por ello desde joven le habrían enseñado ese oficio de cazar fieras en la arena (bastante complejo técnicamente, y que exigía también unas condiciones físicas altas, que no podían adquirirse de un día para otro, sino que eran el resultado de años de entrenamiento, como la actitud psicológica para afrontar un combate con una fiera). <br /><br />Una mujer capaz de cazar fieras era un bien cotizado en el mundo de la arena, por escaso, de manera que es plausible que alguien de ese mundo (probablemente un <i>venator</i>, que tenía los conocimientos y los medios) hubiese enseñado esa habilidad a una niña (su hija, o una niña comprada o adoptada con ese propósito), con el objetivo de ganar dinero con ello cuando fuese adulta. Comprar un esclavo y enseñarle una habilidad, para enriquecerse con él, era una práctica habitual en la época.<div> <br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj0KIUf0p8vP005Y4K7Qn2ZzJA9HcFAhBysbCFc-YK0pH4LjHwdyTriwgg-XSVrOu0LhqrHj95337zDumMJc837a2pvWnVAz55tMdj8wRs5pAC4qaZshPBDkOw6JKnNXE3yDMYyyHaYNInQrKqVgaIIx5rP4u_zpRUMulD4Xm9CnQ8BYyDbVqRjBlnG3A/s1116/FOTO%205.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj0KIUf0p8vP005Y4K7Qn2ZzJA9HcFAhBysbCFc-YK0pH4LjHwdyTriwgg-XSVrOu0LhqrHj95337zDumMJc837a2pvWnVAz55tMdj8wRs5pAC4qaZshPBDkOw6JKnNXE3yDMYyyHaYNInQrKqVgaIIx5rP4u_zpRUMulD4Xm9CnQ8BYyDbVqRjBlnG3A/s320/FOTO%205.jpg" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="text-align: start;">Foto 3. Caza del jabalí en el campo, mosaico romano, siglo IV.</span><br style="text-align: start;" /></td></tr></tbody></table><br /><br /><b>Técnica de caza del jabalí <br /></b><br />Finalmente, otra cosa que podemos deducir del fragmento es la manera en que Mevia mataba al jabalí: el texto menciona el <i>venabulum </i>(en plural, <i>venabula</i>), el arma de caza típica de los romanos. El venabulum era una lanza adaptada para la caza, la conocemos muy bien porque aparece representada con detalle en multitud de fuentes visuales (e.g. foto superior). Como muestran esas fuentes, el <i>venabulum </i>no se lanzaba (lógicamente) sino que el <i>venator </i>lo sostenía con fuerza con ambas manos, esperando el choque del animal que cargaba contra él (ya fuese jabalí, toro, oso, león… la técnica servía para cualquier animal cuyo instinto le llevaba a abalanzarse contra su agresor). La idea era que el animal se ensartase en la lanza, y para que la acción tuviese éxito, el asta del <i>venabulum </i>era gruesa, para no romperse ante la embestida del animal, y la punta de la lanza tenía en su base una barra transversal, para evitar que la lanza se hundiese más allá de ese punto, manteniendo así la distancia de seguridad entre el animal y el <i>venator </i>(si la lanza se hundiese más, o el asta se partiera, el animal podría alcanzar al <i>venator</i>, y matarlo, pese a estar herido). <br /><br />Teniendo todo eso en cuenta, es evidente que Mevia debió de ser una mujer de un físico impresionante, de gran fuerza (pues hay que ser muy fuerte para aguantar la carga de un jabalí cuando choca contra la lanza, y para que esta no se escape de las manos), muy valiente (para aguantar en el sitio frente a un animal furioso que carga contra uno), y hábil en su arte de matar bestias. <br /><br /><b>Puesta en escena <br /></b><br />Mevia probablemente iría acompañada de perros, los asistentes típicos en la caza del jabalí (foto superior), pues la <i>venatio</i> se escenificaba con todos los elementos de una cacería real, para llevar a los urbanitas de Roma (la urbe por excelencia, un millón y medio de habitantes en el año 100) el sabor genuino de esa actividad rural y campestre. <br /><br />Pero junto a esa imagen de realidad se incluían también elementos espectaculares, pues la venatio del anfiteatro era en primer lugar, como todo lo que se ofrecía en la arena, un espectáculo (<i>spectaculum</i>, “algo digno de ser mirado”, de <i>spectare </i>= mirar). El primero de esos elementos espectaculares era la misma Mevia, pues las mujeres no cazaban en Roma, por lo que una mujer cazando jabalíes ya era en sí mismo algo digno de ver. El segundo elemento espectacular era que fuese con un pecho al aire, pues las mujeres romanas no iban así en público. La razón de aparecer así era doble: por un lado era un atractivo erótico para los espectadores (mayoritariamente hombres, pues en el Coliseo las mujeres solo podían sentarse en la zona más alta, las demás gradas estaban reservadas a los hombres) y por otro lado evocaba el aspecto de las amazonas (que eran imaginadas por los romanos con uno o ambos pechos al aire, como muestran varias fuentes visuales y escritas) [e.g. Foto 1]. <br /><br /><b>Conclusión: diosa de la arena <br /></b><br />Así, cuando Mevia saltaba a la arena, lanza en ristre y con un pecho al aire, caminando resuelta hacia un jabalí furioso, los espectadores de la grada quedarían fascinados, creyendo ver a una auténtica amazona, y cuando esta se alzaba vencedora, con su rival derribado a sus pies, las gradas estallarían en una ovación, todos impresionados ante esa mujer que obraba tales proezas, propias de un hombre. Creerían estar viendo a una diosa. <br /><br />Como dice Marcial, lo que solo habían oído por los mitos, la arena se lo mostraba. <br /><br /><div style="text-align: center;"><i>“Quidquid fama canit, praestat harena tibi ”</i></div><div style="text-align: center;"><br /></div>Eso era un <i>spectaculum</i>, eso era alcanzar la gloria en la arena, y eso explica la fama de Mevia, que fue tan grande que hasta Juvenal la citó por su nombre, haciéndola inmortal, llevando su nombre hasta hoy… y su moda de ir con una teta al aire.<br /><br /><br /><div style="text-align: right;"><b>Sobre el autor</b></div><div style="text-align: right;"><br /></div><div style="text-align: right;"><span style="font-size: x-small;"><a href="https://granada.academia.edu/AlfonsoManas " target="_blank">Alfonso Mañas</a></span></div><div style="text-align: right;"><span style="font-size: x-small;">alfonsomanas1@hotmail.com</span></div><div style="text-align: right;"><a href="https://www.facebook.com/alfonso.gladiadores/" target="_blank"><span style="font-size: x-small;">Perfil en Facebook</span></a></div><div style="text-align: right;"><a href="http://alfonso-manas.blogspot.com/" target="_blank"><span style="font-size: x-small;">Blog personal</span></a></div><div style="text-align: right;"><span style="font-size: x-small;">Miembro del grupo de investigación CTS-545 (área de Historia del Deporte) de la Universidad de Granada</span></div><div style="text-align: right;"><span style="font-size: x-small;">Consejero Editorial de <a href="https://www.tandfonline.com/action/journalInformation?show=editorialBoard&journalCode=fhsp20 " target="_blank"><i>The InternationalJournal of the History of Sport</i></a></span></div><div style="text-align: right;"><a href="https://www.viajesiverem.com/tours/gladiadores-antigua-roma/" target="_blank"><span style="font-size: x-small;">Guía en viajes de temática gladiatoria</span></a></div><div style="text-align: right;"><br /></div> <br /><div style="text-align: center;">------------------ o -------------------------</div><br />Para saber más sobre las cacerías de animales en la arena, el papel de las mujeres en ellas, y sobre otras mujeres que lograron la fama luchando en la arena, ver las páginas 135 y siguientes de <a href="https://www.planetadelibros.com/libro-gladiadores/268792" target="_blank"><i>Gladiadores: el gran espectáculo de Roma</i></a> (edición 2018). <br /><br />Sobre las venationes y las mujeres en la arena, ver también el documental <a href="https://www.rtve.es/play/videos/arqueomania/arqueomania-escuela-gladiadores/5600249/">‘</a><a href="https://www.rtve.es/play/videos/arqueomania/arqueomania-escuela-gladiadores/5600249/" target="_blank">Escuela de gladiadores’</a>, de <i>Arqueomanía </i>(minuto 8:26 y 21:07). <br /><br />Sobre el papel de las mujeres en los espectáculos, especialmente en la parte griega del imperio, ver los libros de <a href="https://ucm.academia.edu/FernandoGarc%C3%ADaRomero" target="_blank">Fernando García Romero</a>, el mayor experto mundial en deporte en la antigua Grecia: <br /><br />- <a href="https://www.libreriadeportiva.com/libro/el-deporte-en-la-grecia-antigua_73131" target="_blank"><i>El deporte en la Grecia antigua</i></a> (2019, Síntesis) <br /><br />- <a href="https://www.libreriadeportiva.com/libro/los-juegos-olimpicos-y-el-deporte-en-grecia_846" target="_blank"><i>Los juegos olímpicos y el deporte en Grecia</i></a> (1992, Ausa)<br /><br /><br /><div><div id="edn9"><p class="MsoNormal" style="vertical-align: baseline;"><span class="contentpasted0"><span style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-image: initial; background-origin: initial; background-position: initial; background-repeat: initial; background-size: initial; border: 1pt none windowtext; padding: 0cm;"><a href="https://www.libreriadeportiva.com/libro/los-juegos-olimpicos-y-el-deporte-en-grecia_846"><span style="border: none;"><o:p></o:p></span></a></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="vertical-align: baseline;"><span style="background: white; border: 1pt none windowtext; font-size: 10pt; padding: 0cm;"><br />
<!--[if !supportLineBreakNewLine]--><br />
<!--[endif]--></span><span style="font-size: 10pt;"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoEndnoteText"><o:p> </o:p></p>
</div>
</div><div style="mso-element: endnote-list;"><div id="edn2" style="mso-element: endnote;">
</div>
</div></div></div>Roberto Pastranahttp://www.blogger.com/profile/13128078798890547612noreply@blogger.com0Granada, España37.1774605 -3.59843688.8672266638211568 -38.7546868 65.487694336178848 31.5578132tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-32477300116624948312022-11-04T10:09:00.005+01:002024-02-14T21:45:44.362+01:00Los Persas de Esquilo; el enemigo también es humano<div style="text-align: justify;">Todos los que nos dedicamos, con mejor o peor voluntad y acierto, a eso de la literatura histórica tenemos una deuda con Esquilo, el autor de la obra de teatro más antigua conservada que es, a su vez, el primer drama histórico que ha llegado hasta nosotros: “Los Persas”.</div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQCyRWL7-g7dJsyuYVdjSpLENo0Uo3hCd4DD6gsP4pK2ql8UQ77aa5wwwp1Au8YISFlD3Rl07e5JzvnwlagTimC9Qy5T3ZXQhijVqhod3gsTnxs1yD-jez0GL6H0hPdlixh030Bn2Ev3QdyEr5B4pgHnmINiq50Faje8rOxkgJpUiPClfH88WNx6Xj/s650/Persians2650.webp" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="434" data-original-width="650" height="427" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQCyRWL7-g7dJsyuYVdjSpLENo0Uo3hCd4DD6gsP4pK2ql8UQ77aa5wwwp1Au8YISFlD3Rl07e5JzvnwlagTimC9Qy5T3ZXQhijVqhod3gsTnxs1yD-jez0GL6H0hPdlixh030Bn2Ev3QdyEr5B4pgHnmINiq50Faje8rOxkgJpUiPClfH88WNx6Xj/w640-h427/Persians2650.webp" width="640" /></a></div><br />Pero esta obra no solo es importante por su carácter iniciático o su antigüedad, ni siquiera por el transcendental momento histórico que nos narra, si no por cómo nos lo cuenta.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Antes de entrar en materia pongámonos en antecedentes. Esquilo, su autor, era miembro de una acomodada familia de la nobleza ateniense, dueña de tierras en una de las regiones más ricas del Ática, Eulises. Todo parecía indicar que dedicaría su vida a la administración del rico patrimonio familiar mientras ocupaba el tiempo de ocio en banquetes regados con vino aguado, guerras con las ciudades vecinas y alguna incursión en la política, muy animada desde que, siendo Esquilo un adolescente, Clístenes derrocara al último de los tiranos de Atenas e instaurara la democracia.<span><a name='more'></a></span></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Pero todo este cómodo y previsible futuro se vio trastocado cuando estalló la revuelta de las ciudades griegas de Asia. Estas habían caído bajo el control del Imperio Persa cuando el rey de Lidia, de quien dependían, no tuvo mejor idea que atacar a Ciro el Grande y este lo derrotó sin paliativos, anexionándose sus territorios. Ciro y su sucesor, Darío, permitieron a las ciudades griegas conservar su autonomía y las trataron, en general, con mucho tacto, pero esto no evitó que se sintieran cada vez más incómodas dentro del imperio, ya que creían que este favorecía a otros actores económicos integrados en el mismo, como los comerciantes fenicios.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La revuelta estalló en el 499 a.C. encabezada por el tirano de Mileto, y la democrática Atenas envió una flota en su ayuda. Los griegos obtuvieron algunos éxitos iniciales, incluida la conquista de Sardes, capital de la satrapía, que fue incendiada y su población masacrada o esclavizada, pero Darío no tardó en reaccionar, aplastando la rebelión y arrasando Mileto como respuesta a lo sucedido en Sardes.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Aquello, naturalmente, no acabó ahí, al contrario. El ciclo de odio y venganzas apenas si se había puesto en marcha.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiKeVAeGQfzoBcqnNZSGpg2OBTu2CKwxBb7sOXw2jjgmBQYpbrTKQuCf1dyRY-c15zH70_WuTYA6LMEJLeRLENYZSbruPi-oK31nsBT9anP6pVQ3HGt0QRdlsGvYl7iRfiqLp-fEBclJuSIGJI11_BVCiwUnUJkaZgDOYqpMVkB5fzQYtEW5dIkts_D/s600/Perserschutt.gif" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="484" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiKeVAeGQfzoBcqnNZSGpg2OBTu2CKwxBb7sOXw2jjgmBQYpbrTKQuCf1dyRY-c15zH70_WuTYA6LMEJLeRLENYZSbruPi-oK31nsBT9anP6pVQ3HGt0QRdlsGvYl7iRfiqLp-fEBclJuSIGJI11_BVCiwUnUJkaZgDOYqpMVkB5fzQYtEW5dIkts_D/w517-h640/Perserschutt.gif" width="517" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #cccccc;">Escombros de Atenas retirados tras su destrucción por los persas</span></td></tr></tbody></table>Darío decidió castigar a Atenas por su intervención y en el 490 el ejército persa desembarcó en una playa cuyo nombre ya forma parte del imaginario mundial: Maratón. Y allí acudieron a enfrentarse a él los atenienses, entre ellos Esquilo y sus hermanos Ameinias y Cynegeirus. Este último, el mayor, fue uno de los generales atenienses y el héroe de la jornada, muriendo al tratar de impedir que las naves persas zarparan para dirigirse a Atenas. Más sangre, más muerte, más dolor, más odio. En venganza por la derrota de Maratón, los persas incendiarían la propia Atenas, luego vendrían la respuesta griega en Salamina, batalla en la que destacaría el otro hermano de Esquilo<span style="color: #38761d;">, <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2015/06/ameinias-hermano-de-esquilo.html"><span style="color: #38761d;">Ameinias</span></a></span><span style="color: #04ff00;">,</span> comandante del trirreme que encabezó el ataque contra la flota persa y que, al parecer, dio personalmente muerte al almirante persa, y persiguió a la famosa <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2015/11/artemisia-la-de-salamina.html"><span style="color: #38761d;">Artemisia, que lograría huir usando una táctica, cuanto menos, imaginativa</span></a><span style="color: #2b00fe;">.</span><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Ameinias perdió una mano en combate, pero su hermano Esquilo continuó luchando hasta la victoria definitiva en Platea.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgI16vBCvXUCoLdeHtf4rNvQHARZwbcjlqcdX5AqwzDzl_Yh-i7YHqmRlri5QYn6AMGMkeMJPQrHz5umCecMCuPaWHDbGvDfxRlObMf-_MsWwJzWdN8AI-T5e5wjRUGGQGurABZV6ohpp_aLe3Aj3991fA9cXFrDn5wV68b_s7w7I6dcOcns6tuYXh1/s729/descarga.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="729" data-original-width="503" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgI16vBCvXUCoLdeHtf4rNvQHARZwbcjlqcdX5AqwzDzl_Yh-i7YHqmRlri5QYn6AMGMkeMJPQrHz5umCecMCuPaWHDbGvDfxRlObMf-_MsWwJzWdN8AI-T5e5wjRUGGQGurABZV6ohpp_aLe3Aj3991fA9cXFrDn5wV68b_s7w7I6dcOcns6tuYXh1/w442-h640/descarga.png" width="442" /></a></div>Matar no es fácil, al menos para aquellos de nosotros que no hemos tenido la suerte o la desgracia de nacer o convertirnos en psicópatas. E incluso a estos les cuesta cometer sus primeros crímenes. Por eso, desde siempre, para lograr transformarnos en asesinos se ha recurrido a deshumanizar, a convertir en bestias, en monstruos, a nuestros enemigos. Esto es así desde que se tiene noticias de la primera guerra, pero fue en el siglo XX, con la aparición de la “psicología de masas”, cuando esta idea alcanzó su mayor desarrollo, acompañada por la creación de un armamento que, por primera vez, permitía matar al enemigo sin mirarlo a la cara, con frecuencia sin ni siquiera verlo. Y desde los un tanto burdos carteles de la Primera Guerra Mundial el sistema ha seguido evolucionando hasta las algo más refinadas técnicas de hoy en día.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En estas circunstancias parece lógico pensar que cuando Esquilo se decidió a escribir sobre la guerra elaboraría un panfleto a favor de Atenas en el que los persas serían anatemizados como el siniestro invasor que eran, enemigos de todos los principios básicos de la decencia humana. De hecho esto es lo que había hecho, no mucho tiempo antes, el también dramaturgo Frínico con su obra “La destrucción de Mileto”, hoy perdida. Pero eso no es en absoluto lo que sucede en “Los Persas”. Esquilo decide dar voz al enemigo y contar lo sucedido desde su punto de vista. Y no solo eso: el protagonista no es un valiente guerrero, ni un heroico general, sino una mujer, una madre que espera angustiada noticias de la suerte de la batalla y, con ella, de su hijo. Y no una madre persa cualquiera, es Atossa, la madre del hombre que decretó la destrucción de los griegos, del enemigo por antonomasia, de Jerjes.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEid51-jHBgyKUXCcLt5Zks_T3bJ1YJXVwii1Gbh8wV5JKq6PiEINTsIzyDxQFobqS4feEsd_AVLR-ZGUfd19PdL9WYvIJNggxKpyzSLeqgBE5lKGkH0bdJ-FX1Iejp2N3FwZn7jNk2XI-teDNEwU2WjIxSLZHMUExBZc-j3jOhfR6FvmrfS-WDTZyvt/s1080/FDzuqQsUUAMrpuu.jpg" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1080" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEid51-jHBgyKUXCcLt5Zks_T3bJ1YJXVwii1Gbh8wV5JKq6PiEINTsIzyDxQFobqS4feEsd_AVLR-ZGUfd19PdL9WYvIJNggxKpyzSLeqgBE5lKGkH0bdJ-FX1Iejp2N3FwZn7jNk2XI-teDNEwU2WjIxSLZHMUExBZc-j3jOhfR6FvmrfS-WDTZyvt/w640-h640/FDzuqQsUUAMrpuu.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #cccccc;">Reconstrucción del rostro de Atossa</span></td></tr></tbody></table>Atossa, en su hogar, en el palacio de Susa, junto a su corte de nobles, aguarda sumida en el miedo y la incertidumbre. Hasta que llega un agotado mensajero que le comunica las más terribles noticias. El ejército y la flota persa han sido aniquilados en la batalla de Salamina, cuyas dramáticas circunstancias describe con detalle. El número de muertos es incontable. Lentamente, desgrana la lista de los generales y altos oficiales fallecidos, cuyos nombres son acompañados por un coro de lamentos procedente de sus familiares y amigos. Jerjes, por fortuna, ha sobrevivido y está en camino. Conmocionada, Atossa acude a visitar la tumba de su marido, Darío, con cuyo fantasma charla sobre lo sucedido. Este le señala al responsable del desastre: Jerjes, su hijo, cuya impiedad y soberbia ha traído la desgracia sobre los persas.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Finalmente este llega a la corte, pero se niega a reconocer sus errores. Discuten y, lentamente, el gran Jerjes, el emperador todopoderoso, comprende que es él el único culpable de su desgracia, no los griegos ni los dioses. Y con ello se transforma en un ser más humano, más próximo a todos nosotros.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibql8U6jseLvM0iukgWknUVfK3g_cyFqTyjbInP5fZsy4_U5Td7xam5sKoOEzVUc_QLIrh6qsGpT_a_klyb0_YAjxGkSAI_UqAqwwWAk2PHHmsL5kT7CHlAWfWvyQiNE2JTqqyHeq-VuSLkYz7R_jIjWPNnnzp-itPF4N-FYgAUlbdPTlRLZk0IlXo/s620/inmortales-kAXG-U1701352398690FdF-620x317@abc.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="317" data-original-width="620" height="328" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibql8U6jseLvM0iukgWknUVfK3g_cyFqTyjbInP5fZsy4_U5Td7xam5sKoOEzVUc_QLIrh6qsGpT_a_klyb0_YAjxGkSAI_UqAqwwWAk2PHHmsL5kT7CHlAWfWvyQiNE2JTqqyHeq-VuSLkYz7R_jIjWPNnnzp-itPF4N-FYgAUlbdPTlRLZk0IlXo/w640-h328/inmortales-kAXG-U1701352398690FdF-620x317@abc.jpg" width="640" /></a></div>Comparemos este relato con otros, alejados miles de años de estos hechos y mucho más próximos a nosotros, como los famosos “300” de Hollywood. En la película Jerjes es una especie de extraña y monstruosa criatura, y los guerreros persas ni siquiera tienen rostros humanos, sino de bestias.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Y esto es así porque vivimos en una época donde la guerra es un espectáculo que el público ve filtrado en la pantalla de un televisor o de un ordenador, donde incluso al enemigo se le mata en ocasiones a miles de kilómetros de distancia mediante un dron controlado desde un satélite, un enemigo al que solo se observa como una señal en una de esas pantallas.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Los atenienses que formaban el público al que se dirigió la obra de Esquilo eran los guerreros que habían luchado en esa batalla, y sus familias que vieron entre lágrimas arder Atenas y esperaron angustiadas la suerte del combate. Y, sin embargo, fue ese público el que proclamó a “Los Persas” ganadora del primer premio del festival de Dionisio, el más importante evento literario de la ciudad de Atenas.</div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzBEuig1U_BHwNXO1-IGaA0ZjYaNI0xhRP30aKZf9F05ZWszjH4_F3vGQyW1XSTbfIOL-KexB6EWFl1tn1_-LGZMzZUoD3cSi_RHV3EMB7TFMhcTCiqAQSThZ1uQIdCRTrGOxZTtErfEyVnMJjFKxWOJMfRFIgTJdGIXGdu2zdEwMI36ntk2aqlIP0/s553/WK-AV490_BOOKS__G_20100923174008.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="369" data-original-width="553" height="429" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzBEuig1U_BHwNXO1-IGaA0ZjYaNI0xhRP30aKZf9F05ZWszjH4_F3vGQyW1XSTbfIOL-KexB6EWFl1tn1_-LGZMzZUoD3cSi_RHV3EMB7TFMhcTCiqAQSThZ1uQIdCRTrGOxZTtErfEyVnMJjFKxWOJMfRFIgTJdGIXGdu2zdEwMI36ntk2aqlIP0/w640-h429/WK-AV490_BOOKS__G_20100923174008.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #cccccc;">Representación de la batalla de Maratón en un sarcófago</span></td></tr></tbody></table><br /><div style="text-align: justify;">Y, quizás, si les gustó tanto fue porque ellos no necesitaban que nadie les fabricara razones para ir a luchar. Ellos sí sabían por qué mataban y morían. Por eso no tenían que transformar a sus enemigos en monstruos. Por eso podían reconocer en la angustia de las madres persas su propia angustia y, como Esquilo y sus camaradas, ver el horror de su miedo, de su odio, de su furia y su desesperación grabados en los ojos de su enemigo un instante antes de hundir la espada en su carne y recibir en la cara su último aliento, mientras la luz de la vida se escapaba de esos mismos ojos. Y comprendieron que, en ese momento, no había nadie más unido a ellos, más próximo, más igual, que ese enemigo cuya vida acababan de arrebatar con sus propias manos.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Por eso jamás hubieran entendido que ningún gobernante, literato, o propagandista pretendiera arrebatarle su condición de ser humano. Porque también se la estaría arrebatando a ellos.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><p class="MsoNormal"><a href="https://web.archive.org/web/20131211040021/http:/www.cayocesarcaligula.com.ar/grecolatinos/esquilo/los_persas.html"><span style="color: red;">Los
Persas en castellano</span></a><o:p></o:p></p></div><div style="text-align: justify;"><br /></div>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-91475782700632653392022-09-08T08:53:00.005+02:002022-10-26T13:21:44.010+02:00Asinio Galo, el mesías equivocado<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPcnSVOWv-9kDjUsG8JtYER-4SAdWuRAzDQZD7H8TXaRHIMXHNbwfDO-n35eYFNmwh0iKVeEY3gLg4eTrdB_5Y9u9BRLW-kG5unqbjwnG2m7LGJxqaafVm2a8kszK-o4go0S5XJFA4M3ONCMtoOC4SmVHOCB5ywinSAkmYED6cX_Iuv0YoHi2tcNDZ/s1200/Senado-Romano.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="674" data-original-width="1200" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPcnSVOWv-9kDjUsG8JtYER-4SAdWuRAzDQZD7H8TXaRHIMXHNbwfDO-n35eYFNmwh0iKVeEY3gLg4eTrdB_5Y9u9BRLW-kG5unqbjwnG2m7LGJxqaafVm2a8kszK-o4go0S5XJFA4M3ONCMtoOC4SmVHOCB5ywinSAkmYED6cX_Iuv0YoHi2tcNDZ/s320/Senado-Romano.jpeg" width="320" /></a></div><br /><p><br /></p><p> <span style="text-align: justify;">Todo el mundo conoce al personaje
principal de “La Vida de Brian”, la genial película de los Monty Python. Es un
tipo normal al que confunden con Jesucristo desde el día que nace y que
continuamente sufrirá que le llamen el Mesías, lo que atraerá sobre su persona un
sinfín de desgracias bíblicas.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero pocos saben que hubo un romano que pasó por
una confusión parecida.<span></span></p><a name='more'></a> <o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Un tipo al que gran Virgilio le dedicó un
poema al nacer, ya que su padre patrocinaba al poeta y adular al que te paga
las habichuelas es de recibo para los escritores desde que en el mundo se usa
cálamo y pluma. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En dicho poema, según todos los sabios de la
cristiandad posteriores, se anunciaba la llegada del Mesías, ya que habla sobre una virgen y una época dorada que traerá
un niño; pruebas cristalinas de que habla de Cristo, ¿quién si no?, por lo que
Virgilio fue considerado un poeta inspirado por Dios y de muy recomendable
lectura en los monasterios. Hasta Dante lo hizo su guía turístico por el infierno. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Pero el verdadero niño del canto tuvo menos fama y más desgracia.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>C. Asinio Galo nació en el año 38 a.C. en una
familia muy bien relacionada. Su madre, Quincia, pertenecía a una de las familias
patricias con más pedigrí de la urbe, ya que se hacía remontar a los tiempos
del rey Tulio Hostilio, que es remontarse mucho y ser poco menos que monarcas. Su
padre era Asinio Polión, todo un personaje que merecerá su artículo propio,
pero digamos ahora que fue amigo íntimo de Julio César y luego, durante unos
años de ambiguas lealtades, se pasó al partido de C. Octavio, el futuro
Augusto. Una elección que le otorgaría ser del bando ganador en las guerras
civiles. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjEbvpsNvXze82cn5psQeE9_kd1qeuem9hfJcTwuVa6vKpwlrRzj_LkssZHYWOxvxHxM64sNiJnzTQLYJOBtiIfIn17cbzWjTU0KztX0rQu3DZkIKVfQDcS8hRhF0K6L3abxDZ4FzhQe8MbtnhZFAgfJ47uVjyq0IaW-SJtXEj1beKOPjsP8R10MtVA/s700/Gaius_Asinius_Pollio.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="700" data-original-width="555" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjEbvpsNvXze82cn5psQeE9_kd1qeuem9hfJcTwuVa6vKpwlrRzj_LkssZHYWOxvxHxM64sNiJnzTQLYJOBtiIfIn17cbzWjTU0KztX0rQu3DZkIKVfQDcS8hRhF0K6L3abxDZ4FzhQe8MbtnhZFAgfJ47uVjyq0IaW-SJtXEj1beKOPjsP8R10MtVA/s320/Gaius_Asinius_Pollio.jpg" width="254" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Su papi, Asinio Polión.</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Pero Polión se apartó de la vida política del
imperio porque era un republicano hasta el tuétano, contrario a la idea de
poder unipersonal, y se dedicó en su madurez a la promoción de escritores y
crear un círculo literario de gran fama. Fue él quien descubrió a Virgilio y se
lo presentó a Augusto. También fue el primero que construyó una biblioteca
pública en Roma.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Así que podemos imaginar que Asinio Galo fue
criado entre los literatos que protegía su padre, gente con nombres como
Virgilio u Horacio, y en un ambiente culto de primer nivel, rayando en lo
pedante, para qué negarlo. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgY-hn1LHqnOy0QVFIsrNJNCl6pmQUUzYzSp2qDOUNnchT-zoyD4RLj9tdojyI8Z0hHR78nyAhXVmzDxAdX4Nq28lG1ZbZG8FraGJ5WejMm0_3230TeI2xShZOI9mz9wDxC7sH3ykVS7pHzb3lcYkFJK8U0COmSm-4YI3U1s_6t8AxunBez6FhqTYlY/s720/virgilio.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="430" data-original-width="720" height="191" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgY-hn1LHqnOy0QVFIsrNJNCl6pmQUUzYzSp2qDOUNnchT-zoyD4RLj9tdojyI8Z0hHR78nyAhXVmzDxAdX4Nq28lG1ZbZG8FraGJ5WejMm0_3230TeI2xShZOI9mz9wDxC7sH3ykVS7pHzb3lcYkFJK8U0COmSm-4YI3U1s_6t8AxunBez6FhqTYlY/s320/virgilio.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Virgilio inspirándose entre musas loquitas por sus versos</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Así recibió Virgilio su
nacimiento en la IV Egloga , dando origen al lío del mesías:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i>“Por ti, ¡oh niño!, la tierra inculta dará sus primicias,</i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">la trepadora hiedra cundirá junto al nardo salvaje,<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">y las egipcias habas se juntarán al alegre acanto.<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">Henchidas de leche las ubres volverán al redil por sí solas<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">las cabras, y a los grandes leones no temerán los rebaños.<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">Tu misma cuna brotará para ti acariciantes flores.<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">Y morirá la serpiente, y la falaz venenosa hierba<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">morirá; por doquier nacerá al amomo asirio.”</i><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En fin, que Virgilio era muy agradecido. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Nuestro Galo perteneció a la primera
generación de senadores que nacieron con un emperador sobre sus cabezas. Hijos
de senadores republicanos, que les inculcaron sus valores tradicionales, y que aceptaron con resignación y/o enfado
disimulado el mando supremo del “Augusto” del Palatino. Esta nueva generación
se daba cuenta de que la situación iba para largo y que volver a la República
de sus padres ya era una quimera. Pero nunca se consideraran inferiores a la
familia imperial y se someterán al emperador usando la ironía como
defensa.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Como hijo de familia senatorial con buenas
relaciones con Augusto, Galo tuvo una carrera en la administración de primer
nivel. Fue pasando por todas las magistraturas a velocidad de crucero hasta
llegar a cónsul con apenas 30 años, en el 8 a.C. Tal elección al consulado, nos dice Dión Casio, fue
tachada de corrupta, pero Augusto no quiso investigar el asunto, seguramente
por ser parte involucrada. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Tres años antes, Galo se había casado con Vipsania
Agripina, hija de M. Vipsanio Agripa, el gran amigo de Augusto, y ex esposa del
futuro emperador Tiberio, que nunca aceptó de buen grado su divorcio. No
sabemos realmente la causa<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del divorcio
de Tiberio, desde luego no fue la falta de amor, pues siempre dio muestras de
seguir enamorado de Vipsania; quizá fuese impuesto por Augusto, que había
decidido que Tiberio se debía casar con su hija, Julia, para unir más al clan
julio-claudio. Pero está claro que la posterior boda de Galo con Vipsania
provocó el rencor y los celos en Tiberio. Los cuales aumentarían de grado
cuando Galo se proclamó padre del hijo de Vipsania, que se había divorciado
embarazada. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9ElX4CYg2Cb4qemUPr9oPvMKTHHojP31jNa8WksxLfEX_ByRYD0txElS8rwd8k9hfZqJxs-skQvv_UkaFLdwQLBuOZVimnhQA8XrI8ZroKVBIqKj9H6yhXiBbfo8yFcGXPjylHM8qlWcZseYRuJFc1nAp2ctaPXckgcjfZZUfKCgYdN2R-O-X93tj/s400/vipsania%20agripa.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="320" data-original-width="400" height="256" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9ElX4CYg2Cb4qemUPr9oPvMKTHHojP31jNa8WksxLfEX_ByRYD0txElS8rwd8k9hfZqJxs-skQvv_UkaFLdwQLBuOZVimnhQA8XrI8ZroKVBIqKj9H6yhXiBbfo8yFcGXPjylHM8qlWcZseYRuJFc1nAp2ctaPXckgcjfZZUfKCgYdN2R-O-X93tj/s320/vipsania%20agripa.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Vipsania Agripa, reconstruida según su busto</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Siguiendo su crucero de magistraturas, Asinio
Galo sería procónsul de la rica Asia en 6-5 a.C. y luego gobernador de la Hispania Citerior, por
el año 1 d.C. Esto último lo sabemos gracias al hallazgo de la Tabula
Lougeiorum, un pacto de patronazgo entre los Lougei de la actual Asturias y
nuestro Galo, cuya datación ha sido precisada por Pablo Oscariz Gil (<i>La
datación del gobierno hispano de C. Asinius Gallus</i>, en academia.edu). Estos
pactos eran cosa común entre los gobernadores romanos, que así ponían bajo su
“protección” pueblos enteros, que pasaban a ser sus clientes y fuentes de apoyo.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrj_ieH4shBXs6DCYp04JfkE7n_ekmBl9b9M48hhdK0_XIOS9AVSauxi5Qcb-syO9WYU46Gn0BI-Li624FbDtXH0nt26Mi7LqSL2aXVhL1qS69g9RAbJ1CCd8XTX1CI14743BPKOEMy_ZbbLRLCQC5AmV_0gwMK-F6M9uwHJHg_qJLymJ2fSRBDGFL/s350/monedagaloenasia.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="162" data-original-width="350" height="148" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrj_ieH4shBXs6DCYp04JfkE7n_ekmBl9b9M48hhdK0_XIOS9AVSauxi5Qcb-syO9WYU46Gn0BI-Li624FbDtXH0nt26Mi7LqSL2aXVhL1qS69g9RAbJ1CCd8XTX1CI14743BPKOEMy_ZbbLRLCQC5AmV_0gwMK-F6M9uwHJHg_qJLymJ2fSRBDGFL/s320/monedagaloenasia.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Moneda emitida por Asinio Galo mientras gobernaba Asia.<br />Galo a la izquierda y el dios Dionisio, un poco cabreado, a la derecha</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Tras
pasar por las magistraturas provinciales, a partir de los cuarenta años, Asinio
Galo, vivió ya en Roma de forma definitiva, convertido en senador de gran
prestigio, como Lucio Aruncio, del que ya hablamos. Por cierto, repito aquí la
misma anécdota que cuando hablamos de <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2017/05/lucio-aruncio-el-patricio-ejemplar.html" target="_blank">Aruncio</a>, la que cuenta Tácito, cuando
preguntado Augusto sobre sus posibles sucesores, contó la siguiente:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><i><span style="color: black; font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">“Marco Lépido era capaz pero que menospreciaría serlo; que Galo Asinio
aspiraría al cargo, aunque era incapaz, y que Lucio Aruncio no era indigno y si
hallaba ocasión lo intentaría sin duda.”</span></i><i><span style="color: black; font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 13.5pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"> </span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><o:p> </o:p> Como vemos, Asinio
Galo estaba entre el grupo de posibles sucesores. Augusto no tenía dudas de su
ambición, ¿Quién no va a ser ambicioso cuando Virgilio anuncia su nacimiento
como una nueva era?, pero Augusto, que
era fino en juzgar personas, tenía poca confianza en sus posibilidades.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En el 14 d.C muere Augusto y a Tiberio le toca
asumir el poder. Fue Galo el que propuso que el tren fúnebre de Augusto pasará
por un arco triunfal, que es de buenos ser agradecidos
con quien tantos cargos te ha dado. Pero nos cuenta Tácito que cuando Tiberio se presentó en el
senado y declaró que se haría cargo de cualquier tarea que le quisieran
asignar, lo cual era una forma educada de pedir el mando supremo, a Asinio Galo
se le ocurrió la broma de decir:<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%;">“<i><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Deseo saber, ¡oh
César!, qué parte gustarás más de tomar a tu cargo”<o:p></o:p></span></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-style: italic; mso-bidi-font-weight: bold;">La cara de enfado que puso Tiberio debió ser
todo un poema, porque al momento Galo se excusó, que lo habían entendido mal,
por todos los dioses, que solo faltaría dudar del sucesor de Augusto, y bla,
bla…</span> Pero se había atrevido a vacilar a Tiberio ante todos los
senadores. Si el nuevo emperador ya le guardaba ojeriza desde el asunto de
Vipsania, ahora no perdonaría esta ofensa. Solo era cuestión de tiempo y
Tiberio era de esas personas muy pacientes, calladas hasta la timidez, pero que
guardan las ofensas en caliente espera y siempre se vengan con cuidada crueldad.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkcsXkcb-LtRpezRTR75q_vzmlEz1um3fM6GsAXu5K5RaerOa1w8vxKvvhD7pyYBNATjAewvv40mD5qfCcbFd7Nq4SihZ1iPNY2tpGTW6tOw_VNgmJrsoNiSVqasFWT6L4sXI9xr6n3D__OTXLneDQ9RgbAjRGCvwleOLAyJWIbyCk7wgrejG-aUlh/s1200/tiberio.jpeg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="675" data-original-width="1200" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkcsXkcb-LtRpezRTR75q_vzmlEz1um3fM6GsAXu5K5RaerOa1w8vxKvvhD7pyYBNATjAewvv40mD5qfCcbFd7Nq4SihZ1iPNY2tpGTW6tOw_VNgmJrsoNiSVqasFWT6L4sXI9xr6n3D__OTXLneDQ9RgbAjRGCvwleOLAyJWIbyCk7wgrejG-aUlh/s320/tiberio.jpeg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Tiberio, con su expresión habitual de "ésta te la guardo"</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pasaron los años. Tiberio fue,
poco a poco, dejando el gobierno en manos de su prefecto del pretorio Sejano, y
apartándose de la vida pública, hasta abandonar Roma por su villa en la isla de
Capri, un paraje tan agreste como su carácter.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero un día del año 30 d.C.
Asinio Galo recibe una extraña invitación. El emperador andaba por Roma y quería cenar con él esa misma noche.
Seguramente, nuestro Galo se puso nervioso, pero no podía negarse a compartir
mesa con el dueño del mundo y acudió puntual a la invitación. En la cena, entre
platos exquisitos y dulce conversación, Tiberio fue un ejemplo de amabilidad
con su invitado, que quizá se sintió aliviado. Tiberio era un tipo raro para
ser romano, poco sociable, casi misántropo, siempre desconfiado, a menudo
taciturno, pero cuando estaba de buenas era hasta agradable. El problema es que
ese día no estaba de buenas, solo disfrutaba de su venganza. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLTqs7YDRsEekBBfHydTc1gDlo6SKd9p5kvjvbHukxdar7nRIgQMl7QYvQBKlZloOQC5vUYa8jjLgVTAPwxjmIZY7WIr7oAUnvyk8Ykxz5L1qcqBRYrgksHRnP8RKE1PXeJ9ra0VnpdXN52ZJ61eofcZ35giJ8bE9sFBiHH1SAYp40lHiN7DRM9c8h/s1920/villa%20jovis.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLTqs7YDRsEekBBfHydTc1gDlo6SKd9p5kvjvbHukxdar7nRIgQMl7QYvQBKlZloOQC5vUYa8jjLgVTAPwxjmIZY7WIr7oAUnvyk8Ykxz5L1qcqBRYrgksHRnP8RKE1PXeJ9ra0VnpdXN52ZJ61eofcZ35giJ8bE9sFBiHH1SAYp40lHiN7DRM9c8h/s320/villa%20jovis.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Villa Iovis, la villa de Tiberio en Capri. Tan hermética como su carácter</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Mientras estaban de cena, el senado se reunía
para aprobar su condena a petición del emperador. Se le declaró enemigo público
y cuando Galo volvió a su villa, quizá pensando que Tiberio era un tipo majete,
fue arrestado y puesto en confinamiento.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero su final no sería rápido,
como nos cuenta Dión Casio:<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Sin embargo, Tiberio, después de actuar de esta manera, no permitió
que su víctima muriera… En cambio, para hacer su suerte lo más cruel posible,
le pidió a Galo que tuviera buen ánimo e instruyó al Senado que debería ser
custodiado sin ataduras hasta que él mismo llegara a la ciudad; su objeto, como
dije, era hacer sufrir al prisionero el mayor tiempo posible tanto por la
pérdida de sus derechos cívicos como por el terror.”</i><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Y así sucedió. A Galo se le
condenó a la <i style="mso-bidi-font-style: normal;">damnatio memoriae</i>, a ser
borrado de todos los monumentos y archivos públicos, como si nunca hubiera
existido. Se le negaron las visitas. No tenía compañero ni sirviente con él, no
se le permitía hablar con nadie y no vio a nadie durante el resto de su vida,
excepto cuando se veía obligado a comer. Y la comida era de tal calidad y
cantidad que no le proporcionaba ninguna satisfacción o fuerza ni le permitía
morir. Así estaría durante 3 años, encerrado y solo, apenas alimentado, hasta
que en el año 33, murió de tristeza y abandono. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Tiberio, aunque lo había anunciado, nunca
volvió a Roma a juzgar su causa. Como ya dijimos, era de una refinada crueldad.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">También gustaba del humor negro.
Según Tácito:<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“El César, cuando se le preguntó si se permitía enterrarlo </i>(A Galo)<i style="mso-bidi-font-style: normal;">, no se sonrojó en conceder el permiso y en
deplorar los accidentes que se habían llevado al acusado antes de que pudiera
ser condenado en su propia presencia.”</i> <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;">
</span>En esas casualidades en que la Historia es maestra, es curioso que Asinio
Galo fuese arrestado y apartado del mundo en el año en que Jesús empezó su vida
pública, y que luego muriese, más casualidad, el mismo año en que la tradición
cristiana dice que murió Cristo, el mesías verdadero. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>A ver si va a ser que, Virgilio, como buen
poeta, tenía poderes de adivino. <o:p></o:p></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-85711180137554971232022-07-11T18:52:00.003+02:002024-02-14T21:46:11.461+01:00Damascio; el último filósofo (del Mundo Clásico)<p> </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAnX0ngV61VL-qftqcjeHeX5EqbX4RTte1e_aRAVzVfdR3ccItvzPupXAj-OtHRRRHRrhnV11Ykwg9RX74kYnT-hKptJsP4KFsfwr7clfhFNWnsjLa4kR-HglgGB_pWgL4760ikPbPxbRhEFIPq4CkOFe2MypnOc-iV0lrOASza3yRSbkRe8bm0LTt/s1600/Imagen2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="974" data-original-width="1600" height="390" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAnX0ngV61VL-qftqcjeHeX5EqbX4RTte1e_aRAVzVfdR3ccItvzPupXAj-OtHRRRHRrhnV11Ykwg9RX74kYnT-hKptJsP4KFsfwr7clfhFNWnsjLa4kR-HglgGB_pWgL4760ikPbPxbRhEFIPq4CkOFe2MypnOc-iV0lrOASza3yRSbkRe8bm0LTt/w640-h390/Imagen2.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La Escuela de Atenas según Rafael</td></tr></tbody></table><br />Seamos sinceros, Damascio, a quien dedicamos este artículo,
no fue un gran filosofo. Solo conocemos de él la biografía que escribió de su
maestro Isidoro y unos comentarios, más o menos interesantes, sobre algunas
obras de Platón y Aristóteles. Su propio discípulo Simplicio lo describe en su <i>Comentario
a la física </i>como “Un hombre apasionado por la investigación, que había
realizado numerosos trabajos filosóficos agotadores”. El que parte de su obra
haya llegado hasta nosotros se debe únicamente a la gran influencia del neoplatonismo
en la escolástica cristiana medieval.<span><a name='more'></a></span> <o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero ha pasado a la historia gracias a un triste y dudoso honor: ser el hombre que cerró por última vez la
puerta de la Academia de Atenas, la que fundara Platón, y con ello puso fin,
oficialmente, a lo que se ha llamado el Mundo Clásico.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">De Damascio no conocemos siquiera su verdadero nombre, solo
su apodo, “El de Damasco”, por lo cual sabemos que nació en esa ciudad, se cree
que entre los años 460 y 462, coincidiendo con la destrucción de la estatua de
Zeus que el escultor Fidias había construido para el templo de ese dios en
Olimpia, desde donde había sido trasladada a Constantinopla. Otro símbolo de
ese final de una era. Su familia debía tener bastantes recursos, ya que muy
joven marchó junto a su hermano menor a Alejandría, donde aún funcionaba un
remanente de la antigua Gran Biblioteca, para estudiar retórica con el maestro Teón.
La retórica era considerada una parte fundamental de la formación para ejercer
como abogado.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Durante su estancia, este reducto de la cultura clásica no
dejó en ningún momento de sufrir los ataques de los cada vez más poderosos
cristianos. El patriarca de Alejandría emprendió una dura campaña contra
profesores y alumnos paganos, y el propio hermano de Damascio, Julián, fue
detenido y flagelado ante la multitud, prueba que pasó, según Focio, sin emitir
una sola queja.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Esta experiencia, sin duda, lo marcó. Permaneció en
Alejandría durante 12 años, ahora ya como profesor él mismo de retórica,
mientras estudiaba filosofía con los hijos del neoplatónico Hermias. Posteriormente,
en el 482, se trasladó a Atenas, donde continuó su formación entre otros con
Isidoro de Alejandría, con el que le unió una estrecha amistad. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Por entonces la Escuela de Atenas no era ni una sombra de lo
que fue. Los filósofos formaban una pequeña comunidad, con frecuencia
emparentada entre sí, que, cada vez más presionada por las autoridades
religiosas, se reunía e impartía sus enseñanzas en casas particulares. A eso
habían quedado reducidos la gran Academia de Platón y el Liceo de Aristóteles. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Eran pocos, perseguidos y, para colmo y como suele suceder, no
demasiado bien avenidos. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En el 485 muere
Proclo, y le sucede como diádoco, jefe de la escuela, Marino de Neápolis, un
samaritano que abandonó sus creencias en favor de la filosofía. Damascio,
Isidoro y sus partidarios no lo tenían en muy alta estima, en parte porque
trataba de contemporizar con las autoridades y le preocupaba mucho la marcha de los
cada vez más escasos benefactores de la Escuela. Finalmente, harto de
las amenazas cristianas y de la oposición interna, Marino huyó de Atenas. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEih99qU-T894H0sUeevJmj2h9EPnRenB0ObosCOgc-ltVsejEnmleDjLvKqd9H_evWXTrFLI2ZuTxkZuIydAZnfg54t_yO3f6t-RLpKgD-EHR55e8VCAgzIC2mkzCLG46YGFkfqKXvjl5F1yVNCsDgjN4uv2EBeOF_RlD9bfx3Dz47C-PYJ1L51RrMb/s2079/Mosaic_of_Justinianus_I_-_Basilica_San_Vitale_(Ravenna).jpg" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="2079" data-original-width="1500" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEih99qU-T894H0sUeevJmj2h9EPnRenB0ObosCOgc-ltVsejEnmleDjLvKqd9H_evWXTrFLI2ZuTxkZuIydAZnfg54t_yO3f6t-RLpKgD-EHR55e8VCAgzIC2mkzCLG46YGFkfqKXvjl5F1yVNCsDgjN4uv2EBeOF_RlD9bfx3Dz47C-PYJ1L51RrMb/w462-h640/Mosaic_of_Justinianus_I_-_Basilica_San_Vitale_(Ravenna).jpg" width="462" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Mosaico de Justiniano</td></tr></tbody></table><br /><div style="text-align: justify;">En el 515 el propio Damascio fue elegido diádoco, y se
esforzó en revitalizar aquella agonizante comunidad mientras hacía frente a la
presión de los cristianos. Pero su tiempo ya había pasado. En el 529 el
emperador Justiniano, buscando la unidad religiosa del imperio, emitió un
edicto contra los no cristianos: judíos, herejes (corrientes no oficiales del
propio cristianismo) y paganos. Prohibía que formaran parte del ejército, de la
administración y que ejercieran la enseñanza, y les exigía “instruirse en la
verdadera fe”. Esto suponía el final para la escuela de Atenas.</div><o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Damascio se vio obligado a clausurar aquella institución
que, durante más de ochocientos años, había sido un referente del pensamiento,
del debate y, en resumen, de la razón. Pero se negó a aceptar la conversión forzosa,
y con su discípulo Simplicio y otros cinco compañeros marchó a la corte de del
rey sasánida Cosroes I, que les ofreció asilo y protección, con la intención de
reanudar allí sus actividades. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">El escritor bizantino Agatías nos aporta el único testimonio
conservado sobre el exilio de los siete filósofos: <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i>Poco tiempo antes (con anterioridad a la llegada del
embajador Areobindo y del filósofo Urania junto a Cosroes), Damascio el sirio,
Simplicio el cilicio, Eulamio (o Eulalio) el frigio, Prisciano el lidio,
Hermias y Diogenes, ambos de Fenicia, Isidoro de Gaza, todos ellos la flor más
noble, hablando en términos poéticos, de los filósofos de nuestro tiempo, al no
estar satisfechos de la opinión predominante entre los romanos en lo
concerniente a lo divino, pensaron que el régimen político de los persas era
mucho mejor.<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Llama la atención que fueran justo 7 los exiliados, igual que
los 7 sabios, las 7 maravillas y tantas otras listas, ya que 7 era el número de
la suerte en Grecia y Roma. Eso hace pensar en una adaptación “poética”, en
palabras del propio Agatías, de lo que sucedió.</p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBanCfuzdMfbSAg6c02Q2Rjg3QrWDtqQ8IVvWtNtQlepCnZ-qvIi2z5I_p69cfdWYyF-P1Q1am5fnVnwJRumN3v8ggxBrqwFOOXKrOQtH_YR01Ok0Ef7cnjlcA36jk0x1Ron0N_Vpl5Pm7jXOQ0WLwM9Ecbt-Scsb4dLaxHxcvfQUqaaa0FS5Qy_5u/s396/Khosrow_I_Anushirvan_(cropped),_Gundeshapur_mint.jpg" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="386" data-original-width="396" height="624" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBanCfuzdMfbSAg6c02Q2Rjg3QrWDtqQ8IVvWtNtQlepCnZ-qvIi2z5I_p69cfdWYyF-P1Q1am5fnVnwJRumN3v8ggxBrqwFOOXKrOQtH_YR01Ok0Ef7cnjlcA36jk0x1Ron0N_Vpl5Pm7jXOQ0WLwM9Ecbt-Scsb4dLaxHxcvfQUqaaa0FS5Qy_5u/w640-h624/Khosrow_I_Anushirvan_(cropped),_Gundeshapur_mint.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Moneda de Cosroes I.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero, pese a la fama de Cosroes de soberano cultivado y
justo, que se esforzaba en transmitir su propaganda, los filósofos exiliados no
se adaptaron a las costumbres de los persas o, en mi opinión y tras leer el
relato grecocentrita de Agatías, a ser poco más que una curiosidad en la corte sasánida.
En el 532 Cosroes firmó un tratado de paz con Justiniano que permitía a los
exiliados regresar, con la promesa de que no serían perseguidos por sus ideas.
No se sabe con certeza qué fue de ellos tras su vuelta.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">El neoplatonismo cristianizado fue la base de la teología
medieval. Los propios persas, y luego los árabes, recogieron buena parte del
legado del pensamiento del Mundo Clásico que, poco a poco, en especial gracias
a instituciones como la Escuela de Traductores de Toledo, regresaría a Europa.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal">Fuentes:<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-autospace: none;"><i><span style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-bidi-theme-font: minor-latin;">Damascio y el cierre de la escuela
neoplatónica de Atenas<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; mso-layout-grid-align: none; text-autospace: none;"><span style="font-size: 12pt; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-bidi-theme-font: minor-latin;">Jose M. Zamora<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-bidi-theme-font: minor-latin;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><i><span style="font-size: 12pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-bidi-theme-font: minor-latin;">Damascio, «Vida
del filósofo Isidoro»: estudio preliminar, traducción y notas.<o:p></o:p></span></i></p>
<p class="MsoNormal">Álvaro Fernández Fernández.<o:p></o:p></p>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-2879900939558421522022-06-06T18:49:00.003+02:002022-06-16T11:47:35.574+02:00Fila, una mujer entre lobos<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiarRl_TWYMsisyIwe5dGgJ6aQTnhqq9jMiHX3tgEIK4ErKybdAmvGGfPM4w2xWwlY2Ydog6TapZzBHk1j715YxPHvza3NDoHaojmnsQAiw0BxYTq7yTzAKSmOcm8-g5U1jzlKNLK8Kc8-_cfkdT0OvbmvoaUhwejSJfPkRRT9IWhINMKIMTMpegnT3/s700/portada.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="700" data-original-width="700" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiarRl_TWYMsisyIwe5dGgJ6aQTnhqq9jMiHX3tgEIK4ErKybdAmvGGfPM4w2xWwlY2Ydog6TapZzBHk1j715YxPHvza3NDoHaojmnsQAiw0BxYTq7yTzAKSmOcm8-g5U1jzlKNLK8Kc8-_cfkdT0OvbmvoaUhwejSJfPkRRT9IWhINMKIMTMpegnT3/s320/portada.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Entre los sucesores de Alejandro
Magno, que se repartieron su imperio a dentelladas lobunas, destacan bravucones
crueles, nobles orgullosos y astutos oficiales; todos dispuestos a matar por
ser el sucesor del Magno, aunque fuese a pequeña escala. Pero, entre tanto lobo, se
movió una mujer entre las sombras que alcanzó el respeto de todos por su buen
juicio y fue mencionada por varios historiadores, un detalle con el sexo femenino nada
usual entre los griegos. Además, fue la primera mujer griega nombrada reina (Basilisa)
de forma oficial. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Sin embargo, acabó eligiendo una mala pareja con la que
bailar en unos tiempos tan movidos. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Se llamaba Fila o File, como se
quiera traducir del griego, que es lengua tan ambigua en significados como en
pronunciación.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> <span></span></o:p></p><a name='more'></a><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">No sabemos cuándo nació nuestra
Fila, pero fue pocos años después que el rey Alejandro, al que con toda
seguridad debió conocer y tratar en su juventud en la corte macedonia, antes de
que creciera y se marchara a conquistar el mundo con sus colegas.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Su padre era Antípatro, general y amigo del
rey Filipo, el padre de Alejandro, y de la total confianza del joven rey tan
pronto llegó al trono, ya que no dudó en dejar en sus manos el gobierno de
Macedonia y Grecia mientras se iba de aventura a oriente en 334 a.C., para no
volver más.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhK2friQoanr9XzHHEL2VbYyghpHf0SSEd18i_WHeEpWe2Th_R1FwRVJYkidCz08Rl3hwhWei2EmuYnfC8c7ZOvqlnfYkS6_1GNTmsOLXW8Zt0T3bdK6U4NuBbkWkqX36uVv09wLMk0k0vqWmRsH2UQKRfZpUPcQ4PYmdgEqrmMcjhY8Don7rPw7r_7/s337/antipatro.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="337" data-original-width="220" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhK2friQoanr9XzHHEL2VbYyghpHf0SSEd18i_WHeEpWe2Th_R1FwRVJYkidCz08Rl3hwhWei2EmuYnfC8c7ZOvqlnfYkS6_1GNTmsOLXW8Zt0T3bdK6U4NuBbkWkqX36uVv09wLMk0k0vqWmRsH2UQKRfZpUPcQ4PYmdgEqrmMcjhY8Don7rPw7r_7/w261-h400/antipatro.jpg" width="261" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Antípatro, el padre</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> La de Antípatro no fue una regencia tranquila,
porque aparte de controlar a los bulliciosos griegos, tuvo que soportar a la
madre de Alejandro, la bella y ambiciosa Olimpia, que intrigó a sus espaldas
todo el tiempo, con el envío continuo de cartas a su hijo denunciando el
desprecio y maltrato que le daba Antípatro. No sabemos qué había de verdad en
ello, pero lo cierto es que Olimpia fue desterrada a Epiro en el 331 a.C.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Mientras, Fila fue casada por su
padre con el general Balacro, gobernador de la recién
conquistada Capadocia. En principio, un buen partido y parece que un matrimonio
feliz. Así que durante unos años no pasaría nada importante en la vida de Fila,
mientras Alejandro conquistaba medio mundo conocido y parte del desconocido.
Sabemos por varios autores que ejerció de asesora de su padre, el cual le
consultaba asuntos políticos, y ganó fama entre los griegos de buen juicio y
notable capacidad política. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Su marido Balacro, junto a
Antígono “el tuerto”, gobernador de Frigia, extendería el dominio macedonio por
Anatolia, pero en algún año entre el 328 y el 323 a.c. moriría en batalla
contra los pisidios. Fila se convirtió en una viuda joven.</p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Por otra parte, la labor de zapa de Olimpia
desde su exilio, con continuas críticas a Antípatro, alimentó dudas en su hijo
sobre las intenciones del antiguo amigo de su padre. Ya había mandado matar a
otro veterano general, Parmenión, y ahora parecía albergar sospechas del único
colega de su padre que quedaba vivo. Así que ordenó a Antípatro venir a
Babilonia en 324 a.C. para explicarse de las acusaciones. Pero Antípatro, que era
perro viejo, se excusó y envió a su hijo Casandro a defender su causa ante las
intrigas de Olimpia. No parece que Casandro tuviera mucho poder de convicción o
Alejandro se enfadó por la desobediencia, porque un poco antes de morir en
Babilonia, el Magno envió a su fiel Crátero a Macedonia con la misión secreta de destituir
a Antípatro.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero Alejandro muere… y llega el
caos.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdp6n8MoRXfxRS-W8kN17TqmZRLqR7wqSPDKLClybCeV_uphzodW6Y6M96d8PQGKSX4fKkjbDDf3VDscPdS-yRp4F7BKMzKT49VHdTGEdLutTppsntYCa5QkI8Wg41Wk7dsO7aGLBz9bfU_PxZDQXUVwu9Sztwgz761oaJv6ZRUyAMnr-C01-d8Y09/s450/muertealejandrokarlvonpiloty.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="269" data-original-width="450" height="239" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdp6n8MoRXfxRS-W8kN17TqmZRLqR7wqSPDKLClybCeV_uphzodW6Y6M96d8PQGKSX4fKkjbDDf3VDscPdS-yRp4F7BKMzKT49VHdTGEdLutTppsntYCa5QkI8Wg41Wk7dsO7aGLBz9bfU_PxZDQXUVwu9Sztwgz761oaJv6ZRUyAMnr-C01-d8Y09/w400-h239/muertealejandrokarlvonpiloty.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Muerte de Alejandro, de Karl von Piloty... mucha lágrima falsa<br /><br /></td></tr></tbody></table><br /><div style="text-align: justify;">Sus generales, los diádocos (los sucesores),
empiezan a pelear de inmediato por su imperio, como gallos en corral, y surgen
alianzas de ocasión y traiciones a mansalva. Todo vale, puñaladas o abrazos,
depende del momento, porque lo único que importa es sobrevivir. En medio de
este lío, Crátero y Antípatro se alían y nada mejor que una boda para sellar la
nueva amistad. </div><div><div style="text-align: justify;"> Fila se convierte en la mujer de Crátero en 322 a.C. Parece, en principio,
un buen plan. Antípatro gobierna Grecia y Macedonia, Crátero tiene un ejército
y es muy querido por los macedonios y respetado por el resto de gallitos.</div><o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Primero ayuda a su suegro a someter a los
bulliciosos griegos, que se habían alzado en rebelión tan pronto murió el Magno,
y luego pasó a Anatolia, a pelear contra sus antiguos colegas en la guerra por
el imperio. Pero muere en batalla contra uno de ellos, Eumenes, en 321 a.C.
Solo llevaba un año casado con Fila. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiv-FWV2akrGmHjFjbboTPiPMNwQMWa4rzmFOOqy50HB_GRj0ePOBCds2zViGytIt7e0GYnRCgsc_42IX9NkUeYV3mqtesxi40-9kHz1sunf34terylMqNqtCxwLw2Jn2CAIEYUDkcfTKZpR6f_p0iz_25iyWRT2_JW3H9SBzZDE62lmDMzGrpwhF02/s1752/Los-reinos-de-los-diadocos-303-aC-11735.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="804" data-original-width="1752" height="184" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiv-FWV2akrGmHjFjbboTPiPMNwQMWa4rzmFOOqy50HB_GRj0ePOBCds2zViGytIt7e0GYnRCgsc_42IX9NkUeYV3mqtesxi40-9kHz1sunf34terylMqNqtCxwLw2Jn2CAIEYUDkcfTKZpR6f_p0iz_25iyWRT2_JW3H9SBzZDE62lmDMzGrpwhF02/w400-h184/Los-reinos-de-los-diadocos-303-aC-11735.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El reparto del pastel tras el funeral de Alejandro</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Viuda por segunda vez, Fila y su
padre Antípatro, se encuentran con el problema de buscar nuevo aliado en
tiempos tan turbulentos. Lo encuentran en Antígono “el tuerto”, el gobernador
de Frigia en tiempos de su primer marido, pero que ahora es un poderoso señor
de la guerra que domina toda Anatolia y parte del Oriente Próximo. Tiene un
hijo, Demetrio, con mucho potencial, que según Plutarco:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“reunía a un tiempo lo festivo y lo grave, lo fiero y lo bello, y con
lo juvenil y osado se veía mezclada una inimitable apacibilidad y majestad
heroica y regia."</i><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Vamos, que Demetrio era todo un
gavilán que levantaba pasiones. Para Antígono, la alianza con Antípatro, dueño de
Macedonia, le parecía de maravilla y no se opuso a casar a su hijo con Fila. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pese a que ella era mayor, quizá en diez años,
Demetrio siempre la trataría con sumo respeto, tendría muy en cuenta sus
consejos y siempre le manifestaría un gran afecto… a pesar de ser un mujeriego
impenitente y tener otros dos matrimonios (lo del poliamor es muy antiguo).<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQMBZyxGZWXVfLY2cUZE748EnKNcVjTmm_ZVb_WAklAUqdaDVuiPPoR-5Da3tSUsG5sd3aAwav0gNUUVcLy9w7lf8jNvdUtqtOgnyaX4U1LdVBZge1W1-gDGDp6XEtFDkdBIfC_EVZZL1YwdsopzlHDO5iyxpZ9T0arR7eEy71AwwuCOG87muMn7ZZ/s605/demetriomuseodelprado.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="605" data-original-width="532" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQMBZyxGZWXVfLY2cUZE748EnKNcVjTmm_ZVb_WAklAUqdaDVuiPPoR-5Da3tSUsG5sd3aAwav0gNUUVcLy9w7lf8jNvdUtqtOgnyaX4U1LdVBZge1W1-gDGDp6XEtFDkdBIfC_EVZZL1YwdsopzlHDO5iyxpZ9T0arR7eEy71AwwuCOG87muMn7ZZ/s320/demetriomuseodelprado.jpg" width="281" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Cabeza en bronce del guapo Demetrio, en el Museo del Prado</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En principio, a Fila le vino muy
bien el matrimonio con el general más solicitado del momento. Su padre
Antípatro murió en 319 a.C., pero su hermano Casandro no heredó el trono, ya
que su padre no tenía confianza en sus capacidades. Así que necesitaba un
marido poderoso y Demetrio lo era en presencia y espíritu. Pero el destino,
siempre puñetero, mostraría que era más imagen que realidad.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Su hermano Casandro demostró en
los años siguientes que quizá su padre Antípatro estaba en lo cierto en que no
tenía muchas capacidades para ejercer de rey, pero desde luego estaba muy
capacitado para conseguir ser rey. De una manera psicopática, se cargaría a
todo opositor al trono macedonio, incluida la familia de Alejandro Magno, en la
que no dejó una persona viva: su madre Olimpia, su viuda Roxana, su hijo legal
Alejandro y su hijo bastardo Heracles fueron enviados al otro mundo. Luego se
proclamó rey, por fin, y fundó una nueva capital de Macedonia a la que le puso
el modesto nombre de Casandrea.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbaWrJisQHuooqZNq1H_hfZkNpLrQjZXcDz9QwNc-ECAd07KDp1l0eVmMNjulJUbry3RmwwR8EOAUAiPuW-FPTNr7d1wk8MzEYFgtZJ0d83SSwGClEmbXvpNzQc5Y0mnVBCtyNoaicvaqtQg8QXLmFAcHsGbcJwIj0-33vtLOGHKuBsrTjptZAARFj/s259/Casandro.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="259" data-original-width="194" height="259" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbaWrJisQHuooqZNq1H_hfZkNpLrQjZXcDz9QwNc-ECAd07KDp1l0eVmMNjulJUbry3RmwwR8EOAUAiPuW-FPTNr7d1wk8MzEYFgtZJ0d83SSwGClEmbXvpNzQc5Y0mnVBCtyNoaicvaqtQg8QXLmFAcHsGbcJwIj0-33vtLOGHKuBsrTjptZAARFj/s1600/Casandro.jpg" width="194" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Casandro... con su habitual mirada de pirado</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Pero Demetrio, para desgracia de Fila, no tuvo
tanta crueldad o le faltó la suerte de su cuñado Casandro. Durante años peleó,
junto a su padre Antígono, contra otros diádocos por ampliar y conservar su
imperio. Fila siempre estuvo a su lado o en la distancia, dando apoyo y consejo,
como cuando Demetrio asedió Rodas en 305 a.C., y le mandó “costosos presentes”
(léase soporte económico, aparte de regalos), pero su marido se empeñó en
construir la torre de asedio más grande de la historia, una maravilla… que acabó atascada en el
barro, por lo que tuvo que abandonarla y pirarse. Aunque luego sus restos los
utilizarían los rodios para construir el famoso Coloso de Rodas. Así que
Demetrio debe ser el diádoco que más aporte hizo a la historia del arte, aunque
no como él quisiera.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWmN2C9hIh1l6TFzpOYCrWra3mAykm5Cca6gXuDxmDT8mpw2m7YLQrh2yPvAj2ufwB4LaOcEv4gfZOVAtBp0_gZ9haniUZaEkyP1FeI9cZYQA0YLjc7cYyzNnltR7G8NTDl3l3Ecn8g8Ib4OAJdpKDvtZRVSazzZtX3zK9d2d_CYigLM0eSDY_yFIc/s1959/asedio-de-rodas-305-4-ac-torre-heliopolis-dirigiendose-a-la-muralla.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1396" data-original-width="1959" height="285" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWmN2C9hIh1l6TFzpOYCrWra3mAykm5Cca6gXuDxmDT8mpw2m7YLQrh2yPvAj2ufwB4LaOcEv4gfZOVAtBp0_gZ9haniUZaEkyP1FeI9cZYQA0YLjc7cYyzNnltR7G8NTDl3l3Ecn8g8Ib4OAJdpKDvtZRVSazzZtX3zK9d2d_CYigLM0eSDY_yFIc/w400-h285/asedio-de-rodas-305-4-ac-torre-heliopolis-dirigiendose-a-la-muralla.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La torre de Demetrio en Rodas, antes de atascarse el embrague</td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Fue por esta época del asedio de
Rodas que Demetrio y su padre se proclamaron reyes de Asia, sin complejos, lo
que provocó que también el resto de diádocos se proclamasen reyes en cadena,
que no iban a ser menos. El imperio de Alejandro dejaba de ser uno para dividirse en muchos reinos y mal avenidos durante los próximos dos siglos. Pero Demetrio fue
a más y nombró a Fila reina (Basilisa) de forma oficial. La primera entre las
griegas con este título. Una muestra del respeto que tenía por ella.</p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>También por esta época parece que se dedicó un
templo a nuestra Fila en el Ática, la región de Atenas, bajo la advocación de
“Fila Afrodita”, por parte de uno de los cortesanos más pelotas de Demetrio. Es la primera
manifestación de culto a una reina en Grecia y servirá de precedente a
posteriores templos dedicados por aduladores de reinas. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Al final, tras casi dos décadas
de guerras continuas contra el resto del mundo, todos los diádocos que quedaban
vivos (incluido su cuñado Casandro) se aliaron contra Demetrio y su padre
Antígono “el tuerto”, que acabó cerrando su único ojo en la batalla de Ipsos
(301 a.c.), donde Demetrio perdió el reino, su ejército y a su padre, pero no
perdió a Fila.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPqkaJwmLl12oraVAyUS0hYdnxG_Cmob9XLaSw5q6MIP6dCTyTFEf-yVoUuAbP2nTva3i5aRkbOvRDhLacsDSC1mRjbzmzk7Bc6v4tWkvKS7TOiY24CrNoVVvvClF7Ra-yIQcvTPXDgBzfS1FMuQf7zT7vvhYsY_QWj6eGRWCNaruFBbvD-FPntmny/s768/Batalla%20de%20Ipso.jpeg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="605" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPqkaJwmLl12oraVAyUS0hYdnxG_Cmob9XLaSw5q6MIP6dCTyTFEf-yVoUuAbP2nTva3i5aRkbOvRDhLacsDSC1mRjbzmzk7Bc6v4tWkvKS7TOiY24CrNoVVvvClF7Ra-yIQcvTPXDgBzfS1FMuQf7zT7vvhYsY_QWj6eGRWCNaruFBbvD-FPntmny/s320/Batalla%20de%20Ipso.jpeg" width="252" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Batalla de Ipsos... mal día para estar en primera fila</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Nuestra heroína se iría a Macedonia a buscar
la reconciliación entre su hermano Casandro y Demetrio. Todo un riesgo, porque
su hermano no dejaba de ser un cruel psicópata que se cargaba a todo el que le
hiciera sombra, pero con buenas palabras e inteligencia convenció a su hermano de
que usar la flota de Demetrio, lo único que le quedaba, contra los otros
diádocos, le venía bien para molestar sus rutas navales y dominar el mar en
nombre de Macedonia.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Demetrio cumplió bien su papel de pirata de
los mares, saqueando y hundiendo con alegría todo lo que flotaba por el
Mediterráneo oriental, y hasta llegó a conquistar en una operación relámpago la
región de Cilicia. Pero en 295 a.C., cuando nuestra Fila se encontraba en la
costa de enfrente, en Salamis de Chipre, apareció la flota de Ptolomeo de
Egipto, viejo rival de Demetrio, que la hizo prisionera. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWpObte453W3qDGPqY3KNCmwmSvIGZ31hhqL8sWie2294p4Pu88kcMQzQwknWT5VXBI4bge0m9rXKIBnMB_FeBtjPmUshCHlcI47XyzyPwvljM1CbVDR4aCBYQK0hyzxrLYayDCaM_Ie7qtUtc3EvGzjwLsZ4RI6Ef3gJN-cHJSaBXNDO-GH488Q7o/s372/tolomeo_i_soter.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="372" data-original-width="340" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWpObte453W3qDGPqY3KNCmwmSvIGZ31hhqL8sWie2294p4Pu88kcMQzQwknWT5VXBI4bge0m9rXKIBnMB_FeBtjPmUshCHlcI47XyzyPwvljM1CbVDR4aCBYQK0hyzxrLYayDCaM_Ie7qtUtc3EvGzjwLsZ4RI6Ef3gJN-cHJSaBXNDO-GH488Q7o/s320/tolomeo_i_soter.jpg" width="292" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Ptolomeo I, con su inseparable diadema </td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Sin embargo, debido a su buena fama, fue
tratada de la manera más honorable por el rey Ptolomeo, y enviada, junto con
sus niños, a su hermano Casandro en Macedonia.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">No mucho después de su llegada, en
294 a.C., muere Casandro, y entre sus hijos surge una guerra por el trono. En
esta ocasión, Fila parece que tuvo mucho que ver en la llegada de su marido a
Macedonia, en principio como apoyo de uno de sus sobrinos, y luego, tras las
conspiraciones típicas de estos asuntos, conseguir para Demetrio el trono y la
fidelidad de los macedonios, como cuenta Plutarco:<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Luego que se presentó, no necesitó de largos discursos… le proclamaron
rey y, tomándole por caudillo, le condujeron a Macedonia. A los naturales que
habían quedado en el país no les era tampoco sensible esta mudanza, porque
tenían en memoria y detestaban lo mal que Casandro se había portado con
Alejandro después de su muerte, y si aún quedaba algún recuerdo del antiguo
Antípatro, lo disfrutaba Demetrio por estar casado con Fila.”<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Al momento, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Demetrio ejecutó al sobrino y toda la familia
de su cuñado para no dejar rivales. En fin, son cosas de familia.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Fila no pareció sentir mucho la muerte de sus parientes.
Había conseguido el trono de Macedonia para su marido y era reina de verdad, no
solo de título. Se sentía segura, porque había casado a su hija Estratónice con
el rey Seleuco I, señor de oriente próximo, y su hijo Antígono sería el próximo
monarca del reino de Alejandro Magno, más no podía pedir... bueno, sí, que su marido
no fuera tan calandracas, porque Demetrio se esforzó en echarlo todo a perder
en los siguientes años.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Demetrio era un buen capitán, un simpático y notable
pirata, pero un pésimo rey. Si no batallaba y conquistaba no se sentía realizado.
Invadió a sus vecinos de Epiro y Tracia con guerras continuas, la mayoría
fracasadas, y, finalmente, cruzó a Asia en 287 a.C., sin hacer caso a los
consejos de Fila, y se puso a batallar a diestro y siniestro. Fueron sus
propios hombres los que, hartos ya de tanto pelear sin sentido, hambrientos y
enfermos, lo abandonaron a su suerte. El rey conquistador se quedó sin
soldados.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqtaggDhe7tVF_nbPISu5ItIwWmKsPrKdgJKWtBRTN76VBR1Vkk-5hnxez8MRzwo5yGvozrq7PGW8EUriJfUHwbkK_wySTk8Ib62UYlph5mcHvkeqcIiA4bvEyZcwOl5rshKZKQ0rDcraJIsu8wJXiP_xiiS3nZXE8zH5tlWvPEtPToREXNNMiKLp5/s660/guerra-de-los-Diadocos.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="335" data-original-width="660" height="203" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqtaggDhe7tVF_nbPISu5ItIwWmKsPrKdgJKWtBRTN76VBR1Vkk-5hnxez8MRzwo5yGvozrq7PGW8EUriJfUHwbkK_wySTk8Ib62UYlph5mcHvkeqcIiA4bvEyZcwOl5rshKZKQ0rDcraJIsu8wJXiP_xiiS3nZXE8zH5tlWvPEtPToREXNNMiKLp5/w400-h203/guerra-de-los-Diadocos.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Soldados de Demetrio en jornada laboral... se comprende que se hartaran </td></tr></tbody></table><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En Macedonia surgió entonces una
revolución contra su belicoso y abandonado rey. Fila, viendo el peligro, se
refugió en Casandrea, la ciudad fundada por su hermano. Hasta allí se dirigió
Demetrio. Plutarco nos cuenta el desenlace: </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Precipitado de esta manera Demetrio de su alto estado, huyó a
Casandrea, donde Fila, su mujer, llena de pesadumbre, no tuvo valor para ver a
Demetrio, el más miserable de los reyes, otra vez reducido a la clase de
particular y fugitivo; así, perdiendo toda esperanza y maldiciendo su fortuna,
más firme en los males que en los bienes, tomó un veneno y murió.”<o:p></o:p></i></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Fila no había podido soportar la
nueva bofetada del destino y, alrededor de los 70 años, ya no tenía fuerzas
para conseguir un reino nuevo. Una nueva generación de lobos se estaba alzando y carecía de influencia sobre ellos. Así que decidió irse de este mundo sin despedirse del mayor fracaso de
su vida: su marido. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Demetrio no volvió a reinar en
ningún lado. Al final, se entregó a su yerno, Seleuco I, y fue confinado en
Apamea de Siria, donde se dio a la bebida, quizá abrumado de remordimientos o
harto de todo, mientras contaba sus batallitas por las tabernas a quien le
pagara una copa. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Murió, solo y viejo, en 283 a.C. Cuatro
años después que Fila.<o:p></o:p></p><br /><p></p></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-81800320423154403842022-05-03T19:22:00.005+02:002024-02-14T21:46:49.700+01:00Quinto Labieno; el Traidor<p><span style="text-align: justify;">Aunque la publicidad de las obras de Shakespeare ha hecho que en nuestro acervo cultural actual Quintiliano aparezca como el traidor número uno a Roma, en la mente de los romanos, o al menos de los romanos de la época imperial, no era así. Ese puesto lo ocupaba alguien que actuó sin dudas ni complejos, y que jamás se arrepintió del camino que había tomado: </span><i style="text-align: justify;">Quintus Labienus</i><span style="text-align: justify;">. Para el romano medio simplemente: </span><i style="text-align: justify;">El Traidor</i><span style="text-align: justify;">.</span></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9sbN1EAM54XXMinSc4uFgEj8HLw7-OAmVnyw_pKaSCcX1BnArjQ42feOfCgqriqeUk6_QmxfA07RMlP_ee82CKp6Su5UCXe1F4rKnbKnwZbs5YcP2ix86sAhuKzlMVn9ttIvMAnCR8iuLqfjaSoKizVUtHuHvCTFPzAsL5pDnfZwr24kvenSIj96h/s640/Labienus%20Aureus.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="315" data-original-width="640" height="317" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9sbN1EAM54XXMinSc4uFgEj8HLw7-OAmVnyw_pKaSCcX1BnArjQ42feOfCgqriqeUk6_QmxfA07RMlP_ee82CKp6Su5UCXe1F4rKnbKnwZbs5YcP2ix86sAhuKzlMVn9ttIvMAnCR8iuLqfjaSoKizVUtHuHvCTFPzAsL5pDnfZwr24kvenSIj96h/w640-h317/Labienus%20Aureus.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #fcff01;">Aureo emitido por Quinto Labieno con su retrato en un lado y un caballo parto sin jinete en el otro</span></td></tr></tbody></table><span style="text-align: justify;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span></span></p><a name='more'></a>No conocemos la fecha de nacimiento de Quinto Labieno, por ello no podemos saber con certeza qué papel desempeñó su padre, Tito Labieno, en su vida, pero sin duda fue importante, así que merece la pena que le dediquemos unas líneas.<o:p></o:p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Tito Labieno nació la región del Piceno, a principios del siglo I a C, miembro de una familia del <i>ordo equester</i> (en una equivalencia actual muy aproximada, de clase media), <i>cliente</i> (obligada por acuerdos de lealtad) con la familia de Pompeyo. Comenzó a destacar durante su brillante desempeño como Tribuno de la Plebe, en el 63 a C., al servicio de su <i>patronus</i> y de Cayo Julio Cesar, por entonces aliado de Pompeyo. César, reconociendo su indudable talento, lo llevó con él como legado a su campaña en las Galias, promoviéndolo hasta el puesto de “jefe de caballería”, su segundo en el mando, y confiándole la dirección de las operaciones cuando él estaba ausente.</p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2YzBfcrmRZLk4Ea_tqhu_jm-zPC1ahcpoy7xtMtN0WXmvdmYOdGr31zinHrSeKs3RuYkQS-yeJJSYhwOBa_Aa4vPRNbTFCpQQef7HaFy5_gu3b7GWuMQ7XseRKAWMrMu2JE-tUZT6T_sfdn58saa0-YgXAcP_MmPCfvi7Xwiy5ay1LKS2qB9I8McK/s320/tito_labieno.jpg" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="320" data-original-width="234" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2YzBfcrmRZLk4Ea_tqhu_jm-zPC1ahcpoy7xtMtN0WXmvdmYOdGr31zinHrSeKs3RuYkQS-yeJJSYhwOBa_Aa4vPRNbTFCpQQef7HaFy5_gu3b7GWuMQ7XseRKAWMrMu2JE-tUZT6T_sfdn58saa0-YgXAcP_MmPCfvi7Xwiy5ay1LKS2qB9I8McK/w469-h640/tito_labieno.jpg" width="469" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #fcff01;">Busto de Tito labieno, se puede apreciar<br />el gran parecido físico con su hijo.<br /><br /></span></td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Al estallar las hostilidades entre sus dos patrones, abandonó, previo aviso y con la conformidad de este, el bando de César y marchó junto a Pompeyo. Esto hizo caer sobre él las primeras acusaciones de traición que mancharían para siempre el apellido de la familia. Pero para entender esta decisión, y quizás también la que tomaría su hijo, hay que recordar que los Labieno eran, antes que nada, “clientes” de la <i>gens</i> de Pompeyo, de la mano del cual empezaron su carrera, así que, quizás, lo que se interpreta como una traición sea justo lo contrario; una muestra de lealtad.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Los orgullosos <i>optimates </i>a los que se había unido, lejos de reconocerle sus méritos como había hecho César, lo despreciaron por su bajo origen, ignorando sus consejos y negándole cualquier mando. Tras la derrota de Farsalia se retiró a África, donde continuó la lucha. Allí, por primera vez con tropas a sus órdenes, estuvo a punto de derrotar y acabar con César tras su chapucero desembarco en África. La sorpresiva intervención del mercenario <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2018/02/publio-sitio-nucerino-el-hombre-que.html">Publio Sitio Nucerino</a> lo evitó en el último momento, y tras la derrota de Tapso fue el único líder <i>optimate</i> que logró escapar y llegar a Hispania, donde se unió a los hijos de Pompeyo. En Munda luchó a su lado y allí encontró la muerte.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">No sabemos si Quinto tenía edad para haber acompañado a su padre en alguna de aquellas campañas, pero sí que heredó su causa.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Tras el asesinato de César se une a los cesaricidas y es aquí cuando nos encontramos con las primeras referencias históricas sobre él. Según Dión Casio, lo enviaron como embajador a la corte del rey parto Orodes II, en busca de ayuda económica y militar para su causa. Orodes había demostrado simpatía por el bando pompeyano primero y por los cesaricidas después, principalmente porque César siempre había manifestado su intención de atacar Partia para vengar la derrota romana en Carras, y de hecho estaba preparando un ejército con el que invadir ese país cuando fue asesinado.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Festo, por el contrario, afirma que tras la derrota de Casio y Bruto en Filipos, huyó a Partia en busca de refugio.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Como sea, el hecho es que logró acceder a la corte y se ganó la confianza de su rey. Desde allí observó los acontecimientos, a la espera de una oportunidad que no tardó en presentarse.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhiZqyZKbKOByZiQKqJAQgkOtwagjzRm6GcIdZkbGhjR_RzhM8ncJuLaxlggLrSw3w96lE71lyvMeB-1Nx9pt8KNwbHDMecXhT3iL_5AfTKuoCp_CtzgKaNjC1JcpcjAoGhDlz39pCodYEb23qdpor-pd15GKQDyB6cmAD91zVnZMnlA-XWu-hSXRqG/s800/OrodesII.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="800" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhiZqyZKbKOByZiQKqJAQgkOtwagjzRm6GcIdZkbGhjR_RzhM8ncJuLaxlggLrSw3w96lE71lyvMeB-1Nx9pt8KNwbHDMecXhT3iL_5AfTKuoCp_CtzgKaNjC1JcpcjAoGhDlz39pCodYEb23qdpor-pd15GKQDyB6cmAD91zVnZMnlA-XWu-hSXRqG/w640-h640/OrodesII.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #fcff01;">Orodes II<br /><br /></span></td></tr></tbody></table><div style="text-align: justify;">Marco Antonio, dueño de las provincias romanas de Asia tras los acuerdos que dieron lugar al llamado Segundo Triunvirato, resultó ser un pésimo gobernante, que expolió sus dominios y malpagó a sus soldados mientras se dedicaba a una vida de lujo en Egipto junto a Cleopatra. Quinto persuadió a Orodes para que invadiera Siria, asegurándole que las ciudades lo recibirían como un libertador y que las tropas romanas de guarnición, muchas procedentes del ejército reunido por los cesaricidas y hartas de no cobrar, abandonarían a Marco Antonio y se unirían a Labieno por la fama y el buen recuerdo que había dejado su padre. Orodes le puso al mando de una gran fuerza invasora junto con su hijo, heredero, y principal general, Pancoro. (No hacía mucho, Pancoro había dirigido una rebelión frustrada contra su padre, sin embargo, este no se lo tomó demasiado a mal y no tardó en reconciliarse con él. A fin de cuentas, el propio Orodes había ascendido al trono tras asesinar a su padre y a su hermano, por lo cual debió ver en Pancoro un digno heredero dentro de la más genuina tradición parta). En las fuentes no queda claro quién de los dos ostentaba el mando.</div><o:p></o:p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">En el 40 a.C. atacan Siria y las afirmaciones de Labieno no tardaron en demostrarse ciertas. Los soldados romanos de guarnición desertaron en masa y se pusieron a sus órdenes. Sin prácticamente oposición, ocupó la mayor parte de la provincia, incluida su ciudad más importante, Antioquía, proporcionando así a los partos su siempre anhelado acceso al mar Mediterráneo. El legado de Marco Antonio, Lucio Decidio Saxa, cayó prisionero y Quinto, mostrando la misma inclemencia que había caracterizado a su padre primero en las Galias y luego en la Guerra Civil, lo hizo ejecutar. El principio de la campaña no podría haber sido más exitoso.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKgZQGqRPr4i0xEb1pMxrlKfNrzBv_Sr6qmaKHl46N222r2NLipLUM8fY9lblpjSazyODZL_DZcGaI5TPMDdzM9paelrSLOrEfnNcfJ5E2QmXSX_fCGvZCfXkiFA0vLuj85KpS4bzXNn9o3Zxr9fCz5NVSJnJSeklMof2t1NtfqkobvHf7GbujJIDl/s1039/Disparo%20parto.jpg" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1013" data-original-width="1039" height="624" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhKgZQGqRPr4i0xEb1pMxrlKfNrzBv_Sr6qmaKHl46N222r2NLipLUM8fY9lblpjSazyODZL_DZcGaI5TPMDdzM9paelrSLOrEfnNcfJ5E2QmXSX_fCGvZCfXkiFA0vLuj85KpS4bzXNn9o3Zxr9fCz5NVSJnJSeklMof2t1NtfqkobvHf7GbujJIDl/w640-h624/Disparo%20parto.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption"><span style="background-color: #fcff01;">Plato con una imagen del llamado "disparo parto". Si los romanos destacaron por sus mosaicos, los partos lo hicieron por su orfebrería, y es en ella donde podemos encontrar la mejores representaciones de cómo se veían a sí mismos.<br /><br /></span></td></tr></tbody></table>En este punto el ejército Parto se divide en dos. Pancoro, con el grueso de las tropas, marcha hacia el <span>oeste, en dirección a Egipto, donde está Marco Antonio y cuya conquista también era un sueño de todos los gobernantes que sucedieron a los persas. Quinto Labieno, con las legiones que se le han unido y algunas unidades de caballería parta, se dirige hacia Asia Menor.</span><p></p><o:p></o:p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Rápidamente cae Cilicia y toda la costa, pero aquí empiezan a aparecer los problemas. Todo ejército necesita de grandes recursos para mantenerse, y estos deben obtenerse, inevitablemente, de la población civil, lo que implica que toda guerra supone un grave quebranto económico. Si a esto le unimos la legendaria dureza de los Labienos, la ferocidad de los partos y el ansia de botín de unas tropas romanas formadas básicamente por mercenarios que habían ido pasando de apoyar un caudillo a otro según su conveniencia, es comprensible que las ciudades asiáticas no tardaran en verse obligadas a afrontar una verdad universal: quien espera obtener la libertad de manos de otro, solo cambia de amo.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Y comparándola con la tiranía de sus nuevos “libertadores”, los ciudadanos de Asia comenzaron a añorar el gobierno caótico y corrupto de Marco Antonio.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiF-a1LSR4pMoLDNE3Qkvu8W0032aW7g7zsRfA4nCxUYgZxneZHaTZ2T6tGiq6MKkKgAfQHxjZx30MOgtT-OdLJtPMxHP3sGbsO11bjKRHRFh12YimJiXbUGqZ7ue4TVAer-XsXKcQWJORBx8_MmNfmDXG66vkkD3RBaq2jF8V1z4CMeh3T4vSmHv0/s325/Denario%20de%20labieno.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="155" data-original-width="325" height="306" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiF-a1LSR4pMoLDNE3Qkvu8W0032aW7g7zsRfA4nCxUYgZxneZHaTZ2T6tGiq6MKkKgAfQHxjZx30MOgtT-OdLJtPMxHP3sGbsO11bjKRHRFh12YimJiXbUGqZ7ue4TVAer-XsXKcQWJORBx8_MmNfmDXG66vkkD3RBaq2jF8V1z4CMeh3T4vSmHv0/w640-h306/Denario%20de%20labieno.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #fcff01;">Denario de Quinto Labieno, emitido, sin duda, <br />para pagar a sus nada desinteresados soldados</span>.<br /><br /></td></tr></tbody></table><div style="text-align: justify;">Quinto Labieno tuvo que detener su avance hacia Europa y emplear sus fuerzas en castigar a las cada vez más numerosas ciudades rebeldes. Entre tanto no tuvo mejor ocurrencia que autodenominarse “partico”, como si se tratara del vencedor de los partos y no de un general a su servicio (o aliado con ellos, según el punto de vista de cada cual), acuñando incluso moneda (uno de los principales medios de propaganda política en aquel momento) con su retrato, como si fuera un gobernante romano genuino, aunque en la otra cara apareciera un caballo parto.</div><o:p></o:p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Este retraso dio tiempo a las fuerzas de Marco Antonio para reorganizarse bajo el mando de uno de los generales de más confianza de César y, con diferencia, el más preparado de cuantos sirvieron a Marco Antonio: <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2014/03/ventidio-baso-el-mulero-bitriunfador.html">Publio Ventidio Basso</a>.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihuMiPo2y_yrVVr4E6KXAxYWjCeRMysKnDaDYqE343HxC1kwtEdtBkJ-mab_3AVVHHoS3K3UV4Ymkv-TwtOpu3cf6kz_SXYPhsc-jeChhnd4dtjLJXB3nut5xX67Ox_5s3mwfArcWAArTadNLXEcC80cwUQpHNc0Kb2gerivuLmJHgCNX6NaP1TYzM/s450/cara%20M%20A%20cruz%20Ventidio.jpg" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="210" data-original-width="450" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihuMiPo2y_yrVVr4E6KXAxYWjCeRMysKnDaDYqE343HxC1kwtEdtBkJ-mab_3AVVHHoS3K3UV4Ymkv-TwtOpu3cf6kz_SXYPhsc-jeChhnd4dtjLJXB3nut5xX67Ox_5s3mwfArcWAArTadNLXEcC80cwUQpHNc0Kb2gerivuLmJHgCNX6NaP1TYzM/w640-h298/cara%20M%20A%20cruz%20Ventidio.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption"><span style="background-color: #fcff01;">Denario emitido para pagar a los soldados de Ventidio, que tampoco luchaban gratis. En un lado aparece el busto de Marco Antonio, y en el otro una representación de Publio Ventidio Basso.<br /><br /></span></td></tr></tbody></table><div style="text-align: justify;">Ventidio es uno de los personajes más singulares de cuantos circularon por aquel violento periodo de conquistas y guerras civiles. El único hombre que recorrió las calles de Roma en Triunfo de las dos formas más diferentes posibles: la primera de niño, como cautivo tras el carro de Cneo Pompeyo Estrabón, el padre de Pompeyo el Grande, durante las guerras Sociales; la segunda como general triunfador tras derrotar a los partos en esta campaña. Su fidelidad a César, que fue quien reparó en sus capacidades y lo promovió, y su lógico odio a los Pompeyo marcaron su trayectoria durante las guerras civiles, y le llevaron a comandar las tropas que habían de enfrentarse al último de los seguidores de esta familia (al margen de Sexto Pompeyo): Quinto Labieno.</div><o:p></o:p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Cruzando rápidamente desde Grecia, cayó por sorpresa sobre Labieno, que se encontraba sitiando una ciudad rebelde con su infantería romana y sin sus aliados partos. Este se apresuró a retirarse hacia Siria en busca de la caballería parta, deteniéndose en los montes Tauro. El choque final se produjo en esta cordillera que separa la costa de la meseta central de Anatolia. Ambos ejércitos acamparon en sendas colinas fortificadas mientras esperaban unos refuerzos que llegaron de forma casi simultánea: Ventidio a su infantería pesada, Labieno a la caballería parta.</p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3dVzVjEbfU0ToaTasjZrPSnk2oOtgfObOf3srbx_r4klVWXbOVWYNu8Taxw3W8VCXT7kQWlYl4q2GfMgndq9CGIGIkvBZppZEZ-IHZayzxnfAkJYgxt0qjVLqPzCtK5p5qDK055Kcx7VasYjmtBueHZMXzbHxNL3-fXM7tzRoO3mkJWVqDVGccob9/s1200/jin_part.jpg" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="1200" height="480" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3dVzVjEbfU0ToaTasjZrPSnk2oOtgfObOf3srbx_r4klVWXbOVWYNu8Taxw3W8VCXT7kQWlYl4q2GfMgndq9CGIGIkvBZppZEZ-IHZayzxnfAkJYgxt0qjVLqPzCtK5p5qDK055Kcx7VasYjmtBueHZMXzbHxNL3-fXM7tzRoO3mkJWVqDVGccob9/w640-h480/jin_part.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="background-color: #fcff01;">Plato parto en el que se ve a su caballería cargando</span>.<br /><br /></td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Antes de que ambas fuerzas enemigas se reunieran, Ventidio atacó a los partos y luego se retiró usando una de las tácticas favoritas de estos: fingir pánico. Confiada, la caballería parta cargó contra el campamento romano en la cima de la colina, pero fueron recibidos por una lluvia de disparos de onda, mientras la infantería romana se lanzaba en masa ladera abajo, arroyando a los jinetes partos, muchos de los cuales murieron pisoteados por sus propios compañeros mientras trataban de huir.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Desde su campamento, Labieno contempló impotente el desastre, e intentó que sus hombres formaran para presentar batalla, pero se trataba de simples mercenarios dispuestos a seguir a quien les conviniera, pero no a jugarse la piel por nadie. Los que no desertaron para unirse a Ventidio emprendieron la huida, y Quinto Labieno se quedó solo.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Durante algún tiempo se ocultó en Cilicia disfrazado, hasta que las fuerzas romanas lo encontraron y lo ejecutaron, igual que él había hecho con Saxa y con tantos otros.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i>La traición es una cuestión de fechas</i>, afirmó en su día Richelieu y repitió dos siglos después Talleyrand, otro político francés que se le parecía tanto que podría haber sido su reencarnación. Con ello querían decir que en política y en la vida para muchos, las lealtades son algo que caduca cuando las circunstancias cambian.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Yo añadiría que ser o no un traidor depende aún más de otro detalle; de si tienes éxito y eres tú quien escribe la historia.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Fuentes;</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Dión Casio XLVIII</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pluratco, <i>Vida de Antonio</i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Festo</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Josefo,<i>Las guerras de los judios-Antiguedades de los judios.</i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Veleyo Paterculo</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Frontino, <i>Estratagemas</i>.</p><div style="mso-element: footnote-list;"><!--[if !supportFootnotes]--><!--[endif]--><div id="ftn1" style="mso-element: footnote;"><p class="MsoFootnoteText"><br /></p></div></div>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-92160157618503004782022-04-06T12:32:00.011+02:002022-11-24T16:04:45.949+01:00Expeditions: Rome<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh1gD9APdsOEmVRCkFp5LrWjFlNB-4sRWzRWiA2Ehc5qG5tss1uUCR2QpYPQfqKg07LNdN3m-TuLarwzSphyyzDVyEWt1HVHU4gQrHe4VmGtD4OWVJvC6vEDYcPSqSIzVPh6SHf9Xt4D7M-H2esz2ZQE0FXz9OYy0HiuMZJPiHqQubHIEI_64tRmSYu/s1280/portada.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh1gD9APdsOEmVRCkFp5LrWjFlNB-4sRWzRWiA2Ehc5qG5tss1uUCR2QpYPQfqKg07LNdN3m-TuLarwzSphyyzDVyEWt1HVHU4gQrHe4VmGtD4OWVJvC6vEDYcPSqSIzVPh6SHf9Xt4D7M-H2esz2ZQE0FXz9OYy0HiuMZJPiHqQubHIEI_64tRmSYu/w400-h225/portada.jpg" width="400" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Si quieres un buen juego de roleo y aventura en el mundo
romano, esta joya de <a href="https://www.logicartists.com/">Logic Artists</a> es lo que andas buscando desde hace tiempo.<span></span></p><a name='more'></a><o:p></o:p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">La empresa tiene experiencia en
el asunto de los juegos de rol para ordenador. Ya en 2013 llamó la atención su
<a href="https://store.steampowered.com/app/237430/Expeditions_Conquistador/?l=spanish">“Expeditions: Conquistador”</a> donde te embarcabas en la conquista de Méjico con
Cortés y sus alegres compañeros. Un juego con mecánicas de combate por turnos y extensa
narrativa que irían mejorando con el posterior <a href="https://store.steampowered.com/app/445190/Expeditions_Viking/">“Expeditions: Viking”</a> (2017) y
el que nos toca hoy <a href="https://store.steampowered.com/app/987840/Expeditions_Rome/">"Expeditions: Rome”</a> (2022). Como veis, hay un amplio espacio
de tiempo entre cada juego que sacan al mercado, lo que se explica por el cuidado que
ponen a la hora de hacerlos. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En este juego en particular, determinas el destino de Roma
mientras conquistas tierras extranjeras y navegas por la intriga política de la época.
Lucharás acompañado de tu pequeño grupo de aliados o guiarás a toda una legión
en batalla por el Asia Menor. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3gMpYRWt9gtwq3pIgfzTdk43tuNBxuGIbOgk--AdPQkTSBGB7hhqrRr3gskoj5xNpHfypbnFSG7JK5JjDvEg7JSmk_PjKhE1tQyI3C9lo99qABRPSbNcnaCxkJ53XKf12CSd2sYSYhBGbLszE9qXu75q-ES7jAZB4VcTATA0NojOVlTcMUw9wDjPK/s1024/expeditions-rome-character-customization.webp" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="1024" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg3gMpYRWt9gtwq3pIgfzTdk43tuNBxuGIbOgk--AdPQkTSBGB7hhqrRr3gskoj5xNpHfypbnFSG7JK5JjDvEg7JSmk_PjKhE1tQyI3C9lo99qABRPSbNcnaCxkJ53XKf12CSd2sYSYhBGbLszE9qXu75q-ES7jAZB4VcTATA0NojOVlTcMUw9wDjPK/w400-h225/expeditions-rome-character-customization.webp" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Puedes crear un personaje muy guapetón</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> El interés del estudio Logic Artists no es ofrecer
una obra histórica, sino servir el marco, detallado y elegante, para llevar a
cabo una historia de venganza
clásica, la de un hijo por el asesinato de su padre. Este es el punto de
partida, pero desde aquí se tejerá una historia<b> </b>con múltiples ramificaciones, como todo buen
juego de rol, llena de pequeños relatos, misiones o cometidos que enriquecen la aventura<b>.</b></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-bidi-font-weight: bold;">Nos moveremos entre localizaciones con un mapa al estilo de los Total War, y tendremos que estar pendientes en todo momento de la comida y
el agua que tenemos a disposición para nuestros legionarios, ya que un
legionario hambriento es un legionario cabreado y tú no debes dar órdenes a
legionarios cabreados, de veras, hazme caso.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgK8faK1u9GODKkVamBItXWRj5I2UV2x1Zo_DbZMlfWDN6zcPT8jz3odYaIit2JjJSPRjjIEqDUXF7MdBKw61hYPeDpy4kSZG0LWwgsroPW8ogCtjxE4Srmo1Yq3kyOb-vHwPeF03aCtgwdF2c3P_c0lkW7RjIcmXC9r61sA9RYvwgpM9UkzRink-VA/s2000/paisaje2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1270" data-original-width="2000" height="254" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgK8faK1u9GODKkVamBItXWRj5I2UV2x1Zo_DbZMlfWDN6zcPT8jz3odYaIit2JjJSPRjjIEqDUXF7MdBKw61hYPeDpy4kSZG0LWwgsroPW8ogCtjxE4Srmo1Yq3kyOb-vHwPeF03aCtgwdF2c3P_c0lkW7RjIcmXC9r61sA9RYvwgpM9UkzRink-VA/w400-h254/paisaje2.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Bonitos paisajes para morir</td></tr></tbody></table><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Tendrás varios compañeros que se
unirán a ti en tu búsqueda, entre ellos un ex gladiador, un filósofo-guerrero
con un pasado vergonzoso y una mujer de capucha perenne. Hay suficientes bromas
entre ellos para que te generen cierto cariño, y la posibilidad de que mueran o
resulten heridos llega a ser dolorosa... o un alivio. </div><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero, y este es un pequeño fallo, sus misiones secundarias encajan
en la historia principal como mermelada que apenas se pega a los bordes de un
sándwich. Tus compañeros tampoco parecen muy afectados por las
consecuencias de tus acciones. A pesar de que los personajes
conciliadores/arrogantes/estoicos/sexistas desaprueben las decisiones clave que vayas tomando en la partida, no experimentas las repercusiones de sus opiniones a lo largo del juego.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOKliucVirtgkO3ELPuOSAoXj_aRRu1tSC2GVA84bIaPWTMJmjStW4NlQw-DQsZoDVp6MbdV3HbieqJorkEn5ohOPdYZ0QFykFw3eSfkuwHde_W-PJ8lmzpn_zqnVp4Hs9HPSv1MoP60fTO7zuY06MNz5PM56YxWf4kyRfsejwBsz02e-Mcgv_zv94/s1024/persoanjegestion.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="1024" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOKliucVirtgkO3ELPuOSAoXj_aRRu1tSC2GVA84bIaPWTMJmjStW4NlQw-DQsZoDVp6MbdV3HbieqJorkEn5ohOPdYZ0QFykFw3eSfkuwHde_W-PJ8lmzpn_zqnVp4Hs9HPSv1MoP60fTO7zuY06MNz5PM56YxWf4kyRfsejwBsz02e-Mcgv_zv94/w400-h225/persoanjegestion.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Gestionando a tus pesados colegas</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Para ser justos, hay poco tiempo
para sentirse cómodo con los compañeros cuando tienes que manejar una legión
romana. Ya que, como miembro de una estimada familia bajo la
amenaza de un poderoso senador empeñado en su extinción, te envían a un
ejército que intenta recuperar Asia Menor. En poco tiempo, si no eres un
inútil, demuestras tu valía en la batalla y logras ascender a la posición de Legado.
Entonces el juego se expande, porque tomas el mando de una legión romana de
miles de personas y batallas contra los
enemigos de Roma, mientras corres con tu escuadrón de élite en misiones clandestinas
como asesinatos, interrupción de las líneas de suministro enemigas y otras
cositas malvadas.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZhnZEjNCgK7y-CKCvN-3lBfvN5IR95RpUDrG7PvZpcHjMA-FuABTwiTrei7sZYQb7lBFAqW1btQmyGXXeCuNfnKmyfRu4cdLIelKf9SyeyihKmpfX0VtwZZVFok0_d5f0OTP3m2rrhuXpLPnjMu0FAqrf2O7II7027rc8IPLsE64W5ee3VoPhnT4N/s900/galera.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="506" data-original-width="900" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZhnZEjNCgK7y-CKCvN-3lBfvN5IR95RpUDrG7PvZpcHjMA-FuABTwiTrei7sZYQb7lBFAqW1btQmyGXXeCuNfnKmyfRu4cdLIelKf9SyeyihKmpfX0VtwZZVFok0_d5f0OTP3m2rrhuXpLPnjMu0FAqrf2O7II7027rc8IPLsE64W5ee3VoPhnT4N/w400-h225/galera.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">A ostia limpia por una galera</td></tr></tbody></table><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span style="text-align: justify;"> </span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span style="text-align: justify;">La mayor parte de tu tiempo lo pasas con tu grupo de amigos, con quienes puedes explorar ciudades, chatear con personajes del juego y participar en combates por turnos. A medida que atraviesas el mapa te encontrarás con eventos aleatorios basados en texto, que siempre son específicos de la tierra en la que te encuentres. Podrás probar comidas sospechosas ofrecidas por mujeres bereberes en sus cabañas acolchadas con alfombras, decidir qué hacer con los cadáveres con los que tropieces o emborracharte con vino mientras acampas para pasar la noche. Estos eventos están maravillosamente escritos, y la superposición en muchos de ellos entre las supersticiones y la realidad es acorde con una época en la que la magia todavía era una explicación ampliamente utilizada para los fenómenos mundanos.</span></div><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRlhvtOC9ZACbGtLvq36Z9y--z4qX-uG2D5o4f39Iw3kd3ngNSecyRGJLT78TXj1UsyTqJUqW0e4ZqVT9YnKICuOGshrD3ifQmS-yCRkj2Nudi82JsvBf54CFkCpLDhhJ95O97ahg8eeGqb7JVbVWyBm8xcnLoOBsd8evga_gPhd0OxkX-MC1RhUwJ/s1920/paisaje3.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRlhvtOC9ZACbGtLvq36Z9y--z4qX-uG2D5o4f39Iw3kd3ngNSecyRGJLT78TXj1UsyTqJUqW0e4ZqVT9YnKICuOGshrD3ifQmS-yCRkj2Nudi82JsvBf54CFkCpLDhhJ95O97ahg8eeGqb7JVbVWyBm8xcnLoOBsd8evga_gPhd0OxkX-MC1RhUwJ/w400-h225/paisaje3.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">De excursión por el monte con tus amiguetes</td></tr></tbody></table><br />En el combate por turnos, usas la
cobertura en el entorno, aseguras un terreno elevado para tus arqueros e
intentas canalizar y flanquear a tus enemigos para que se sometan. Puedes realizar turnos parciales con
un personaje, cambiar a otro y luego volver al anterior. Incluso puedes llevar
a cabo el turno de un personaje mientras otro todavía se está moviendo por el
mapa, lo que le da a los procedimientos una fluidez agradable.<o:p></o:p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjti_OWIdx4lk6O8E67FWBBYW9MDMBiRcoozeWHMB2kxBGOi8qIem4cGlQObkyKCh6bKDqTg76Y1EY_kMUwhi1XDFceQjXeN5VQxJtYMSrwh1NV7jAwja_GKrnX_1MsJm2ynBh0dqRQZYGGWMfBj5hV5OOdEH2-MJYETcDnF-mzFX72Q9y8vCyWezBd/s940/mapa.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="470" data-original-width="940" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjti_OWIdx4lk6O8E67FWBBYW9MDMBiRcoozeWHMB2kxBGOi8qIem4cGlQObkyKCh6bKDqTg76Y1EY_kMUwhi1XDFceQjXeN5VQxJtYMSrwh1NV7jAwja_GKrnX_1MsJm2ynBh0dqRQZYGGWMfBj5hV5OOdEH2-MJYETcDnF-mzFX72Q9y8vCyWezBd/w400-h200/mapa.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Mapa de clara inspiración totalwarera</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Cuando ya lideras una legión, poco a poco tendremos que ir conquistando
localizaciones a lo largo del mapa para anexionarlas a Roma. La legión se compone de un número determinado
de hombres que estarán comandados por nuestros centuriones, que podrán ser contratados individualmente y
que, al igual que nuestros compañeros, tendrán su clase y su subclase
correspondiente. En el momento de una batalla con la legión, se pasa a un
minijuego que recuerda a un wargame de tablero, porque tus unidades se ven como
fichas desde una perspectiva zenital. Es un añadido agradable, pasar de
combates individuales o en pequeños grupos a batallas de wargame clásico, pero
en las batallas tienes pocas opciones a elegir entre estrategias y no dejan de
ser repetitivas. Por eso hay la opción de omitir la batalla entera y dar el resultado.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEje2t-qSANdFOui9rjQ4LKjcwQmOZtzoUvGu7elGf2RgC0e1qUvvrP1OSbOeoHEQ7RZsGXXvD2JED7013Tx4zBx5MEZYkd2rnPlsz1YINVApYOM4mxILHXYX64KniQ7VTOX1Y0RrKgr4A8uavXbDfR334FLcpj_NjkHNUCIaYNWdpOVGPFos5UT5IiS/s1024/batalla.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="1024" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEje2t-qSANdFOui9rjQ4LKjcwQmOZtzoUvGu7elGf2RgC0e1qUvvrP1OSbOeoHEQ7RZsGXXvD2JED7013Tx4zBx5MEZYkd2rnPlsz1YINVApYOM4mxILHXYX64KniQ7VTOX1Y0RrKgr4A8uavXbDfR334FLcpj_NjkHNUCIaYNWdpOVGPFos5UT5IiS/w400-h225/batalla.jpg" width="400" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">El modo batalla es como wargame viejuno</div><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La legión puede atacar y defender ciudades y
obtener recursos como aserraderos, minas y granjas que puedes usar para mejorar
tu campamento. Puedes reclutar a través de los cuarteles, fabricar armas y
armaduras en la forja e incluso construir una casa de baños, donde apostar un
amigo con rasgo 'social' aumentará la moral de tu legión. Aunque lo de poner un
tipo desnudo en una casa de baños para dar moral a la legión resulta un poco
extraño.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEt-V9A6M7JkwQf90lO_MwnqmdhRzfydomS1tOQVZOdDOjP7spHu1PgLtBGDt-sfl4kYHHWimE9QqaZZVxCNIbqcqt1Z45q6BdBfF5dmusGYoaI6VZpXLD-v_Yvr2GGB2gM0a5qTAiPB5aNwEjyApOzGPjtJFr3e8n7-pgIKXW6bZKVmxtXrVRDzQH/s640/cleo.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="360" data-original-width="640" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEt-V9A6M7JkwQf90lO_MwnqmdhRzfydomS1tOQVZOdDOjP7spHu1PgLtBGDt-sfl4kYHHWimE9QqaZZVxCNIbqcqt1Z45q6BdBfF5dmusGYoaI6VZpXLD-v_Yvr2GGB2gM0a5qTAiPB5aNwEjyApOzGPjtJFr3e8n7-pgIKXW6bZKVmxtXrVRDzQH/w400-h225/cleo.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">¡Puedes hasta ligar con Cleopatra!</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Donde “Expeditions: Rome”
realmente brilla es en su atención a los detalles históricos. La mayoría de los
ambientes no son particularmente interactivos, pero la cámara superior flexible
te permite acercar la imagen para apreciar las paredes estampadas y los mosaicos
del piso de una villa romana, las alfombras vibrantes que adornan una tienda de
guerra bereber o descubrir los dibujos y jeroglíficos en una tumba egipcia. El
cuidado a los detalles es sorprendente y de gran calidad. Tanto en lugares como
en objetos, los diseños son históricamente fieles y, desde luego, hermosos. Da
gusto perderse por el juego.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWO2ZuFQdU-s8GShdVTSbEnIOUCIfVPdQlx3w4xOh_GCcrGlKMTgRP5vPGeAhpdoWCd2d-srPSV94AnTCUSy_tvsvF0UHH_AAYYC7xVfq1D6pxTUkMz4sj__US-6C11-9hzzJ0oSculZNusk_qgeK-8Kk-1aB2kTZArY6xNx7bvQ36AeUd1C5JOyJd/s800/paisaje.webp" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWO2ZuFQdU-s8GShdVTSbEnIOUCIfVPdQlx3w4xOh_GCcrGlKMTgRP5vPGeAhpdoWCd2d-srPSV94AnTCUSy_tvsvF0UHH_AAYYC7xVfq1D6pxTUkMz4sj__US-6C11-9hzzJ0oSculZNusk_qgeK-8Kk-1aB2kTZArY6xNx7bvQ36AeUd1C5JOyJd/w400-h266/paisaje.webp" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El cuidado en los detalles da gusto verlo.</td></tr></tbody></table><br /><br /><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Os dejamos con una partida:<o:p></o:p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="315" src="https://www.youtube.com/embed/P9OpgVvR_6s" width="438" youtube-src-id="P9OpgVvR_6s"></iframe></div><br />Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-16266649776383619602022-03-04T18:06:00.002+01:002022-03-10T08:59:21.469+01:00Leonidas de Rodas, el campeón<p style="text-align: center;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgn_2IuiK8zpwlwmruNoaCjq3W7oqjQY4ZvNYx0cp5zgvWAywlX5FQW_bQy_cXbEYNROd1lVkfHu5z-Zw513s13UCXHLABc_-RPbYB9Ng1w2ALkttb4vuvYrsX2hxv5UKdyJfr8CyTGQF2HxfEX6QO6s_AfIkEh0FIRvjxovRWMTaH1aeJ7hosrKWws=s640" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="360" data-original-width="640" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgn_2IuiK8zpwlwmruNoaCjq3W7oqjQY4ZvNYx0cp5zgvWAywlX5FQW_bQy_cXbEYNROd1lVkfHu5z-Zw513s13UCXHLABc_-RPbYB9Ng1w2ALkttb4vuvYrsX2hxv5UKdyJfr8CyTGQF2HxfEX6QO6s_AfIkEh0FIRvjxovRWMTaH1aeJ7hosrKWws=s320" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;">En la antigüedad, las ciudades
griegas se odiaban entre ellas con una pasión digna de elogio. Tenían una larga
tradición de guerras vecinales por cualquier tontería, porque el motivo era lo de menos; lo importante era el sentido de competición y lucha, el <i style="mso-bidi-font-style: normal;">agon</i>, que impregnaba toda la sociedad helena.
Es normal que ese espíritu competitivo entre las ciudades tuviera también una
variante religiosa, menos violenta y más deportiva. Así que en Grecia había una
buena cantidad de eventos religiosos con competiciones incorporadas, donde las
ciudades podían seguir celebrando sus rivalidades. Su mejor expresión eran los
juegos en honor a Zeus, el dios supremo, celebradas en su santuario de Olimpia.
Los atletas venidos de todo el mundo heleno podían alcanzar fama inmortal en su
estadio si lograban la victoria, su nombre nunca sería olvidado y su ciudad los
honraría durante toda su vida.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y luego estaba Leónidas de Rodas, que los
eclipsó a todos.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span></span></p><a name='more'></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><br /></span><p></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es el año 152 a.C. y estamos frente al templo
de Zeus en Olimpia, en una mañana cálida de principios de agosto. Un heladónica
(juez) pone una corona de olivo sobre la cabeza de un treintañero de cara ajada
y músculos fibrosos. Se llama Leónidas, es un atleta vencedor en las tres
carreras de las Olimpiadas de ese año, por lo tanto, es un <i style="mso-bidi-font-style: normal;">triastes.</i> Un título conseguido por pocos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero Leónidas se ajusta la corona como quien
ya tiene costumbre de llevarla y sonríe con suficiencia, mientras saluda a la gente
congregada ante el templo. Para él es la cuarta vez que consigue el triplete.
Todos aplauden a rabiar porque saben que nunca sus ojos verán nada igual, ni lo
hará el mundo durante dos milenios. Contemplan al mayor atleta de la historia
siendo coronado por su duodécima y última victoria. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgjk8GMQp96cJMEKRnaxH5IrHQlRCVzVeTF_mRGlL8wxsFn8TLC61gUlvdRqhyk24fkLNApGz5TQfCfGQ_cVwAfEfIGDW12bMU-bAOvW9zfe4HaJXpjIJlJRoeuQ1ovADqJhBfhYwTeB8osl05xu3awSZHXHPaEqSVgtBSRqfvYvkH1UcxmT-rrMn6r=s400" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="279" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgjk8GMQp96cJMEKRnaxH5IrHQlRCVzVeTF_mRGlL8wxsFn8TLC61gUlvdRqhyk24fkLNApGz5TQfCfGQ_cVwAfEfIGDW12bMU-bAOvW9zfe4HaJXpjIJlJRoeuQ1ovADqJhBfhYwTeB8osl05xu3awSZHXHPaEqSVgtBSRqfvYvkH1UcxmT-rrMn6r=w279-h400" title="Diadumeno" width="279" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El Diadúmeno de Policleto, el atleta más cool</td></tr></tbody></table><span style="font-size: 12pt;"></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">Nada más sabemos de Leónidas, excepto las
citas cortas de algunos autores griegos. Su ciudad de origen, Rodas, era una
isla de tamaño medio para los griegos, que nunca faltaba a la hora de enviar
atletas para las Olimpiadas; como los Diágoras, una familia de boxeadores,
padre y tres hijos, en la que todos fueron campeones olímpicos y cuyas estatuas
habían recibido el honor de adornar el recinto sagrado de Olimpia.</span></p><p></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Rodas tuvo también algunos ganadores de
carreras, orgullo de su ciudad, pero en el siglo II a.c. consiguió lo que
llevaba siglos esperando: el supercampeón, a Leónidas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sabemos que su hazaña fue insólita e
inolvidable: vencer 12 veces en las Olimpiadas. Marca que tuvo que esperar 2168
años para ser superada por el nadador Michael Phelps. Aunque en atletismo sigue
siendo inalcanzable. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Hay que remarcar que vencer en los juegos de
Olimpia, fundados en 776 a.C., para los griegos no era una victoria en unos
juegos cualquiera. El certamen de Olimpia se convirtió en una ocasión estupenda de desahogar
la pasión de competir entre las polis helenas, a la vez que honrar a sus dioses
y, curiosamente, permitió el acercamiento y una sombra de unidad entre ellos,
puesto que equivalían a una asamblea general del pueblo griego. Era uno de los
pocos momentos en que se sentían un pueblo, aunque fuera solo en el plano
religioso, y solo cada cuatro años durante cinco días de finales de julio y
principios de agosto. Pero eran tan importantes que los griegos databan su
calendario por el número de Olimpiadas y no había ciudad, por villorrio que
fuese, que no mandase algún atleta a competir. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh5f88W0qqgeugDy5_IrAbCc0Ziu4KpBn-ycvsPfkCsWOk3HOUSeKAfEdVR5ErYVpOFGRX-13BBqQ96e_kB9ZlPT28W86fBvdEh0j-Ckk1Hb3J2XBj8LUJNlmt_cmHujW5cbsT1lqm3onfW8c3t-AyINraFugpbn0-iVMpgfCB1RjJnbHvZCQjOSQW9=s736" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="619" data-original-width="736" height="336" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh5f88W0qqgeugDy5_IrAbCc0Ziu4KpBn-ycvsPfkCsWOk3HOUSeKAfEdVR5ErYVpOFGRX-13BBqQ96e_kB9ZlPT28W86fBvdEh0j-Ckk1Hb3J2XBj8LUJNlmt_cmHujW5cbsT1lqm3onfW8c3t-AyINraFugpbn0-iVMpgfCB1RjJnbHvZCQjOSQW9=w400-h336" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Olimpia en sus buenos tiempos</td></tr></tbody></table><span style="font-size: 12pt;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">Había otras competiciones, otros juegos en
honor de otros dioses, pero Olimpia era “la competición”, </span><i style="font-size: 12pt;">el agon</i><span style="font-size: 12pt;"> por encima de todos, donde lo único que importaba era vencer,
ya que solo había premios para los campeones. Así que Leónidas tuvo que
competir con decenas de rivales en cada Olimpiada.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;">Leónidas compitió en cuatro seguidas,
las de los años 164 a.C., 160 a.C., 156 a.C. y 152 a.C., y en cada una de ellas
ganó las tres carreras de atletismo que se celebraban en el estadio: el estadio
mismo, el diaulos y el hoplitódromos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Nadie lo hizo antes ni lo haría después. Su
hazaña es única en los más de 1000 años de olimpiadas antiguas. Porque las tres
carreras no eran nada fáciles y se corrían en solo dos días.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgX32jTC_tHDJ4RzwvVSr-TaUgSeIjk8tfG4ug9Iz1XPrcuc0Cb795vI3QQMyackg2HB5CTX_ExQspepD0CEirtC4KEGlMlq8eaF1ISySh0_K18SmpA3oQ1iG7HNKW_FweFMqNf6R4gJ3Bzd95-OmD8Bv07TWQnNr4YjhIv2w8s3Y1d-ikOCjxp7tbL=s500" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="339" data-original-width="500" height="217" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgX32jTC_tHDJ4RzwvVSr-TaUgSeIjk8tfG4ug9Iz1XPrcuc0Cb795vI3QQMyackg2HB5CTX_ExQspepD0CEirtC4KEGlMlq8eaF1ISySh0_K18SmpA3oQ1iG7HNKW_FweFMqNf6R4gJ3Bzd95-OmD8Bv07TWQnNr4YjhIv2w8s3Y1d-ikOCjxp7tbL=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Estadio de Olimpia sin turistas</td></tr></tbody></table><span style="font-size: 12pt;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;">El Estadio (Stadion) era la carrera
más corta y tomaba el nombre del lugar donde se celebraban las competiciones.
Es decir, consistía en correr todo el estadio, cuya medida era de
alrededor</span><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">de 200 metros, que, en teoría,
eran 600 veces la longitud del pie de Hércules; algo que parece que resultaba
difícil de calcular, porque los griegos no se aclaraban sobre el tamaño de la
suela del héroe, que variaba en cada lugar donde se celebraban juegos.</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj0V2I8A_SIQS90IsMYVEdaAkgmjY-fX2WpU3BinmGb-DAee-vII_TGBhfaNwRGIIT-qC17VWg7Ds15xg_uKPh1s_GeUN1Ep5Hw8q38P7u_NNfDxHlmfbq6G1-jRH4S1WJa-V2T3Sz6jqmMiXdFP0eb5YubgPLPWhc2hFGt8bAhn_LPfiolFOmpAqCZ=s400" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="299" data-original-width="400" height="239" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj0V2I8A_SIQS90IsMYVEdaAkgmjY-fX2WpU3BinmGb-DAee-vII_TGBhfaNwRGIIT-qC17VWg7Ds15xg_uKPh1s_GeUN1Ep5Hw8q38P7u_NNfDxHlmfbq6G1-jRH4S1WJa-V2T3Sz6jqmMiXdFP0eb5YubgPLPWhc2hFGt8bAhn_LPfiolFOmpAqCZ=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Atletas currando por la gloria olímpica<br /><br /></td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">También sabemos por Pausanias que no
era solo llegar los atletas, saludar y correr el Estadio. Había, igual que hoy,
carreras de clasificación para llegar a la final, que corrían solo 17 atletas.
Pausanias habla de dos carreras de clasificación antes de la final de Olimpia.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;">El Diaulos, por su parte, no era más
que doblar la distancia del Estadio. Los atletas tenían que dar la vuelta al
llegar al final del estadio y volver al punto de partida para completar unos
400-380 metros. No sabemos si también había carreras de clasificación para
llegar a la carrera final, pero es probable. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El estadio, como el Diaulos, eran las dos
pruebas más antiguas de las competiciones de Olimpia y las más aclamadas.
Solían correrlas los mismos atletas, aunque parece que podía haber
especializados en cada carrera, pues según Filostrato: <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Los atletas para el diaulos deben ser más
robustos que los corredores de estadio.”<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;">Luego estaba el hoplitódromos, que
era un mundo aparte. Se trataba de una carrera de resistencia, porque, en lugar
de correr desnudos, como era la norma en las otras pruebas, en tiempos de
Leónidas tenían que llevar puesto casco y escudo, como si fueran corriendo al
combate. El casco y el escudo de un hoplita griego no eran precisamente
ligeros, así que el esfuerzo debía de ser grande. La distancia en Olimpia era
de dos estadios (un diaulos), aunque hay referencias de carreras de más
estadios en otros juegos. Por ejemplo, en Platea, había que correr hasta 15 puñeteros
estadios y, según nos cuenta Filostrato tenía una
norma muy peculiar:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“…<i style="mso-bidi-font-style: normal;">esta
carrera hoplítica de Platea contaba con una normativa especial para sus
participantes: el que era coronado vencedor una vez en esta prueba, cuando quería
volver a participar tenía que estar muy seguro de la condición física de su
cuerpo, ya que si era derrotado…<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se le
ejecutaba.”<o:p></o:p></i></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Me imagino que en Platea lo de intentar el
doblete no era muy habitual.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjlP-wrzkUPu5IJCn33GVpYwzDUiDbt8kkllXGliBc6oUYJczgDo56Xhb6Geiqv-XSfbOqyF2NsjeQX8orY3SasKIFQASPbgImYjo7391WWchdB-hTT5wIWQgAQHZHYU86jBzFJJ_s8Bxn5e5NX-UaJ716YQI_V0Y-3i7GRZgHvYLY2FAr1FsWLNYPf=s640" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="360" data-original-width="640" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjlP-wrzkUPu5IJCn33GVpYwzDUiDbt8kkllXGliBc6oUYJczgDo56Xhb6Geiqv-XSfbOqyF2NsjeQX8orY3SasKIFQASPbgImYjo7391WWchdB-hTT5wIWQgAQHZHYU86jBzFJJ_s8Bxn5e5NX-UaJ716YQI_V0Y-3i7GRZgHvYLY2FAr1FsWLNYPf=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Atletas corriendo el hoplitódromos con escudos fashion</td></tr></tbody></table><span style="font-size: 12pt;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;">El Hoplitódromo era una carrera
bastante “moderna”, pues apareció por primera vez en las Olimpiadas de 520
a.C., y se consideraba muy especializada. Solía tener sus atletas propios, que
no corrían el estadio ni el diaulos. Esto explica que a lo largo de los cientos
de años de historia de las Olimpiadas muchos atletas ganasen el estadio y
también el diaulos varias olimpiadas seguidas, pero solo 6 atletas ganaron las
tres carreras juntas en una sola olimpiada y ninguno lo repetiría en la
siguiente… hasta que llegó Leónidas y ganó las tres carreras durante cuatro
olimpiadas seguidas.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;">Fue tal la conmoción que causó su
hazaña en el mundo deportivo heleno que, según Filóstrato: <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;">“Ya no distinguimos entre corredores armados, entre los que están en el
estadio y los que están en el diaulos, desde que Leónidas de Rodas ganó en
cuatro Juegos Olímpicos seguidos, en esta triple competencia.”</span></i><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Leónidas cambió por completo los esquemas sobre
el <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>entrenamiento de los atletas. Un
velocista también podía ser un corredor de resistencia. Desde su hazaña, muchos
lo intentarán y será más habitual ver a corredores en las tres carreras, pero
ninguno se acercará en victorias a Leónidas. Es que son cuatro Olimpiadas
seguidas, vencedor en doce carreras finales… puede que ni siquiera lo intentase
alguien. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjT96gNdqIkDmWPvUZaLMGyKcG6WtBiLZ-jXmkfKX1OpELbiyyDSgpW7GMbHIHpiQXpqSTTrSUWE5rJ8DSg2eUcGzHQkFzDszv-y6DKbqIv1KeJl_pIWYbkALGKr9OLfsDcfBkxcOUqBnQVizD_IaGuYFqeJLdgiJ_gkP1lvmAfX2KuBvnZQ5ABZ9zt=s1280" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjT96gNdqIkDmWPvUZaLMGyKcG6WtBiLZ-jXmkfKX1OpELbiyyDSgpW7GMbHIHpiQXpqSTTrSUWE5rJ8DSg2eUcGzHQkFzDszv-y6DKbqIv1KeJl_pIWYbkALGKr9OLfsDcfBkxcOUqBnQVizD_IaGuYFqeJLdgiJ_gkP1lvmAfX2KuBvnZQ5ABZ9zt=w320-h180" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Templo de Zeus en Olimpia, una segunda casa para Leónidas</td></tr></tbody></table><span style="font-size: 12pt;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">La fortaleza física y la capacidad de
recuperación de Leónidas deben ser un caso especial en el mundo del
deporte.</span><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">Las carreras se corrían el
segundo y tercer día de los cinco que duraban los juegos. Así que estamos
hablando de alguien que corría en dos días las tres finales, más la carrera de
clasificación del Estadio y, probablemente, las de clasificación del Diaulos y del
Hoplitódromos. Todo bajo el sol de agosto griego.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es difícil de planear, pero se podía preparar
a conciencia para lograrlo en una Olimpiada, si tienes talento y condiciones,
como sabemos hicieron otros seis atletas excepcionales. Pero mantener la
concentración y el esfuerzo para conseguirlo durante cuatro Olimpiadas
sucesivas es tarea de un titán disciplinado y terco.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="mso-spacerun: yes;"><br /></span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"></span></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgVegS-lbF161Z0XjFYBUTmpjNizYPw6cnEXTjc_bmPD33jNoYbKYhCwYCgc46Qy0vDDcREcMDo8TctRs_SGfeVu_P6YvcS9WcqVlVS7o6D_8vVltP4b-3BdPEuktL8Qz01naPpLQTrmmzLFCNtfQ7E1-2PZTY-oX4mO8rgQIy8qLq5VYTiZn6BulgC=s1000" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="750" data-original-width="1000" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgVegS-lbF161Z0XjFYBUTmpjNizYPw6cnEXTjc_bmPD33jNoYbKYhCwYCgc46Qy0vDDcREcMDo8TctRs_SGfeVu_P6YvcS9WcqVlVS7o6D_8vVltP4b-3BdPEuktL8Qz01naPpLQTrmmzLFCNtfQ7E1-2PZTY-oX4mO8rgQIy8qLq5VYTiZn6BulgC=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La entrada de atletas al estadio de Olimpia</td></tr></tbody></table><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="font-size: 12pt;"><br /></span></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><span style="font-size: 12pt;"> </span><span style="font-size: 12pt;">Si alguna vez hubo un verdadero hijo de Zeus
sobre la Tierra, es probable que fuera Leónidas de Rodas. El atleta que en la
línea de salida, cuando oía al heladónica gritar </span><i style="font-size: 12pt;">¡Apite!</i><span style="font-size: 12pt;"> (Partid), volaba hasta la
meta impulsado por una fuerza realmente olímpica.</span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 200%;"><o:p> </o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><span style="font-size: 12pt;">Sobre otros olímpicos en este blog:</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><a href="https://blogtabula.blogspot.com/2014/01/cinisca-campeona-olimpica.html">Cinisca</a></p><p class="MsoNormal" style="line-height: 200%; text-align: justify;"><a href="https://blogtabula.blogspot.com/2012/10/l-minicius-natalis-quadronius-verus.html">Quadronius Verus</a></p>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-82451657212984485422022-02-08T00:01:00.003+01:002022-02-08T00:04:34.629+01:00Francesc Sánchez, in memoriam<p>Por David P. Sandoval</p><div dir="auto"><div class="ecm0bbzt hv4rvrfc ihqw7lf3 dati1w0a" data-ad-comet-preview="message" data-ad-preview="message" id="jsc_c_13"><div class="j83agx80 cbu4d94t ew0dbk1b irj2b8pg"><div class="qzhwtbm6 knvmm38d"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql oi732d6d ik7dh3pa ht8s03o8 a8c37x1j fe6kdd0r mau55g9w c8b282yb keod5gw0 nxhoafnm aigsh9s9 d3f4x2em iv3no6db jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id hzawbc8m" dir="auto"><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;"><span class="pq6dq46d tbxw36s4 knj5qynh kvgmc6g5 ditlmg2l oygrvhab nvdbi5me sf5mxxl7 gl3lb2sf hhz5lgdu"></span></div></div></span><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql oi732d6d ik7dh3pa ht8s03o8 a8c37x1j fe6kdd0r mau55g9w c8b282yb keod5gw0 nxhoafnm aigsh9s9 d3f4x2em iv3no6db jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id hzawbc8m" dir="auto"><div class="kvgmc6g5 cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">Hay una edad a la que empiezas a perder amigos. No por bodas, hijos o viajes a otras partes. No. Porque mueren. Yo ya he pasado por muertes familiares bien pronto, pero de mis amigos cercanos, de momento, ninguno. Hasta hace poco.<span><a name='more'></a></span></div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">A Francesc le conocí hace casi 20 años. Se había apuntado a esa cosa de Nova Roma-Hispania Romana con ganas, ilusión, interés. En un viaje a Barcelona quedé con él. Habíamos hablado mucho por correo electrónico y el grupo de la asociación. Me hacía ilusión conocerle, porque tenía muchas ganas de hacer, de hablar (le encantaba hablar, era un torbellino, encadenando una idea y otra) y además parecía, como casi todo el mundo que se mete a esa locura de la recreación histórica, muy interesante. Y lo era.<span><!--more--></span></div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div><div dir="auto" style="text-align: start;">Quedamos, se apuntó otro buen amigo, Jordi, y nos llevó a comer a un sitio elegante y muy currado. Le pregunté en broma si eso era un soborno para hacer un evento en Sabadell, <span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql oi732d6d ik7dh3pa ht8s03o8 a8c37x1j fe6kdd0r mau55g9w c8b282yb keod5gw0 nxhoafnm aigsh9s9 d3f4x2em iv3no6db jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id hzawbc8m" dir="auto">que él tenía en mente</span>. Yo no necesitaba sobornos. Me encantaba la idea, ese proyecto llamado <i>Renovatio Arragonis</i>.</div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div><div dir="auto" style="text-align: start;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgfU3trOBeqy5SqM6Tm_aKoW1L6extkkXNGt5U6zxCfVIiFqJnYe8_itvk4vakTRfzmxzttc8o9T4YHCEc0UQ_1fP4JSw-MI-OQjAnag14UFyB5o0Lu6NN4BzInTYmQ6DUldpojWPcLZW8tvNDjV_AGy9u27s5oVHFXm4vAbU5HaqzTuLUxJWoBIuRZ_g=s1600" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="999" data-original-width="1600" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgfU3trOBeqy5SqM6Tm_aKoW1L6extkkXNGt5U6zxCfVIiFqJnYe8_itvk4vakTRfzmxzttc8o9T4YHCEc0UQ_1fP4JSw-MI-OQjAnag14UFyB5o0Lu6NN4BzInTYmQ6DUldpojWPcLZW8tvNDjV_AGy9u27s5oVHFXm4vAbU5HaqzTuLUxJWoBIuRZ_g=s320" width="320" /></a></div><br /></div><div dir="auto" style="text-align: start;">El proyecto salió, claro. </div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div><div dir="auto" style="text-align: start;">Su empuje, su capacidad de trabajo y su encanto personal, lleno de alegría, pícara e inteligente, nos contagió. Incluso cuando algunos en aquella época recelaron de ir porque les parecía un nacionalista catalán de esos malos. Estúpidos hay en todas partes, claro está. El evento fue una maravilla. Una que queda en el recuerdo de los que participamos. Y de los que lo vieron. Francesc lo había conseguido. Fue un triunfo merecido para él.</div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div><div dir="auto" style="text-align: start;">Los años pasaron y hablamos de muchas, muchas cosas: de baloncesto, política, mujeres, derecho... Y Roma. Siempre Roma. </div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div><div dir="auto" style="text-align: start;">Me encantaba su arrebato por por Egipto, Roma, la literatura... Francesc era activo, un torbellino. Me sentía cómodo con él y en los diferentes eventos recreacionistas de Sant Boi que hicimos. Sus guiones, su preparación y su saber organizar eran fundamentales.</div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">Disfruté de todas nuestras conversaciones, ya fueran en persona o por teléfono. A partir de 2013, al nacer mi hijo, me costaba más hablar por teléfono, viajar. Pero disfrutaba leyéndole en su blog, lleno de artículos buenísimos y que entroncaban con su participación en aquel proyecto al que aún tengo cariño, Stilus. Él, con Roberto, hizo de esa revista digital una referencia en el mundillo. Y luego, en su blog de Arraona Romana, continuó con artículos y apadrinando a escritores de novela histórica. Era una gozada leer un artículo nuevo. </div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">Se sorprendió cuando publiqué mi primera novela y ésta no era ni de romanos ni histórica al uso. Pero la disfrutó, reseñó y comentó conmigo. Me sentí agradecido, claro. Y me pidió, siempre que podía, que escribiera una de romanos, que él se metía a editor incluso. Bromeábamos, reíamos, disfrutábamos...</div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">La pandemia cortó un poco el contacto. Pero él era incansable. Se adaptó e hizo varias cosas de manera digital, organizándonos por Zoom o Meet. Y seguía, seguía... Hasta que no pudo seguir. </div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div><div dir="auto" style="text-align: start;"><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgAYJxm7dXnqMGksbs7jPYb1qFRhGynwCR03YkIjSwVi2MgrfH5PGqKq97mq7xfkmFKTDj_YuKXzb53XOaY3sIPdj9lAl933QbPQ9ihcKvBGuOSCEkLcodsu8g9FV2cEyOSshFaXoDudcWNtuT7ByoF2_KxeUOKkMkdqcTvNpuSX1erGQ0czkom3mr7GA=s822" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="822" data-original-width="658" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgAYJxm7dXnqMGksbs7jPYb1qFRhGynwCR03YkIjSwVi2MgrfH5PGqKq97mq7xfkmFKTDj_YuKXzb53XOaY3sIPdj9lAl933QbPQ9ihcKvBGuOSCEkLcodsu8g9FV2cEyOSshFaXoDudcWNtuT7ByoF2_KxeUOKkMkdqcTvNpuSX1erGQ0czkom3mr7GA=w248-h320" width="248" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br /></td></tr></tbody></table>Un día, de pronto, me dijo que tenía una biopsia. Ya llevaba tiempo mal. Y no pintaba bien. Cuando me lo dijo, mi primer instinto fue comprar un billete del AVE para ir a verle. Sorprendido, me pidió que le dejara arreglar las cosas, el despacho, el trabajo, los temas personales... Comprendí también que no quería que le viera desmejorado, la quimio, el cansancio, el agotamiento y la extenuación que provoca el tratamiento. Quedamos que, cuando él lo viera más claro, iría.</div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">El 8 de enero me enteré de su muerte. Por esperado, no deja de doler. Los años, las conversaciones, la voz, las risas, la inteligencia... Todo eso queda, se acumula en otro manto de la memoria que calienta y alberga la experiencia de la vida. Francesc estará en el recuerdo de muchos, por numerosos motivos. Yo comparto algunos aquí, porque es mi manera de recordarle y darle un mínimo homenaje.</div></div></span><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql oi732d6d ik7dh3pa ht8s03o8 a8c37x1j fe6kdd0r mau55g9w c8b282yb keod5gw0 nxhoafnm aigsh9s9 d3f4x2em iv3no6db jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id hzawbc8m" dir="auto"><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;"> <br /></div><div dir="auto" style="text-align: start;">Hasta la vista, Francesc. Espero que el barquero te lleve a un buen sitio. Tu recuerdo no se irá. Y ya sabemos cuánto importa a los romanos ser recordados. <br /></div><div dir="auto" style="text-align: start;"> </div></div><div class="cxmmr5t8 oygrvhab hcukyx3x c1et5uql o9v6fnle ii04i59q"><div dir="auto" style="text-align: start;">Vale, <i>amice</i>.</div></div></span></div></div></div></div>Roberto Pastranahttp://www.blogger.com/profile/13128078798890547612noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-79261470898206644872022-01-06T10:23:00.004+01:002024-02-14T21:47:18.904+01:00Bellum monetariorum; la gran rebelión de los corruptos<div style="text-align: justify;">La corrupción en las administraciones públicas no es algo nuevo, por desgracia (otra cosa es su magnitud), sino que viene, como ya explicamos, de <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2016/11/marco-postumio-pirgense-contigo-empezo.html">muuuuuy lejos</a>, pero... ¿qué sucede si en una sociedad profundamente podrida alcanza el poder un hombre íntegro, un verdadero reformista incorruptible, dispuesto a sanear el estado cueste lo que cueste y a castigar a los que se aprovechan de los bienes públicos sin hacer ningún tipo de excepciones?</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En algún artículo anterior ya os hablamos de Aureliano y de lo peligroso, e impopular, que puede llegar a resultar ser un héroe. Ahora vamos a contar lo que sucedió al poco de alcanzar el poder este honrado, capaz y enérgico gobernante que, tras salvar a Roma, acabaría asesinado a traición por sus propios guardaespaldas, convencidos por un político corrupto a punto de ser detenido de que los siguientes cuyos chanchullos iban a ser desenmascarados eran ellos.</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZxlfcHxiRGEgyZr9A9iGDrJhbKaEzn3lfSe0CbiR3tSA4CwNUiFwnrgTAT1hyP6aVvBicHWVE8S9w7cEw5M458B-S0xNhs7FFY5JFtUmMcYkhQqtTsW8r1VcAbABDd1aEpq1aKU2ccoY/" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="225" data-original-width="300" height="480" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZxlfcHxiRGEgyZr9A9iGDrJhbKaEzn3lfSe0CbiR3tSA4CwNUiFwnrgTAT1hyP6aVvBicHWVE8S9w7cEw5M458B-S0xNhs7FFY5JFtUmMcYkhQqtTsW8r1VcAbABDd1aEpq1aKU2ccoY/w640-h480/image.png" width="640" /></a></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Pero vayamos al principio de esta historia. El 270, año del ascenso de Aureliano al trono tras el fallecimiento en menos de dos años de sus dos antecesores por asesinato o enfermedad, estaba resultando ser un año especialmente malo dentro de un siglo, el III, tan desastroso para Roma que todo él es conocido como “La crisis del siglo III”. El imperio se había dividido en tres entidades independientes, con el llamado imperio Galo campando a sus anchas por occidente y el reino de Palmira dueño de la mayor parte de oriente, incluido Egipto. Los godos a duras penas habían logrado ser contenidos en los Balcanes por Aureliano y sus antecesores Galieno y Claudio II, cuando ya otras tribus bárbaras, como los sármatas y los vándalos, empezaban a cruzar el Danubio. Los alamanes merodeaban por el norte de Italia y, para colmo, el nuevo emperador debía enfrentarse a un rival elegido por el senado en Roma.<span><a name='more'></a></span></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div><div style="text-align: justify;">Semejante cúmulo de problemas, unido a la demostrada muy escasa esperanza de vida de los ocupantes del trono imperial, hubieran hecho que muchos se hubieran planteado si, realmente, merecía la pena ponerse al mando de una nave que hacía agua por todas partes y que parecía claro que no tardaría en irse a pique. Pero Aureliano era un hombre con un ánimo y una energía poco habituales. Mientras corría con su ejército de una frontera a otra para enfrentarse a las diversas tribus invasoras decidió también empezar a combatir lo que consideraba el verdadero origen de todos los males del Imperio: la ineficacia, corrupción y desprestigio de la administración y con ella de todo el estado.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrGv2t6GIFIFX-IepkQ9M7HGrmcEjYOFtg3m7scvOvAQ2_zWLWqXAeUdxezZAhY6akeJTXi5eWzNM9N46KkQmuJqTCW-A9LjvQYuFg0p4bQegfSeI7a6etdvSN7bl_oNlpZWwA30f3YXk/" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="452" data-original-width="374" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrGv2t6GIFIFX-IepkQ9M7HGrmcEjYOFtg3m7scvOvAQ2_zWLWqXAeUdxezZAhY6akeJTXi5eWzNM9N46KkQmuJqTCW-A9LjvQYuFg0p4bQegfSeI7a6etdvSN7bl_oNlpZWwA30f3YXk/w531-h640/image.png" width="531" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Ceca romana.</td></tr></tbody></table><span style="text-align: justify;"></span><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Una de las muestras más claras de esa corrupción y de ese desprestigio era la situación de la moneda romana. El viejo denario de plata, símbolo del poder de la República y de los primeros siglos del Imperio, no era ya sino un vago recuerdo. Toda una serie de gobernantes habían encontrado una fácil solución al déficit permanente de las cuentas públicas en la emisión de cantidades cada vez mayores de monedas, que fueron perdiendo por ello tanto su valor como medio de cambio como su propio valor intrínseco en metales preciosos. Las últimas monedas emitidas solo contenían un 5% teórico de plata, y era necesario someterlas a un baño de ácido para que tuvieran algo de brillo. Y he dicho valor teórico porque en algunas, como las emitidas por la ceca (fábrica de moneda) central del imperio, la de Roma, este minúsculo porcentaje de plata aún se había reducida más, hasta el 3% e incluso menos.<br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Esta diferencia estaba causada por la corrupción de los responsables de la ceca, que se apropiaban de parte, casi de la mitad por lo visto, de la plata destinada a las emisiones, confiando, sin duda, en que, dado que la propia moneda era en sí un fraude perpetrado por el estado, nadie repararía en su fraude particular. Y, en efecto, hasta entonces había sido así, sobre todo porque contaban con la cobertura de políticos poderosos, miembros del senado, que se beneficiaban, y quizás dirigían, aquel robo masivo de recursos públicos.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnZD4-MxGRTsz6VmG7nC3sWLb4JmKKzwzSBkDeD2wwX2zrNsRfs7-ADum38kM-0E0YH26-R1Z49YFtw4oUuQJjAoZR0vFApw0pY3owoS1u-tzqLOUsXpU3VZT54hj7mR2II1luqaUirR8/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="437" data-original-width="458" height="610" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnZD4-MxGRTsz6VmG7nC3sWLb4JmKKzwzSBkDeD2wwX2zrNsRfs7-ADum38kM-0E0YH26-R1Z49YFtw4oUuQJjAoZR0vFApw0pY3owoS1u-tzqLOUsXpU3VZT54hj7mR2II1luqaUirR8/w640-h610/image.png" width="640" /></a></div></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Amparados por esa impunidad los funcionarios corruptos actuaban cada vez con mayor descaro. La propia calidad formal de la moneda se hundió, y los retratos de los emperadores grabados en esa época son tan malos que casi parecen caricaturas. Es muy probable que esto se debiera al nepotismo a la hora de seleccionar a los empleados de la ceca, primando la fidelidad a sus jefes y la aceptación de la corrupción reinante muy por encima de su capacidad para el trabajo. Algo que caracteriza a los estados profundamente corruptos es la creación por sus dirigentes de amplias redes clientelares, formadas por toda suerte de individuos a los que, a cambio del apoyo a sus líderes, se les permite robar un poco, recoger las migajas del gran pastel, y que terminan por constituir la verdadera base social de los gobernantes.<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0G1Wu8FCNnCpfxsCRTOTUQV506l9tW68BL7DJ79I_NnDFwGVfrICE5IGL6p_MHARlb9iBwamTCGu5SikMk_1-dLqCrM6lP9VoLXR3oM7QRHHfDhhrzgS-Zy4A8y1j99Fko9XJHbonyoQ/" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="470" data-original-width="465" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0G1Wu8FCNnCpfxsCRTOTUQV506l9tW68BL7DJ79I_NnDFwGVfrICE5IGL6p_MHARlb9iBwamTCGu5SikMk_1-dLqCrM6lP9VoLXR3oM7QRHHfDhhrzgS-Zy4A8y1j99Fko9XJHbonyoQ/w632-h640/image.png" width="632" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Monedas de Galieno y Claudio II. <br />Puede apreciarse el recortado de los bordes.</td></tr></tbody></table><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Ya no solo se alteraba la aleación de las monedas, sino que antes incluso de salir de la ceca estas eran disminuidas de peso recortándoles los bordes, quizás por los propios empleados que, amparados por el fraude generalizado cometido por sus jefes, se quedarían con estos recortes a modo de ingreso extra.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Todo esto no solo lo conocemos por las fuentes de la época (Aurelio Víctor, Eutropio, la Historiae Augustae), la arqueología ha demostrado que la cantidad de planta de las monedas emitidas en ese momento en Roma era sensiblemente inferior, hasta un 54%, a las de otras cecas, como las de Tarraco o Antioquía.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">No se sabe bien cómo empezó la revuelta, aunque todas las fuentes están de acuerdo en que el detonante fue la detención en el 271, apenas unos meses después de la ascensión al poder de Aureliano, de <i>Felicissimus</i> (buen nombre para un golfo) el <i>rationali</i>s, es decir el responsable, del tesoro de imperial, algo así como el ministro de hacienda actual, entre cuyas funciones estaba supervisar la ceca de Roma. Esta detención, sin duda, desató el pánico entre sus subordinados y entre sus superiores y cómplices en el senado, que temerían ser los siguientes.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div><div style="text-align: justify;">Coincidiendo con estos hechos, Aureliano sufrió la única derrota militar de toda su carrera. Tras aplastar por completo a los godos, y obligar a los vándalos, sármatas y demás a retirarse más allá del Danubio, se encaminó a toda velocidad hacia Italia, de cuyo norte se habían apoderado los alamanes y jutungos, que ahora habían cruzado el Po y se dirigían a Roma. Pero por el camino sufrió una emboscada de estas tribus en un bosque cerca de la ciudad de Placentia (¿tal vez alguien les puso al tanto de la ruta que iba a recorrer?) que masacraron y desbandaron su ejército.</div><div style="text-align: justify;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieEXrrAlVnWyS8WAkJY-UU4B_ztd822A2VWaFJZfPjJNIHY7ftlPl3u2UqpwwC3duH6XEzFp4AuhVIc7sQT7gR6dN7icjN_dG9zWmw0TJD0VoecfF06JHp5mU6I6KkzPiRhph7grgivu8/" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img alt="" data-original-height="581" data-original-width="886" height="421" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieEXrrAlVnWyS8WAkJY-UU4B_ztd822A2VWaFJZfPjJNIHY7ftlPl3u2UqpwwC3duH6XEzFp4AuhVIc7sQT7gR6dN7icjN_dG9zWmw0TJD0VoecfF06JHp5mU6I6KkzPiRhph7grgivu8/w640-h421/image.png" width="640" /></a></div><div style="text-align: justify;">El pánico se extendió por la capital, y quizás los políticos corruptos aprovecharon que su perseguidor parecía haber sido puesto fuera de juego para dirigir una gran revuelta y tratar de alzarse con el poder. Ya sé que resulta un poco extraño que una población se lance a un conflicto interno con el enemigo marchando sin oposición hacia sus puertas, pero quizás no lo parezca tanto si tratamos de ver el asunto desde la perspectiva de sus protagonistas. Los políticos y funcionarios corruptos tenían claro que con Aureliano no había nada que negociar, y si este continuaba en el poder su única expectativa de futuro era la espada del verdugo, una reunión con las fieras en la arena del anfiteatro o formar parte de la decoración de alguna calzada colgando de una cruz, según fuera su condición social. Por el contrario, con los jefes de las tribus bárbaras siempre era posible intentar alcanzar un acuerdo y comprar su retirada a cambio de una elevada cantidad de dinero (público, por supuesto).</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Pero para que la rebelión alcanzara la magnitud que alcanzo era preciso que se les uniera una parte considerable de la población de la ciudad, ya que los funcionarios de la ceca apenas sumarían un par de centenares. ¿Qué podía llevar a simples ciudadanos a alzarse en apoyo de dirigentes corruptos y en contra de quien trataba de salvarlos y de sanear la administración? Es de suponer que, y como siempre, fue el miedo, la ignorancia y la desesperación. A los graves problemas que arrastraba el imperio desde hacía décadas, en Roma se había unido ahora el hambre. Cenobia de Palmira se había apoderado de Egipto, cortando el suministro de grano a la capital, provocando una brutal crisis de abastecimientos. A los políticos corruptos no debió de costarles mucho atraerse a un buen número de seguidores contándoles de que la culpa de sus males era de ese camorrista y feroz emperador procedente de Iliria, al que en Roma prácticamente nadie había visto nunca, y que ellos, políticos bien conocidos, senadores, negociarían acuerdos con Cenobia y con los bárbaros, resolviendo así todo fácil y rápidamente, sin ningún costo ni sacrificio. Justo lo mismo que los políticos siguen contando ahora y que la gente sigue esforzándose en creer.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Pero cometieron un error de cálculo, el mayor y más común de los errores: menospreciar a su enemigo. Aureliano podía haber sido derrotado, pero no vencido: rápidamente volvió a reunir a sus tropas, las reorganizo y les infundió ánimos. Luego, aprovechando que las tribus de alamanes y jutungos, sintiéndose seguros tras su victoria, se habían desperdigado por las llanuras centrales de Italia dedicándose al pillaje, los atacó por sorpresa, aniquilándolos.</div><div style="text-align: justify;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvW2WU_oIzYYaFxzwOLpT1h5F9E2X7gl82LPXSR-d_aTOClfxsC0LqNwnp-FlWXTFqUhv3Uojetsoykmwg-j50g9wHCrQ9tatUphAw-54hyphenhyphenXJSW0foDptjAO0iAiDTrIqLjfMylT8HqFg/" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="625" data-original-width="886" height="453" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvW2WU_oIzYYaFxzwOLpT1h5F9E2X7gl82LPXSR-d_aTOClfxsC0LqNwnp-FlWXTFqUhv3Uojetsoykmwg-j50g9wHCrQ9tatUphAw-54hyphenhyphenXJSW0foDptjAO0iAiDTrIqLjfMylT8HqFg/w640-h453/image.png" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Germanos ocupados... en sus cosas de germanos.</td></tr></tbody></table><br />Después de esa victoria, era el turno de los rebeldes de la capital.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Mientras Aureliano perseguía a los alamanes y a los pocos sobrevivientes de los jutungos, envió a parte de sus tropas para que aplastaran el motín. Estas se unieron a las cohortes urbanas, que hasta entonces no parece que hubieran hecho gran cosa, y se prepararon para retomar el control de la capital. Los rebeldes, por su parte, sabedores de lo que les esperaba con Aureliano, se atrincheraron en el monte Celio, una de las siete colinas originales de Roma. La batalla consiguiente derivó, como era de esperar, en una masacre, que nos dice mucho sobre la desesperación que se había adueñado de la población de la capital del imperio. Las fuentes hablan de siete mil muertos, aunque no aclaran si entre los amotinados, los soldados o ambos.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">La ceca de Roma fue clausurada, Felicissimus terminó ajusticiado, y con él muchos de sus cómplices y colaboradores, incluidos senadores corruptos, algo que el senado jamás le perdonaría a Aureliano. Posteriormente este reunificaría el imperio, destruyendo a los galo-romanos y a Palmira, reanudando así el suministro de grano a Roma. También trataría de restaurar, en la medida de lo posible, la moneda, y de reducir la gigantesca e inútil burocracia, extirpando de raíz y sin concesiones la corrupción para recuperar la eficacia de la administración.</div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEheqTBzeVu3dyuRjgooWtbQuMzSlG1nWkqT3N53RBNaNbdS0nFYBJdGSDXR7sNEFrPi_E8Y5aNMaDDIZcYZOJ1wvGHyEnnoLrKgfTMQLnXl5hstgYi13gQMWQBKVc8IDgsEcRYe1XPd_DY/" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="525" data-original-width="859" height="392" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEheqTBzeVu3dyuRjgooWtbQuMzSlG1nWkqT3N53RBNaNbdS0nFYBJdGSDXR7sNEFrPi_E8Y5aNMaDDIZcYZOJ1wvGHyEnnoLrKgfTMQLnXl5hstgYi13gQMWQBKVc8IDgsEcRYe1XPd_DY/w640-h392/image.png" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Busto de Aureliano y reconstrucción digital de su rostro.<br /><br /></td></tr></tbody></table><div style="text-align: justify;">Pero sería esta última lucha, la guerra contra la corrupción, la que sellaría su destino. El brillante general que derrotó, uno a uno, a todos los enemigos de Roma; el gran guerrero del que se decía que había matado a más de mil oponentes en combate; el héroe incorruptible..., alcanzaría su final apuñalado por la espalda <a href="https://blogtabula.blogspot.com/2018/05/aureliano-o-los-peligros-de-ser-un.html">por sus propios y corruptos guardaespaldas cuando más indefenso se encontraba</a>, agachado para beber junto a un arroyo.</div>Enrique Santamaría Urtiagahttp://www.blogger.com/profile/03913673616587651451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-32482457232732456732021-12-12T08:00:00.018+01:002023-12-14T19:20:47.905+01:00Mujeres crucificadas: la crucifixión como espectáculo en los anfiteatros de Roma<p style="margin: 0cm 0cm 0pt; text-align: justify;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-family: Times New Roman;"><span style="font-size: small;">Alfonso Mañas</span> <br /></span></span></p><p style="margin: 0cm 0cm 0pt; text-align: justify;"><span style="font-size: 10pt;"><span style="font-family: Times New Roman;">1.224 palabras, 8 minutos de lectura</span></span></p><p>La crucifixión era uno de los métodos usados en los anfiteatros para ejecutar a los condenados a muerte, tanto hombres como mujeres. Conocemos incluso el nombre de una de esas mujeres que sufrió tal castigo, Alcimilla. <br /><br />Probablemente una esclava, Alcimilla vivió a principios del siglo II en <i>Cumae</i>, o al menos murió allí. Solo sabemos de ella por un dibujo raspado sobre la pared de una taberna de la vecina ciudad de Puteoli, que la representa colgando de una cruz, clavada de pies y manos, con el cuerpo cubierto por líneas horizontales que probablemente pretenden representar las marcas de latigazos. El dibujo es muy esquemático, apenas un esbozo de la figura humana, pero el nombre Alcimilla grabado al lado deja claro que se trata de una mujer. <br /><br />Junto al de la crucificada, la pared está cubierta por muchos otros dibujos: gladiadores, fieras, tridentes… las imágenes típicas que podían verse en un anfiteatro durante un día de juegos, lo que sugiere que la escena de Alcimilla crucificada también tuvo lugar en la arena de un anfiteatro, probablemente el de <i>Cumae</i>, pues entre los dibujos aparece grabada la palabra “CVMIS”. <br /><br />La taberna cuya pared está tan ricamente decorada se encuentra en las cercanías del anfiteatro de Puteoli, por lo que es normal que quienes asistían a esos espectáculos (tanto en ese anfiteatro como en el de <i>Cumae</i> y resto de ciudades vecinas) entrasen ahí para reponer fuerzas, y que mientras conversaban entorno a una jarra de vino garabatearan sobre el yeso de la pared lo que habían visto sobre la arena. <br /><br /></p><p>Que la crucifixión era uno de los entretenimientos habituales ofrecidos en los anfiteatros lo sabemos por varias fuentes, como un anuncio pintado sobre un muro de Pompeya (datado hacia el año 50-79) que indica que en unos juegos que se celebrarán (precisamente) en la vecina ciudad de <i>Cumae</i> (a unos 50 km. de Pompeya) se ofrecerán, entre otros entretenimientos, “<i>cruciarii</i>” (literalmente ‘crucificados’).</p><p></p><p style="margin-left: 40px; text-align: left;"><i>CIL</i>, IV, 9983a: <br /><br /><i>Cumis gl(adiatorum) p(aria) XX / [et eorum] suppos[itici pu]gn(abunt) k(alendis) oct(obribus), III, pr(idie) n[onas octobres]: / cruciarii, ven(ationes) et vela er(unt) </i><br /><br />En <i>Cumae</i>, 20 parejas de gladiadores y sus suplentes lucharán el 1, 5 y 6 de octubre. Crucificados, cacerías y toldo habrá también. <br /></p><p style="text-align: left;"><br />Como vemos, el reo condenado a ser crucificado era llamado “<i>cruciarius</i>” (plural “<i>cruciarii</i>”). El uso del plural en la inscripción indica que iban a ser varios los individuos que serían crucificados durante esos tres días de juegos. <br /><br />Como cita la inscripción, un día de juegos en el anfiteatro se dividía en tres bloques de espectáculos: las cacerías (<i>venationes</i>, desde el amanecer hasta mediodía), las ejecuciones de condenados (a mediodía) y los combates de gladiadores (por la tarde). <br /><br />Las ejecuciones de mediodía, eufemísticamente (o irónicamente) llamadas por los romanos ‘juegos de mediodía’ (<i>ludi meridiani</i>), mostraban sobre la arena todo método de ejecución conocido por los romanos. Así, la crucifixión, uno de sus métodos preferidos, no podía faltar. <br /><br />Decimos que Alcimilla era probablemente una esclava porque su nombre era típico entre las esclavas de la época y porque la crucifixión era un método de ejecución reservado principalmente a los esclavos, de hecho se le llamaba ‘el castigo de los esclavos’ (<i>servile supplicium</i>). <br /><br /><br /><b>El problema de la crucifixión como entretenimiento </b><br /><br />Pese a la afición de los romanos a la crucifixión, su utilización como espectáculo anfiteatral planteaba un problema básico, pues todo lo que se ofrecía en la arena del anfiteatro debía ser entretenido de ver para el público, en el caso de las ejecuciones tenían que ser dinámicas y rápidas (condenados devorados por fieras, luchando a muerte con armas, etc.). Sin embargo, la crucifixión era todo lo contrario, estática y lenta, una persona clavada a una cruz agonizando inmóvil durante horas. <br /><br />La parte inicial de la crucifixión sí ofrecía dinamismo y era entretenida para el gusto de los espectadores de los ludi meridiani, pues consistía en la entrada en la arena de los condenados, su flagelación, clavarlos a las cruces y el izado de estas, pero una vez hecho eso, la crucifixión no ofrecía nada más. <br /><br />Evidentemente nadie iba al anfiteatro a ver a un condenado fijado a una cruz, inmóvil, agonizar durante horas, por lo que los organizadores de los juegos tuvieron que pensar en modos de convertir la crucifixión en un espectáculo atractivo para los espectadores. <br /><br />La solución más frecuente era soltar fieras, que devoraban al crucificado, lo cual ‘animaba’ la ejecución y aceleraba la muerte. Así se hizo en el año 80 durante la inauguración del Coliseo, y en el 177 con Blandina, aunque en este caso las fieras no atacaron a la santa (la cual fue bajada de la cruz y tuvo que ser ejecutada de otra forma). <br /><br />Otra solución habitual era prender fuego al crucificado, esto fue lo que hizo Nerón con los cristianos crucificados por el incendio del año 64, muchos de ellos crucificados en la arena del circo de Nerón, actual Vaticano. <br /><br /><b>Otras mujeres crucificadas </b><br /><br />Aparte de Alcimilla y Blandina, no conocemos el nombre de ninguna otra mujer que fuese crucificada en la arena, de las muchas que sufrieron esa pena (e.g. las cristianas crucificadas durante los juegos de Nerón en 64). Sabemos que una liberta llamada Ida fue crucificada por Tiberio, pero ignoramos si dicha crucifixión tuvo lugar en un anfiteatro. En cualquier caso, la crucifixión de mujeres fue algo habitual en la época, pues a ello se refieren muchos autores (e.g. Plauto, Petronio, Apuleyo, etc.). <br /><br /><b>En la cultura de hoy (literatura, cine, TV) </b><br /><br />La crucifixión en la arena, y la crucifixión de mujeres en la arena, es un aspecto de los juegos romanos que no ha sido muy tratado en la actualidad, a diferencia de otros (como los <a href="http://blogtabula.blogspot.com/search/label/Gladiadores%20y%20espect%C3%A1culos " target="_blank">gladiadores</a>). <br /><br />Sienkiewicz, en su novela <i>Quo Vadis</i> (1895), recrea la escena de los crucificados en la arena, mujeres incluidas (capítulo 57), aunque no cita ningún método para acelerar la muerte, los deja simplemente ahí colgando, para el aburrimiento de los espectadores (como señala el propio Sienkiewicz). <br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEglpuIStWfLfP9xPxFe5_bs0rmFH8xqAh7bX4o0A_toBzMsXhU9Iv69L4hjEoH9fxBIX6s6Y0s4HIjgBDhlbXCSzTZ86BivvwWx9Re2_LDtmRvLctQmlxWRHZnPTDeEM6csRp9sPdiGtw7pSKyQ0XSgrl8mi0_6uDfypokERja3PN1qGxMy_2Kpcdw3Eg=s686" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="491" data-original-width="686" height="229" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEglpuIStWfLfP9xPxFe5_bs0rmFH8xqAh7bX4o0A_toBzMsXhU9Iv69L4hjEoH9fxBIX6s6Y0s4HIjgBDhlbXCSzTZ86BivvwWx9Re2_LDtmRvLctQmlxWRHZnPTDeEM6csRp9sPdiGtw7pSKyQ0XSgrl8mi0_6uDfypokERja3PN1qGxMy_2Kpcdw3Eg=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Ilustración de la novela <i>Quo Vadis, </i>capítulo 57 (Jan Styka, 1901).<br /></td></tr></tbody></table><p style="text-align: left;">En el capítulo 62 Sienkiewicz recrea la escena de un crucificado al que le sueltan un oso (el mismo espectáculo que se ofreció en la inauguración del Coliseo, según Marcial). </p><p style="text-align: left;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjkvWy5tVi-LlXNbTMGNN4U4Z6Dx7R8hJyAdFkVDmEByYw3ZTWPyZtKr9F2tNnSD-p66J77ApaQSmSqf_5-jR0OTNP2Hb_bHCvtdPMIqZvqtr4DWmtv4t7p4IOXlFUeq6UozwNQtW6-jYxURI3KAwlQfwW8GqRV6NHjHdxoQ9Pjk8c4q4GLDM-XDRTHjg=s689" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="689" data-original-width="509" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjkvWy5tVi-LlXNbTMGNN4U4Z6Dx7R8hJyAdFkVDmEByYw3ZTWPyZtKr9F2tNnSD-p66J77ApaQSmSqf_5-jR0OTNP2Hb_bHCvtdPMIqZvqtr4DWmtv4t7p4IOXlFUeq6UozwNQtW6-jYxURI3KAwlQfwW8GqRV6NHjHdxoQ9Pjk8c4q4GLDM-XDRTHjg=s320" width="236" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Ilustración de la novela <i>Quo Vadis</i>, capítulo 62 (Jan Styka, 1901).</td></tr></tbody></table><br />En las versiones cinematográficas de la novela ninguna de esas dos escenas es mostrada, salvo en la versión de 2001 (rodada tras el éxito de <a href="http://blogtabula.blogspot.com/2020/05/20-anos-de-gladiator.html" target="_blank"><i>Gladiator</i></a> el año anterior), en la que se recrea la escena de la arena cubierta de cruces, algunas con mujeres en ellas. <p></p><p style="text-align: left;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiEuot1v2WYgWnmOPo2-WlV7nmiWncpzLKZ6EMy3562eBXhonVe8N11cT_0Tqpn4Oua-I0AZu0t7_0dyys73lWcVLS91VX_c9XLmQ1fgbxlOpyv3DPZv7Pwa6kwYiCa5wCVedYUCFlI5Pk_y8xza4zYNyuzzh6SJ_2FepaoEiIeDd8yGrrSxYSGZoZFug=s1280" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="706" data-original-width="1280" height="177" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiEuot1v2WYgWnmOPo2-WlV7nmiWncpzLKZ6EMy3562eBXhonVe8N11cT_0Tqpn4Oua-I0AZu0t7_0dyys73lWcVLS91VX_c9XLmQ1fgbxlOpyv3DPZv7Pwa6kwYiCa5wCVedYUCFlI5Pk_y8xza4zYNyuzzh6SJ_2FepaoEiIeDd8yGrrSxYSGZoZFug=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Fotograma de la película <i>Quo Vadis</i> (2001). </td></tr></tbody></table><br />Prender fuego al crucificado para acelerar la muerte en la arena es mostrado en la película <i>Espartaco</i> (2004). <p></p><p style="text-align: left;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiwkP8I6Wz2dRk6SykECX2q77Jgdl-TR71BO1yWHp-6LPBs3A9H_Jin4eHNGjru8ITVR31pmV9tuGw1oVSnz9BvfsEog9cNamQFH1c9YI2UscasO5VQvxA7F1xyhhIyFoLYBRRVgIfKmQxvJzvpSLZgJFVo6OysQYm1WR8oU4pAjn9FoBQvTe9wQvLcfw=s1280" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="730" data-original-width="1280" height="183" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiwkP8I6Wz2dRk6SykECX2q77Jgdl-TR71BO1yWHp-6LPBs3A9H_Jin4eHNGjru8ITVR31pmV9tuGw1oVSnz9BvfsEog9cNamQFH1c9YI2UscasO5VQvxA7F1xyhhIyFoLYBRRVgIfKmQxvJzvpSLZgJFVo6OysQYm1WR8oU4pAjn9FoBQvTe9wQvLcfw=s320" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Fotograma de la película <i>Espartaco</i> (2004). </td></tr></tbody></table><br />Fuera ya del ámbito histórico, la imagen de una mujer crucificada resulta siempre muy llamativa en nuestra cultura occidental, por el contraste que ofrece con la figura del crucificado por antonomasia, Cristo, de manera que es usada de vez en cuando para impresionar a los espectadores. Así, cuando en la popular serie de los años 90 <i>Xena: princesa guerrera</i> buscaban un final de traca para la cuarta temporada, que conmocionara a la audiencia, decidieron crucificar a Xena (y a su compañera, a las dos). Eso sí, en un guiño a la historia, ambas son crucificadas por los romanos (la moraleja del episodio podría ser que nunca es buena idea meterse con los romanos, ni siquiera para la poderosa Xena). <br /> <br /><br /><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjMP_cS-lxf1Wb9jirTxeVmspwYQu23S18fHXxMKfL8D071gDMp6574cJRnKY442KGizCtx-J84OjkPadfdZc5SfOXVftiku0M8ip9YRTT1CezIo0WxfeaI4BLVG19EcZ-OdzmyOQ5a2rScboTwY_0cBkusnY5bKweTGohnLhcrujTOZJSKZQOYBPWt_w=s1200" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="1200" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjMP_cS-lxf1Wb9jirTxeVmspwYQu23S18fHXxMKfL8D071gDMp6574cJRnKY442KGizCtx-J84OjkPadfdZc5SfOXVftiku0M8ip9YRTT1CezIo0WxfeaI4BLVG19EcZ-OdzmyOQ5a2rScboTwY_0cBkusnY5bKweTGohnLhcrujTOZJSKZQOYBPWt_w=w215-h161" width="215" /></a></div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhv6fTDpo_BoHOUxm7BbXHA2xw3XTdXN4ZI8EU1PT1RAu0v3WyJ9nswxUK5-GTo83Z9ZRZlhkBQXi5LYgvGyBboZxKS4jS3nYNtquqMQTQC5NWpIgtGkdk_qtD3rMUMd4bGY_WyxTvouw9wNZ3j9TAi810pRiEFWSy1RoSBnF-LPZRcD6xYsed8iqvQvA=s752" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="752" height="190" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhv6fTDpo_BoHOUxm7BbXHA2xw3XTdXN4ZI8EU1PT1RAu0v3WyJ9nswxUK5-GTo83Z9ZRZlhkBQXi5LYgvGyBboZxKS4jS3nYNtquqMQTQC5NWpIgtGkdk_qtD3rMUMd4bGY_WyxTvouw9wNZ3j9TAi810pRiEFWSy1RoSBnF-LPZRcD6xYsed8iqvQvA=w248-h190" width="248" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La crucifixión de Xena (temporada 4, episodio 21, 1999). </td></tr></tbody></table><p></p><p></p><p><br /></p><p style="text-align: right;"><b>Sobre el autor:</b><br /><span style="font-size: x-small;">alfonsomanas1@hotmail.com <br />Miembro del grupo de investigación CTS-545 (área de Historia del Deporte) de la Universidad de Granada <br />Consejero Editorial de <i>The International Journal of the History of Sport</i></span><span style="font-size: x-small;"><br /><br /></span><br /></p><p style="text-align: center;">---------- O ----------<br /></p><p style="text-align: left;"> <br /><br />Para saber más sobre las crucifixiones en la arena, los <i>ludi meridiani,</i> y el papel de las mujeres en los juegos de anfiteatro, ver las páginas 136 y siguientes de <i><a href="https://www.planetadelibros.com/libro-gladiadores/268792" target="_blank">Gladiadores: el gran espectáculo de Roma</a></i> (edición 2018). <br /> </p><p><style>@font-face
{font-family:"Cambria Math";
panose-1:2 4 5 3 5 4 6 3 2 4;
mso-font-charset:0;
mso-generic-font-family:roman;
mso-font-pitch:variable;
mso-font-signature:-536870145 1107305727 0 0 415 0;}@font-face
{font-family:Calibri;
panose-1:2 15 5 2 2 2 4 3 2 4;
mso-font-charset:0;
mso-generic-font-family:swiss;
mso-font-pitch:variable;
mso-font-signature:-536859905 -1073697537 9 0 511 0;}p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal
{mso-style-unhide:no;
mso-style-qformat:yes;
mso-style-parent:"";
margin:0cm;
margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:12.0pt;
font-family:"Times New Roman",serif;
mso-fareast-font-family:"Times New Roman";
mso-fareast-language:ES;}span.MsoEndnoteReference
{mso-style-unhide:no;
mso-style-parent:"";
vertical-align:super;}p.MsoEndnoteText, li.MsoEndnoteText, div.MsoEndnoteText
{mso-style-priority:99;
mso-style-unhide:no;
mso-style-link:"Texto nota al final Car";
margin:0cm;
margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:10.0pt;
font-family:"Times New Roman",serif;
mso-fareast-font-family:"Times New Roman";
mso-fareast-language:ES;}a:link, span.MsoHyperlink
{mso-style-unhide:no;
mso-style-parent:"";
color:blue;
text-decoration:underline;
text-underline:single;}a:visited, span.MsoHyperlinkFollowed
{mso-style-noshow:yes;
mso-style-priority:99;
color:purple;
mso-themecolor:followedhyperlink;
text-decoration:underline;
text-underline:single;}p.MsoNoSpacing, li.MsoNoSpacing, div.MsoNoSpacing
{mso-style-priority:1;
mso-style-unhide:no;
mso-style-qformat:yes;
mso-style-parent:"";
margin:0cm;
margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:11.0pt;
font-family:"Calibri",sans-serif;
mso-ascii-font-family:Calibri;
mso-ascii-theme-font:minor-latin;
mso-fareast-font-family:Calibri;
mso-fareast-theme-font:minor-latin;
mso-hansi-font-family:Calibri;
mso-hansi-theme-font:minor-latin;
mso-bidi-font-family:"Times New Roman";
mso-bidi-theme-font:minor-bidi;
mso-fareast-language:EN-US;}span.TextonotaalfinalCar
{mso-style-name:"Texto nota al final Car";
mso-style-priority:99;
mso-style-unhide:no;
mso-style-locked:yes;
mso-style-link:"Texto nota al final";
mso-ansi-font-size:10.0pt;
mso-bidi-font-size:10.0pt;
font-family:"Times New Roman",serif;
mso-ascii-font-family:"Times New Roman";
mso-fareast-font-family:"Times New Roman";
mso-hansi-font-family:"Times New Roman";
mso-bidi-font-family:"Times New Roman";
mso-fareast-language:ES;}.MsoChpDefault
{mso-style-type:export-only;
mso-default-props:yes;
font-size:11.0pt;
mso-ansi-font-size:11.0pt;
mso-bidi-font-size:11.0pt;
font-family:"Calibri",sans-serif;
mso-ascii-font-family:Calibri;
mso-ascii-theme-font:minor-latin;
mso-fareast-font-family:Calibri;
mso-fareast-theme-font:minor-latin;
mso-hansi-font-family:Calibri;
mso-hansi-theme-font:minor-latin;
mso-bidi-font-family:"Times New Roman";
mso-bidi-theme-font:minor-bidi;
mso-fareast-language:EN-US;}.MsoPapDefault
{mso-style-type:export-only;
margin-bottom:10.0pt;
line-height:115%;}div.WordSection1
{page:WordSection1;
mso-endnote-numbering-style:arabic;}</style></p>Roberto Pastranahttp://www.blogger.com/profile/13128078798890547612noreply@blogger.com3Granada, España37.1773363 -3.59855718.8671024638211549 -38.7548071 65.487570136178846 31.5576929tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-85599883920440047362021-11-16T12:29:00.005+01:002022-03-15T19:51:22.658+01:00Legion Gold<p style="text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrccT1luNZmL6lAN3WoXUUhOTRrW4ACsr6a7mMryx6_nTJXWtlhd4b11QgkwGX5uDliUfhZ38oRFCGpYNqWeytlCn3MzAKvdG2d97cTpASC6SE0rZYCoC5X77wuFeBQ3Qata9tQzp4lLg/s460/portada.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="215" data-original-width="460" height="150" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrccT1luNZmL6lAN3WoXUUhOTRrW4ACsr6a7mMryx6_nTJXWtlhd4b11QgkwGX5uDliUfhZ38oRFCGpYNqWeytlCn3MzAKvdG2d97cTpASC6SE0rZYCoC5X77wuFeBQ3Qata9tQzp4lLg/s320/portada.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Hace unos veinte años salió al mercado
el juego “Legion”, que tuvo un gran éxito y una expansión, que de aquella era
el máximo símbolo del éxito para un videojuego. Era una época en que se
innovaba en los juegos de estrategia y te los vendían completos. Hoy, vivimos
en una época en que los juegos son refritos de fórmulas ya conocidas, que salen
a medio hacer, y luego todo son expansiones o DLCs, que dicen que lo
mejoran, pero no son más que la terminación del juego a plazos, para que gastes
más y durante más tiempo.</span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span></span></span></span></p><a name='more'></a><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span><p></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Así que se agradece a Slitherine que
actualicen a los sistemas operativos actuales y, de paso, mejoren el juego
original de Legion, más su expansión, en un solo paquete, al que han
llamado <a href="https://store.steampowered.com/app/1284080/Legion_Gold/?l=spanish&curator_clanid=4777282&utm_source=SteamDB">“Legion Gold”</a>.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es una llamada a
los nostálgicos de los juegos de estrategia de principio de siglo y un
recordatorio de que los buenos juegos no pierden solera con el tiempo.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghd0SZDlSLhd-Wy7_0JsR08tGpsIDcD4vG-SZDFCcaPdPDeJ6nXyLWp7ILL4f0zQSHgdflmfC_B6FRm_GG6vLIDEfasubWpJY8YYSrGHW19t7UdT_PIEZr6f49fWmRjvq5DOzBG_kf9e0/s800/campa%25C3%25B1as.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghd0SZDlSLhd-Wy7_0JsR08tGpsIDcD4vG-SZDFCcaPdPDeJ6nXyLWp7ILL4f0zQSHgdflmfC_B6FRm_GG6vLIDEfasubWpJY8YYSrGHW19t7UdT_PIEZr6f49fWmRjvq5DOzBG_kf9e0/w400-h300/campa%25C3%25B1as.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Hay varias campañas para escoger y disfrutar</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">En “Legion Gold” Los jugadores asumen
los roles de una nación o ciudad-estado en el período de tiempo del antiguo
imperio romano. El objetivo es construir y expandir su nación para dominar el
mundo conocido, que incluye Italia, Bretaña, Hispania, Alemania y Galia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Tendrás la opción de jugar como los
romanos o como otra tribu, tratando de repeler a las hordas invasoras o
conquistadoras. El juego es fiel al período y la mayoría de las unidades militares
son las mismas que realmente existieron durante esa época.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Además de ordenar tus fuerzas, también
podrá completar estructuras dentro de tus ciudades, y actualizarlas, aumentando
así su productividad y estatus. Para ello, obviamente, debes conquistar a las
naciones de los alrededores, aunque también puede utilizar medios políticos y
diplomáticos para pacificar a tus vecinos.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhoJeu-r0nFNd2qpk0a8ilZUwzEif6HvKuOP9EOISG7XMg1tIF5gklSD2wVlyfpgQxpH_B3nGr2bWLoo2BPfH2_KBfCGjCs-0pEbxBk7z9rYNyhfF9LhpCblq9iY5-QqidBC0f79WaFxxc/s1024/mapa.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhoJeu-r0nFNd2qpk0a8ilZUwzEif6HvKuOP9EOISG7XMg1tIF5gklSD2wVlyfpgQxpH_B3nGr2bWLoo2BPfH2_KBfCGjCs-0pEbxBk7z9rYNyhfF9LhpCblq9iY5-QqidBC0f79WaFxxc/w400-h300/mapa.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pronto Hispania hablará latín. Es cuestión de unos siglos nada más.</td></tr></tbody></table><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; text-align: justify;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; text-align: justify;">El juego se divide esencialmente en dos
fases: movimiento/construcción y fase de combate. Durante tu turno de
movimiento, verás qué unidades están disponibles y dónde pueden moverse. </span><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; text-align: justify;">También puedes abrir la pantalla de ciudades, administrarlas, reclutar
ejércitos o construir edificios.</span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; text-align: justify;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDa4LTZmJUf4m0GU7vib3cUXAgP4corGS_Gro8_AebuYSaxarjTd607Guqm0gUHV4PGf_uVYYR_gIErYDaVE08u2OSZNuKI21O4bQd_P34eXoz1QSb2g7QeZFSc5svmCxLRyAF4fpG4mw/s1280/ciudad.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDa4LTZmJUf4m0GU7vib3cUXAgP4corGS_Gro8_AebuYSaxarjTd607Guqm0gUHV4PGf_uVYYR_gIErYDaVE08u2OSZNuKI21O4bQd_P34eXoz1QSb2g7QeZFSc5svmCxLRyAF4fpG4mw/w400-h225/ciudad.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Una ciudad de la Galia Cisalpina romanizada hasta las trancas</td></tr></tbody></table><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; text-align: justify;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; text-align: justify;">Si, durante tu turno, te has enfrentado
al enemigo, aparecerá la pantalla de combate, que fue la gran novedad de “Legion”
en su época y que pocos han seguido después.</span></div><p></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En
este juego no manejas tus unidades, sino que las colocas en el terreno y les
das órdenes a seguir para la batalla que viene, que será automática, en tiempo
real, y podrás ir viendo como tus unidades obedecen las órdenes dadas… y son
machacadas o consiguen la gloria. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjc344jDDU1fraYkPQDdrBwgaaaIDTSdIjw08nYrsFs_dDnrbhWzP9b8kskvW3pgsAAjl4TBeNrCBjgWFc0iEhvgs1ZouDhUKU5inJgymO4saJt8ZZb32FMQjGr3-DUEGxWDS_B5hxLrZ4/s800/planbatalla.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjc344jDDU1fraYkPQDdrBwgaaaIDTSdIjw08nYrsFs_dDnrbhWzP9b8kskvW3pgsAAjl4TBeNrCBjgWFc0iEhvgs1ZouDhUKU5inJgymO4saJt8ZZb32FMQjGr3-DUEGxWDS_B5hxLrZ4/w400-h300/planbatalla.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Planificando una brillante táctica contra ¿pocos enemigos?</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt;">Así
que el jugador es un espectador pasivo y no tiene que ir clicando cada dos por
tres órdenes a sus soldados. Solo sufrir por su impericia o felicitarse por su
genio táctico, mientras contempla como sus hombres pelean en escenarios muy
logrados.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Antes de la batalla, puedes dar varias
órdenes a seguir, como formar una unidad en una cuña y hacer que se dirijan al
corazón del enemigo inmediatamente, mientras colocas los arqueros en una
formación de tablero de ajedrez, o hacer que se demoren, y luego marchen al
ataque. Hay variedad de estrategias a seguir, según el pueblo que elijas. Desde
luego, los romanos destacan por su mayor capacidad táctica.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQ0At-VQpveQPgjfoSaBtpz0DCdme0-hW4PJEFTQs9QXXACFrOf40aoAHb1XzS1o3JaoPobMm2l0er7x7K6ahIhD69eYaPcwXiRPIhw8-qL0to9KEPzYK7fIwzpViD40lps77jBIprN1A/s1280/batalla1.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQ0At-VQpveQPgjfoSaBtpz0DCdme0-hW4PJEFTQs9QXXACFrOf40aoAHb1XzS1o3JaoPobMm2l0er7x7K6ahIhD69eYaPcwXiRPIhw8-qL0to9KEPzYK7fIwzpViD40lps77jBIprN1A/w400-h225/batalla1.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pues eran bastantes, uy, uy... maldita inteligencia militar</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt;">Al igual que tiene fase de movimiento y fase
de combate, el juego también tiene una dualidad gráfica. La fase de movimiento
se parece a un juego de mesa animado, donde los mapas están divididos en
hexágonos y las áreas sombreadas muestran la extensión posible del movimiento.
El aspecto es colorido y exuberante, pero también bastante plano, típico de un
juego de principios de siglo.</span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgP8UdBAGiEPauffWVJ-g_shy91ijgqe-yU8qosstthKE5trJP14BeIWM4cr2L9v9Ub52VDp9PFpttadsJEL-z_miGSpejxpzqT-jsv4gYGce6PWwhiAG97YxvrG4zBm29-1M52AfzrdX0/s800/mapa2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgP8UdBAGiEPauffWVJ-g_shy91ijgqe-yU8qosstthKE5trJP14BeIWM4cr2L9v9Ub52VDp9PFpttadsJEL-z_miGSpejxpzqT-jsv4gYGce6PWwhiAG97YxvrG4zBm29-1M52AfzrdX0/w400-h300/mapa2.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">De paseo conquistador por el sur de Italia</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt;">Durante la fase de combate, la animación
es mucho mejor. Tienes unidades alineadas a un lado de la pantalla y debes determinar
cómo atacarán a sus rivales al otro lado. Una vez que hayas dado todas tus órdenes,
presionas el botón de combate y observas cómo se desarrolla la batalla. Ojo,
hay niebla de guerra, así que puede que los enemigos que observas al otro lado
no sean todos los que hay. A menos que los hayas espiado bien. Mucho cuidado
con los escenarios boscosos, que los árboles esconden secretos.</span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEilLE9ESyNrGtyj0ZKveL9iJ-t3b11EF_-zL9TbYQ3FrmMGCjBILSvryLTWb3tRKeBPi2rLgArgotCq2FEl3L_fbI6V_dRvoKFVlWYBhMkvR-IshhBGRUavbho-TW2Ve7dTsJHVYxFqcsw/s480/batalla2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="360" data-original-width="480" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEilLE9ESyNrGtyj0ZKveL9iJ-t3b11EF_-zL9TbYQ3FrmMGCjBILSvryLTWb3tRKeBPi2rLgArgotCq2FEl3L_fbI6V_dRvoKFVlWYBhMkvR-IshhBGRUavbho-TW2Ve7dTsJHVYxFqcsw/w400-h300/batalla2.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Menuda matanza en primera línea</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt;">La interfaz del jugador es buena y
sencilla, permite a los jugadores manejar con soltura el juego. Ya sea que
hayas jugado a este estilo de juego antes o no, descubrirás que los elementos
de control y hacer clic son fáciles de aprender.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">¿Qué hay nuevo en esta versión moderna? Pues
el juego ha agregado tres niveles de dificultad, tres nuevas campañas (que
cuentan con nuevas razas, unidades, estructuras y entornos ambientales), un
sistema mejorado de batallas, y un pulido de los aspectos diplomáticos,
económicos y de gestión del juego.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">“Legion Gold” es un sólido juego de
estrategia por turnos, un <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>calculado viaje
a través de la historia, que obliga a los jugadores a pensar en sus turnos de
movimiento y también en sus planes de batalla. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmIyRTK6inIk3DoYJ7xQ23-OcwYXEznNHtpcq41LX99BOIaObCSly26sV4IVJbLLpFtAAUosgSSOgDx0TCXNCd3xrl_E-nG5ivCygNiDQlkfStYM64I-rzPVtsBp9h1Y2IRWZeFMj0AZc/s800/estadistica.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="800" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmIyRTK6inIk3DoYJ7xQ23-OcwYXEznNHtpcq41LX99BOIaObCSly26sV4IVJbLLpFtAAUosgSSOgDx0TCXNCd3xrl_E-nG5ivCygNiDQlkfStYM64I-rzPVtsBp9h1Y2IRWZeFMj0AZc/w400-h300/estadistica.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Y no hay juego de estrategia sin pantalla de estadística.</td></tr></tbody></table><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt;"> </span><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt;">Si
deseas tener más control sobre la fase de lucha, entonces hay para elegir muchos
otros juegos de combate. Sin embargo, si desea un juego que equilibre de forma
sencilla pero eficaz los distintos aspectos de un juego de estrategia/civilización
y los combine con una IA de combate que te obliga a un desafío cerebral antes
de batallar, entonces podrías encontrar que este juego es digno de conquistar.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Los clásicos nunca mueren. Solo se
actualizan. “Legion Gold” es el mejor ejemplo. </span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Os dejo con un pequeño vídeo:</span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 19.5pt; margin-bottom: 19.5pt; text-align: justify;"><span face="Verdana, sans-serif" style="color: #222222;"><span style="font-size: 15.3333px;"><br /></span></span><span face=""Verdana",sans-serif" style="color: #222222; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/ymifQI3aXMA" width="320" youtube-src-id="ymifQI3aXMA"></iframe></div><br /><p></p>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-25029094256812291582021-09-18T22:15:00.029+02:002021-10-03T00:14:04.748+02:00Decimo Junio Bruto... y gallego<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfh17Q04ep77anU4MUiu7qUpUigsmCuzeMx21iyiB0ATlwRyrM6kLonj7pRc4M7HV7PYlQ4qXQzwQO8v8xu9uusM4XY91BUy8RXZIaP4-mMehKe6jVJbJ-skurVkC4wAxsNJI1YgjHCbk/s200/decimo_junio_bruto_el_gallego.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="199" data-original-width="200" height="318" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfh17Q04ep77anU4MUiu7qUpUigsmCuzeMx21iyiB0ATlwRyrM6kLonj7pRc4M7HV7PYlQ4qXQzwQO8v8xu9uusM4XY91BUy8RXZIaP4-mMehKe6jVJbJ-skurVkC4wAxsNJI1YgjHCbk/w320-h318/decimo_junio_bruto_el_gallego.jpg" width="320" /></a></div><br /> <p></p> A la hora de explorar y conquistar territorios desconocidos, usando vagas excusas, nadie mejor en la Historia que un gobernador romano. A uno de ellos el Senado le pidió que persiguiera a unos “ladrones” y aprovechó la ocasión para abrirse paso con su ejército hasta el fin del mundo conocido, cruzar el mítico río del Olvido y someter a pueblos bárbaros “de largas cabelleras”.<br /><br />Contemos su historia.<span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Cuando nació,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>allá por la década de 180 a.C., Décimo Junio Bruto era un romano predestinado
a triunfar o morir en el intento. Su familia decía descender del mítico Junio
Bruto que se había hecho el tonto (brutus) para lograr la expulsión de los
reyes de Roma. Desde aquella, sus antepasados se habían empeñado en dar magistrados a la república cada generación hasta
llegar a su padre, Marco Junio Bruto, que fue cónsul en el 178 a.C.. Con este
pasado ejemplar a cuestas, estaba claro que, si no igualaba a su progenitor,
por lo menos, Décimo sería un fracasado social en la exigente élite romana.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero su familia lo educó de primera para
afrontar su futuro. Tanto en los aspectos militares como en los culturales, los Junio Bruto eran conocidos por su cultura y afición al helenismo. Por
ejemplo, su hermano mayor Marco sería uno de los juristas más importantes en la
historia del derecho romano y uno de los padres del Derecho Civil, mientras que
nuestro Bruto sería el mecenas del poeta trágico Lucio Attio, del que apenas
nos quedan unos versos, pero que fue muy reconocido en su época y al que
Cicerón llegaría a conocer en su juventud, recordando su conversación como uno
de los grandes momentos de su vida.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUBCsZdj3mPtanzd-XoKvtchMJ86vl2vXyxOlgG-PJIpwRLulSpTZF0cKND87vINB9f2u3CTw4O2v3TrVzAoCP4rdUyGHFwDYX7CL1NAZqfzPqHv9YR2ekVGW4mJT0VExdFKCOIxFKeCA/s1293/patricioocioso.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="1293" height="279" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUBCsZdj3mPtanzd-XoKvtchMJ86vl2vXyxOlgG-PJIpwRLulSpTZF0cKND87vINB9f2u3CTw4O2v3TrVzAoCP4rdUyGHFwDYX7CL1NAZqfzPqHv9YR2ekVGW4mJT0VExdFKCOIxFKeCA/w400-h279/patricioocioso.jpg" title="Patricio ocioso recibiendo a su poeta de guardia" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Patricio recibiendo a su poeta de guardia</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esta tradición familiar, la educación
exclusiva y el mundo aristocrático en el que vivía, convirtió a Décimo Junio
Bruto en un claro partidario de los conservadores, los romanos de verdad, y
acérrimo enemigo de los tribunos de la chusma plebeya, los desclasados que no
paraban de exigir derechos y prebendas.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Según
crecía, Bruto fue ocupando poco a poco todos los cargos de magistrado, hasta
llegar a la pretura en el 141 a.C y gastarse un pastón en montar unos Juegos
Apolinares muy recordados en años posteriores, que le valdrían ganar el
consulado en 138 a.C. Pero se acabó el derroche. Desde ese momento se acabaron
los regalos a la chusma.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihneqJtCWS9ktOwY_8YHjd53gXXLGFOHaRIhyaaVRLwLpVLEgu9ePxdsjRbQpL9fUzNKErwRnh9dsF7swGW2UyWmT0la5_ZXISlTaDZWUjSx-HqAO9jnllicjGrfej8L-nl3Y4kdtIFvI/s1600/juegos+apolinares.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="838" data-original-width="1600" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihneqJtCWS9ktOwY_8YHjd53gXXLGFOHaRIhyaaVRLwLpVLEgu9ePxdsjRbQpL9fUzNKErwRnh9dsF7swGW2UyWmT0la5_ZXISlTaDZWUjSx-HqAO9jnllicjGrfej8L-nl3Y4kdtIFvI/w400-h210/juegos+apolinares.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Bruto dando satisfacción a la chusma plebeya</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> En su año de consulado estuvo en continua
lucha con los tribunos plebeyos y sus odiosas peticiones. Sabemos que se negó a
comprar cereal para repartirlo al pueblo, ¡Qué lo quieren todo gratis,
caramba!, y que se opuso otra vez a los tribunos cuando quisieron ejercer su
derecho de eximir a gente de la recluta militar, ¡Que no, que la mili hace
hombres a esos miserables!, hasta el punto de acabar en prisión durante un
tiempo por orden de uno de los tribunos defensores de su odiada chusma. Todo un escándalo, tal como luego recordarían con espanto Cicerón y Tito Livio.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El año siguiente, el Senado lo envió de procónsul
a la Hispania Ulterior. Su misión principal era pacificar la zona de Lusitania
y limpiarla de las <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“bandas de ladrones” </i>que,<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> </i>según Apiano, abundaban por la zona, después de que los
romanos acabaran con Viriato mediante el soborno de sus amigos fieles, que acabaron siendo mucho más
traidores.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0DE4gax4m_wkd4SFm2RfHhpRql6lu7r7t2AVSYpY74gNgn0NW-Vxfa3EdAHLp5KP1qcxUfZhBLhxhLhh2MjeadF-4WdNkofxqoa-edbL_omT9nKrAMqjdmQeNRfEff3le2nk7mhEXFzI/s640/viriatoapiolado.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="640" data-original-width="480" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0DE4gax4m_wkd4SFm2RfHhpRql6lu7r7t2AVSYpY74gNgn0NW-Vxfa3EdAHLp5KP1qcxUfZhBLhxhLhh2MjeadF-4WdNkofxqoa-edbL_omT9nKrAMqjdmQeNRfEff3le2nk7mhEXFzI/w300-h400/viriatoapiolado.jpg" width="300" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Viriato y su último mal despertar</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Una misión de limpieza y dar esplendor que
Décimo se tomó a lo grande, como Bruto que era.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Tan a lo grande que muchos
autores antiguos escribirán sobre ello, aunque fuese solo de pasada. Porque su
avance fue el mayor en la conquista de Hispania desde Escipión en la II Guerra
Púnica.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Empezando desde Olisipo
(Lisboa), que fortificó, Junio Bruto emprendió la marcha Tajo arriba, giró
hacia el norte, por el interior del actual Portugal, y avanzó hasta asegurar y
extender el poder romano desde el Tajo hasta el Duero, que también cruzó y se
piensa que no paró de conquistar y dar estopa hasta el Miño y actual sur de
Galicia. No cabe duda que se tomó en serio la limpieza. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjp35jMhTfLPHDTk-IwWPeDMwhQvROEXYtvvp4ufhpdky9C1HeReYEipxebObbuHhaGLYIG3gYGdZaeqog-FePNhUTGpuShcAzx6d5LAHh_hWZYjRBQH3E8aybxnasT9kO1m3DjvSmoaCY/s589/conquista_gallaecia.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="460" data-original-width="589" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjp35jMhTfLPHDTk-IwWPeDMwhQvROEXYtvvp4ufhpdky9C1HeReYEipxebObbuHhaGLYIG3gYGdZaeqog-FePNhUTGpuShcAzx6d5LAHh_hWZYjRBQH3E8aybxnasT9kO1m3DjvSmoaCY/s320/conquista_gallaecia.png" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Mapa sobre la conquista del noroeste con el tour de Bruto</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Desde luego, entre sus motivaciones también
estaba el ansia de botín y prestigio propia de los gobernadores romanos, que
aprovechaban sus etapas provinciales para forrarse los bolsillos en honor de la
república y, de paso, ganar gloria y bellas citas en los anales.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En su
campaña, la zona entre el Tajo y el Duero fue relativamente fácil de someter,
porque ya había sufrido mucho contacto con Roma, pero al llegar al Duero se tuvo que
enfrentar a las tribus del norte, que le ofrecieron batalla el 9 de junio de
137 a.C. Un evento bélico que era justo lo que Bruto y cualquier general romano
buscaban en sus expediciones, porque vencer y matar a un montón de bárbaros en
batalla campal era el pasaporte al triunfo en Roma y el sueño de cualquier
senador desde su más tierna infancia. Cuantos más bárbaros apiolados por la
gloria de Roma y el prestigio propio, tanto mejor. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Por supuesto, Junio Bruto venció
a los bárbaros. Según Orosio, se esmeró en la tarea, pues
dejó a 50.000 muertos desperdigados por el campo e hizo 6000 prisioneros. Pero
Orosio no es famoso por sus cálculos y seguro que exagera un poco.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBryuwOFg7id46DvVn94AE9wuguhdPEgCOwisPozinACcTXmtCLYtm8N0xypZ9K36Q9AZbaghRbiWh_CRg6IVCoxMWD92vIiTtXEWGC1Z3tfw3Qg-YZiCkkE5pVhatBB44GsvF2Qh6svI/s1600/legionariosigloIIac.JPG" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1105" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBryuwOFg7id46DvVn94AE9wuguhdPEgCOwisPozinACcTXmtCLYtm8N0xypZ9K36Q9AZbaghRbiWh_CRg6IVCoxMWD92vIiTtXEWGC1Z3tfw3Qg-YZiCkkE5pVhatBB44GsvF2Qh6svI/w276-h400/legionariosigloIIac.JPG" width="276" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Legionarios de la época de Bruto (por Angel García Pinto)</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Nuestro Bruto podía ya volver a Roma lleno de
gloria, pero sintió curiosidad por el norte desconocido que se abría ante sus
tropas, ese lugar de donde venía el estaño y se decía que dando patadas al
suelo salían pepitas de oro. Decidió seguir y verlo con sus ojos.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sin embargo, Bruto no se encontró un
territorio muy rico, sino húmedo, lluvioso, boscoso y poblado por pueblos
desconocidos con muy malas pulgas, acostumbrados a los ataques rápidos de
guerrilla <i>“con la velocidad propia de los
bandidos”</i> y nada dispuestos a dejarse matar en batallas
gloriosas. Unos pueblos donde, según Apiano:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> <i>“las
mujeres luchaban al lado de los hombres, y morían con ellos, sin dejar escapar
jamás grito alguno al ser degolladas” y </i> <i>“de las
mujeres que son capturadas, unas se dan muerte a sí mismas y otras, incluso,
dan muerte a sus hijos con sus propias manos, alegres con la muerte más que con
la esclavitud.”</i> </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeJ1_k9AwbrCcmJfSCpGbcaB5tOP14vx_WHHimLyfYG4nusiw94wzt1Oj5KHAxS0d2_mvTwEaeR9krpmkO7SUpfSVLWAG3T2nOSr-gumDJ5qGR9D5L0ttnj7WexwiLmm3F3Xagiu6-rNY/s564/galaicaempoderada.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="564" data-original-width="284" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeJ1_k9AwbrCcmJfSCpGbcaB5tOP14vx_WHHimLyfYG4nusiw94wzt1Oj5KHAxS0d2_mvTwEaeR9krpmkO7SUpfSVLWAG3T2nOSr-gumDJ5qGR9D5L0ttnj7WexwiLmm3F3Xagiu6-rNY/w201-h400/galaicaempoderada.jpg" width="201" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Galaica empoderada</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Entre tanto empoderamiento femenino, destaca
el pueblo de los “Callaeci” o “Gallaeci”, que habitaban el valle de Monterrei y
la actual sierra de Larouco (sur de Orense), que pusieron a Bruto tantos problemas
para someterse que acabarían dando nombre a todo lo que había al norte y
alrededor de ellos, la actual Galicia.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjy9ABhcYxZKjpdym6VPr7FZdWBtybKPpTnz1MZTBJ7xjtPW6oik7Cp8HaH43O2fGLDYjBJNzuPHM_ZaO6VJBh-WKA0l8eMkEH_KnEpV28dQMqkyfEVyfEYsxaOE3jC8AJTGXpbuI24s6s/s563/galaicos.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="402" data-original-width="563" height="285" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjy9ABhcYxZKjpdym6VPr7FZdWBtybKPpTnz1MZTBJ7xjtPW6oik7Cp8HaH43O2fGLDYjBJNzuPHM_ZaO6VJBh-WKA0l8eMkEH_KnEpV28dQMqkyfEVyfEYsxaOE3jC8AJTGXpbuI24s6s/w400-h285/galaicos.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Galaicos de fiesta: ¡A brindar, que llega Bruto con romanos nuevecitos!</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>A Bruto le causaron tanta impresión que a su
vuelta decidió adoptar como nombre triunfal el de “Galaico”. Como luego contaría
el poeta Ovidio en su Fastos:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Entonces Bruto tomó el
apodo del enemigo galaico y tiñó de sangre la tierra hispana”</i><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Es en este avance al norte, poniendo todo perdido de sangre, cuando sus tropas llegaron al rio Lethes o río del
Olvido. Seguramente el Limia actual. Se había corrido entre la tropa el rumor
de que si lo cruzaban se olvidarían de su nombre y de quienes eran, como pasaba
en el río infernal del mismo nombre. Algunos decían que era realmente ese río
infernal, que surgía de la tierra y desembocaba en el océano por aquella
región. Los soldados dudaron al llegar a su orilla y empezaron las protestas;
que ya estaba bien de tanta conquista, que el clima era cada vez más frío, que
por muchas patadas que dabas al suelo solo salían piedras y ni una miserable
pepita… mejor volver y no cruzar, no sea que se olvidaran de todo. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero Junio Bruto, en vez de
soltar una arenga a aquellos soldados plebeyos, hijos de la chusma, simplemente cogió el estandarte de una legión
y cruzó el río a caballo, subió la orilla opuesta y empezó a llamar a los legionarios
por sus nombres. Así, aparte de demostrar que el río del Olvido era un fake de
la época, los obligaba moral y religiosamente a seguirlo, porque ningún romano
dejaría su sagrado estandarte solo y en peligro.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUFcsqdDRitZFpCYk1MEyzQJo9Mlo78tWu4eO3crvozqWqv8XiOQuWwP8XVVZv3Sw0vXUDtOMPO5_Gv-7Q0YIAcLSkhXytEF_Sj_7XWK8C3RPHGwBqFecdDx0mMQNeKLNk69Dg1_9QQ-o/s588/riolimiaestatua.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="362" data-original-width="588" height="246" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUFcsqdDRitZFpCYk1MEyzQJo9Mlo78tWu4eO3crvozqWqv8XiOQuWwP8XVVZv3Sw0vXUDtOMPO5_Gv-7Q0YIAcLSkhXytEF_Sj_7XWK8C3RPHGwBqFecdDx0mMQNeKLNk69Dg1_9QQ-o/w400-h246/riolimiaestatua.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Estatua a orillas del río Limia en honor de Bruto... un poco ninot de falla, la verdad.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Al final llegaron a la costa
atlántica, lo más seguro que por la desembocadura del Miño y, según cuenta
Floro:</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i style="mso-bidi-font-style: normal;">“advirtió, no sin cierto horror y temor de haber cometido un
sacrilegio, que el sol caía en el mar y sus fuegos se apagaban en las aguas.”</i> <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Había llegado al fin del mundo
conocido, donde el sol se hundía en el gran océano. Ya poco más podía hacer.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Desde ese punto, volvería por la
costa y luego giraría hasta Braga, para proteger la retaguardia de su ejército
de la tribu de los brácaros, que, según Apiano, se acababan de
apoderar de los depósitos de provisiones y amenazaban sus comunicaciones con el
Duero. Vamos, que todavía quedaban galaicos de sobra y muy cabreados después de
la gloriosa batalla. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Allí dio por concluida su
campaña. Pero no sus ganas de marcha, porque todavía tuvo tiempo de partir a la
Hispania Citerior, para ayudar a su colega (y cuñado) Lépido Porcino en la
lucha contra los vacceos; luego fundar una ciudad en la Ulterior con su nombre,
Brutobriga, que todavía no ha sido bien localizada, y fundar otra ciudad a
orillas del Turia para los veteranos de las guerras contra Viriato y su propia
campaña, una ciudad que tendría mucho más futuro y que está muy bien localizada:
Valencia. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIH8feZlgr2mxG_7BDzBzk0iv15t7RocWxdHoMcc9m2cy8aIvWZ8wtWoGNt7zPBQ78ElAhUEkA4qB_n9LdwqnMqFZAmSsYH4GGURE_mYTLvMKn6T4b99vj1Pc6hnxZaTz9bvYXVY_MlXM/s564/valencia-con-foro.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="364" data-original-width="564" height="259" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIH8feZlgr2mxG_7BDzBzk0iv15t7RocWxdHoMcc9m2cy8aIvWZ8wtWoGNt7zPBQ78ElAhUEkA4qB_n9LdwqnMqFZAmSsYH4GGURE_mYTLvMKn6T4b99vj1Pc6hnxZaTz9bvYXVY_MlXM/w400-h259/valencia-con-foro.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Valencia romana, ¡Qué bonita le quedó a Bruto!</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Luego volvió a Roma en el 136 a.C. y se le
concedió el triunfo frente a <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“Lusitanos y
Galaicos” </i>y se le dio el título honorífico de Callaicus o Gallaecus, que
celebró con mucha pompa y mayor boato, pero tres años después, que es el tiempo
que le llevó construir un templo de mármol en honor de Marte, cerca del Circo
Flaminio, pues no quiso celebrar su triunfo antes de cumplir el voto dado al
dios de levantar un templo en su honor, que un romano de verdad con los dioses
no se la juega.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En el interior del templo colocó dos valiosas
estatuas, de Marte y Venus, del escultor Escopas, que seguramente consiguió a
través de alguno de sus colegas con un pasado de saqueador cultural en Grecia.
Plinio todavía las cita en ese lugar dos siglos después. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibjMiefBeH7QDlklK1zzC5h7RsLxfmYDAKJ_iLs014BsIzLx9EckMCW2DXpAssn1REafSVbP1AJmsuRIHn5IRb4gIPFw53RP_JsnkzWOUsm7DyVTEUK9PWCIOpr3g0V3eMTjdOfAuSOgI/s1027/planta+templo+de+marte.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="678" data-original-width="1027" height="264" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibjMiefBeH7QDlklK1zzC5h7RsLxfmYDAKJ_iLs014BsIzLx9EckMCW2DXpAssn1REafSVbP1AJmsuRIHn5IRb4gIPFw53RP_JsnkzWOUsm7DyVTEUK9PWCIOpr3g0V3eMTjdOfAuSOgI/w400-h264/planta+templo+de+marte.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Planta del templo de Marte levantado por Bruto. Sencillo pero mono.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Al poco de volver, se casaría, en torno ya a
los 50 años, con la noble Claudia Pulcra, que le daría tres hijos, y siguió con
su carrera de senador. Fue nombrado augur en el 130 a.C. y e<span style="background: white; color: #202122;">n el 129 a. C. sirvió como
legado y apagafuegos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del cónsul Cayo Sempronio Tuditano en Iliria,</span> que andaba muy revoltosa y nada
cariñosa<span style="background: white; color: #202122;">. Allí, según Tito Livio, <i style="mso-bidi-font-style: normal;">“la derrota fue
compensada por una victoria ganada gracias a la habilidades de Décimo Junio
Bruto</i>”. Si es que no había nada como los veteranos de Hispania para calmar
insurrectos</span><span face=""Arial",sans-serif" style="background: white; color: #202122; font-size: 10.5pt; line-height: 107%;">.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span face=""Arial",sans-serif" style="background: white; color: #202122; font-size: 10.5pt; line-height: 107%;">Luego
</span>dedicó el resto de su vida a su vieja costumbre de protestar desde su
escaño del Senado contra los tribunos de la plebe, que en esta época eran los
famosos hermanos Graco y sus rabiosos partidarios, los cuales no paraban de
exigir derechos y otras tonterías revolucionarias para la escoria plebeya. Por
los dioses, como si no hubiera cosas más interesantes, como patrocinar
literatos o montar más campañas de conquista.<o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBW_707K2PW0sAi8GuhUCQ9_aLb_3PcHmH5cbECGxuVFe5_ZRp3vvdGu7O5TabJ-GAQvk7aXJjSd_sUED6O5vfKiWcjy1tcuF2DWH73VkhZdw1VDD_zYXRPynrfxR6jZ3sys62Dz8-uZ8/s800/Los-hermanos-Graco.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="533" data-original-width="800" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBW_707K2PW0sAi8GuhUCQ9_aLb_3PcHmH5cbECGxuVFe5_ZRp3vvdGu7O5TabJ-GAQvk7aXJjSd_sUED6O5vfKiWcjy1tcuF2DWH73VkhZdw1VDD_zYXRPynrfxR6jZ3sys62Dz8-uZ8/w400-h266/Los-hermanos-Graco.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Los hermanos Graco: El Mal</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Pero nuestro viejo protestón, líder de los
conservadores más ultras, logró vivir más que ambos hermanos, que murieron de
forma violenta y que Bruto celebró a lo grande, sobre todo la del
último, Cayo, en 121 a.C., que Bruto apoyó en el Senado y justificó con vehementes
discursos y que, por casualidades de la historia, también fue
un 9 de junio, el día que venció a los galaicos. Su día de la suerte.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero la alegría le duró poco, porque dejó este
mundo alrededor de los 60 años, pocos años después, para alegría de la plebe
miserable.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Décadas más tarde, uno de sus nietos sería
Bruto Albino, el otro Bruto que apuñaló a César, ese dictador amado por la
chusma plebeya y un traidor a los romanos de verdad. </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Seguramente nuestro Bruto
estaría muy orgulloso de su descendiente. <o:p></o:p></p><p></p>Unknownnoreply@blogger.com0ZA-311, 46, 49210 Almeida de Sayago, Zamora, España41.2281182 -6.064074121.529837958157497 -41.220324100000006 60.926398441842494 29.092175900000008tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-83595692959245202402021-07-14T09:00:00.002+02:002021-07-14T09:00:00.197+02:00Pompeya vuelve a la vida<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9C7bmSm9O-7Ms2VUfGVdZNhpR9LwcZtJN7jOUwYq-Tazy_Zdmamii7fYeJJ6hyUR5mC9bXIhDSqWIF_tYQRQYZvB5Orqx3i_sw0diQjOZbWirKgZXztw1BeN58rfxqOkjPWdOArne7ovp/s500/external-content.duckduckgo.com.jpeg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="310" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9C7bmSm9O-7Ms2VUfGVdZNhpR9LwcZtJN7jOUwYq-Tazy_Zdmamii7fYeJJ6hyUR5mC9bXIhDSqWIF_tYQRQYZvB5Orqx3i_sw0diQjOZbWirKgZXztw1BeN58rfxqOkjPWdOArne7ovp/s320/external-content.duckduckgo.com.jpeg" /></a></div><br />Los viajeros que visitaban las excavaciones de Pompeya en los siglos XVIII y XIX describían con deleite cómo las cuadrillas de trabajadores hacían emerger del suelo edificios de calidad sublime, adornados de frescos, inscripciones y objetos cotidianos. La experiencia de aquellas personas es algo que hoy sólo podemos envidiar. Tras ser desenterrados, la ciudad comienza un inevitable deterioro: los yesos y pinturas se caen, las téseras de los mosaicos se pierden, los muros van perdiendo firmeza hasta que se desploman… Los objetos más valiosos hace tiempo que fueron trasladados para ser estudiados, custodiados y, en el mejor de los casos, expuestos en asépticas vitrinas. <br /><br />El resultado es que la Pompeya que espera a los visitantes actuales, aunque sigue siendo un enclave espectacular y único, tiene poco de esa grandeza que muchos esperan. Edificios cerrados al interminable y abrasivo flujo de turistas conviven con espacios abiertos a la visita, pero casi desnudos y carentes de contexto. La impresión puede ser decepcionante, como refleja un graffitti moderno de los baños del centro de visitantes: “Si hubiera querido ver ruinas, me hubiera ido a Kabul”. <br /><br />La experiencia descarnada que ofrece hoy en día Pompeya inspiró a los profesores <a href="https://www.encyclopedia.com/arts/educational-magazines/butterworth-alex">Alex Butterworth</a> y <a href="https://www.awaws.org/ray-laurence.html">Ray Laurence</a> a escribir “Pompeya, la ciudad vida”, una obra divulgativa que pretende condensar la documentación disponible para reconstruir una panorámica amplia de la vida en aquella ciudad romana. <span><a name='more'></a></span><br /> <p></p><p>La obra de Butterworth y Laurence es fundamentalmente un ensayo en el que se insertan breves escenas ficcionalizadas que pretenden hacer más vívidos los retazos de la vida de los habitantes de Pompeya cuyo nombre quedó grabado en el registro arqueológico. Esta aproximación mixta entre la ficción y no ficción se combina con el uso de diversas fuentes. En primer lugar está la ya mencionada labor de arqueología documental. El proyecto, evidentemente, no es exhaustivo, ya que el volumen de
información es ingente. Muchos de los trabajos publicados durante las
últimas décadas, de hecho, todavía reposan en anaqueles y bibliotecas a
la espera de ser cotejados y difundidos. </p><p>La obra recurre también a los historiadores clásicos para trazar una semblanza de la historia de Pompeya en los 25 años previos a la erupción. A través de los indicios arqueológicos y documentales, nos acercaremos al reinado de Nerón, por cierto con una conexión muy estrecha con Campania, y de Vespasiano. Por último, la base que conforman los registros arqueológicos y documentales se adereza con pinceladas de la cultura y la civilización romana, tales como las festividades religiosas, para insuflar vida a lo que en algún momento quedo atrapado bajo metros de lapilli y material volcánico. <br /><br />Los autores advierten que, incluso tejiendo la historia con esas tres fuentes de información, hay momentos en los que se encontraron faltos de material. Hay fragmentos en los que el abundante recurso a los condicionales (podría haber sido que…, hubiera perfectamente sido posible que…) muestra que el proyecto se adentra peligrosamente en lo especulativo. “Hay incertidumbres y es seguro que habrá reinterpretaciones con excavaciones posteriores”, se disculpan los autores, quienes, por otro lado, tampoco temen meterse en terrenos polémicos. Usando el viejo recurso de mencionar el tema del que no quieren hablar, la introducción del libro rehúsa hacer paralelismos entre la civilización romana de mediados del siglo I d.C y el momento actual, en asuntos como las crecientes desigualdades sociales, el comercio y consumo desaforado de lujos, el recurso a inmigrantes (en aquella época, a esclavos) para suplir la carencia de trabajadores y, en última instancia, una gran catástrofe que se lleva todo por delante. <br /><br />Pese a sus problemas de ritmo y de equilibrio, los amantes de la cultura romana que ya cuentan con una base de conocimientos previos deberían dar una oportunidad a esta obra. “Pompeya, la ciudad viva” es un ejercicio valiente que nos ofrece, por momentos, la vitalidad que tuvieron las calles de esa ciudad.</p><p><style>@font-face
{font-family:"Cambria Math";
panose-1:2 4 5 3 5 4 6 3 2 4;
mso-font-charset:0;
mso-generic-font-family:roman;
mso-font-pitch:variable;
mso-font-signature:3 0 0 0 1 0;}@font-face
{font-family:Calibri;
panose-1:2 15 5 2 2 2 4 3 2 4;
mso-font-charset:0;
mso-generic-font-family:swiss;
mso-font-pitch:variable;
mso-font-signature:-536859905 -1073732485 9 0 511 0;}p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal
{mso-style-unhide:no;
mso-style-qformat:yes;
mso-style-parent:"";
margin:0cm;
margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:12.0pt;
font-family:"Calibri",sans-serif;
mso-ascii-font-family:Calibri;
mso-ascii-theme-font:minor-latin;
mso-fareast-font-family:Calibri;
mso-fareast-theme-font:minor-latin;
mso-hansi-font-family:Calibri;
mso-hansi-theme-font:minor-latin;
mso-bidi-font-family:"Times New Roman";
mso-bidi-theme-font:minor-bidi;
mso-fareast-language:EN-US;}a:link, span.MsoHyperlink
{mso-style-priority:99;
color:#0563C1;
mso-themecolor:hyperlink;
text-decoration:underline;
text-underline:single;}a:visited, span.MsoHyperlinkFollowed
{mso-style-noshow:yes;
mso-style-priority:99;
color:#954F72;
mso-themecolor:followedhyperlink;
text-decoration:underline;
text-underline:single;}.MsoChpDefault
{mso-style-type:export-only;
mso-default-props:yes;
font-family:"Calibri",sans-serif;
mso-ascii-font-family:Calibri;
mso-ascii-theme-font:minor-latin;
mso-fareast-font-family:Calibri;
mso-fareast-theme-font:minor-latin;
mso-hansi-font-family:Calibri;
mso-hansi-theme-font:minor-latin;
mso-bidi-font-family:"Times New Roman";
mso-bidi-theme-font:minor-bidi;
mso-fareast-language:EN-US;}div.WordSection1
{page:WordSection1;}</style></p>Roberto Pastranahttp://www.blogger.com/profile/13128078798890547612noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3261461019864425616.post-22360841170047417632021-06-08T11:42:00.001+02:002021-09-30T16:20:25.385+02:00Imperator: Rome<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSRkuPN60VNcEVGUpdwrHfk_fmGc06VpU9xWvuuAN_L9U8wSqrHeD6c7Sixd_WoNbF0m4ISKDFh0aCiCqOgHXZPNxebshbsPAyXU8gRKaeVvdiJFwU2ChR2H2tQWo_FYnBP5Y1bBd4XEY/s491/portada.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="491" data-original-width="350" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSRkuPN60VNcEVGUpdwrHfk_fmGc06VpU9xWvuuAN_L9U8wSqrHeD6c7Sixd_WoNbF0m4ISKDFh0aCiCqOgHXZPNxebshbsPAyXU8gRKaeVvdiJFwU2ChR2H2tQWo_FYnBP5Y1bBd4XEY/s320/portada.jpeg" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> En abril del 2019 la empresa de juegos Paradox, famosa por
sus juegos de estrategia y simulación, lanzó un juego que publicitaron como uno
de sus mejores productos hasta la fecha. Un juego de gran estrategia en la
Antigüedad, el <i>“Imperator: Rome”</i>. <o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Llevaban meses
calentando al personal con avances y bonitos vídeos sobre las posibilidades de
su nueva obra. La expectación era máxima entre la enorme comunidad de
seguidores de esta empresa sueca; <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>líder
en este género de entretenimientos digitales y con fama de crear juegos de
temática histórica complejos, inteligentes, bellos, detallistas, pero a la vez
divertidos. <o:p></o:p></p><span><a name='more'></a></span><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> </p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sin embargo, a los
pocos días de su lanzamiento, ya era uno de sus mayores fracasos, porque
intentaron llevar a su máxima expresión la filosofía de sacar un esqueleto al
que luego añadirle la mayoría del contenido vendiendo expansiones a plazos… y
se pasaron tres pueblos. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhUSuRSJCWOQIx8Xt0GaBikQBIkqexiqy0MJxGiMtFsMDgx7rse03E90Hr7CnOyZ9woOE2lSyDBStXEpMjHUEcZJiOiU0CDexYZuTTF5nQ8KojfJ_Lguxl0EbgAYMlkmN_u-Y8XR0B6U2U/s1920/misiones.png" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhUSuRSJCWOQIx8Xt0GaBikQBIkqexiqy0MJxGiMtFsMDgx7rse03E90Hr7CnOyZ9woOE2lSyDBStXEpMjHUEcZJiOiU0CDexYZuTTF5nQ8KojfJ_Lguxl0EbgAYMlkmN_u-Y8XR0B6U2U/w400-h225/misiones.png" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Al principio, promete ser muy detallado</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El Imperator resultó
un juego vacío, bonito de ver y muy malo de jugar, apenas un esqueleto, un
andamio, que presagiaba infinidad de añadidos de pago para completarse a costa
de los sufridos jugadores, los cuales se vieron engañados y estallaron en las
redes. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Hubo una crítica masiva y total.
El juego fue vapuleado, despreciado y Paradox machacado en todo medio. Desde
aquella, se pasaron dos años añadiendo gratis lo que faltaba al juego, excepto
dos pequeñas expansiones de pago, que no son necesarias para disfrutarlo. Se
agradece que no lo olvidaran en un cajón e intentarán arreglar su mala política
de lanzamiento.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi62gmlFN3IokAAf6VcRyaJwXzLQFJPSYE1JjEhcKwe-finOjLzCBWFH88nXryYEhmGFu5PVZrTWZ2ISFxHcToiw7DIkKp7QHgDwsSUn8yAfgUg7UT2rrLR9UfpCR217q-rrxv3j_sa9xg/s1920/egipto.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi62gmlFN3IokAAf6VcRyaJwXzLQFJPSYE1JjEhcKwe-finOjLzCBWFH88nXryYEhmGFu5PVZrTWZ2ISFxHcToiw7DIkKp7QHgDwsSUn8yAfgUg7UT2rrLR9UfpCR217q-rrxv3j_sa9xg/w400-h225/egipto.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Con un bello mapa del Mediterráneo</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Sin embargo, en el mes de abril de 2021 anunciaron que el
equipo que llevaba el proyecto se deshacía y pasaba a otras tareas, aunque
seguirían dando soporte al juego en el futuro. Esto, en lenguaje diplomático de
videojuegos, significa que se acabó lo que se daba. Ya no se continuará en su
mejora y expansiones. Al final, no pudo quitarse la fama de juego maldito.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p> ¿Pero qué tal está
ahora?, ¿Imperator: Rome levantó cabeza con el tiempo y ha quedado un juego
digno?</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Cuestión de gustos.
El juego ya está marcado socialmente con la etiqueta de fracaso, pero no es
malo en general, ya tiene mucho contenido y si te gusta la Antigüedad lo puedes
disfrutar. <o:p></o:p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgzZM4RTH-y1ttgHVBQFUXZiPCewNW_6-QWYaz90MMyjIQ127CMmJ4rou4e0Saqyk73GMXglCIlSQFlKPoMUoxSNx6dW_8m2mgI0XQcfkZ8IVYrK3eYK5R9tYcdlC7Sl2ePyN-qkPPfQWw/s1920/paisaje.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgzZM4RTH-y1ttgHVBQFUXZiPCewNW_6-QWYaz90MMyjIQ127CMmJ4rou4e0Saqyk73GMXglCIlSQFlKPoMUoxSNx6dW_8m2mgI0XQcfkZ8IVYrK3eYK5R9tYcdlC7Sl2ePyN-qkPPfQWw/w400-h225/paisaje.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Una legión disfrutando de la campiña italiana</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Por desgracia no es
una joya como sus parientes Crusader Kings y Europa Universalis. Es un intento
de juntar ambos en un solo juego, que, como muchas mezclas, ha quedado diluido
en un producto sin sabor. Ni es un juego de dinastías familiares ni tampoco un
juego de gobiernos estatales. Es una cosa intermedia, ni fu ni fa, que no
engancha lo mismo y confunde bastante.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigIHTtB45HzTbkMh3IKbNBx1dx0kOONmdFkr9-af5kJyN7XIwJ_GC1rRL-BrYGTLaB-mlU-K2qMXaRkpWF_v8XmUfRb-CpxU4-zE3kCfcaSqK_8j3G0-FWf36OnZOKYJ1B4QyLcOjyLkI/s1024/hispania2.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="576" data-original-width="1024" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigIHTtB45HzTbkMh3IKbNBx1dx0kOONmdFkr9-af5kJyN7XIwJ_GC1rRL-BrYGTLaB-mlU-K2qMXaRkpWF_v8XmUfRb-CpxU4-zE3kCfcaSqK_8j3G0-FWf36OnZOKYJ1B4QyLcOjyLkI/w400-h225/hispania2.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Hispania... un poco agitada</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p>Puedes llevar una república, tribu o una monarquía de la
época; hay cientos de reinos y los personajes dentro de cada uno son miles, con
sus intrigas y decisiones a tomar, aunque en un grado muy inferior al Crusader
Kings. No llegan a ser personajes completos con los que te puedes encariñar y
seguir su historia. Falta una pizca de culebrón e independencia en sus vidas,
lo que llamamos aventura y albedrío.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8usAYru6WACtQWl8SSOfVFhNBXE5g149w_3PC9HSSc_vnKNPZuyxQRImYsj6lNSvOuzuSG4jyh5mU2vHT3wri3Pbu43WNqu9jJtXvgBt0PWez2vrprnNJmBL9nJffReRcy7ogGTekVKI/s1920/personajes.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8usAYru6WACtQWl8SSOfVFhNBXE5g149w_3PC9HSSc_vnKNPZuyxQRImYsj6lNSvOuzuSG4jyh5mU2vHT3wri3Pbu43WNqu9jJtXvgBt0PWez2vrprnNJmBL9nJffReRcy7ogGTekVKI/w400-h225/personajes.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Parece una dinastía del Crusader Kings, pero la vista engaña</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> Los diferentes reinos
y pueblos están diferenciados, al menos los principales, y tienen su propio
árbol de misiones a seguir, que no es algo obligatorio pero si recomendable.
Hay comercio, construcción, gestión de población, culto religioso, tecnologías,
objetos sagrados, y hasta la posibilidad de diseñar y construir maravillas.
Pero realmente muchas cosa no parecen influir mucho en el juego y están como
adorno, si quieres las usas o si no las miras avanzar. La mayoría solo aumenta o
disminuye ciertos porcentajes.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQ0hP2vbtoX6cGudKICoOpK3Wyg57BquS2IsSEM_Xj9Xjfdjdo_Kx4DCu3LNv4hk-sw5D3vdPymPCuzvN498qzjLarkOybLBXPO8asyKnlNuC3ELnF6p6Rw-l_rdgGvnGgTeQIBREBGTY/s900/tecnologias.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="506" data-original-width="900" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQ0hP2vbtoX6cGudKICoOpK3Wyg57BquS2IsSEM_Xj9Xjfdjdo_Kx4DCu3LNv4hk-sw5D3vdPymPCuzvN498qzjLarkOybLBXPO8asyKnlNuC3ELnF6p6Rw-l_rdgGvnGgTeQIBREBGTY/w400-h225/tecnologias.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Árbol de tecnologías, esta parte no está nada mal.</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En el plano militar
puedes construir ejércitos profesionales (legiones), que tendrán su propio
currículo y condecoraciones, o levas de ciudadanos, que son más baratas y
simples. Pero la variedad de unidades militares es escasa y muy general. La
inmersión es nula cuando ves reyes macedonios dirigiendo legiones.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhO12QIpNYUtRTbe8LTyxzlorn-jBJA86qeihXTyVB4sa8eyT8Zu6foG1ILtVU5PWRdN07fYz1caJ9i0ss25EX4dcVCFtDT37rpu0WNPLAfypM_Uw7Cr9fXzW6wX4Yc-hbERBy9b5ilp3c/s600/lucha.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="315" data-original-width="600" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhO12QIpNYUtRTbe8LTyxzlorn-jBJA86qeihXTyVB4sa8eyT8Zu6foG1ILtVU5PWRdN07fYz1caJ9i0ss25EX4dcVCFtDT37rpu0WNPLAfypM_Uw7Cr9fXzW6wX4Yc-hbERBy9b5ilp3c/w400-h210/lucha.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Dos ejércitos ganándose el pan</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La diplomacia está
más currada, con muchas variantes a escoger, ya que es un apartado que Paradox
siempre ha mimado en sus juegos.</p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><o:p> </o:p><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En general, la idea
que surge del juego es que destaca por su belleza formal, pero no es tan
interesante en sus mecánicas como desea un aficionado a la gran estrategia
política y económica o un aficionado a la intriga dinástica y familiar. Hay una
sensación general de que le falta algo más, que nunca llega, que la complejidad
es relativa, hueca, dentro de tanta opción, y la amalgama entre lo dinástico y
lo estatal no cuaja, pese a las continuas mejoras que ha recibido durante dos
años. Pero es que un esqueleto se puede rellenar de carne, pero no cambiar su
ensamblaje.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh33Hf4i2kdwKL87LPbl9QwvwI2W6eidcZ9fyPMEJTGIo6veTcpR80yIsHs-Dsf5gNGgXYnfp3UxcpKB9VONLDvpJ44LxXRlcJl3uuuiCwhQ8KwYl-NoFjHbD7K9EhHrT91D8PubWf5ubI/s1920/eventos.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh33Hf4i2kdwKL87LPbl9QwvwI2W6eidcZ9fyPMEJTGIo6veTcpR80yIsHs-Dsf5gNGgXYnfp3UxcpKB9VONLDvpJ44LxXRlcJl3uuuiCwhQ8KwYl-NoFjHbD7K9EhHrT91D8PubWf5ubI/s320/eventos.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pueden surgir eventos divertidos </td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Quizá es que, a
veces, el término medio entre dos opciones no es una buena elección, por mucho
que lo diga Aristóteles.<o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Os dejamos con el vídeo de una partida: </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/7dsvgkY4fNc" width="320" youtube-src-id="7dsvgkY4fNc"></iframe></div><br /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p>Unknownnoreply@blogger.com0